Evangelizar 007 - Diciembre de 2013

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Evangelizar Revista de Ayudas Pastorales

Diócesis de Sonsón-Rionegro

«Mirad: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa “Dios-con-nosotros”.»

Dic. de 2013 | N° 7


El envío hasta los confines de la tierra.

LITURGIA DEL DOMINGO Pbro. John Jairo Olaya Ballesteros

Domingo 1º de Adviento Domingo 2º de Adviento Domingo 3º de Adviento Domingo 4º de Adviento Domingo de la Sagrada Familia: Jesús, María y José

FORMACIÓN DOCTRINAL Pbro. Luis Javier Otálvaro Álvarez

La profesión de nuestra fe. El Símbolo de los Apóstoles y el Credo Niceno – Constantinopolitano. Artículos del Credo.

NUESTRA REALIDAD Mons.Gilberto Muñoz Ospina

Promiscuidad y embarazo adolescente.

CONTROVERSIAS RELIGIOSAS Pbro. Oscar Chalarca Giraldo

Director P. John Jairo Olaya Ballesteros. Diagramación Silvia Giraldo Consejo editorial Delegados de Pastoral Coordinador general Vicaría de Pastoral Impresión Periódico El Mundo Dirección Diócesis de Sonsón-Rionegro Curia Episcopal Calle 51 No 47-31 Tel: 531 5252 www.diosonrio.org.co Fotografía Diócesis de Sonsón-Rionegro

Sacerdocio femenino en la iglesia católica: ¿llegó la hora?

Sugerencias

VIDA FAMILIAR Psicóloga. Luz Mery Román Buitrago

Navidad en familia.

ESPACIOS PARA CRECER Pbro. John Jairo Olaya Ballesteros

Historia de la navidad.

vipastoral@diosonrio.org.co

Todos los evangelistas, al narrar el encuentro del Resucitado con los Apóstoles, concluyen con el mandato misional: “me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos a toda la gente. Sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo” (Mateo 28, 18 -20; marcos 16, 15 -18; Lucas 24, 46 -49; Juan 20, 21 -23) Este envío es envío en el Espíritu, Espíritu que les regala el Resucitado. Sólo en total disponibilidad al Espíritu del Resucitado obtendremos la libertad del corazón y la disponibilidad incondicional de tiempo para decirle al obispo, aquí estoy, envíame a donde me necesiten. Si cada sacerdote logra dar este paso de disponibilidad misionera, la Diócesis será un signo creíble de vitalidad y madurez en su fe y el presbiterio será especialmente bendecido por el Señor. Se debe seguir formando desde la pastoral vocacional, la formación inicial y la pastoral sacerdotal el espíritu misionero de los llamados al sacerdocio ministerial. Es que el don especial que los presbíteros reciben en la Sagrada ordenación nos los prepara para una misión limitada y restringida, sino para una vastísima y universal misión de salvación hasta los últimos confines de la tierra, dado que todo ministerio sacerdotal participa de la misma amplitud universal de la misión confiada por Cristo a los Apóstoles. De todas formas todos los sacerdotes deben ser sensibles a las necesidades de la Iglesia universal y deben informarse sobre el estado

de las misiones y de las Iglesias Particulares que se encuentran en alguna dificultad especial por escasez de clero y de agentes de evangelización. El número 24 de la COOPERATIO MISIONERA, presenta la idoneidad de los ministros enviado a misión a otras Jurisdicciones Eclesiásticas: “esta vocación especial presupone en el candidato una índole adecuada y peculiares dotes naturales. Entre las cualidades síquicas, se consideran necesarias la fortaleza de ánimo y un sincero espíritu de servicio. Por ellos los superiores deben ser muy diligentes en la dirección espiritual para encontrar candidatos aptos e idóneos. Naturalmente se supone que los obispos destinan a esta tarea a sus mejores sacerdotes, los cuales no sólo deben poseer una segura doctrina sagrada, sino que deben distinguirse por una fe firme, una esperanza inquebrantable y el celo por las alamas a fin de que, por cuanto esté de su parte, puedan transmitir verdaderamente la fe a los demás”.

Pregunta • ¿qué grado de disponibilidad tienes para prestar un servicio misionero en otras Jurisdicciones y por cuánto tiempo?

Texto para profundizar • La Misión de Cristo Redentor capítulo III.

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o Asesor General Mons. Fidel León Cadavid Marín

E l e n ví

Mons. José David Henao Marín

fines

A LOS SACERDOTES

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SUMARIO

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DOMINGO 1° DE ADVIENTO

CATEQUESIS 1

Las primeras comunidades, por la predicación de los Apóstoles o de sus sucesores, por la celebración del culto y por la práctica de la caridad, crecían y maduraban en su fe. También, desde estos momentos iniciales de la vida de la Iglesia, las comunidades eran misioneras, esto es, iban por todo el mundo para predicar al Señor Resucitado, según el mandato del mismo Jesús, y fundaban nuevas comunidades.

Evangelio según san Mateo (24,37-44)

Reanudamos el camino

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando venga el Hijo del hombre, pasará como en tiempo de Noé. Antes del diluvio, la gente comía y bebía y se casaba, hasta el día en que Noé entró en el arca; y cuando menos lo esperaban llegó el diluvio y se los llevó a todos; lo mismo sucederá cuando venga el Hijo del hombre: Dos hombres estarán en el campo: a uno se lo llevarán y a otro lo dejarán; dos mujeres estarán moliendo: a una se la llevarán y a otra la dejarán.

La Iglesia reanuda cada año su camino a través de la historia celebrando y profundizando cada vez más intensamente el misterio de Cristo, misterio siempre nuevo que ni el tiempo ni la humanidad pueden agotar. Cristo es el alfa y la omega, el principio y el fin. Gracias a él, la historia de la humanidad avanza como una peregrinación hacia la plenitud del Reino, que él mismo inauguró con su encarnación y su victoria sobre el pecado y la muerte.

Por lo tanto, estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor. Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora de la noche viene el ladrón estaría en vela y no dejaría abrir un boquete en su casa. Por eso, estad también vosotros preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre.»

Adviento es sinónimo de esperanza

PAUTAS DE REFLEXIÓN Con este primer domingo de Adviento comienza en la Iglesia un nuevo año litúrgico.

La Iglesia no cree en un dios sin rostro; su fe se apoya en un misterio que trasciende las fronteras de lo razonable para descubrir la presencia de Dios en medio de nosotros. El adviento se convierte, así, en ese tiempo en el cual la Iglesia aguarda la llegada de su Señor, guiada por la esperanza. Una esperanza que llama a la vigilancia, virtud característica de este singular tiempo litúrgico. Vigilancia en la oración, animada por una amorosa espera; vigilancia en el dinamismo de la caridad concreta, consciente de que el reino de Dios se acerca donde los hombres aprenden a vivir como hermanos.

Por todo esto y por muchas otras razones, se hizo necesario sintetizar las verdades de la Sagrada Escritura y de la Tradición en fórmulas breves, sintéticas y precisas que contenían lo fundamental de la profesión de fe de los creyentes. Además, como es posible comprender, la misma vida de la comunidad y las celebraciones litúrgicas, reclamaban una formulación común para que todos, con espíritu de profunda unidad, pudieran proclamar el contenido de lo que creían. Esta realidad nace de la unidad en una sola

fe, que pide, de igual modo, una forma común para expresarla. El Catecismo de la Iglesia Católica nos recuerda que a estas fórmulas, en las que se encuentra resumido el contenido de nuestra fe, se les puede llamar: •

Profesiones de Fe: porque con ellas damos testimonio con nuestros labios de lo que creemos.

Credo: porque normalmente la primera palabra de cada una de ellas es “creo”. Con esto indicamos, de manera solemne, nuestra convicción firme de cuanto profesamos.

Símbolos de la Fe: porque en ellas se contiene un sumario o un resumen de la totalidad de las verdades de la fe.

Preguntas para el diálogo 1. ¿Cómo vivían la fe las primitivas comunidades cristianas?¿Cómo vivimos hoy nuestra fe? 2. ¿Cómo podemos llevar a la práctica lo que profesamos en el Credo? Textos para profundizar • Catecismo de la Iglesia Católica No. 185 189

• http://www.mercaba.org/CREDO/CURSO/ credo_01.htm


2° DE ADVIENTO

El Símbolo

Y no os hagáis ilusiones, pensando: “Abrahán es nuestro padre”, pues os digo que Dios es capaz de sacar hijos de Abrahán de estas piedras. Ya toca el hacha la base de los árboles, y el árbol que no da buen fruto será talado y echado al fuego. Yo os bautizo con agua para que os convirtáis; pero el que viene detrás de mí puede más que yo, y no merezco ni llevarle las sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego. Él tiene el bieldo en la mano: aventará su parva, reunirá su trigo en el granero y quemará la paja en una hoguera que no se apaga.»

de los Apóstoles

y el Credo Niceno – Constantinopolitano

hecho: “Es el símbolo que guarda la Iglesia romana, la que fue sede de Pedro, el primero de los apóstoles, y a la cual él llevó la doctrina común” (S. Ambrosio).

PAUTAS DE REFLEXIÓN La figura de Juan Bautista

Evangelio según san Mateo (24,37-44) Por aquel tiempo, Juan Bautista se presentó en el desierto de Judea, predicando: «Convertíos, porque está cerca el reino de los cielos.» Éste es el que anunció el profeta Isaías, diciendo: «Una voz grita en el desierto: “Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos.”» Juan llevaba un vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura, y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y acudía a él toda la gente de Jerusalén, de Judea y del valle del Jordán; confesaban sus pecados; y él los bautizaba en el Jordán. Al ver que muchos fariseos y saduceos venían a que los bautizará, les dijo: «¡Camada de víboras!, ¿quién os ha enseñado a escapar del castigo inminente? Dad el fruto que pide la conversión.

El Evangelio de este segundo domingo de Adviento nos presenta la figura de san Juan Bautista, el cual se retiró al desierto de Judea y, con su predicación, llamó al pueblo a convertirse para estar preparado para la inminente venida del Mesías. El precursor de Jesús, situado entre la Antigua y la Nueva Alianza, es como una estrella que precede la salida del Sol, de Cristo, es decir, de Aquel sobre el cual «reposará el espíritu del Señor: espíritu de sabiduría e inteligencia, espíritu de consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor del Señor» (Is 11, 2).

Un tiempo para la escucha De la misma forma que el pueblo de Israel acudía a escuchar a Juan Bautista, también nosotros estamos llamados en este tiempo de Adviento a escuchar la voz de Dios que resuena en el desierto del mundo a través de las Sagradas Escrituras, especialmente cuando se predican con la fuerza del Espíritu Santo. El modelo de la escucha es la Virgen María: Contemplando en la Madre de Dios una existencia totalmente modelada por la Palabra, también nosotros nos sentimos llamados a entrar en el misterio de la fe, con la que Cristo viene a habitar en nuestra vida.

El Credo, el Símbolo o la Profesión de nuestra fe no podemos identificarlo con un esquema frío, sin sentido o que recitamos sin ninguna convicción. Esta síntesis de nuestra fe, cuando es proclamada individual o comunitariamente, debe llevar la fuerza de nuestra repuesta a Dios, de nuestra adhesión vital a él y de las convicciones que orientan nuestra vida y que testimoniamos ante el mundo. En nuestro lenguaje, con frecuencia hablamos de recitar el Credo “cortico” o “el largo”. De hecho, a lo largo de los siglos se han presentado, de acuerdo a las necesidades de cada época, diversas formulaciones de la Profesión de la Fe. Ellas no difieren en lo fundamental ni se contradicen entre sí, sino que han sido diferentes maneras de poner en una fórmula concisa y breve las verdades de la fe. De estas formulaciones, dos se consideran las más importantes y por eso se proponen en la liturgia para que los creyentes proclamemos comunitariamente nuestra única fe: •

El Símbolo de los Apóstoles, llamado así porque es considerado con justicia como el resumen fiel de la fe de los apóstoles. Es el antiguo símbolo bautismal de la Iglesia de Roma. Su gran autoridad le viene de este

• El Símbolo llamado de NiceaConstantinopla debe su gran autoridad al hecho de que es fruto de los dos primeros Concilios Ecuménicos (325 y 381). Sigue siendo todavía hoy el símbolo común a todas las grandes Iglesias de Oriente y Occidente. Ambos símbolos se dividen en tres partes: La primera trata de Dios Padre, Señor de todas las cosas; la segunda, de Dios Hijo, Redentor de los hombres; y la tercera, de Dios Espíritu Santo, fuente y principio de toda santidad (cfr. CIC, 190). A su vez, en estas tres partes diferenciamos 12 artículos.

Preguntas para el diálogo 1. ¿Qué es un Concilio Ecuménico? 2. ¿Los fieles son conscientes de las verdades de fe que proclaman en el credo? 3. ¿Cómo lograr que los fieles conozcan y profundicen estas verdades de fe?

Textos para profundizar • Catecismo de la Iglesia Católica No. 189 - 197 • http://es.catholic.net/conocetufe/768/2480/ articulo.php?id=271 • h t t p : / / w w w . m e r c a b a . o r g / F I C H A S / ORACION/CREDO/0_introduccion.htm

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DOMINGO

CATEQUESIS 2


3° DE ADVIENTO

Artículos del Credo

Evangelio según san Mateo (11,2-11):

Para esta catequesis presento un cuadro comparativo del Credo de los Apóstoles y el Niceno constantinopolitano. Esto facilitará comentarios y profundización en cada uno de los artículos.

En aquel tiempo, Juan, que había oído en la cárcel las obras del Mesías, le mandó a preguntar por medio de sus discípulos: «¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?» Jesús les respondió: «Id a anunciar a Juan lo que estáis viendo y oyendo: los ciegos ven, y los inválidos andan; los leprosos quedan limpios, y los sordos oyen; los muertos resucitan, y a los pobres se les anuncia el Evangelio. ¡Y dichoso el que no se escandalice de mí!»

Art.

Una noticia que suscita alegría

¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?

Esta noticia, que Dios había enviado a su único Hijo al mundo y que con Él había llegado la salvación para toda la humanidad, es motivo de gozo y alegría. ¡Qué mejor noticia podía esperar la humanidad! Que mejor noticia que aquella que anuncia la llegada de Dios al mundo para liberar al hombre de las ataduras del pecado y de la muerte.

Nos dice el Evangelio de este domingo que Juan envió a Jesús a dos de sus discípulos con una pregunta: ¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro? La respuesta de Jesús no se detuvo en discursos ni teorías, no perdió su tiempo anunciando a gritos quién era él. “Vayan y cuenten a Juan lo que ustedes oyen y ven”, esa es la manera de responder desde la fe, lo que ven que se hace en defensa de la vida o la integridad de la vida, para que terminen las cegueras, las tartamudeces, para que terminen los signos de muerte, para que terminen los signos de sufrimiento, pero no para caer en unos nuevos sufrimientos y nuevas muertes, sino para alcanzar la plena y definitiva salvación.

Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.

Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor,

Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho;

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que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen,

que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre;

4

padeció bajo el poder de Poncio Pilato fue crucificado, muerto y sepultado,

y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras,

5

descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos,

y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre;

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subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.

Creo en el Espíritu Santo,

Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.

la Santa Iglesia católica, la comunión de los santos,

Creo en la Iglesia, que es Una, Santa, Católica y Apostólica.

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PAUTAS DE REFLEXIÓN

Ante esta noticia el cristiano no puede menos que estar siempre alegre en el Señor. Así, la alegría cristiana brota de esta certeza: Dios está cerca, está conmigo, está con nosotros, en la alegría y en el dolor, en la salud y en la enfermedad, como amigo y esposo fiel. Y esta alegría permanece también en la prueba, incluso en el sufrimiento; y no está en la superficie, sino en lo más profundo de la persona que se encomienda a Dios y confía en él.

Nicea - Constantinopla

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra.

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Al irse ellos, Jesús se puso a hablar a la gente sobre Juan: «¿Qué salisteis a contemplar en el desierto, una caña sacudida por el viento? ¿O qué fuisteis a ver, un hombre vestido con lujo? Los que visten con lujo habitan en los palacios. Entonces, ¿a qué salisteis?, ¿a ver a un profeta? Sí, os digo, y más que profeta; él es de quien está escrito: “Yo envío mi mensajero delante de ti, para que prepare el camino ante ti.” Os aseguro que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan, el Bautista; aunque el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él.»

Apóstoles

7 8 9

10 el perdón de los pecados, 11 la resurrección de la carne 12 y la vida eterna. Amén.

Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.

Para el diálogo

Texto para profundizar

1. Identificar diferencias y semejanzas.

• http://www.aciprensa.com/catequesis/ credo7.htm

2. Comentar y profundizar en cada uno de los artículos.

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DOMINGO

CATEQUESIS 3


4° DE ADVIENTO

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DOMINGO

NUESTRA REALIDAD

luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados.» Todo esto sucedió para que se cumpliese lo que habla dicho el Señor por el Profeta: «Mirad: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa “Dios-connosotros”.» Cuando José se despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y se llevó a casa a su mujer.

PAUTAS DE REFLEXIÓN En este cuarto domingo de Adviento el evangelio de san Mateo nos invita a profundizar en el significado del nacimiento de Jesús, acontecimiento salvífico fundamental que es, al mismo tiempo, histórico y sobrenatural. Una situación compleja José era el prometido de María, pero antes de empezar a estar juntos, ella quedó en encinta. Esta situación preocupó sobre manera a José y decidió repudiarla en secreto. Pero cuando el ángel del Señor se le aparece en sueños y le anuncia que el hijo que esperaba María era obra del Espíritu Santo, José la acoge en su casa. De esta forma José se presenta como hombre «justo», fiel a la ley de Dios, disponible a cumplir siempre la voluntad de Dios. Culmina el tiempo de Adviento, ¿Cómo nos hemos preparado? Evangelio según san Mateo (1,18-24) El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: María, su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió repudiarla en secreto. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo: «José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a

Este domingo, el último del adviento, se nos anuncia con total claridad la llegada del Mesías: «Mirad: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa “Dios-con-nosotros”.» ¿Si nos hemos preparado lo suficiente para vivir este acontecimiento salvífico de fe con un corazón bien dispuesto para acoger a Dios en nosotros y evitar así que la navidad se convierta en una fiesta pagana? La alegría de la navidad es vida, es vida plena, es vida de apertura, es vida para sembrar fraternidad, para sembrar paz y justicia, y no para borracheras, comilonas y despilfarros.

Uno de los problemas más frecuentes y serios en la actualidad es la promiscuidad sexual de adolescentes y aún de niños, y el embarazo de niñas y adolescentes. De ello no estamos exentos en el oriente antioqueño donde se han registrado 1609 embarazos de adolescentes, sin contar los abortos clandestinos. Situaciones preocupantes • Se desestima el valor de la castidad; a los jóvenes les da pena ser vírgenes. • Se incita a las relaciones sexuales con la promoción indiscriminada de preservativos. • Los padres de familia y los maestros no abordan con suficiente claridad y objetividad la cuestión del sexo. • En los colegios se da una fuerte presión por parte del grupo de edad, para que se tengan relaciones sexuales. • Los medios de comunicación (televisión, internet, prensa) y los ambientes sociales (paseos, fiestas, tabernas, etc) incitan a la actividad sexual. Retos pastorales • Una pastoral familiar que aborde directamente el hogar, pues es un hecho que la inmensa mayoría no asisten a grupos de parejas y menos de familia. • Oferta de una pastoral prejuvenil y juvenil, acorde con las demandas de los muchachos, para poder llegar con las propuestas nuestras.

Una pastoral educativa personalizada: por tanto es urgente la consejería pastoral permanente en las escuelas y colegios donde aún tenemos cabida. Una escuela de formación permanente para los educadores que dictan religión, ética y valores, a fin de que asuman su compromiso cristiano evangelizador también en este campo. Participación eficaz en los espacios oficiales donde se definen las políticas de infancia y juventud, para que ésta problemática ocupe lugar central.

Preguntas ¿Qué pensar acerca del incremento de la actividad sexual de los adolescentes? ¿a qué se debe? ¿qué se puede hacer desde la familia y la parroquia para impartir una adecuada formación sexual?


DE LA SAGRADA FAMILIA: JESÚS, MARÍA Y JOSÉ

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DOMINGO

CONTROVERSIAS RELIGIOSAS

PAUTAS DE REFLEXIÓN El Hijo de Dios quiso tener una familia Celebramos este domingo la fiesta de la Sagrada Familia. Siguiendo los evangelios de san Mateo y san Lucas, fijamos hoy nuestra mirada en Jesús, María y José, y adoramos el misterio de un Dios que quiso nacer de una mujer, la Virgen santísima, y entrar en este mundo por el camino común a todos los hombres. Al hacerlo así, santificó la realidad de la familia, colmándola de la gracia divina y revelando plenamente su vocación y misión. Evangelio según san Mateo (2,13-15.19-23)

El valor de la familia

Cuando se marcharon los magos, el ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: «Levántate, coge al niño y a su madre y huye a Egipto; quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.»

El bien de la persona y de la sociedad está íntimamente vinculado a la “buena salud” de la familia. Por eso, la Iglesia está comprometida en defender y promover “la dignidad natural y el eximio valor” del matrimonio y de la familia dada su importancia y trascendencia en el ámbito humano.

José se levantó, cogió al niño y a su madre, de noche, se fue a Egipto y se quedó hasta la muerte de Herodes. Así se cumplió lo que dijo el Señor por el profeta: «Llamé a mi hijo, para que saliera de Egipto.» Cuando murió Herodes, el ángel del Señor se apareció de nuevo en sueños a José en Egipto y le dijo: «Levántate, coge al niño y a su madre y vuélvete a Israel; ya han muerto los que atentaban contra la vida del niño.» Se levantó, cogió al niño y a su madre y volvió a Israel. Pero, al enterarse de que Arquelao reinaba en Judea como sucesor de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allá. Y, avisado en sueños, se retiró a Galilea y se estableció en un pueblo llamado Nazaret. Así se cumplió lo que dijeron los profetas, que se llamaría Nazareno.

Múltiples desafíos Hace ya tiempo que la familia tradicional afronta una profunda crisis: no dejan de aumentar las parejas que optan por la convivencia en lugar de pasar por el altar, los divorcios no paran de crecer, los matrimonios entre personas del mismo sexo son ya una realidad en varios países, así como la adopción de niños por parte de parejas homosexuales... Estos y muchos otros se presentan como grandes desafíos que la Iglesia tiene por delante en el terreno de la familia, ¿Qué hacemos para fortalecer nuestra familia y el valor de la familia como institución insustituible en la sociedad humana?

Estado de la cuestión Algunos consideran que: • El rechazo del sacerdocio femenino es algo discriminatorio. • La exclusión de las mujeres del ministerio sacerdotal señala una actitud machista de la Iglesia. • Las mujeres tienen capacidad para ser mamás, buenas religiosas, catequistas, enfermeras, maestras, pero no para ser sacerdotes.

El hecho de que Cristo hubiera escogido sólo a varones para el ministerio sacerdotal responde a la situación de la mujer, con respecto al varón, en aquel tiempo. Pero las condiciones históricas han cambiado.

Doctrina católica • La normatividad canónica de la Iglesia señala que el sacramento del orden sólo se puede conferir a los varones. • La Iglesia considera que la mujer cumple un papel fundamental en el campo de la evangelización, sin necesidad de ser sacerdotes. • El papa Juan Pablo II declaro que la Iglesia no tiene en modo alguno la facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres, y que este dictamen debe ser considerado como definitivo por todos los fieles de la Iglesia.”(Ordinatio Sacerdotalis, 4) Imaginarios posibles • Mujeres cardenales. • Mujeres al frente de nunciaturas. • Mujeres en los dicasterios de la Curia Vaticana.

Para discutir ¿Qué pensar acerca de la ordenación de mujeres?


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VIDA FAMILIAR

Navidad es tiempo para celebrar el nacimiento de Jesús, en esta fecha especial encontramos que el Hijo de Dios desciende para compartir nuestras vidas, haciéndose hombre nos hace partícipes de su divinidad y misterio. “En la ciudad de David os ha nacido un salvador, el mesías, el Señor” Lc 2,11. Que nos trajo la gracia del Padre y el mensaje de la salvación.

Abramos nuestro corazón para que con bondad, fe y amor en esta navidad “Vamos a Belén y veamos ese acontecimiento que el Señor nos ha anunciado” Lc 2,15, volvamos nuestros ojos al momento al lado de la familia de Nazaret, quienes pobres, en un establo, despojados del mundo, rodeados de personas sencillas, se prepararon y recibieron la mayor riqueza cuando “la gloria del Señor los envolvió con su luz” Lc 2,9 y acogieron con especial disposición la Palabra de Dios, para hacerla extensiva a la humanidad.

Vivir la navidad es experimentar la cercanía de Dios, comprender que más allá de los excesos de compras y comidas, están los regalos que permiten unirnos en la vida espiritual, encontrarnos con el otro, con sus necesidades, con su ser. Navidad es más que una fecha, es una celebración permanente, donde estamos llamados a tener una apertura para el nacimiento del Salvador en nuestra vida y alegría para comunicar la buena Noticia a quienes nos rodean y lograr que se haga extensivo el Reino de Dios entre nosotros, experimentando la esperanza del nacimiento de Jesús.

Reflexión •

¿Qué representa en mi familia la navidad? • ¿Qué significado tienen los regalos de navidad?

• En familia realizar un compromiso para vivir con sentido cristiano esta navidad. “Entre tantos regalos que compramos y recibimos no olvidemos el verdadero regalo: darnos mutuamente algo de nosotros mismos. Darnos mutuamente nuestro tiempo. Abrir nuestro tiempo a Dios. Así la agitación se apacigua. Así nace la alegría, surge la fiesta.” (Benedicto XVI)

Historia del pesebre

Historia del árbol de navidad

La historia del pesebre se remonta al siglo XII cuando San Francisco de Asís inició la costumbre de representar la natividad de Jesús por medio de figuras. Desde entonces, la virgen María, San José, El Niño Dios, los tres reyes magos, los pastores, la mula y el buey se convirtieron en los protagonistas del pesebre, tal y como lo conocemos en nuestros días. La idea de representar con figuras el nacimiento de Cristo le surgió a San Francisco de Asís durante un viaje que hizo en 1223 a la gruta de Belén, sitio donde nación el redentor. Entre tanto, la encargada de difundir la tradición de representar el nacimiento, fue Santa Clara de Asís. En la Edad Media y en El Renacimiento se involucraron al pesebre la figura de los Pastores de Belén y los tres Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltazar, quienes traían al niño ofrendas de incienso, mirra y oro.” (El colombiano. 16 de diciembre de 2011)

El primer árbol de navidad fue decorado con sangre. Se cuenta que en la Alemania precristiana se realizaban dos ritos: el primero al Dios Odín (“padre de todos” según la mitología escandinava). Su rito consistía en que un grupo de guerreros se reunía en torno al roble sagrado de Odín y a manera de tributo, ofrendaban las vidas de los prisioneros de guerra. El segundo rito estaba dedicado al Dios Thor, (hijo de Odín. Considerado como el más fuerte de todos los Dioses nórdicos). Estos ritos sufrieron un cambio importante a partir del siglo VII, con la llegada a Alemania del monje san Bonifacio. Al darse cuenta de los sacrificios humanos que practicaban los nativos en el roble dedicado a Odín, San Bonifacio decidió usar un abeto para evangelizarlos a través de él. Aprovechando su forma triangular, logró transmitirles el concepto de la santísima trinidad (Dios padre, hijo y espíritu santo).

La tradición de adornar el árbol navideño también se inició en Alemania. Para su decoración se emplea en la actualidad una gran diversidad de objetos y elementos, siendo los más tradicionales: • Estrella: colocada generalmente en la punta del árbol, representa la fe que debe guiar la vida del cristiano, recordando a la estrella de Belén. • Esfera: al parecer en un principio San Bonifacio adornó el árbol con manzanas, representando con ellas las tentaciones. Hoy día, se acostumbra a colocar bolas o esferas que simbolizan los dones de Dios a los hombres. • Lazos: Representan la unión de las familias y personas queridas alrededor de dones que se desean dar y recibir. • Luces: En un principio velas, representan la luz de Cristo. www.wikipedia.org


Es amor. Es esperanza. Es fe. Es alegría. Es principio de Redención. Es una etapa de nuestra historia de Salvación. Es encuentro con Cristo, Niño. Es conversión y renovación. Es paz interior. Es vida nueva. Es camino que se abre para el tiempo y para la eternidad. Es verdad que se alimenta del Amor. Es vida que fructifica y madura, sin dejar de nacer siempre en el corazón. www.poemas-del-alma.com


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