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Mariana Rendón “Me gusta trabajar bajo presión”

La coordinadora de Eventos de Valle Arriba Golf Club asegura que la primera herramienta que usa en su trabajo es la organización. Es además chef titulada y se acaba de estrenar como mamá

Por Ana María Matute Fotografía: Gabrielle Pierotti Zapiain

Para que un evento sea exitoso se debe planificar todo con anticipación, pero tomando en cuenta que siempre surgen imprevistos a los que hay que responder sin perder la calma. El que no pueda trabajar bajo presión no será capaz de hacerlo. Así define Mariana Rendón su trabajo en Valle Arriba Golf Club.

Ya tiene un poco más de tres años al frente de la Coordinación de Eventos del club y asegura que ha sido de gran aprendizaje. Con apenas 34 años de edad (que no le importa decir) y estrenándose como mamá, está satisfecha porque ha podido aplicar todo lo que ha aprendido en su vida profesional, pero además se ha nutrido de otras áreas que la han hecho crecer.

En 2004 egresó del High Training Educational Institute con el título de chef internacional. Y como cocinera fue pantrista y encargada de las ensaladas en restaurantes del Piso 5 del Tolón. También trabajó en Ariza Restaurante y pasó por la cocina del Hotel Marriot. Menciona como una de sus más llamativas experiencias el haber participado como chef asistente en una boda india y en una cena organizada por la embajada de ese país. “Cocinar para una ocasión especial es estar metida de lleno en la organización y eso tiene mucho que ver con mi segunda carrera. Yo desde niña sabía que quería organizar eventos”, afirma.

Precisamente por eso, porque le gusta organizar, planificar con tiempo, sabía que de todo lo que estudió para obtener el título de Técnico Superior Universitario en Publicidad y Mercadeo lo que quería ejercer era la producción. Su primera pasantía fue en Hogares Bambi, pero luego trabajó con ellos por casi cuatro años.

“Yo encuentro muchas similitudes entre ser un chef y un organizador de eventos, pero sobre todo se parecen en la planificación y la organización, pues sin eso no funciona una cocina o no sale bien la actividad que vamos a realizar. Pero, además, hay que saber trabajar bajo presión. Para muchos será desagradable, pero yo confieso que para mí es como un ‘placer culposo’, pues me gusta esforzarme y luego ver los resultados, que todo el mundo quede contento”, recalca.

“Yo encuentro muchas similitudes entre ser un chef y un organizador de eventos, pero sobre todo se parecen en la planificación y la organización, pues sin eso no funciona una cocina o no sale bien la actividad que vamos a realizar”

Nuevo reto

importante de todas. Sin embargo, con la misma energía ella colabora con el club cuando se lo solicitan. “Yo estoy de permiso pre y posnatal, pero igual les dije que lo que necesitaran me llamaran. A veces organizo cosas desde la casa, me gusta mi trabajo”, asegura.

Sobre su hija y el ejemplo que quisiera darle como madre profesional, Mariana insiste en formarla con valores y principios “pues son un lujo que no es palpable”. Está consciente de que en el mundo los principios ya no son respetados como se debería. “Quiero educar a un buen ser humano, quiero darle la crianza más digna posible. Sé que lo perfecto no existe, pero quiero que mi hija sea empática con los demás, solidaria y que sea respetuosa”.

Mariana estuvo en su puesto de trabajo hasta el último día que le permitió el médico y a la semana siguiente tuvo a la bebé. “Yo trabajé estando embarazada, nosotras las mujeres somos capaces de hacer de todo”, insiste.

Los planes

“Trabajar en un ambiente como el de Valle Arriba Golf Club me ha enseñado mucho, sobre todo en lo que se refiere a relaciones públicas, que también tiene que ver con mi trabajo. Para mí es muy importante darle el trato adecuado a cada persona, que sienta que puede comunicarse conmigo. Y eso lo hago tanto con los socios como con los clientes que vienen a realizar eventos en nuestras instalaciones”. Mariana considera además que hay que tener la capacidad para responder ante los imprevistos.

Tiene planes para seguir haciendo cursos y mantenerse actualizada en el área que la ocupa, pero además confiesa que le gustan los idiomas. Ya habla inglés y piensa ahora estudiar francés. “Quiero seguir creciendo y enriqueciéndome como profesional. Ahora que soy mamá se me agrega otra responsabilidad, pero no me preocupa. Todo es prioritario, pero lo importante es saber qué va primero, hay que saber jerarquizar”, recalca.

“Para mí es muy importante darle el trato adecuado a cada persona, que sienta que puede comunicarse conmigo. Y eso lo hago tanto con los socios como con los clientes que vienen a realizar eventos en nuestras instalaciones”