Clase nº1 Artes Visuales

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Universidad de Chile Facultad de Artes Departamento de Teoría de las Artes HISTORIA DEL ARTE Curso de Formación Básica Transversal, primer semestre 2011 Profesor: Gonzalo Arqueros

Clase Nº 1 “Condiciones de la producción “artística” en el siglo XV” 06 de abril de 2011


Un cuadro del siglo XV es el depósito de una relación social. De un lado estaba un pintor que realizaba un cuadro, o por lo menos supervisaba su realización. Del otro lado había alguien que le había pedido que lo hiciera, había aportado fondos para ello y, una vez hecho, calculaba utilizarlo de una u otra manera. Ambas partes funcionaban dentro de instituciones y convenciones — comerciales, religiosas, perceptuales y, en el más amplio sentido, sociales — que eran diferentes de las nuestras e influían en las formas de lo que estas partes hacían juntas.

El hombre que pedía el cuadro, pagaba por él y encontraba un uso para él podría ser llamado el patrón, si no fuera porque éste es un término que trae ecos de otras y muy diferentes situaciones. Este socio es un agente activo, determinante y no necesariamente benevolente en una tran-sacción cuyo resultado es el cuadro: podemos llamarlo correctamente un cliente.1 La mejor pintura del siglo XV fue hecha sobre la base de un encargo, en la que el cliente solicitaba una manufactura hecha de acuerdo con sus especificaciones. (Fuente: Michael Baxandall: Pintura y vida cotidiana en el renacimiento.)


El cliente pagaba por el trabajo, entonces como ahora, pero entregaba sus fondos a la manera del siglo XV y esto podía afectar a la naturaleza de los cuadros. Con relación a la cual el cuadro en depósito era entre otras cosas una relación comercial, y algunas de las prácticas económicas de la época están corporizadas muy concretamente en los cuadros.

El dinero es muy importante en la historia del arte. Actúa en pintura no sólo en cuanto a un cliente que desea gastar dinero en una obra, sino en cuanto a los detalles de cómo lo entrega. Un cliente como Borso d'Este, Duque de Ferrara, que hacía cuestión de principio pagar sus pinturas por pie cuadrado — por los frescos en el Palazzo Schifanoia la tarifa de Borso era de diez lire (liras) boloñesas por pede (pie) cuadrado — conseguirá, generalmente una clase distinta de pintura que la de un hombre comercialmente más refinado como el comerciante florentino Giovanni de Bardi, que paga al pintor por sus materiales y su tiempo.


Un activo empleador de pintores, el comerciante florentino Giovanni Rucellai, hizo notar que tenía en su casa obras de Domenico Veneziano, Filippo Lippi, Verrocchio, Pollaiuolo, Andrea del Castagno y Paolo Uccello — junto con una cantidad de orfebres y de escultores — «los mejores maestros que han existido durante mucho tiempo no sólo en Florencia, sino en Italia». Es obvia su satisfacción en poseer personalmente lo qué es bueno. En otro lado, hablando ahora más sobre sus muchos gastos en construir y decorar iglesias y casas, Rucellai sugiere tres otros motivos: estas cosas le dan «la mayor satisfacción y el mayor placer porque sirven a la gloria de Dios, al honor de la ciudad y a la conmemoración de mí mismo».


Ahora compramos cuadros ya hechos; esto no se debe a que tengamos más respeto por el talento individual del pintor del que podían tener personas como Giovanni Rucellai, sino a que vivimos en otra clase de sociedad comercial. Los esquemas dominantes en el negocio de cuadros tienden a parecerse a los que dominan en el de mercaderías más sustanciales; lo postromántico es también post Revolución Industrial, y casi todos nosotros compramos también muebles ya hechos. Filppo Lippi Boceto de retablo (1457)


Carta de Filippo Lippi a su comitente “He hecho lo que me pidió sobre el cuadro, y me he atenido escrupulosamente a cada cosa. La figura de San Miguel está ahora tan cerca de su final que, como su armadura deberá ser de plata y oro, como sus otros atuendos, he ido a ver a Bartolomeo Martelli: dijo que hablaría con Francesco Cantansanti respecto al oro y a lo que usted quiere, y que yo debería hacer exactamente lo que usted desea. Y me rezongó, diciendo que yo le había fallado a usted.

En esta carta de Fra Filippo Lippi a su comitente o patrón, se puede ver cómo se desarrollan las condiciones del trabajo artístico en el siglo XV. La carta documenta la relación de un maestro con su patrón y también con el trabajo. Queda muy claro el grado de autoconciencia que posee el pintor en calidad de “sirviente” contra una suma de dinero en depósito. Es decir, como “un profesional que cobra por sus servicios”. Este servicio presenta problemas específicos derivados de las exigencias específicas del encargo determinadas por el gusto del patrón y por la calidad del trabajo del maestro. Se ve claramente cómo el cuadro crece en valor mientras más compleja sea la exigencia del patrón y también cómo el financiamiento de la obra se relaciona con los tiempos de trabajo que puede ofrecer el pintor.

Ahora bien, Giovanni, yo soy aquí su sirviente, y lo seré de hecho. He recibido de usted catorce florines, y le he escrito que mis gastos llegarán a treinta florines, y llegan a eso porque el cuadro es rico en adornos. Le pido que arregle con Martelli para que él sea su representante en esta obra, y que si yo necesito algo para apresurar el trabajo, yo pueda arreglarlo con él... Si usted está de acuerdo... en darme sesenta florines para incluir materiales, oro, dorado y pintura, con Bartolomeo actuando como lo sugiero, yo, por mi parte, para causar a usted menos inconvenientes, tendré el cuadro completamente terminado hacia agosto 20, con Bartolomeo como mi garantía... Y para mantener a usted informado, envío un dibujo sobre cómo el tríptico se hace de madera, con su altura y su ancho. Por amistad con usted no quiero cobrar más de los 100 florines de costo por esto: no pido más. Le pido que me conteste, porque estoy ocioso aquí y quiero irme de Florencia cuando termine. Si he sido demasiado presumido en escribirle, perdóneme. Haré siempre lo que usted quiera en cualquier asunto, grande o pequeño.” Válete, 20 de julio de 1457 Filippo el pintor, en Florencia


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