La Voz Católica Diciembre 2018

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“Más que un nuevo año, necesitamos un corazón nuevo, que cambie nuestro rumbo, afirme la convivencia y la lucha pacífica, genere oportunidades y esperanza de futuro”. † Darío de Jesús Monsalve Mejía, Arzobispo de Cali

ISSN: 2462-9979

AÑO XXVII

No 224

SANTIAGO DE CALI, DICIEMBRE DE 2018

VALOR $1000.00

SOMOS IGLESIA EN MISIÓN PERMANENTE

Tips Pastorales Los arreglos de navidad

Se celebraron los 25 años de episcopado de Monseñor Darío de Jesús

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“Te esperamos este 7 de Diciembre de la Virgen en nuestros Camposantos para “Poniendo Poniendo en sus manos todas nuestras intenciones ” que juntos Veneremos a MARÍA” conmemorar el día

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Editorial

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

Necesitamos un corazón nuevo

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Al cumplir entre ustedes mis 25 años de vida episcopal, este pasado 15 de noviembre, recibí innumerables y generosas manifestaciones de cercanía, de amor eclesial, de estímulo y apoyo a mi ministerio arzobispal. ¡Gracias a todos!

Año 2018 No. 224 de Diciembre de 2018 Publicación Mensual ISSN: 2462-9979 Arzobispo de Cali Monseñor Darío de Jesús Monsalve Mejía Vicario General Pbro. Wiston Mosquera Moreno DEPARTAMENTO DE COMUNICACIONES Directora Magda Luz Arias Leal Comunicador Social Periodista Oscar Andrés Orejuela Valero Diseño y Diagramación Bernardo Arcila Parra Impresión Casa Editorial El Tiempo ARQUIDIÓCESIS DE CALI Curia Arzobispal Cra. 4 No. 7-17 PBX: 889 0562 medios@arquicali.org www.arquicali.org

Los escritos de los colaboradores solo comprometen a quienes los firman.

omienza en la Iglesia un nuevo Año Litúrgico, el del ciclo C, con el Evangelista Lucas. Termina un año de calendario civil y se abren los festejos de fin y comienzo de año, con sus tiempos fuertes de comercio, ferias, reuniones y festejos. Desde el siete de diciembre, con los alumbrados públicos, domésticos y callejeros, el dogma de La Inmaculada Concepción de La Virgen María anuncia la llegada y el comienzo de LA NUEVA CREACIÓN. “Todo el que está en Cristo es una nueva criatura”, dice Pablo. María, “desde el primer instante de ser concebida”, fue liberada del poder del pecado, de esa pretensión idólatra y original de Eva y Adán, de la humanidad de siempre, de igualarse con Dios. La esperanza de vernos libres de ese poder, la comparte cada bautizado con la humanidad y la creación entera, que anhela, como mujer en dolores de parto, verse libre de la esclavitud y ver la aparición de los “hijos de Dios”, de una libertad responsable, amorosa y fraterna, que permita saborear la dicha y la dignidad de la vida humana, en una conciencia que armonice e incluya en ella a todas las demás criaturas. Hacia esa nueva conciencia, forjada en el misterio de Jesucristo y el don de la redención, necesitamos apuntar todos los que tenemos deberes y responsabilidades con la transmisión y conservación de la vida, de la fe en Dios, de la educación y dignidad de las personas, del cuidado de la casa común. Desde el gobernante de un país, hasta una mamá y un papá; desde un pastor hasta un líder social; desde un líder institucional o subversivo, necesitamos todos unificar los esfuerzos y unirnos, con espíritu constructivo, para lograr ese cambio de corazón que sea, al mismo tiempo, un corazón para el cambio de costumbres, de cultura y de estructuras en la sociedad. Ni la violencia, ni la codicia corruptora y traficante, ni la mentira sistemática y la indiferencia y el libertinaje de los anárquicos, pueden seguir creciendo en nuestra sociedad colombiana. Solo nos sirve, en estos tiempos de extremos e incertidumbres, convocar la voluntad de cada persona a ponerle límites a la propia libertad, a la conducta social, al reclamo de legítimos derechos, a movilizaciones y luchas, a proyectos de riqueza y de poder, muchas veces perversos y destructores. Ganar voluntades, trabajar por ese cambio del corazón humano, generar espacios de compromiso y de pacto colectivo en cada territorio, es la convocatoria para vivir con fe y dignidad estos tiempos de Adviento, Navidad y Año Nuevo. Más que un nuevo año, necesitamos un corazón nuevo, que cambie nuestro rumbo, afirme la Por: † Monseñor Darío de Jesús convivencia y la lucha pacífica, genere oportunidades Monsalve Mejía y esperanza de futuro. Arzobispo de Cali Convirtamos la construcción de paz con justicia y verdad en una alianza nacional, en un movimiento social e integrador de regiones, culturas y organizaciones sociales. No dejemos a la deriva de los poderes la voluntad de romper, de una vez por todas, la historia de barbaries y violencias. No dejemos que la lucha por ganar elecciones le robe el futuro a las nuevas generaciones. No más partidismos ni marrullas. No más incitación al vacío y obstrucción como falsa oposición. Un año de elecciones locales y regionales, como lo será el 2019, no se convierta en un torpe y peligroso pulso entre fuerzas e intereses ajenos al bien colectivo, al avance en procesos de paz, en soluciones para el bienestar común, en gestión y generación de trabajo legal y productivo, de salud, orden y educación como responsabilidad y garantía que asume el Estado. Agradezco vivamente los esfuerzos de la señores Obispos Auxiliares, de los vicarios zonales y de la Curia, de las delegaciones pastorales y centros que las aglutinan, de los arciprestes y párrocos, de las instituciones y obras de la Arquidiócesis, del personal de empleados y de apostolado en cada área de evangelización, de pastoral y de servicios eclesiales. A todos los pastores, los religiosos(as) y fieles laicos, a las autoridades e instituciones de la ciudad de Cali y demás municipios dentro de la jurisdicción de la Arquidiócesis, les llegue mi saludo de Navidad y Año Nuevo. Al cumplir entre ustedes mis 25 años de vida episcopal, este pasado 15 de noviembre, recibí innumerables y generosas manifestaciones de cercanía, de amor eclesial, de estímulo y apoyo a mi ministerio arzobispal. ¡Gracias a todos! Oraré por sus intenciones y espero, con la bondad de Dios, servir con entrega sincera y voluntad constante a la Iglesia y, con ella, al bien, la verdad y la paz de nuestra sociedad. Les doy mi agradecido abrazo y mi bendición de padre y pastor. Seamos hombres y mujeres de buena voluntad con Dios, para que tengamos siempre con Él la paz en nuestra tierra.


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Región

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

Sin que la llama se apague “No podemos decirle a las futuras generaciones que hubo plata para la guerra y que no hubo plata para la paz” (Monseñor Juan Carlos Barreto, Obispo de Quibdó)

Por: Observatorio de Realidades Sociales Arquidiócesis de Cali

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a exhortación a cumplir y a ser fieles al mandamiento NO MATARÁS es una tarea de gran dificultad en una sociedad que ha cargado durante mucho tiempo la cruz de la guerra, que ha sido clavada en el madero de las profundas desigualdades sociales, que ha enfrentado el hambre y que es emboscada a diario por la corrupción y la mentira. No es fácil insistir en el desarme de los corazones, de las manos y del lenguaje cuando existe la costumbre del uso de la fuerza, del aventajado que más ofende o del que impone su corazón de piedra. Sin embargo, aún con el panorama más agreste, sigue siendo vital tejer y dar pasos de cara a esa artesanía diaria y colectiva de construir la paz. Sobre esta tarea hemos recibido suficientes ejemplos. Curiosamente de las comunidades que más han sido víctimas y han sufrido la guerra, en el Chocó, por mencionar un caso, la sociedad civil organizada y los grupos étnicos territoriales acompañados por la Iglesia Católica continúan destinando esfuerzos para superar la crisis humanitaria que ese municipio enfrenta, con acciones afirmativas que llaman la atención respecto al abandono estatal, las afectaciones que generan en la sociedad los grupos armados y la delincuencia común. Uno de esos últimos esfuerzos se tradujo en la Velatón por la paz el pasado 22 de noviembre, la cual inspira a que el país entero acoja la iniciativa de encender #UnaVelitaPorLaPaz como un acto de fe, sencillo y esperanzador, en el que simbólicamente se llama la atención a quienes se enorgullecen de ser piedra de tropiezo en la construcción de paz o se aferran a prácticas de violencia social y armada. Miles de velitas por la paz se irán sumando durante este mes al esfuerzo de cientos de iniciativas sociales del Choco y por hacer que el Acuerdo Humanitario ¡Ya! se escuche y se cumpla, cesando el fuego y las hostilidades, desmontando las estructuras de grupos armados ilegales, respetando la autonomía territorial, los espacios sagrados y el derecho propio de las comunidades; identificando zonas minadas, desminando y no volviendo a ubicar trampas en ninguna parte del territorio; mante-

“Cada luz encendida será una oportunidad de cambio”

niendo la mesa de negociación con el ELN hasta que se encuentre una solución política; deteniendo el reclutamiento forzado y la utilización de niños, niñas y adolescentes; cesando inmediatamente todo acto de violencia sexual; respetando la vida y libertad absteniéndose de prácticas de desaparición forzada y secuestro; dejando de generar desplazamiento, confinamiento o restricciones de movilidad; absteniéndose de promover o sembrar cultivos de uso ilícito. Millones de velitas que se encenderán en todo el país por deseos sentidos como la reanudación de la Mesa de diálogo con el ELN, por la paz con Educación, por la paz con verdad, por la implementación del acuerdo, por la vida de los líderes sociales y por las víctimas que ha dejado la violencia en Colombia. Millones de fuegos encendidos que esperamos aviven el compromiso de hacer paz en cada rincón, sin restringirse a jornadas de conveniencia electoral o contiendas desdibujadas en nuevas guerras. Fueguitos que esperamos iluminen el camino de la paz en cada territorio, incluyendo el de Jamundí, Dagua, La Cumbre, Yumbo y Cali, en los que más que nunca necesitamos luz para superar las sombras que dejan los asesinatos, el mercado de drogas y armas, la vulneración a derechos sociales, económicos y culturales. Velitas que esperamos se enciendan haciendo conciencia del lugar transformador que cada uno ocupa y de la esperanza que tenemos ante nuestros ojos. Cada luz encendida será una oportunidad de cambio, de rectificación y nuevo comienzo. Entendámoslo así y hagámosle llegar ese mensaje a vecinos y vecinas para que

dediquemos peticiones por la persona, la familia, el barrio o vereda, el municipio y por nuestro país. Que encender una velita sea un acto con el que se enseña a adultos y ni-

ños el No matarás, porque la vida es sagrada, porque la paz es sagrada y para que se aprenda a que es necesario dedicar esfuerzos en cuidarla y protegerla sin que la llama se apague.


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Para Reflexionar

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

De la doctrina a la vida: La familia y su impacto social Por: † Juan Carlos Cárdenas Toro Obispo Auxiliar de Cali

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iciembre es asociado como un tiempo para compartir en familia. Son los días del reencuentro. Son los días en que se reavivan los valores aprendidos al calor del hogar. Definitivamente, es un tipo propicio para recordar que la familia cristiana no es sólo un espacio íntimo sino un semillero de principios y valores cristianos que han de germinar y fructificar no sólo para beneficio de los parientes sino de la sociedad en general. El Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia (CDSI, n. 209-210) sostiene que la familia es «el lugar primario de la humanización de la

persona y de la sociedad, cuna de la vida y del amor». Allí los hijos «aprenden las primeras y más decisivas lecciones de sabiduría práctica a las que van unidas las virtudes». Así, se comprende cómo es de seria la tarea que los cónyuges asumen cuando reciben de Dios la misión de cuidar a los hijos. Papá y mamá se hacen los más eficaces educadores en humanidad y en la fe de sus hijos. Los conocimientos que adquieran fuera de la casa, nunca tendrán el arraigo de lo que aprendan en casa (no sólo con las palabras sino con el testimonio de sus padres). En el pesebre contemplamos la familia de Nazaret, y allí recordamos que «Jesús nació y vivió en una familia concreta aceptando todas sus características propias y dio así una excelsa dignidad a la institución matrimonial». La Navidad celebra el nacimiento de Jesús, pero también celebra a la familia como lugar pri-

La familia como célula social

vilegiado para encarnar el misterio de la redención humana al interior del hogar pero llegando a todos los ámbitos de la sociedad. La sociedad debe respetar el valor

de la familia como célula social; en este sentido el CDSI advierte que «relegar la familia a un papel subalterno y secundario, excluyéndola del lugar que le compete en la sociedad significa causar un grave daño al auténtico crecimiento de todo el cuerpo social». Y justamente por ellos, la familia debe hacer valer su derecho a jugar este rol central que impacta a la comunidad a partir de los valores que allí se siembran en sus integrantes. De este modo, que estos días de la Navidad, alrededor de José, María y Jesús, afiancemos los vínculos de nuestras familias y entendamos que ellas no pueden ser simples espectadoras de una sociedad que decide en su nombre lo que quiere para las personas sino que han de ser protagonistas e influenciadoras en la construcción de aquello que san Juan Pablo II llamó “civilización del amor”.

Reseña de Libros

Cuatro mendrugos de pan Magda Holander-Lafon - Editorial Periférica, 2017. 151 páginas

Por: Pbro. Germán Martínez Rodas Vicario Episcopal de Educación

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ue Melchor Cano (1509-1560), el dominico famoso por sus “Lugares teológicos” y, a la vez, “tristemente famoso” por su oposición visceral contra un hermano de orden (dominico) y arzobispo, Bartolomé Carranza, a quien acusó ante la Inquisición de “luterano” y “alumbrado”, amén de su inquina no disimulada contra la naciente Compañía de Jesús (sic transit gloria mundi), quien planteó la autoridad de la historia humana como uno de los lugares para hablar de Dios. La Literatura, así, con mayúscula, es precisamente eso, un “lugar” para hablar o rechazar a Dios, para defender o pisotear al ser humano, para testimoniar, alabar, o condenar los actos humanos. ¿Qué acontecimiento más impactante y terrible que el Holocausto judío? Algo sabemos por las películas La lista de Schindler, La Vida es bella, El hijo de Saúl o por el testimonio de Primo Levi “Si esto es un hombre”, pero siempre nos quedaremos cortos ante la desgarradora tragedia de aquellos años 1939-1945. En CUATRO MENDRUGOS DE PAN, la escritora de origen húngaro, Magda Hollander-Lafon,

llevada prisionera con 16 años a los campos de concentración de Auschvitz-Bir Kenau y Ravensbruck, sobrevive a tal pesadilla, se radica primero en Bélgica y finalmente en Francia, aún vive, tiene 90 años y ha publicado, después de un largo silencio interior, sus memorias, sus recuerdos, sus luchas, sus miedos, sus reflexiones sobre algo que nos resistimos a creer: el hombre es lobo para el hombre. Es una “meditación sobre la vida”: los cuatro mendrugos de pan que una mujer moribunda le da a la adolescente en el campo de concentración, el agua que le ofrecen cuando el cuerpo está a punto de rendirse, el movimiento de las nubes en el cielo de Auschvitz (que por un momento no está ennegrecido por el humo del crematorio) o la señora de la sonrisa que la recogió a la salida de su cautiverio. Es un libro luminoso, lleno de vida y de esperanza. Un audaz testimonio sobre la transformación de las tinieblas en alegría de vivir. Hija de judíos, la escritora poco a poco se convirtió al cristianismo. También ese acontecimiento se refleja en su bella literatura.


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Para Reflexionar

Lo esencial del cristianismo

Opinión † Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali

Tips Pastorales

Los arreglos de navidad

En esta navidad redescubre lo esencial de nuestra fe

Por: Pbro. Germán Martínez R. Vicario Episcopal de Educación

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n búsqueda continua de novedades; confundidos, sin saber qué es verdad y qué es mentira; angustiados por la pérdida de los valores que aprendimos desde pequeños; sin horizontes claros para seguir caminando; los creyentes de hoy no podemos olvidar lo sustancial de nuestra fe: Hombres y mujeres somos creaturas de Dios, llamados a la comunión con Dios, porque somos uno en la Paternidad, iguales en la Fraternidad de Cristo y libres gracias al poder del Espíritu. Cristo es la manifestación histórica de Dios: “Cuando se cumplió el plazo envió Dios a su hijo, nacido de mujer, sometido a la Ley, para rescatar a los que estaban sometidos a la Ley, para que recibiéramos la condición de hijos” (Gálatas 4,4-5). El amor a los demás (entiéndase servicio, entrega, respeto, solidaridad), es la verificación de la continua relación con Dios: “Quien no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve” (1 Juan 4, 20). La alegría de existir, el gozo de vivir contra toda angustia y depresión, está en la opción por la pobreza de espíritu, en la limpieza

de corazón, en la sencillez de vida, en la construcción de la justicia y de la paz, porque la convivencia humana tiene su secreto en aquello de que vale más la misericordia que los sacrificios rituales y los juicios vengativos. En una economía que mata e impone IVA a la canasta familiar, los creyentes viven y celebran el pan que se parte y se reparte, cuya fuente y origen es el “Padre quien da el verdadero pan del cielo, porque el pan de Dios es el que baja del cielo y va dando vida al mundo” (Juan 6, 32-33). Finalmente, más allá de vanidades, de falsas promesas, de futuros inciertos y engañosos, el destino del mundo, la meta de hombres y mujeres está en el Misterio de Dios: “Cuando todo le haya sido sometido, entonces también el Hijo se someterá a Aquel que ha sometido a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos” (1 Corintios 15,28). Qué bella y profunda es la propuesta y la vivencia del cristianismo, qué tan diferente es de ese antieclesialismo liberaloide y trasnochado, de ese proselitismo fanfarrón y hostigante y de ese integrismo conservador y viejo que es lo que se da en nuestra ciudad supersticiosa y pagana a la vez. Que esta navidad sepamos redescubrir lo esencial de nuestra fe, entonces viviremos un estilo creyente, una celebración rica, bella y profunda y realizaremos una extensión social de la fe.

Diciembre es un mes en donde todos los sentimientos se encuentran. Para muchos son días de alegría y jolgorio, para otros son días de nostalgia y remembranzas. Por otro lado, en la Iglesia se celebran dos tiempos litúrgicos, el Adviento y la Navidad. Ambos tienen un mensaje común centrado en la esperanza. Es la renovada invitación para que la vida de todos los cristianos esté enmarcada en la esperanza de la vida eterna, de los tiempos nuevos, en los que, como dice el profeta llegarán días en que “de las espadas forjarán arados, de sus lanzas podaderas. No alzará la espada nación contra nación, ni se prepararán más para la guerra. Estirpe de Jacob, venid, caminemos a la luz del Señor” (Isaías, 2, 4 - 5). Esto significa que es necesario prepararnos para acoger a Jesús que quiere nacer de nuevo en los corazones de todos. Espiritualmente nos preparamos con la oración, la penitencia, la caridad. Y en los días previos, los llamados tiempos fuertes, hacemos la novena al Niño Dios.

Con esta preparación espiritual, que debe ser la más importante, se ha ido consolidando una tradición que viene de otras culturas, manifestada en la decoración de las casas, calles y templos, con luces de colores y arreglos navideños, inspirados muchas veces en costumbres nórdicas donde el papá Noel es el protagonista. El árbol de navidad y guirnaldas de variadas formas, ocupan los espacios, lastimosamente desplazando los signos religiosos y cristianos como el pesebre y la tradicional imagen de la Sagrada Familia. Qué bueno que sin dejar a un lado las decoraciones navideñas, tan costosas por cierto, los católicos y cristianos demos el lugar que merecen al auténtico y original significado del adviento y la navidad, como momento de encuentro de la familia alrededor del pesebre para que juntos podamos cantar con los ángeles: “Gloria Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que Dios ama” (Lucas, 2,14). Desde ya para todos, “Feliz Navidad”.


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Santiago de Cali, Diciembre de 2018

MONAIN Contagiar alegría desde el puro amor

Nos preparamos para recibir a los niños en esta navidad

Felipe Reyes y Victoria Arango Grupo Juvenil KADOSH

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e acercan fechas especiales para nuestra comunidad católica; recordando y viviendo la navidad, donde hacemos un alto a nuestras rutinas, nos encontramos con nuestra familia, amigos y vecinos, todos reunidos juntos alrededor del pesebre para celebrar el nacimiento del Niño Dios. Así, nuestro grupo juvenil se prepara cada año para recibir a cientos de niños en nuestra parroquia, con el fin de transmitir la tradición católica, compartir y educar desde el amor, todo esto a través del movimiento navideño infantil más conocido como MONAIN, material elaborado por la Pastoral Juvenil de Cali donde se encuentran temáticas diarias para la preparación y desarrollo de la novena, para cada día

podemos encontrar actividades relacionadas al día de la novena, además de dinámicas y juegos para llevar a cabo, haciendo más amena la experiencia. Como principal objetivo, el MONAIN busca preparar el corazón de los niños para el nacimiento de Jesús, desde la fraternidad y la alegría característica de la infancia. “Y dijo: «Yo os aseguro: si no cambiáis y os hacéis como los niños, no entraréis en el Reino de los Cielos.” Mateo 18, 3. Aceptamos el reto de ser niños para que la alegría se vaya tomando cada uno de los momentos en los que compartimos con los niños, día tras día su participación nos llena y motiva a volver con mucho más para dar, desde su mirada inocente y pura nos enseñan a ver con amor lo que es realmente importante, así pues, aprendemos que el centro de nuestra navidad está justo en medio del pesebre, lo estamos esperando, podemos reconocerlo junto a los más puros, sencillos y amorosos, es por eso que al final, son los niños los que nos terminan acercando y mostrando

Niños disfrutan de temáticas diarias

al Niño Jesús en el pesebre. “Más Jesús les dijo: «Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis porque de los que son como éstos es el Reino de los Cielos.»”Mateo 19,14.

Acepta tú también el reto de ser niño, desde el puro amor, acércate al Niño Jesús en el pesebre y ayuda a que otros lo hagan, Yo hago el MONAIN ¿y tú?


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Educación

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Acercamiento Social de la Cátedra Isaías Duarte Cancino a la Comunidad Parroquial Nuestra Señora de Aguablanca

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l pasado 20 de octubre se llevó a cabo el Festival de la Familia con la comunidad de la Parroquia Nuestra Señora de Aguablanca ubicada en el Barrio Manuela Beltrán, un evento que nace de la idea de realizar un acercamiento social, que permita dar respuesta a necesidades de poblaciones vulnerables, tal como lo soñó Monseñor Isaías Duarte Cancino. Por ello, y dadas las condiciones del sector, especialmente la realidad que viven los habitantes de la calle 99, un grupo de estudiantes de los programas de Administración de Empresas e Ingeniería de UNICATÓLICA, en compañía de la docente Mildred Alexandra Blanco Castro, Coordinadora de la Cátedra, realizaron un primer acercamiento para conocer la realidad de esta comunidad y escuchar las necesidades expuestas por el Pbro. Nelson Tovar, algunas personas del Consejo Pastoral y las madres de familia del taller de apoyo escolar que allí se realiza.

Se socializaron las necesidades de la comunidad

“Al escucharlos, se descubrió una realidad desbordante, pues la problemática va más allá de las situaciones materiales: violencia, maltrato infantil, abandono por parte del Estado y de la empresa privada, embarazos adolescentes y consumo de sustancias psicoactivas en niños de 9 años, además de situaciones emocionales que los han sumido en la tristeza, la desconfianza

UNICATÓLICA en la Red de Universidades Católicas del Valle del Cauca

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n el mes de septiembre, cinco universidades católicas del Valle del Cauca se dieron cita en la rectoría de UNICATÓLICA, entre ellas la Universidad de San Buenaventura, Universidad Pontificia Bolivariana Sede Palmira, Pontificia Universidad Javeriana y Uniminuto, todas adscritas a la Red de Universidades Católicas de Colombia (RUCC), para firmar un convenio de cooperación interinstitucional para la conformación de la Red de Universidades Católicas del Valle del Cauca, durante cinco años. La iniciativa de constituir una agrupación de universidades e instituciones católicas de educación superior, inspiradas en los valores del humanismo cristiano, tal y como lo indica uno de los apartes del convenio, surgió del Pbro. Raúl Jordán Balanta, Rector de la Pontificia Universidad Bolivariana Sede

Palmira, y para ello, se ha venido trabajando desde hace un año en su consolidación. De esta manera, las universidades de esta Red estarán comprometidas a fomentar iniciativas que generen sinergias y permitan aunar esfuerzos para formalizar alianzas y desarrollar proyectos conjuntamente, compartir conocimiento e infraestructura en beneficio de la educación superior y el fortalecimiento de la educación católica en la región. “La idea es que a corto plazo, la RUCC pueda estar apoyada por nodos regionales para dinamizar y desarrollar todo el trabajo y los temas de internacionalización, así como funciona la Red Colombiana para la Internacionalización de ASCUN Nodo Suroccidente, de la cual UNICATÓLICA hace parte, entonces estamos a la espera de que la Red del Valle del Cauca se establezca como Nodo Suroccidente”, comentó Carolina Tello Zapata, Coordinadora de la Oficina de Relaciones Interinstitucionales.

y la desesperanza, pues expresan que muchas universidades llegan allí, pero no vuelven”, comentó la profesora Blanco. Ya en clase, y ante esta situación, los estudiantes transmitieron el mensaje a sus compañeros, y junto

con la docente diseñaron la propuesta del Festival de la Familia Nuestra Señora de Aguablanca, con el ánimo de dar respuesta a las necesidades de la comunidad, hacer presencia de la Institución y contemplar la posibilidad de desarrollar propuestas a largo plazo. Por lo tanto, docentes y estudiantes iniciaron un plan de gestión de recursos económicos y donaciones de empresas privadas y estatales para llevar a cabo esta bonita celebración familiar, donde aproximadamente 700 personas disfrutaron de una jornada de vacuna contra la violencia, siembra de árboles, pintura de mural, ofrecimiento de servicios de la Secretaría del Adulto Mayor de la Alcaldía de Cali, sancocho comunitario, recreación infantil, zanqueros, teatro, regalos para 350 niños y niñas, entre otras actividades, en un ambiente de amor, paz, fraternidad y mucha alegría.


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Lo que celebramos

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

La Arquidiócesis de Cali celebró los 25 años de episcopado de Monseñor Darío de Jesús Monsalve Mejía

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l arzobispo de Cali, Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía, celebró sus bodas de plata episcopales este 15 de noviembre, con un ágape y una eucaristía conmemoratoria de su recorrido pastoral durante sus 25 años como obispo. La celebración se inició con un almuerzo en el hotel Dann Carlton de Cali, donde familiares, obispos de diferentes regiones, clérigos, la Gobernadora del departamento del Valle del Cauca, el Alcalde de Santiago de Cali, miembros de las fuerzas públicas, directivos de Fenalco y amigos le dieron un cálido recibimiento y exaltaron su labor durante su recorrido por Colombia. Además, la Alcaldía de Santiago de Cali le otorgó la Medalla Sebastián de Belalcazar, grado Cruz de Comendador; La Gobernación del Valle del Cauca, la Medalla Ciudades Confederadas en el grado Gran Cruz Oficial; Fenalco le otorgó una placa expresando su reconocimiento al arzobispo por su importante labor durante su vida

Eucaristía celebrada en el Santuario Señor Jesús de la Divina Misericordia en el oriente de la ciudad

ministerial en beneficio de la región y el país, mientras la Universidad San Buenaventura, la Pontificia Universidad Javeriana, la Universidad San Buenaventura y la Fundación Universitaria Católica Lumen Gentium, también le otorgaron reconocimiento por su trabajo pastoral en estas instituciones. Durante su discurso de agradecimiento, Monseñor Darío resaltó la fuerza de Dios en su trabajo pastoral e hizo la invitación a la comunión

Algunos de los obispos asistentes

Familiares de monseñor Darío de Jesús Monsalve Mejía

entre la sociedad colombiana.”Dios ha plantado la Mesa de la Eucaristía de la Redención, del Sacrificio Único y Suficiente de Cristo Jesús... Desde esta mesa del ágape jubilar de mis 25 años de obispo, los invito a seguir construyendo la sociedad que Dios quiere, la comunidad de Iglesia que Cristo Jesús inició con Los Doce y Los 72 discípulos, los hogares y la patria que hagan posible una vida con sentido, bondad, justicia, belleza y paz”.

Por otra parte, después de recibir los reconocimientos, el arzobispo celebró una eucaristía en el Santuario de la Divina Misericordia en el barrio el Pondaje, lugar al que asistieron alrededor de 400 personas y donde se agradeció a Dios por la vida de Monseñor Darío y por su trabajo con las comunidades. Durante su homilía, Monseñor Darío pidió perdón por sus pecados e hizo hincapié a los momentos actuales “ “en los cuales tenemos todos la amenaza de sentirnos solos, sin líderes, como ovejas perdidas debemos, buscar ser hombres y mujeres capaces de sacrificarse por los demás persiguiendo el anhelo de la paz, la convivencia y la reconciliación”. En estos 25 años, Monseñor Darío ha trabajado incansablemente por la sociedad colombiana, desde el fomento de la paz, la evangelización a partir de los valores infundidos por Jesucristo y la humildad, la cual lo llevó a pedirle al papa Francisco, “Le ruego que me bendiga porque lo necesito mucho me ayudará a mantener paz en mi corazón y servirle a mi gente en Cali y Colombia”.

Monseñor Darío acompañado por la Gobernadora del Valle y el Alcalde de Cali


Santiago de Cali, Diciembre de 2018

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Lo que celebramos

Palabras de Monseñor Darío de Jesús Monsalve Mejía en el ágape jubilar. El Evangelio de la Mesa Abundante

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areciera un contrasentido reunirnos hoy en este lugar, para un sereno y fraternal compartir, con el motivo de celebrar, con la Iglesia de Cali, el aniversario jubilar de los 25 años de ordenación episcopal del obispo diocesano. La Mesa del ágape precede hoy a la Mesa Sacramental del Altar eucarístico, que presidiré y concelebraremos en la tarde, con la participación de los fieles. Este ágape pretende resaltar la colegialidad de la sucesión apostólica con mis hermanos Obispos, a quienes, junto con los obispos auxiliares y la entera Arquidiócesis, agradezco desde lo hondo del alma su presencia y compañía. Pretende, igualmente, poner de manifiesto la importancia en la vida del Obispo, de la familia propia, del hogar eclesial primigenio, el de esposos, padres, hijos, hermanos y parientes, tan decisivo en el ser, en la vocación y la misión de cada pastor, desposado como Cristo con la comunidad universal de la Iglesia, desde su ministerio en la Iglesia Particular. Gracias, hermanos, cuñadas, sobrinos y familiares aquí presentes. Junto con los Obispos y con la propia familia, nos sentamos a manteles hoy un grupo de presbíteros, religiosos y fieles laicos y de personas amigas, testimoniando la institucionalidad de la Iglesia local y su deber de acompañar a las autoridades y a la sociedad en la que ella vive y sirve el Evangelio de Jesucristo. Agradezco, de manera muy sentida, la presencia de la Señora Gobernadora del Valle, del señor Alcalde de Cali, de las demás autoridades civiles y servidores públicos, de los comandantes de las fuerzas armadas y de policía, de líderes sociales y comunicadores y periodistas muy cercanos. Cuando pienso en la imagen más apropiada de la Iglesia, como vínculo entre la espiritualidad cristiana católica y el mundo que ella ayuda a construir desde las conciencias y corazones de todos, me inclino por la de una Mesa y un Banquete de bodas entre Dios y la Humanidad, entre Cristo y la Iglesia, entre el Cordero Inmolado y la humanidad redimida y lavada con su Sangre. “Bienaventurados los invitados al banquete de bodas del Cordero”,

proclama el autor sagrado del Apocalipsis (19,9), y lo repite la Iglesia en cada Eucaristía. Desde la Mesa de Dios mismo, servida en el Universo como Creación y planeta tierra para toda la humanidad, en el marco de esta “Casa Común” de la que, bellamente, nos habla el Papa Francisco, invitándonos a cuidarla como tal; desde la Mesa de la Familia de Dios, servida desde el pueblo de Israel y con el Nuevo Pueblo, incluyente de todos, sin excepción ni discriminación alguna sobre la vida y dignidad humanas, Dios ha plantado la Mesa de la Eucaristía de la Redención, del Sacrificio Único y Suficiente de Cristo Jesús. En ella se sirve el Pan de los Hijos y de los hermanos, el Pan bajado del Cielo y el Pan amasado del fruto de la tierra y del trabajo humano, el Pan multiplicado de la Vida Abundante, del vino y la pesca abundantes, de la plenitud del Espíritu dada por Jesús. La Mesa de Dios ha de ser también la de cada casa y hogar, la de cada encuentro y vínculo interhumano, la de toda alianza y pacto, la del pan de la palabra y del diálogo, la de los acuerdos y reiterada unidad de voluntades para preservar la vida de todos, la dignidad de todos, la convivencia entre todos, los derechos y deberes de todos. Desde esta mesa del ágape jubilar de mis 25 años de obispo, los invito a seguir construyendo la sociedad que Dios quiere, la comunidad de Iglesia que Cristo Jesús inició con Los Doce y Los 72 discípulos, los hogares y la patria que hagan posible una vida con sentido, bondad, justicia, belleza y paz. Sí, una Patria, como esta Colombia nuestra, que hoy miramos con dolor y preocupación inmensa, pero, sobre todo, con esperanza y dedicación a su paz, tan

difícil de aclimat a r e n las concien-

cias, territorios, estructuras e instituciones. Esa paz de Colombia que hoy requiere confianza institucional, estatal, jurídica y presupuestal, para que se convierta en la Mesa por el futuro común de nuestro país. Permítanme dejarles, como recordatorio de este momento y día que compartimos, unos detalles, sencillos y expresivos. El primero, para todos, un ejemplar y recordatorio del más hermoso libro de espiritualidad cristiana de todos los tiempos, desprendido hace más de seis siglos de las Sagradas Escrituras, del Evangelio de Jesucristo, en contextos y visiones de la realidad muy diversos a los de hoy, pero con validez de principios, valores y actitudes perennes: “La imitación de Cristo”, por Tomás de Kempis. Me permito leer la dedicatoria, con palabras tomadas de él hace 42 años, un 17 de octubre de 1976, cuando fui ordenado presbítero, y leí el pensamiento de ese día del año, que trae el Kempis. Junto a este tesoro, y para quienes aún saben valorar las lecturas en ratos de ocio y se decidan a recordar conmigo lo que se dijo hace 25 años, con motivo de mi ordenación episcopal en Jericó, pongo a disposición de los presentes una reedición de discursos y homilías pronunciados del 14 al 30 de noviembre de 1993, compilados cuidadosamente por el Padre Humberto Ochoa Quijano, mi sucesor como Rector del Seminario Mayor, en

esa amada Diócesis de mi origen y estirpe episco pal. Algunos de los par-

tícipes como oradores y auditorio están hoy aquí, entre quienes resalto al querido Monseñor Nabor Suarez Alzate, amigo fidelísimo y sin igual, quien fuera uno de mis padrinos en la ordenación episcopal. Quienes se aventuren a esa lectura, podrán tomar el mencionado libro, que dejo a su disposición. Con el corazón pleno de agradecimiento al Mayoral de los Pastores, al Pastor y Obispo de nuestras almas, Jesucristo, y a la Iglesia, en la persona de los Papas de mi episcopado (San Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco), al Nuncio Paolo Romeo, hoy cardenal emérito de Palermo, Italia, quien me ordenó obispo, a los Nuncios sucesores, a la Conferencia Episcopal colombiana, a la Iglesia diocesana de Jericó, aquí presente en cabeza de su obispo, Monseñor Noel Antonio Londoño Buitrago, a las Provincias Eclesiásticas de Medellín, Bucaramanga y Cali, a cada porción donde he servido como Obispo (Medellín, Málaga-Soatá, Cali), hoy digo agradecido, con el salmista: “Mi corazón por eso te salmodiará sin tregua; Yahveh, Dios mío, te alabaré por siempre” (Salmo 3013). +Darío de Jesús Monsalve Mejía Arzobispo de Cali.


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Lo que celebramos

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

Vicariato Apostólico de Guapi

Acciones de paz, a través de la cultura, en la Costa Pacíf ica caucana La cultura ha sido una expresión de paz en los territorios del Pacífico y una oportunidad para que entre el llanto subsista la alegría. Pbro. Ariel Viáfara Hurtado Párroco San Miguel ArcángelLópez de Micay

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a cultura es la riqueza de los pueblos. Es la historia, es la vida, es esperanza. Es la sabiduría de hombres y mujeres que sostienen las comunidades. Es el cultivo de los valores ancestrales y de las vivencias que se manifiestan de diversos modos en cada región. La cultura ha sido una expresión de paz en los territorios del pacífico y una oportunidad para que entre el llanto subsista la alegría. Cantar, narrar, bailar han sido un bálsamo para reparar tantas heridas y sobrellevar la vida ante la ineficiencia estatal. Entre tantas experiencias e iniciativas culturales que vienen trabajando en el litoral pacífico, hay dos iniciativas que vale la pena resaltar por su aporte a la construcción de la paz en el territorio. La profesora Rut Marien Valencia

A través de los ritmos tradicionales reavivan la identidad del municipio

lidera en Guapi la escuela de paz Arte y Cultura “Tejiendo Saberes “que, realiza procesos culturales en la zona urbana y rural a fin de fortalecer el folklore y las demás tradiciones en la región. En esta escuela se fomentan los valores éticos, religiosos y culturales. Participan niños, jóvenes y adultos que siembran paz a través del canto, las artesanías y actividades formativas en temas ancestrales. Se reúnen durante la semana para componer canciones de juga, currulao y bunde. Se enfocan también en los ritos fúnebres, donde compilan

los alabaos, emprendiendo un proceso de investigación sobre todas estas expresiones. En López de Micay la profesora María Nangly Arboleda ha venido trabajando con el folklore desde hace más de 30 años y ha logrado construir un semillero de artistas tradicionales que representan la identidad de los micayseños. Son 50 niños los que conforman la escuela de música y danza, los cuales a cultivan la vida con sus voces y con sus coreografías. Aprenden a ver la vida con esperanza, con alegría, arraigados a su contexto.

Animan las fiestas patronales, participan activamente las Eucaristías y en los eventos del municipio. Han participado en el Festival de música del pacífico Petronio Álvarez, en la plataforma de Petronito. Estos niños se dedican a conservar la música tradicional y reavivar la identidad del municipio. Aprenden a cantar, bailar, tocar los instrumentos autóctonos y a preservar la música del pacífico. Estas hazañas siembran paz. Los niños le aportan a su región y sus voces se convierten en un clamor, en un llamado a la unidad, a la reconciliación en medio de tantas tinieblas. En estas dos gestoras culturales hay un potencial de talento y liderazgo que día a día trasmiten a las nuevas generaciones. Son mujeres que contribuyen en los procesos de evangelización en sus parroquias y que siguen sembrando paz en esta región necesitada de un mejor amanecer. Vale la pena que este tipo de iniciativas tengan el apoyo suficiente de la comunidad y de diversos sectores para que sigan haciendo mucho bien en sus municipios.


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Diócesis de Palmira

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

El motivo de la f iesta es Jesús

“Muestra un pesebre en tu corazón, donde lo que más se resalte sea la humilde familia de Nazaret”

Por: Pbro. Johan Alexis Gómez A. Delegado de Comunicaciones Diócesis de Palmira

D

entro de las costumbres de nuestros pueblos, siempre han sido muy importantes y necesarias las festividades de cada uno de ellos. Encontramos fiestas por cual motivación dentro de las que caben la agricultura, la religión, los animales, el arte, los personajes representativos de un determinado lugar o fundadores, entre otras cosas que podríamos decir. Las fiestas constituyen la riqueza multicultural de un pueblo, el gozo de sentirse miembros de una comunidad, el orgullo de llevar un sello que los identifica con el resto del mundo y los presenta con un puesto importante dentro de él. En otras palabras las fiestas son la muestra tangible de lo intangible que conlleva sentirse unido a una cultura con unas particularidades únicas que demuestran la esencia

de lo que son en sí mismas y que han de trasladarse por generaciones a todos aquellos que vienen como nuevos habitantes al mundo y sobre todo a mundos muy particulares en los que aprenderán una manera de ser esencial y radical. Al acercarse las festividades navideñas dentro del calendario gregoriano, es decir el mes de diciembre un gran número de personas empiezan el ¡corre! ¡corre! Tratando de buscar los mejores precios de los adornos navideños; guirnaldas, bolas de navidad, escarchas, afiches, campanas, Papa Noel, entre otros son buscados con gran afán para adornar los interiores y exteriores de las casas, que luego unido al uso indiscriminado de luces por todas partes embellecen nuestras ciudades hasta la saturación. Todo esto refleja una aparente “alegría” desbordada de adornos, que ciertamente expresa un sentir por la época del último mes del año. Todo esto sin desmeritar su validez y su empeño por ambientar nuestros hogares, a nosotros como cristianos católicos nos tiene que llevar a una pregunta ¿Qué es lo

que estás celebrando? Si, hazte hoy esta pregunta. De verdad hazte esta pregunta. Ninguna fiesta puede realizarse sin una motivación, siempre debe tener un elemento que conduzca a dicha celebración. Católico, si tú y yo… ten en cuenta lo siguiente, dentro de la Iglesia existe algo que se llama el año litúrgico donde se celebra todo el acontecer pascual y salvífico de Cristo, que inicia con el Adviento, tiempo de preparación para la navidad donde se recuerda de manera especial la encarnación del Hijo de Dios. Pero el Adviento, aun no es navidad, es preparación. Observa dentro de tu realidad como desde el mes de noviembre empiezan a sonar villancicos en los que habla del nacimiento de Jesús. Si lo vemos sólo con los ojos de la razón y de la fiesta es bueno, ya que por lo menos hay un indicio de un tal Jesús, pero si lo comprendemos desde la fe cristiana católica tenemos dificultades de comprensión del sentido que tiene la historia de la salvación como proceso de vida. La Iglesia es sabia porque su fundador es Sabio, por eso nos va mos-

trando a lo largo del año litúrgico, unos pasos lentos pero firmes para comprender el acontecer pascual de Cristo. Por esta razón queremos invitarlos a pensar en lo siguiente. ¿Tienes adornos en tu casa?, no los quites ¿Estás oyendo desde noviembre? No los dejes de oír, tienes papá Noel por todos lados, no los bajes, pero trata de darte cuenta si todo esto que tienes colgado en tu casa te muestran lo central del adviento y la navidad, mira si te prepara para renovar tu vida, al comprender que el motivo de la fiesta se llama Jesús el Salvador, el Mesías esperado, la luz para tus sombras, la cura para tus heridas o simplemente ocultan la realidad de tu vida vacía, simple, sin sentido, llena de pecado y de muerte. Este mensaje es especialmente para ti cristiano católico –si crees que Cristo Salva muestra con tu vida y con tus manifestaciones exteriores el valor del autor de la verdadera fiesta del fin de año y del inicio del año de la Iglesia, muestra un pesebre en tu corazón donde lo que más se resalte sea la humilde familia de Nazaret José, María y el Niño-.


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Vida Consagrada

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

Arquidiócesis de Cali vivió la Semana Vocacional #SoyFelizCuando

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a Semana Vocacional se realizó con la integración y comunión de Pastoral Educativa, Vocacional, Juvenil y la participación de las siguientes comunidades religiosas: Juanitas, Paulinas, Vicentinas, Carmelitas Misioneras, Salesianas, Siervas de la Madre de Dios, Dominicas de la Presentación, Casa Belén, Pías Discípulas, Hermanitas de la Anunciación, Misioneros de Yarumal y Hermanos Franciscanos. Teniendo presente el lema de la semana “Soy feliz cuando…” buscamos con los jóvenes de los colegios: Santa Isabel de Hungría de Alfonso López, Llano Verde principal, Compartir y Calimio Desepaz discernir e interiorizar como en la vida todo ser humano busca la felicidad, y el único camino que nos lleva a ella es Dios. El mundo presente nos presenta varios caminos el poder, tener, placer, fama y muchos más…caminos que nos enredan y nos manipulan y nos lleva al caos a la esclavitud. La experiencia en los cuatro colegios fue muy valiosa, vivida en un ambiente de acogida, fraternidad, participación y responsabi-

Comunidades religiosas y educativas hicieron parte de la Semana Vocacional

lidad. Llegando a una población de 2.000 jóvenes de los grados de décimo y undécimo. Los días lunes, martes, miércoles y jueves se vivieron encuentros con los jóvenes en reflexión, dialogo, escucha, trabajos personales y grupales. En los jóvenes pudimos percibir receptividad, interés, respeto, sintonía con las temáticas que les presentamos y en general de diferentes expresiones de hambre de Dios y deseo de compañía en la etapa que están viviendo tanto de su familia como de su colegio. OPEN HOUSE, realizada el 26 de octubre; otra actividad muy significativa desarrollada en la Comunidad de Hermanas Vicentinas de La Medalla Milagrosa. Aquí participaron 200 jóvenes

Varios colegios asistieron a la cita con Dios

representantes de los 27 colegios de la Arquidiócesis de Cali. En un primer momento oramos a los pies de la Santísima Virgen de la Medalla Milagrosa, orientada por el Pbro. Juan Carlos Gallego; posteriormente, se hizo un trabajo por bases para continuar discerniendo en sentido de la vocación para alcanzar la felicidad. En unas bases los jóvenes con los sacerdotes y en otras las jóvenes con las religiosas quienes compartimos ¿por qué nos sentimos felices al ser mujeres consagradas? Después tuvimos una bella serenata musical juvenil, orientada por el joven Oscar Gómez, que dio el punto final a esta jornada. JAJ: Jornada Arquidiocesana de la Juventud, realizada el pasado 28 de octubre, en la Comunidad de las Hermanitas de la Anunciación, memoria de la finalización del Sínodo de los Jóvenes en Roma. Una jor-

nada de alegría, acogida, fraternidad con el gozo y dinamismos de los grupos juveniles de las diferentes parroquias. Se explicó el sentido que tiene el sínodo; un trabajo en equipo

buscando escuchar el aporte de los jóvenes hacia lo que ellos quieren y buscan de la Iglesia concretamente en sus diferentes parroquias. Luego la celebración de la Eucaristía, por Monseñor Darío de Jesús Monsalve Mejía. Culminando la Semana Vocacional, dejando gran satisfacción en el trabajo realizado y con el compromiso de seguir acompañando a los jóvenes en los colegios, parroquias y en los ambientes donde hacemos presencia misionera. En nombre de las comunidades Religiosas, damos gracias infinitas a Dios por todo los que nos permitió realizar y a la Pastoral Educativa, Pastoral Vocacional y Pastoral Juvenil. H. Martha Ligia Acosta M. Carmelita Misionera.

Diferentes jornadas se vivieron a lo largo de la semana


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Actualidad

200 parejas contrajeron matrimonio en la onceava versión de los Matrimonios Colectivos

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l pasado 17 de noviembre, 200 parejas se dieron cita en el Orquideorama para contraer matrimonio en la ceremonia de los Matrimonios Colectivos presidida por Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía, Arzobispo de Cali y realizada por la Arquidiócesis de Cali y la emisora Radio Calidad de RCN. Las parejas participantes recibieron la preparación para el curso prematrimonial a cargo de los movimientos de catequesis familiar de la Vicaría para la Familia y la Cultura, asimismo, el pasado 8 de septiembre, tuvieron la oportunidad de compartir en el ‘Picnic del Amor Conyugal’ realizado en las instalaciones de la fundación Cristo de la Calle, en el cual contaron con un espacio para la integración, la evangelización y diferentes actividades que promovieron el amor de pareja.

“Pues bien, lo que Dios ha unido, que el hombre no lo separe” Mc 10, 9

El evento estuvo enmarcado dentro del año del ‘Amor Esponsal’, en el cual la Arquidiócesis de Cali ha

realizado un trabajo evangelizador en torno a los esposos y la familia. A la fecha se estima que aproxima-

damente 2.500 parejas han contraído matrimonio en el evento que se realiza anualmente.


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Actualidad

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

¡Cumplimos 10 años! Cena navideña con habitantes de calle y vecinos pobres del centro de la ciudad

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migos y amigas, Jesús de Nazaret quiere llegar al corazón de muchas personas; niños y niñas, jóvenes, mujeres y hombres, ancianos y ancianas; los nuevos profetas del siglo XXI para confiarles una Misión: transformar el mundo combatiendo la inequidad y la indiferencia, con acciones tan simples como saludar o darle la mano al más necesitado, actos que abrirán los caminos para la construcción de una Ciudad más justa y en paz. Navidad es una época propicia para desarrollar esa misión. Es una estación para encontrarnos con la alegría de la buena noticia del Evangelio, una dicha que está en servir al otro; al familiar, al vecino, al migrante, a todo aquel que se encuentra solo y abandonado. En relación con lo anterior, quiero contarles que nuestra Cena de Navidad está de aniversario. Este

evento hace parte de la cultura del encuentro propuesto por el Papa Francisco; a través de él llegamos a muchas familias y seres humanos desde hace 10 años ininterrumpidos. Esta Cena de navidad con habitantes de calle y vecinos pobres de la ciudad la celebramos cada 25 de diciembre en la plazoleta de San Francisco a partir de las 5:30 p.m., asisten también vendedores ambulantes, mujeres cabezas de familia, migrantes, desplazados, vecinos pobres del Calvario, del barrio Sucre, del Obrero y otras personas necesitadas que viven en el centro de esta ciudad. La primera vez que celebramos nuestra “Cena de navidad” en el año 2009 asistieron 50 personas, el año pasado asistieron 600 personas, que esperamos volver a atenderlos con la ayuda de todos ustedes, para hacer realidad el milagro de la multiplicación de los panes y los peces sirviendo alimentos con calidad y amor. Ustedes se preguntarán, por qué ce-

lebrar la navidad con los pobres de la calle, siendo una fecha para compartir en familia, pues bien, la festividad de la navidad es la oportunidad para inclinarnos ante la presencia de los pobres de la calle porque allí también está el niño Jesús, que yace en el corazón abandonado y triste, de cada uno de estos seres humanos que parecen irreales ante el Estado y la sociedad. Les invito a vestir el traje del amor para servir al Dios Niño, que nos ha reunido para hacernos entrega del testamento de la generosidad, un tesoro capaz de cambiar nuestra vida, y esta ciudad. El nacimiento del niño Jesús nos propone el retorno a un mundo más cálido, más hospitalario, más desprendido de lo material, un mundo construido desde la orilla de la gratuidad del amor y que nos permita ofrecer nuestro corazón y aportar a la convivencia de nuestra ciudad, evitando que se convierta en un desierto poblado por personas secas como la arena, incapaces de respetar

al otro e interactuar solidariamente. Quiero convocar a que lleguen muchos de esta ciudad, que vengan los que viven en el oriente, occidente, norte y sur de Cali, no hay tiempo que perder, vengan a servir. No te quedes por fuera, ven a poner en práctica la Buena Nueva: “Porque tuve hambre y me diste de comer”. También puedes conocer el servicio de “Pan & Chocolate” todos los domingos a partir de las 6:30 p.m., frente a la puerta principal de la Iglesia de San Francisco y este 25 de diciembre a la “Cena Navideña de la Misericordia”, puedes vincularte como Jefe de mesa, como voluntario servidor o benefactor, en cualquiera de los 40 comedores, en la nochebuena. Mayores Informes: Jesús H. Jiménez Z. Cel. 310 822 80 65. Email:jesushumberto.jimenez@ hotmail.com Voluntariado Cristo de San Damián Resucitado. v

CURSO COLECCIONABLE SOBRE EL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

Creo en Dios Padre todopoderoso creador del cielo y de la tierra Por: Pastoral de Catequesis Arquidiócesis de Cali

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os símbolos de la fe Los símbolos de la fe, son fórmulas con las cuales la Iglesia desde sus orígenes ha expresado su propia fe y las ha transmitido en un lenguaje común para todos los fieles. - Los símbolos de la fe más importantes son: El símbolo de los Apóstoles que es el antiguo símbolo bautismal de la Iglesia y el símbolo Niceno – Constantinopolitano, que es el fruto de los primeros Concilios ecuménicos: Nicea, 225 y Constantinopla, 361. (Ver páginas 25 y 26). Creemos en un solo Dios. - Él, se ha revelado al pueblo de Israel como el “Único” cuando dice: “Escucha Israel, el Señor nuestro Dios es el Único Señor” (Deuteronomio

6,4). El mismo Jesús ha dicho: “Dios, es el único Señor” (Marcos 2, 29). Dios se reveló a Moisés como el Dios vivo: “Yo soy el Dios de tus padres: el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob” (Éxodo 3,14).- A Moisés, Dios revela su nombre misterioso: “Yo soy el que soy” (Éxodo 3, 14). Desde los tiempos del Antiguo Testamento el nombre de Dios ha sido sustituido por la palabra: Señor. Sólo Dios es desde siempre y por siempre; Él, trasciende el mundo y la historia. Él, es el Santo por excelencia, rico en misericordia siempre dispuesto al perdón. Es el Ser omnipotente, eterno, personal y perfecto. Él, es la Verdad y el Amor. La Santísima Trinidad Dios es la Verdad misma. El Hijo eterno de Dios, la Sabiduría encarnada fue enviado al mundo para dar testimonio de la Verdad (Juan 8,37). Dios es en sí mismo Amor (1 Juan 4, 8 –16) que se da completa y gratuitamente; pues,

“Tanto amó Dios al mundo que le dio a su Hijo único para que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad”. Al enviar a su Hijo y al Espíritu Santo, Dios revela que Él, es comunicación de amor. El Misterio de la Santísima Trinidad. - Es el misterio central de nuestra fe cristiana. Es un misterio inaccesible a nuestra razón. Este misterio ha sido revelado por Jesucristo y es fuente de todos los demás misterios. Él, nos revela que Dios es Padre, no sólo como Creador del universo y de los seres humanos sino sobre todo, porque engendra eternamente a su Hijo que es el Verbo: “resplandor de su gloria e impronta de su sustancia (Hebreos 1,3). - El Espíritu Santo que es la tercera Persona de la Santísima Trinidad, es Dios uno, igual al Padre y al Hijo. Él, guía a la Iglesia hasta el “conocimiento de la verdad completa” (Juan. 16,13). Las tres personas son realmente distintas entre sí: El Padre engendra

al Hijo. El Espíritu Santo, procede del Padre y del Hijo. Las Divinas Personas son inseparables en su obrar. Cada persona se hace presente según el modo que le es propio en la Trinidad: El Padre en la obra de creación, el Hijo en la redención y al Espíritu Santo en la santificación de la Iglesia. 1. Explique: a) ¿Por qué Dios es Verdad? b) ¿Por qué Dios es Amor? 2. Escriba tres frases acerca de la Santísima Trinidad. 3. Responda: a) ¿Por qué Dios es Padre? b) ¿Por qué Dios es Hijo? c) ¿Por qué Dios es Espíritu Santo? d) ¿Qué son los símbolos de la fe? 4. ¿Cuándo expresamos comunitariamente nuestra profesión de fe o “Credo”? 5. ¿Qué dice Deuteronomio 6,4 sobre la existencia de Dios? 6. Según el contenido de esta Catequesis, escriba cuatro atributos propios de Dios.


Feliz Cumpleaños

DÍA

NACIDOS EN DICIEMBRE Nombre Asignación Pastoral Monseñor Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali Vásquez Zapata William Alberto Parroquia San Pascual Bailón Martínez Figuerola Juan Miguel Delegado para causa de partidas Jaramillo Caicedo Bladimir Clínica de Occidente Urrego Parra Cesar Yesid, MSA Parroquia Santa Mariana de Jesús Alvarado Pava Francisco Ancianato Mi Casa Otalvaro Palacio Joaquín Párroco Nuestra Señora del Carmen Ruiz López Jorge Emerson Parroquia María Madre del Salvador Quintero Mazo Jhon Jairo, C.M. Parroquia San Vicente de Paul Too Glarius Kiptum Parroquia Cristo Maestro Samboní Jhon Jairo Párroco de San Rafael Arcángel Delgado Luis Fernando Párroco de Santa Lucia Bermúdez Patiño Cesar Augusto Parroquia San Pedro Claver Guzmán Aguirre José Ricardo Parroquia Jesús de Nazaret Uribe Muñoz Luis Javier Residencia Familiar Acosta Maestre Evaristo, OFM Cap Parroquia San Pio X Restrepo Gómez Felipe Adolfo Parroquia Francisco y Clara de Asís Cadavid Morales Jorge Humberto Parroquia Cristo del Perdón Marín Hernández Jesús Ernesto Parroquia Todos los Santos Cardona Muñoz Jorge Tulio Programa Úname - Camposanto López González Pablo Alberto Párroco Nuestra Señora de Lourdes Carlos Alejandro Pabón Cardenas, CJM Parroquia Santa Mónica

Fecha 8/12/1959 3/12/1974 3/12/1952 4/12/1952 5/12/1979 8/12/1943 8/12/1949 8/12/1982 11/12/1975 11/12/1977 14/12/1975 15/12/1966 16/12/1968 19/12/1983 20/12/1929 21/12/1980 21/12/1971 24/12/1947 25/12/1961 27/12/1956 27/12/1965 28/12/1946

M´nthaka Kimathi Kenedy

30/12/1976

Parroquia Cristo Maestro

ORDENADOS EN DICIEMBRE

Bohórquez Abad Jorge Eduardo

Parroquia Nuestra Señora del Carmen (Cgto El Carmén)

1/12/1985

Años de Servicio 33

Toro Valencia Luis Alberto, OFM

Templo San Francisco

3/12/1994

24

Cruz Rendón Luis Hernando Estrada Giraldo Mauricio López Echeverry Luis Alfonso Navia Rengifo Moisés Gallego Muñetón Juan Carlos Montes Martínez Diego Alejandro Suárez Maldonado Miguel Adolfo Franky Alzate Álvaro Cabarcas Rúa Fabian Alberto, SDB Martínez Rodas Germán Tenorio Peña Gustavo Adolfo Galvis Uribe Julio Enrique Salgado José Ignacio Céspedes Loaiza Raúl Darío Cadavid Morales Jorge Humberto Correa Pareja William Gómez Trujillo José Bernardo Salazar Benítez Rafael Londoño Aguirre Onésimo De Jesús González José Uribe Muñoz Luis Javier Osorio Castro Elkin Martínez Cortes Octavio Villegas Arenas Efraín Leudo Murillo Francisco Nel, OFM Cov Gómez González Víctor Manuel, CMF Urrego Parra Cesar Yesit González Carmona Horacio Sánchez Suarez Cesar Bolívar, CJM

Parroquia San Buenaventura Parroquia Niño Jesús de Praga Parroquia Santísima Trinidad Párroco María Madre de la Vida Parroquia Santiago Apóstol Parroquia Inmaculada Concepción Parroquia San Andrés Apóstol Párroco San Gabriel Arcángel Parroquia San Juan Bosco Formador Seminario Mayor San Pedro Apóstol Párroco Cristo Sacerdote (Jamundí) Párroco San José (El Queremal) Capilla Jesús Nazareno Parroquia Nuestra Señora de los Remedios Parroquia Cristo del Perdón Párroco Transfiguración del Señor Ancianato Mi Casa Parroquia Juan Pablo II Párroco de Cristo Resucitado Residencia Familiar Parroquia Cristo Resucitado Capellán Hermanas Compañía del Niño Dios Parroquia San Francisco de Asís (Dapa) Parroquia Maria Misionera Parroquia San José (Colón) Parroquia Santa Mariana de Jesús Parroquia Santa Infancia Parroquia Santa Mónica Formador Seminario Mayor de Profesionales Santiago Apóstol

3/12/1999 4/12/1993 4/12/1993 4/12/1993 5/12/2015 5/12/2015 5/12/2009 5/12/1970 6/12/1997 6/12/1980 7/12/1981 7/12/1986 7/12/1986 7/12/1986 8/12/1974 8/12/1977 8/12/1983 8/12/1979 8/12/1983 8/12/1988 8/12/1955 9/12/1967 9/12/1978 9/12/1988 10/12/1995 11/12/1999 12/12/2009 12/12/1987 14/12/1991

19 25 25 25 3 3 9 48 21 38 37 32 32 32 44 41 35 39 35 30 63 51 40 30 23

15/12/2017

1

Residencia Familiar Parroquia Juan Pablo II Parroquia María Madre de la Iglesia Párroco Nuestra Señora de Lourdes Parroquia Santa Cruz Parroquia Nuestra Señora de la Valvanera Parroquia Santa Mónica Parroquia Nuestra Señora de la Candelaria Capellán Clínica Valle Del Lili Heraldos del Evangelio (Delegado para Cali) Parroquia Nuestra Señora de la Providencia Capellán Clínica Amiga Parroquia San Pío X Parroquia Pastorcitos de Fátima (Pavas) Parroquia San Cayetano

15/12/1979 15/12/1979 17/12/2011 17/12/1966 17/12/1994 17/12/1994 18/12/2011 19/12/1971 19/12/2007 19/12/1953 18/12/2008 20/12/1970 20/12/1981 21/12/1980 22/12/1999 27/12/1985

39 39 7 52 24 24 7 47 11 65 10 48 37 38 19 33

Nombre

Ríos Sanclemente Luis Alberto Betancourt García Hernán Pérez Jaramillo Luis Eduardo Estrada Cifuentes Luis Carlos Gómez Robayo Álvaro Hernando López González Pablo Alberto Riascos Mondragón Rodrigo Ramírez González Juan Manuel Carlos Alejandro Pabón Cardenas, CJM Vélez Acevedo Víctor Mauricio Cuervo Pineda Juan Vargas Martínez Juan Antonio, FP Albarracín Ávila Gilberto, CM Guerrero Cárdenas Efraín Acosta Maestre Evaristo Zapata Múnera Rubén Dalmiro Gómez Montes José Nicolás

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Actualidad

Santiago de Cali, Diciembre de 2018

Asignación Pastoral

Fecha

SACERDOTES FALLECIDOS José Manuel Diaz Cerón SJ

5 de diciembre 1989

Alcides Botero

21 de diciembre 1994

Mons. Luis Antonio Molina

5 de diciembre de 1996

Arias Delgado Pablo Emilio

4 de diciembre de 2007

Moreno Araujo Fernando Brynot

13 de diciembre de 2011

Lasso Mazuera William

10 de diciembre de 2016 3 de diciembre de 2017

Ruiz Gómez Diego Marino

19 9 31 27

1

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2 3

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5 MI 6 J 7 V 8

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9 D 10 L 11 M 12 MI 13

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14 V 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29

S D L M MI J V S D L M MI J V S

30 D 31

L

DÍA 2 D 3

L

4 M 5 MI 8

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9 D 12 16 17 19 23

MI D L MI D

25 M 26 27 28 29 30

MI J V S D

CALENDARIO LITÚRGICO DICIEMBRE 2018 CELEBRACIÓN COLOR Primeras Vísperas del Domingo 1° de M Adviento 1° de Adviento M San Francisco Javier, presbítero MO B San Juan Damasceno, presbítero y doctor de Feria-ML M-B la Iglesia Feria M San Nicolás, obispo Feria-ML M-B San Ambrosio, obispo y doctor de la Iglesia MO B INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA, (Día del SOLEMN. B precepto) 2° de Adviento M Feria M San Dámaso I, papa Feria-ML M-B Nuestra Señora de Guadalupe, Patrona de Fiesta B América Latina Santa Lucía, virgen y mártir MO R San Juan de la Cruz, presbítero y doctor de la MO B Iglesia Feria M 3° de Adviento M-Ros Feria priv. M Feria priv. M Feria priv. M Feria priv. M Feria priv. M Feria priv. M 4° de Adviento M NACIMIENTO DEL SEÑOR, (Día del precepto) SOLEMN. B EN EL DÍA DE LA SOLEMNIDAD Feria B San Esteban, protomártir Fiesta R San Juan, apóstol y Evangelista Fiesta B Los Santos Inocentes, mártires Fiesta R Día 5° Octava de Navidad Feria B LA SAGRADA FAMILIA DE JESÚS, MARÍA Y Fiesta B JOSÉ Día 7° Octava de Navidad Feria B R - Rojo V - Verde M - Morado B - Blanco

CALENDARIO ARQUIDIÓCESIS DE CALI DICIEMBRE 2018 CELEBRACIÓN 1° de Adviento Colecta Justa R. Clero Retiro de Adviento Pastoral de Profesionales Retiro de Adviento Vida Consagrada Retiro de Adviento Clero Consejo de Gobierno Zonal – Zona Norte Navidad del Clero Inmaculada Concepción Cumpleaños Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez 2° de Adviento Inicio campaña del Diezmo Nuestra Señora de Guadalupe 3° de Adviento Clausura de Actividades Curia Arzobispal Celebración Navidad Sacerdotes 4° de Adviento Natividad del Señor Octava de Navidad Octava de Navidad Octava de Navidad Octava de Navidad Octava de Navidad Sagrada Familia


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NiĂąos

Santiago de Cali, Diciembre de 2018


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