ARQUIDIÓCESIS DE CALI. VICARÍA PARA LA EVANGELIZACIÓN
NOVENA DE NAVIDAD 2019 “HÁGANSE SERVIDORES UNOS DE OTROS” En el editorial de la Voz Católica del mes de agosto pasado invitaba el Arzobispo de Cali a dirigir la mirada a Cristo, el Siervo Sufriente: “Jesús es el enviado del Padre y el Buen Samaritano de la humanidad que sufre: de las víctimas por la discriminación de género (mujer samaritana), por la violencia de los ladrones (parábola del samaritano) y por la degradación y la exclusión (leproso samaritano), Esta TRILOGÍA SAMARITANA DEL EVANGELIO, marca la ruta del servicio al Dios Único, al prójimo victimizado y al Cuerpo de Cristo (comunidad eclesial), saliendo de la “lepra” egocéntrica, que desplaza y excluye”. En nuestro Plan Pastoral (2019-2023) hemos enfatizado durante todo este año que va terminando el lema: DEL SEÑOR SOMOS Y DEL DOMINGO VIVIMOS, ahora, en vísperas de comenzar el año 2020 queremos subrayar uno de nuestros siete ejes transversales: Diócesis servidora, por eso ya empezamos a difundir lo que será clave para todos en el nuevo año: HÁGANSE SERVIDORES UNOS DE OTROS. Está tomado del evangelio de Marcos; después de la petición de Santiago y Juan: “Concédenos que nos sentemos en tu gloria, uno a tu derecha y otro a tu izquierda” (10,37), se desató entre los demás discípulos una discusión contra estos dos compañeros y Jesús les dice: “Saben que los que son tenidos como jefes de las naciones, las dominan como señores absolutos, y sus grandes las oprimen con su poder. Pero no ha de ser así entre ustedes, PUES EL QUE QUIERA LLEGAR A SER GRANDE ENTRE USTEDES, QUE SEA SU SERVIDOR, Y EL QUE QUIERA SER EL PRIMERO ENTRE USTEDES, QUE SEA ESCLAVO DE TODOS; QUE TAMPOCO EL HIJO DEL HOMBRE HA VENIDO A SER SERVIDO, SINO A SERVIR Y A DAR SU VIDA COMO RESCATE POR MUCHOS” (10, 42-45). He ahí el gran argumento bíblico, evangélico, para invitar a todos A HACERSE SERVIDORES. El HÁGANSE parte del hecho de que todavía NO SOMOS
SERVIDORES, se aprende a servir, como se aprende a escuchar, a compartir, a perdonar, a construir un mundo mejor. LA NOVENA DE NAVIDAD NOS REÚNE EN TORNO AL PESEBRE DONDE DIOS SE HACE NIÑO, INDEFENSO, POBRE, HUMILDE, MARGINADO, PARA DESARMAR NUESTRA VIOLENCIA, NUESTRO EGOÍSMO, NUESTRA AUTOSUFICIENCIA, PARA ENSEÑARNOS A SERVIR. Junto con María y José, con nuestros feligreses, en familia, con los amigos, con los migrantes, con los más necesitados OREMOS CON ESTA NOVENA Y PIDAMOS CON HUMILDAD QUE PODAMOS HACERNOS SERVIDORES UNOS DE OTROS. Modo de hacer la NOVENA DE NAVIDAD: La oración para todos los días, la de san José, los gozos, la oración al Niño Dios y a María de Nazaret son las que siempre hemos hecho desde pequeños y guardamos todavía en nuestra memoria, eso tiene ya en sí un valor religioso. Para cada día se propone UN TEXTO BÍBLICO Y UNA BREVE CONSIDERACIÓN, es ahí donde está un poco lo propio y novedoso para este año 2019. Donde sea posible, con niños y jóvenes, se pueden utilizar, en vez de las oraciones clásicas, otras oraciones más acordes a los tiempos que vivimos, e incluso se puede intentar dramatizar cada día según el título que aquí se da a cada consideración diaria.
Dios de infinita bondad y caridad que nos has amado tanto, que nos diste en tu Hijo la mejor prenda de tu amor, para que, encarnado y hecho nuestro hermano en las entrañas de la Virgen María, naciera en un pesebre para nuestra salvación. Te damos gracias por tan inmenso beneficio. En retorno te ofrecemos, Señor, nuestra esperanza y deseo sincero de vivir solidariamente nuestras relaciones en la familia y la comunidad. Señor, queremos crecer juntos como hermanos; por eso te pedimos que nos ayudes a mantenernos unidos en el amor en todos los momentos de nuestra vida. Te pedimos que esta Navidad, fiesta de paz y de alegría, sea para nosotros un estímulo que nos muestre la importancia de trabajar en la tarea de la nueva evangelización que nosotros y el mundo entero necesita. Amén.
¡Oh! José, hombre justo, esposo fiel de María y padre adoptivo de Jesús, a ti, a quien Dios colocó como custodio del hogar de Nazareth, te pedimos que vengas a nuestros hogares para enseñarnos a vivir solidariamente. Queremos celebrar la Navidad compartiendo la esperanza de una Colombia en la que podamos vivir como hermanos, brindándonos apoyo especialmente en los momentos de mayor dificultad. Te lo pedimos por la siempre bienaventurada Virgen María, a ti, Cristo nuestro Señor que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amen.
¡Oh! María, Madre nuestra, que por tus virtudes y especialmente por tu humildad fuiste escogida como Madre de Jesús, te pedimos que prepares nuestros corazones para que tu Hijo pueda nacer entre nosotros. Que, en esta Navidad, uniendo nuestro esfuerzo al de los demás podamos ser instrumentos de paz y reconciliación promoviendo la justicia y la solidaridad, especialmente, entre aquellos que más lo necesitan. Te invitamos María para que acompañes nuestro caminar en este proceso de nueva evangelización con que la Iglesia busca la construcción de una sociedad más fraterna, justa y solidaria. Amén.
Jesús, Navidad es la celebración de tu encarnación en medio de nosotros; es la presencia gozosa de tu amor en nuestra familia y en nuestra comunidad. Navidad es la certeza de que el Dios del cielo y de la tierra es nuestro Padre, porque Tú, Divino Niño, eres nuestro hermano. Ayúdanos a comprender que, a través tuyo, Dios nos invita a vivir la fraternidad practicando el respeto, la justicia y la solidaridad. Haz que podamos vencer todo aquello que nos impide vivir como hermanos. Danos la sencillez de los niños para asumir nuestro compromiso en la construcción de tu Iglesia promoviendo y asumiendo los valores que ella nos propone para que, de este modo, como comunidad, podamos celebrar con alegría tu nacimiento. Amén.
(Se reza un Padre Nuestro, Ave María y un Gloria)
GOZOS Dulce Jesús mío, mi niño adorado ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto! ¡Oh, Sapiencia suma del Dios soberano, ¡que a infantil alcance te rebajas sacro! ¡Oh, Divino Niño, ¡ven para enseñarnos la prudencia que hace verdaderos sabios! Ven a nuestras... ¡Oh, Adonai potente que Moisés hablando, de Israel al pueblo diste los mandatos! ¡Ah, ven prontamente para rescatarnos, y que un niño débil muestre fuerte el brazo! Ven a nuestras... ¡Oh, raíz sagrada de José que en lo alto presenta al orbe tu fragante nardo! Dulcísimo Niño que has sido llamado Lirio de los valles, Bella flor del campo. Ven a nuestras... ¡Llave de David que abre al desterrado las cerradas puertas de regio palacio! ¡Sácanos! ¡Oh Niño con tu blanca mano, de la cárcel triste que labró el pecado! Ven a nuestras... ¡Oh, lumbre de Oriente, sol de eternos rayos, que entre las tinieblas tu esplendor veamos! Niño tan precioso, dicha del cristiano, luzca la sonrisa de tus dulces labios. Ven a nuestras... ¡Espejo sin mancha, santo de los
¡Rey de las naciones, Emmanuel preclaro, De Israel anhelo Pastor del rebaño! ¡Niño que apacientas con suave cayado ya la oveja arisca, ya el cordero manso! Ven a nuestras... ¡Ábranse los cielos y llueva de lo alto bienhechor rocío como riego santo! ¡Ven hermoso Niño, ven Dios humanado! ¡Luce, Dios estrella! ¡Brota, flor del campo! Ven a nuestras... ¡Ven, que ya María previene sus brazos, do su niño vean, en tiempo cercanos! ¡Ven, que ya José, con anhelo sacro, se dispone a hacerse de tu amor sagrario! Ven a nuestras... ¡Del débil auxilio, del doliente amparo, consuelo del triste, luz del desterrado! ¡Vida de mi vida, mi dueño adorado, mi constante amigo, mi divino hermano! Ven a nuestras... ¡Ven ante mis ojos, de ti enamorados! ¡Bese ya tus plantas! ¡Bese ya tus manos! ¡Prosternado en tierra, te tiendo los brazos, y aún más que mis frases, te dice mi llanto! Ven a nuestras... ¡Ven Salvador nuestro por quien suspiramos Ven a nuestras almas, Ven, ¡no tardes tanto!
santos, sin igual imagen del Dios soberano! ¡Borra nuestras culpas, salva al desterrado y en forma de niño, da al mísero amparo! Ven a nuestras...
Texto bíblico: Filipenses 2, 5-11: “Entre ustedes tengan la misma actitud del Mesías Jesús: Él, a pesar de su condición divina, no se aferró a su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, haciéndose uno de tantos. Así, presentándose como simple hombre, se abajó, obedeciendo hasta la muerte y muerte en cruz”. Palabra de Dios. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: Aquí junto al pesebre, el gran signo de la humildad de Dios que se hace pequeño, indefenso, pobre, desamparando, aprendemos en esta primera noche de la novena que EL HIJO DE DIOS VIENE DEL CIELO Y PERMANECIENDO OBEDIENTE AL PADRE HASTA DAR LA VIDA POR TODOS NOSOTROS, VUELVE AL CIELO. Por eso en este primer día exclamamos con gran respeto, devoción y reconocimiento VENID ADORÉMOSLE. San Pablo ve a toda la comunidad creyente reunida alrededor del Cristo que ha vencido la muerte, el Resucitado y con este bello himno a Cristo invita a cada persona de la comunidad a ser humilde con los demás: “En vez de obrar por egoísmo o presunción, cada cual considere humildemente que los otros son superiores y nadie mire únicamente por lo suyo, sino también cada uno por lo de los demás” (Filipenses 2, 3-4), los versículos antes de empezar el himno al Cristo modelo de servicio, de entrega, de humildad. ¿Qué significa realmente que Dios se haya hecho niño, pequeño, servidor? La respuesta nos conmueve: Si Dios mismo es un niño humilde, servicial, todas las relaciones de orden y jerarquía que existen en la tierra se transforman radicalmente en lo opuesto. Esto es lo conmovedor: lo divino es la obediencia y el sometimiento, no la autorrealización y la emancipación respecto de esto o aquello. Dios no sólo se hace
pequeño entre nosotros, sino que se integra entre nosotros. Él no destruye, sino que sana. Y sana desde dentro. Un momento de silencio para INTROYECTAR ESTE GRAN MISTERIO DEL DIOS ENTRE NOSOTROS. Siguen las demás oraciones propias o también se puede cantar un villancico que hable de la humildad y pequeñez de Dios que debe ser también nuestra humildad y pequeñez.
Texto bíblico: Marcos 9, 33-37: “Llegaron a Cafarnaún y, una vez en casa, les preguntó Jesús: ¿De qué discutían por el camino? Ellos callaron, pues por el camino habían discutido entre sí quién era el mayor. Entonces se sentó, llamó a los Doce y les dijo: Si uno quiere ser el primero, que sea el último de todos y EL SERVIDOR DE TODOS. Y tomando un niño, LO PUSO EN MEDIO DE ELLOS, lo estrechó entre sus brazos y les dijo: El que acoja a un niño como éste en mi nombre, a mí me acoge; y el que me acoja a mí, no me acoge a mí, sino a Aquel que me ha enviado”. Palabra del Señor. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: Los evangelios cuentan que Jesús tenía especial cariño por los niños. Eso es ya sorprendente porque en aquel tiempo las mujeres y los niños NO CONTABAN, O LES HACÍAN HACER TAREAS DE ESCLAVOS (lavar los pies). En cambio, Jesús afirma: “de los que son como niños es el Reino de Dios” (Marcos 10,14). Lo que impresiona a Jesús de los niños no es la supuesta inocencia de ellos (también hacen pataletas y no obedecen), sino el hecho de que, en su situación de niños, SON POR ENTERO DEPENDIENTES Y TODO DEBEN ESPERARLO DE LOS MAYORES. Además, los niños tienen capacidad de asombro y preguntan constantemente, esas actitudes son básicas para acoger a Dios. Poniendo en el centro a los niños Jesús NOS ENSEÑA A SERVIR A LOS MÁS DÉBILES. Él mismo, nos dice el Evangelio de
Juan, en la última cena, “les demostró su amor hasta el extremo…se levantó de la mesa, dejó el manto, y, tomando un paño, se lo ató a la cintura. Echó luego agua en un platón y se puso a lavarles los pies a los discípulos” (13, 1.4-5). Y después les dirá “Si yo, el Señor, y el Maestro, les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies unos a otros” (Juan 13, 14). Lo que hace dichoso, bienaventurado a todo creyente ES SU CAPACIDAD DE SERVICIO, DE ENTREGA, DE DONACIÓN. Y una reflexión final: Dios se ha hecho niño ¿qué implica esto en una sociedad que es tan violenta con los niños? Significa que todos nosotros, también algunos ministros de la Iglesia nos hemos distanciado de Dios. Golpear, abusar, usar a los niños para llamar la atención son CRÍMENES HORRENDOS. NADA PUEDE JUSTIFICARLOS. En este segundo día de la novena PIDAMOS A DIOS QUE SE HA HECHO INDEFENSO EN EL PESEBRE QUE DESARME NUESTRO CORAZÓN VIOLENTO Y ORGULLOSO Y NOS HAGA SERVIDORES DE LOS NIÑOS. PIDAMOS TAMBIÉN POR LOS HOGARES DESTRUIDOS PUES SIEMPRE SON LOS NIÑOS QUIENES LLEVAN LA PEOR PARTE. BUSQUEMOS A TODA COSTA LA RECONCILIACIÓN DE LOS PADRES. Un momento de silencio para pensar en esta dura realidad. Siguen las oraciones comunes y los villancicos apropiados.
Texto bíblico: Efesios 5,21-25. 6, 1-4: “Sean dóciles unos con otros por respeto a Cristo: las mujeres a sus maridos como si fuera al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, como el Mesías, salvador del cuerpo, es cabeza de la Iglesia. Como la Iglesia es dócil al Mesías, así también las mujeres a sus maridos en todo. Maridos, amen a sus mujeres igual que el Mesías demostró su amor a la Iglesia entregándose por ella. Hijos, obedezcan a sus padres cristianamente, como es razón. Honra a tu padre y a tu madre es el primer mandamiento que lleva una promesa: te irá bien y vivirás largo tiempo en la tierra. Padres, ustedes no exasperen a sus hijos; críenlos educándolos y corrigiéndolos como el Señor quiere”. Palabra de Dios. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: El pasaje que se acaba de proclamar es UN CUADRO DOMÉSTICO QUE PINTA PABLO PARA HACERLE VER A LAS FAMILIAS DE AYER Y DE HOY CÓMO HAN DE RELACIONARSE SEGÚN LA FE. En la Biblia la FAMILIA ES UNA IMAGEN DE LA SOBERANÍA DE DIOS. Los vínculos entre Dios y su pueblo elegido son lazos perpetuos, lazos de amor, lazos de solidaridad, de cuidado y de un gran amor. La familia es la célula nuclear del reino de Dios. El mismo Jesús rechaza el divorcio y su argumento se remonta a la creación, al designio divino al crear al hombre y a la mujer, bendiciéndolos para que crecieran y se multiplicaran; por eso lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre. Es decir, lo que olvidamos con frecuencia es esa IMAGEN NUPCIAL ENTRE DIOS E ISRAEL que en el Sacramento del matrimonio se traduce en EL AMOR Y LA FIDELIDAD QUE DIOS CONCEDE A LOS ESPOSOS. Ahora se entiende sin prejuicios el pasaje de san Pablo a los Efesios: NO HABLA DE LA SUPREMACÍA DEL HOMBRE SOBRE LA MUJER NI AL REVÉS, HABLA A LOS MARIDOS DE ENTREGARSE A SU MUJER COMO CRISTO SE ENTREGÓ A LA IGLESIA, ES DECIR, HABLA DE EXTENDER LOS BRAZOS EN LA CRUZ Y ASÍ
AMAR DESDE LA CRUZ. IGUAL PARA LA MUJER, TAMBIÉN PARA LAS RELACIONES PADRES-HIJOS VALE LA MISMA ACTITUD: ENTREGA, SERVICIO, DONACIÓN TOTAL. Como los ojos del niño miran a quien le da de comer, así los ojos del esposo deben dirigirse a su esposa y los de ésta a aquél, así los ojos del pueblo de Dios deben dirigirse a Dios. En este tercer día revisemos NUESTRAS RELACIONES FAMILIARES: ¿SÍ SOMOS SERVIDORES UNOS DE OTROS? ¿O NOS DESTROZAMOS UNOS A OTROS? Un momento de silencio para reflexionar. Siguen las oraciones comunes.
Texto bíblico: Mateo 19, 9-12: “Ahora les digo yo que si uno despide a su mujer -no hablo de unión ilegal- y se casa con otra, comete adulterio. Los discípulos le replicaron: Si tal es la situación del hombre con la mujer, no es conveniente casarse. Pero él les dijo: No todos pueden con eso que han dicho, sólo los que han recibido el don. Hay eunucos que salieron así del vientre de su madre, a otros los hicieron los hombres, y hay quienes se hacen eunucos por el reinado de Dios. El que pueda con eso, que lo haga”. Palabra del Señor.
CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: Desde pequeños nos enseñaron a memorizar los diez mandamientos, los siete sacramentos, las oraciones, tal vez no nos hablaron del significado profundo de ellos porque eran otros tiempos, otra pedagogía. Hoy, el Catecismo de la Iglesia (que es del año 1992), fruto del Concilio Vaticano II, da un paso adelante y nos instruye: “El Bautismo, la Confirmación y la Eucaristía son los SACRAMENTOS DE LA INICIACIÓN CRISTIANA. Fundamentan la vocación común de todos los discípulos de Cristo, que es VOCACIÓN A LA SANTIDAD Y A LA MISIÓN DE EVANGELIZAR EL MUNDO…Otros dos sacramentos, el ORDEN Y EL MATRIMONIO, contribuyen ciertamente a la
propia salvación, PERO ESTO LO HACEN MEDIANTE EL SERVICIO QUE PRESTAN A LOS DEMÁS” (números 1533-1534). El avance teológico está en que agrupa los siete sacramentos en tres grandes bloques: Sacramentos de iniciación cristiana, sacramentos de la curación (Reconciliación y Unción) y sacramentos AL SERVICIO DE LA COMUNIÓN Y MISIÓN DE LOS FIELES (lo dice expresamente en el número 1211). En la celebración sacramental del matrimonio los esposos SE BESAN, no es un símbolo vacío, es EXPRESIÓN DEL PROFUNDO AMOR ENTRE ELLOS, entrega y amor que se concretiza luego en la vida que engendran, en los hijos, en su paternal y maternal cuidado: EL MATRIMONIO ES ASÍ UN SACRAMENTO AL SERVICIO DE LA FAMILIA. En la ordenación sacerdotal el Obispo entrega la patena y el cáliz al sacerdote y le dice: Recibe la ofrenda del pueblo santo para presentarla a Dios. Considera lo que realizas e imita lo que conmemoras y CONFORMA TU VIDA CON EL MISTERIO DE LA CRUZ DEL SEÑOR”. EL ORDEN SACERDOTAL ES TAMBIÉN SACRAMENTO AL SERVICIO DE LOS CREYENTES, es servicio de escucha, de acompañamiento, de reconciliación, de celebración de la Vida (Eucaristía). En este cuarto día, contemplemos en el pesebre al Niño Dios, recordemos el pasaje de Pablo a los Gálatas: “Al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de mujer, nacido bajo el régimen de la ley, para rescatar a los que se hallaban sometidos a ella y para que recibiéramos la condición de hijos” (4, 4-5). Sólo Dios, que se hace pobre, humilde y SERVIDOR DE TODOS, puede liberarnos de nuestro egoísmo y hacernos buenos esposos, buenos hijos, buenos hermanos, buenos sacerdotes. Pidamos esta noche por los hogares y por nuestros sacerdotes, sin la oración y sin la contemplación del pesebre se nos pierde el sentido profundo del servicio y de la entrega.
Texto bíblico: Génesis 4, 8-11: “Caín dijo a su hermano Abel: Vamos al campo. Y cuando estaban en el campo, Caín atacó a su hermano
Abel y lo mató. El Señor dijo a Caín: ¿Dónde está Abel, tu hermano? Respondió: No sé. ¿Soy yo el guardián de mi hermano? El Señor le replicó: ¿Qué has hecho? La sangre de tu hermano me está gritando desde la tierra”. Palabra de Dios. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: En este tiempo de Navidad acostumbramos intercambiar regalos, visitarnos, celebrar en familia, compartir fraternalmente. Eso el algo bueno y positivo, PERO NO PODEMOS OLVIDAR QUE TAMBIÉN ENTRE NOSOTROS ESTÁ PRESENTE LA REALIDAD DURA Y ANTICRISTIANA DEL ODIO, DEL DESAMOR, DE LA ENVIDIA, INCLUSO DEL MAL TRATO Y DE LA VIOLENCIA. Ya desde las primeras páginas de la Biblia, en el capítulo cuarto del libro del Génesis (como acabamos de escuchar) se cuenta el primer homicidio, peor todavía, se trata de un fratricidio (es decir, un hermano que mata a otro hermano). Con ese pasaje enseña la Palabra de Dios dónde está el origen de todo odio y de todo mal: Unos versículos antes del pasaje leído decía Dios a Caín: “¿Por qué te enfureces y andas cabizbajo? Cierto, si obraras bien, seguro que andarías con la cabeza alta; pero si no obras bien, el pecado acecha a la puerta. Y aunque viene por ti, tú puedes dominarlo” (Génesis 4,7). El odio genera violencia y muerte; Jesús enseñará en el Nuevo Testamento algo que olvidamos con frecuencia: “Han oído que se dijo a los antepasados: No matarás, pues el que mate será reo ante el tribunal. Pues yo les digo que todo aquel que se encolerice contra su hermano será reo ante el tribunal; el que lo insulte será condenado por el Consejo; el que lo llame renegado será condenado al fuego del quemadero” (Mateo 5, 21-22). El odio es vivir en oscuridad, en tinieblas, símbolos en la Biblia de todo lo que se opone a Dios. ¿Cómo dejar el odio, cómo dejar la oscuridad? Acogiendo a Dios que es luz, sólo Él disipa nuestras tinieblas. En la primera carta de Juan se afirma claramente: “Quien ama a su hermano está en la luz y en sí no encuentra tropiezo. En cambio, quien odia a su hermano está en tinieblas y camina en tinieblas sin saber a dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos” (1 Juan 1, 10-11). La Biblia narra otras peleas entre hermanos y su reconciliación: Abrahán y Lot (Génesis 13); Jacob y Esaú sanan sus heridas (Génesis 33); José
se reconcilia con sus hermanos que lo vendieron (Génesis 45). En el libro de los Hechos de los Apóstoles la manera normal de tratarse entre los creyentes es llamándose mutuamente “hermanos”. En el pesebre reconocemos al Niño Dios, el Dios entre nosotros, él único que es capaz de desarmar nuestros corazones heridos por el odio, la envidia, la venganza, sólo acogiendo a Jesús de Nazaret en nuestras vidas podremos cantar todos el Salmo 133: “Miren que es bueno y da gusto que los hermanos convivan juntos. Es un ungüento precioso en la cabeza, que va bajando por la barba, que baja por la barba de Aarón hasta la franja de su ornamento. Es rocío del Hermón que va bajando sobre el monte Sión. Porque allí manda el Señor la bendición: la vida para siempre”. En este día quinto pidamos al Niño Dios que disipe de nuestros corazones todo rencor, que nos HAGA SERVIDORES ENTRE HERMANOS, signo de las relaciones nuevas que Dios crea entre las personas, SIGNOS DE LA LLEGADA DEL REINO DE DIOS.
Texto bíblico: Eclesiástico 3, 1-4.12-13: “Escuchen, hijos míos los consejos de su padre, pónganlos en práctica y se salvarán; pues el Señor hace que los hijos respeten al padre y afirma la autoridad de la madre sobre su prole. El que honra a su padre expía sus pecados, el que respeta a su madre acumula tesoros. Hijo mío, sé constante en
honrar a tu padre, no lo abandones mientras viva; aunque chochee, ten indulgencia; no lo abochornes mientras viva”. Palabra de Dios. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: Los ancianos son cadena de tradición, son como antorchas en el relevo de las generaciones. Los ancianos pueden enseñar porque han acumulado saber; pueden aconsejar porque han acumulado experiencias. Con tal que lo hagan con discreción, no con irritación. Que las experiencias les enseñen modestia y comprensión, que mantengan ellos también su puesto humano respetando al Señor, a quien el profeta Daniel llama “el anciano de Días” (Daniel 7,9). El Salmo 71 describe a un creyente que desde su juventud pone su confianza en Dios y por eso hacia el final de su vida puede decir con propiedad “no me rechaces ahora en la vejez; cuando me falten las fuerzas, no me abandones” (71, 9). Y en el Evangelio de san Lucas, el anciano Simeón toma entre sus brazos al Niño Jesús y exclama: “Ahora, Señor, según tu promesa, despides a tu servidor en paz, porque mis ojos han visto a tu Salvador; lo has colocado ante todos los pueblos como luz para alumbrar a las naciones, y gloria de tu pueblo, Israel” (2, 28-32). Esa experiencia tan profunda la recogió la Iglesia y la puso en la oración nocturna llamada Completas con la que se cierra cada día la vivencia de todo creyente. De esa manera la Iglesia nos enseña a orar cada día: MIS OJOS HAN VISTO TU SALVACIÓN. Somos la generación QUE PUEDE VER AL MESÍAS, AL HIJO DE DIOS, AL NIÑO DIOS. Todas las personas que acogen el mensaje del evangelio, todas las personas que escuchan la Palabra de Dios SON LA GENERACIÓN NUEVA. NO SOMOS NI MILENIANS, NI GENERACIÓN Z, NI JUVENTUD PERDIDA, NI FRACASADOS DEL SIGLO XXI, SOMOS DICHOSOS, BIENAVENTURADOS, BENDECIDOS QUE PODEMOS VER A DIOS EN EL OTRO, EN LOS NIÑOS, EN LOS JÓVENES, EN LOS ANCIANOS. En nuestros barrios, en nuestra ciudad hay muchos ancianos arrinconados, expulsados de su hogar, solos y abandonados, pidamos en esta sexta noche SER SERVIDORES DE LOS ANCIANOS, acerquémonos a ellos, algo nos enseñaran, muchas cosas nos han transmitido, mucho hemos de aprender de ellos. Decían en nuestras casas QUIEN NO ESCUCHA
CONSEJO NO LLEGA A VIEJO. Es verdad que muchos ancianos se vuelven difíciles, necios, intransigentes, qué difícil es SABER ENVEJECER. Aprendamos las actitudes de estos dos ancianos de los que nos habla el evangelio: Simeón “era honrado y piadoso, aguardaba el consuelo de Israel” dice san Lucas, y encima nos habla de la profetisa Ana, mujer muy anciana “de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; NO SE APARTABA DEL TEMPLO Y SERVÍA A DIOS DÍA Y NOCHE CON AYUNOS Y ORACIONES. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que esperaban la liberación de Jerusalén” (Lucas 2, 36-38). También son así muchos ancianos, nuestros abuelos, padres, tías, siempre han orado, siempre nos enseñaron a obrar bien, nos corrigieron muchas veces, SEAMOS HOY SERVIDORES DE LOS ANCIANOS, IMITAREMOS ASÍ A JESÚS DE NAZARET EL SERVIDOR DE TODOS.
Texto bíblico: Deuteronomio 10, 14-19: “Cierto: del Señor son los cielos, hasta el último cielo; la tierra y todo cuanto la habita; con todo, sólo de los padres de ustedes se enamoró el Señor, los amó, y de su descendencia los escogió a ustedes entre todos los pueblos, como sucede hoy. Circunciden su corazón, no endurezcan su cabeza; que el Señor, su Dios, es Dios de dioses y Señor de señores; Dios grande, fuerte y terrible, no es parcial ni acepta soborno, hace justicia al huérfano y a la viuda, ama al emigrante, dándole pan y vestido.
Amarán al emigrante, porque emigrantes fueron en Egipto”. Palabra de Dios. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: El Papa Francisco, son su lenguaje tan sencillo, tan pastoral, tan coherente nos ayuda a entender esta dura realidad que nos resistimos a vivir: “No es fácil entrar en la cultura que nos es ajena, ponernos en el lugar de personas tan diferentes a nosotros, comprender sus pensamientos y sus experiencias. Y así, a menudo, renunciamos al encuentro con el otro y levantamos barreras para defendernos. Las comunidades locales, a veces, temen que los recién llegados dañen el orden establecido, roben algo que se ha construido con tanto esfuerzo. Incluso los recién llegados tienen miedos: temen la confrontación, el juicio, la discriminación, el fracaso. Estos miedos son legítimos, están basados en dudas que son totalmente comprensibles desde un punto de vista humano. Tener dudas y temores no es un pecado. El pecado es dejar que estos miedos determinen nuestras elecciones, comprometan el respeto y la generosidad, alimenten el odio y el rechazo. El pecado es renunciar al encuentro con el otro, al encuentro con aquel que es diferente, al encuentro con el prójimo, que en realidad es una oportunidad privilegiada de encontrarse con el Señor” (2018). En la Iglesia Católica, desde el año 1914 se instituyó la JORNADA MUNDIAL DEL MIGRANTE Y DEL REFUGIADO. Actualmente, en el mundo existen unos setenta millones de migrantes y refugiados. Y entre nosotros, sabemos ampliamente el drama que vive el pueblo de Venezuela. El Evangelio, nuestra fe, nada tienen que ver con un refugio intimista, con un rezar piadosamente, con negar la dureza de la realidad. En esa “carta de navegación” que escribió el Papa Francisco, llamada LA ALEGRÍA DE LA EVANGELIZACIÓN afirma: “La Palabra de Dios enseña que en el hermano está la permanente prolongación de la Encarnación para cada uno de nosotros: “Lo que hicieron a uno de estos hermanos míos más pequeños, me lo hicieron a mí” (Mateo 25, 40). Éste y otros pasajes expresan la total prioridad de la SALIDA DE SÍ HACIA EL HERMANO como uno de los mandamientos principales que fundan toda norma moral y como el signo más claro para discernir acerca del camino de crecimiento
espiritual en respuesta a la donación totalmente gratuita de Dios. Por eso mismo EL SERVICIO DE LA CARIDAD ES TAMBIÉN UNA DIMENSIÓN CONSTITUTIVA DE LA MISIÓN DE LA IGLESIA Y EXPRESIÓN IRRENUNCIABLE DE SU PROPIA ESENCIA. Así como la Iglesia es misionera por naturaleza, también brota ineludiblemente de esa naturaleza la CARIDAD EFECTIVA CON EL PRÓJIMO, LA COMPASIÓN QUE COMPRENDE, ASISTE Y PROMUEVE” (número 179 de la Alegría del Evangelio). En un momento de silencio meditemos estas palabras del Papa y decidámonos por SERVIR A LOS QUE LLEGAN.
Texto bíblico: Lucas 1, 39-45: “Unos días después María se puso en camino y fue a toda prisa a la montaña, a la provincia de Judea; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. En cuanto oyó Isabel el saludo de María, la criatura dio un salto en su vientre. Llena de Espíritu Santo, dijo Isabel con fuerte voz: Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre. ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Y dichosa tú, que has creído, porque lo que te han dicho de parte del Señor se cumplirá”. Palabra del Señor. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: El pasaje que acabamos de escuchar en este octavo día de la novena, vísperas ya de la GRAN NOCHE DE NAVIDAD, nos ayuda a CONTEMPLAR LA
ACTITUD SERVIDORA DE MARÍA DE NAZARET: Dos mujeres embarazadas se encuentran, las dos pertenecen a una larga lista de mujeres que en la Biblia SEÑALAN ALGO IMPORTANTE: Agar y Sara, María y Marta. Aquí representan a dos niños: A Juan el Bautista y a Jesús de Nazaret. Aquí se encuentran la que ha sido hecha fecunda gracias a un milagro divino y la que está encinta por obra DEL ESPÍRITU SANTO. Un Padre de la Iglesia decía: “La más joven visita a la de mayor edad, la virgen saluda a la esposa. Porque cuanto más casta, tanto más humilde…La humildad de los grandes es la elevación de los pequeños” (Beda el Venerable). Y san Ambrosio añade: “La persona de mayor rango (María) visita a la de menor, a fin de ayudarla; de igual manera, el Señor acudirá más tarde a bautizarse, para santificar el bautismo de Juan”. Las relaciones jerárquicas son puestas al revés, es ya la teología del Magnificat: “Derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes”. Y para cualquiera que esté atento a este pasaje tan profundo del Evangelio de san Lucas, resuena también aquí la segunda frase del Ave María: “Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre”. Los saltos de la criatura dentro del vientre de Isabel son entendidos como un homenaje y de nuevo los Padres de la Iglesia interpretaron ese júbilo COMO ANUNCIO DE LA ALEGRÍA ESPIRITUAL NAVIDEÑA: EL BAUTISTA RECONOCIÓ A JESÚS, Y NOSOTROS CRISTIANOS HEMOS DE AMAR A JESÚS CON IDÉNTICA ENTREGA. María de Nazaret cruza la montaña y visita a su pariente, las niñeras deberían gloriarse de que también María fue una de ellas. Y todavía hay otra imagen muy bella: Isabel llena de alegría pronuncia un gran saludo, todo el que se encuentra con el Señor ES COLMADO DEL ESPÍRITU SANTO, MARÍA ES AQUÍ PORTADORA DE CRISTO, QUIEN LA RECIBE Y ACOGE RECIBE LA PALABRA HECHA CARNE. Es el mismo san Lucas quien nos transmite una bella bienaventuranza: “Una mujer de entre la gente dijo a Jesús: Dichoso el vientre que te llevó y los pechos que te criaron. Pero él repuso: Mejor: Dichosos los que escuchan el mensaje de Dios y lo cumplen” (11, 2728). En el pesebre los personajes principales son JOSÉ, MARÍA, EL NIÑO, LOS PASTORES, LOS SABIOS DE ORIENTES QUE
VIENEN A ADORAR, A SERVIR AL DIOS NIÑO Y LE TRAEN PRESENTES. Contemplemos cada uno de estos personajes, fijémonos especialmente en MARÍA DE NAZARET: Su visita a Isabel es UN SERVICIO. En el Evangelio de san Juan aparece la madre de Jesús, ATENTA A LAS NECESIDADES DE UNA FIESTA DE BODAS: “No tienen vino” (4,3). Y en ese mismo evangelio es descrita “JUNTO A LA CRUZ DE JESÚS” (19,25). En la religiosidad popular más antigua se hizo famoso el canto STABAT MATER DOLOROSA IUXTA CRUCEM LACRIMOSA = JUNTO A LA CRUZ ESTABA LA MADRE DE DOLORES. Hoy, 2019, ¿JUNTO A QUIÉN ESTAMOS NOSOTROS? ¿CON QUIÉN COMPARTIMOS PENAS Y ALEGRÍAS? Pidamos en esta noche de navidad ser SERVIDORES COMO SIRVIÓ MARÍA.
Texto bíblico: Lucas 2, 8-14: “En las cercanías había unos pastores que pasaban la noche al aire libre, velando el rebaño por turno. Se les presentó el ángel del Señor: la gloria del Señor los envolvió de claridad, y se asustaron mucho. El ángel les dijo: Tranquilícense, miren que les traigo una buena noticia, una gran alegría, que lo será para todo el pueblo: HOY, en la ciudad de David, les ha nacido un salvador: el Mesías, el Señor. Y les doy esta señal: Encontrarán un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. De pronto, en torno al ángel, apareció una legión del ejército celestial, que alababa a Dios diciendo: GLORIA A DIOS EN EL CIELO Y PAZ EN LA TIERRA A LOS HOMBRES, QUE ÉL QUIERE TANTO”. Palabra del Señor. CONSIDERACIÓN PARA ESTE DÍA: ES NOCHEBUENA, ES NAVIDAD. EL GRAN VILLANCICO “NOCHE DE PAZ, NOCHE DE AMOR” RESUENA CON PROFUNDA EMOCIÓN. EL
TAMBORILERO Y MUCHOS MÁS NOS LLENAN DE PAZ Y DE ALEGRÍA. MÁS ALLÁ DE LOS BELLOS VILLANCICOS, DEL INTERCAMBIO DE REGALOS, DE LA NATILLA Y LOS BUÑUELOS Y LA CENA DE MEDIANOCHE HAY UNA AFIRMACIÓN FUNDAMENTAL: EL NIÑO DIOS ES EL AUTOR DE LA PAZ, CRISTO ES NUESTRA PAZ. EL EVANGELIO DE SAN LUCAS TIENE UN PASAJE IMPACTANTE HACIA EL FINAL: JESÚS, ACERCÁNDOSE A JERUSALÉN LLORA Y DICE: “SI TAMBIÉN TÚ COMPRENDIERAS EN ESTE DÍA LO QUE LLEVA A LA PAZ. PERO NO, NO TIENES OJOS PARA VERLO” (19,41-42). ABRAMOS EN ESTA NOCHE SANTA DE NAVIDAD NUESTROS OJOS, PIDAMOS SER CONSTRUCTORES DE PAZ, TRABAJEMOS POR LA PAZ, SIRVAMOS A LA PAZ, HAGAMOS REALIDAD LA BIENAVENTURANZA DEL EVANGELIO: “DICHOSOS LOS QUE TRABAJAN POR LA PAZ, PORQUE A ÉSOS LOS VA A LLAMAR DIOS HIJOS SUYOS” (Mateo 5, 9). UNA SANTA NAVIDAD PARA TODOS Y TODAS ES EL DESEO SINCERO DEL ARZOBISPO, DE LOS OBISPOS AUXILIARES, DE LOS SACERDOTES, RELIGIOSOS Y RELIGIOSAS Y DE TANTOS CATEQUISTAS, SERVIDORES PARROQUIALES Y DISCÍPULOS MISIONEROS QUE QUEREMOS DE VERDAD HACERNOS SERVIDORES UNOS DE OTROS. VILLANCICOS Los Peces En El Río
A Belén Pastores
La Virgen se está peinando entre cortina y cortina los cabellos son de oro y el peine de plata fina. Pero mira cómo beben los peces en el río Pero mira cómo beben por ver al Dios nacido Beben y beben y vuelven a beber Los peces en el río por ver a Dios nacer. La Virgen está lavando
A Belén pastores debemos marchar, que el Rey de los reyes ha nacido ya. (Bis) Vamos pastorcitos, que el Rey Celestial, tiene por morada, humilde portal. A Belén pastores debemos marchar, que el Rey de los reyes ha nacido ya. (Bis)
y tendiendo en el romero los pajaritos cantando y el romero floreciendo. Pero mira cómo beben los peces en el río Pero mira cómo beben por ver al Dios nacido Beben y beben y vuelven a beber Los peces en el río por ver a Dios Nacer. La Virgen se está peinando entre cortina y cortina los cabellos son de oro y el peine de plata fina. Pero mira cómo beben los peces en el río Pero mira cómo beben por ver al Dios nacido Beben y Beben y vuelven a Beber Los peces en el río por ver a Dios nacer.
La Virgen Bendita, cuidándolo está, de rodillas todos veámosle adorar. A Belén pastores debemos marchar, que el Rey de los reyes ha nacido ya. (Bis) Muy fría la nieve, que cayendo está, hay el pobrecito, que frio tendrá. A Belén pastores debemos marchar, que el Rey de los reyes ha nacido ya. (Bis) Sobre unas pajitas tendidito está, hay el pobrecito, como llorará A Belén pastores debemos marchar, que el Rey de los reyes ha nacido ya. (Bis)
El Tamborilero
Noche de Paz
El camino que lleva a Belén baja hasta al valle que la nieve cubrió. Los pastorcillos quieren ver su Rey, le traen regalos en su humilde zurrón al Redentor, al Redentor. Yo quisiera poner a tus pies algún presente que te agrade, Señor, más Tú ya sabes que soy pobre también y no poseo más que un viejo tambor. En tu honor frente al portal tocaré que con mi tambor! El camino que lleva a Belén voy marcando con mi viejo tambor, nada hay mejor que yo pueda ofrecer, su ronco acento es un canto de amor al Redentor, al Redentor. Cuando Dios me vió tocando ante Él me sonrió.
Noche de paz, noche de amor Todo duerme derredor Entre los astros que esparcen su luz Bella anunciando al niño Jesús Brilla la estrella de paz Brilla la estrella de amor Noche de paz, noche de luz Ha nacido Jesús Pastorcillos que oíd anunciad No temáis cuando entréis adorar Que ha nacido el amor Que ha nacido el amor Desde el pesebre del niño Jesús La tierra entera se llena de luz Porque ha nacido Jesús Entre canciones de amor