ACTUALIDAD DIOCESANA
Encuentro del obispo Martín con el papa Francisco
u Fue durante la audiencia general del 19 de febrero pasado, en oportunidad del Congreso Internacional celebrado en Roma conmemorando el 50° aniversario de la promulgación de la Constitución sobre la Liturgia del Concilio Vaticano II. ESPACIO JOVEN
La vida nueva de la Pascua u «Que en esta Pascua aprendamos a mirar con otros ojos, con los de Dios, los del Amor y hagámoslo con fe, con la fe que nos demuestra que Jesús camina al lado nuestro todos los días, a veces haciendo ruido para que lo escuchemos, pero a veces muy en silencio».
Y ADEMAS... Carta del Obispo . Reflexiones de monseñor Martín de Elizalde frente al flaglo del droga.
Lo suyo, lo mio, lo nuestro .Contratapa. El padre Germán Loriente escribe acerca de «La dimensión social de nuestra gracia».
SANTOS Juan XXIII y Juan Pablo II serán canonizados el segundo domingo de Pascua, fiesta de la Divina Misericordia.
Visite la página web de nuestra diócesis: www.diocesis9dejulio.org.ar
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CARTA DEL OBISPO
Para ver más mensajes del obispo Martín http://www.diocesis9dejulio.org.ar/obispo.html
FRENTE AL FLA GEL O DE LA DR OG A FLAGEL GELO DROG OGA Queridos hermanos: Los obispos de la Argentina dieron a conocer a fines del año pasado una declaración El drama de la droga y el narcotráfico, que tuvo amplia difusión. Después de representar las angustias y preocupaciones de la sociedad frente a este grave flagelo, señala el documento la necesidad de aplicar medidas urgentes para que no siga difundiéndose, reconoce la acción beneficiosa de muchas personas e instituciones, e invita al Estado a tener una presencia más activa y coherente. A la vez trasmite la convicción de muchos en nuestro país que los grandes intereses que están atrás del problema, lo ven solamente como un negocio pingüe, y cuentan con complicidades en los más altos niveles. Por eso, invito a todos a tomar conocimiento del documento, y disponerse con los recursos a su alcance a la colaboración tan necesaria y urgente en esta dura campaña.
algunos pasos que son prioritarios, y en los cuales nuestras comunidades parroquiales, instituciones educativas y asistenciales, los religiosos y religiosas, ministros y agentes pastorales, pueden estar útilmente presentes. Indico en síntesis el contenido de mi propuesta:
Uno de los resultados de la Declaración episcopal ha sido que un grupo de concejales de los distritos municipales incluidos en el territorio diocesano se acercaron al Obispado, con el deseo de compartir su interés y promover acciones conjuntas. Un gesto importante ha sido que varios Concejos Deliberantes (Bragado, Lincoln, Gral. Viamonte, Pehuajó) redactaron resoluciones sobre este tema, y esto permite esperar una acción más dinámica y coordenada entre todos los sectores.
-«La coincidencia en la gravedad que este flagelo de las adicciones reviste, con un daño irreparable para la salud y la moral de la población, especialmente los jóvenes, y para la estabilidad familiar; -La creación de centros de prevención de adicciones o la dinamización de los existentes, con personal idóneo y recursos suficientes, y dando publicidad de su existencia y funciones a la población; -La presencia en hospitales y centros de salud de personal capacitado para detectar a los adictos, orientar a ellos y sus familiares, tratar las emergencias y sugerir las medidas a tomar; -La formación de personas competentes para acompañar terapéuticamente a los adictos y prever la creación de fuentes laborales para ellos; -La preparación de los docentes en las escuelas para atender las situaciones de adicción y prevenir los riesgos en las áreas de la educación; -Interesar a las organizaciones profesionales, educativas, empresariales, deportivas y sociales, para sumarse a este esfuerzo, promoviendo de manera clara y sin ambigüedad los valores de una vida sana y denunciando los peligros de los paraísos ficticios.»
Como obispo diocesano, y en respuesta a la inquietud manifestada, he dirigido a los señores Presidentes de los H. Concejos Deliberantes una nota señalando
Y a continuación: «Se requiere, sin duda, para esto, además de los recursos necesarios, una conciencia fuerte en toda la comunidad, y
un debate informado y sereno, que aclare las posiciones que se esgrimen, descartando las soluciones engañosas y falsas. Sería lamentable que por concesión a situaciones de poder o para evitar la exigencia de un esfuerzo profundo y sostenido, se limiten las acciones a una mera declaración de principios, expresados sin vigor ni convicción, y sin la continuidad de medidas eficaces. Un ejemplo de estas falsas soluciones lo tenemos en las propuestas de despenalización del consumo, término demasiado genérico, que bajo el propósito declarado de no hacer recaer la sanción sobre el adicto que consume – un enfermo, en última instancia -, en realidad permite que pululen y prosperen las redes del tráfico. Finalmente, me permito agregar una consideración que me parece importante, y es que la propuesta que la sociedad necesita debe estar dirigida a la integralidad de la persona y de su accionar, con valores objetivos y verdaderamente humanos, que contemple la situación espiritual y física de las personas y reconozca la prioridad de la conciencia para un ejercicio auténtico de la libertad, la fraternidad solidaria y la vocación a la trascendencia.» Para nosotros, creyentes, existe el recurso y el deber de la oración, para que Dios se apiade de quienes son víctimas de estas dolorosas situaciones y toque el corazón para que se conviertan los que, sin atender a los daños provocados en la salud moral y corporal de los hermanos, persisten ciegamente en un camino de destrucción. Con mucho afecto, los saluda y bendice, + Martín, obispo de Nueve de Julio
INTENCIONES PARA ORAR ABRIL 2014
a pedido del Santo Padre
GENERAL: Ecología y justicia Para que los gobernantes promuevan el cuidado de la creación y la justa distribución de los bienes y recursos naturales. MISIONERA: Esperanza para quien sufre Para que el Señor Resucitado llene de esperanza el corazón de quienes sufren el dolor y la enfermedad.
FE DE ERRATAS. En edición anterior (N°145), página 4, en el artículo sobre la ordenación diaconal de Fernando y José Luis, donde dice «11 de enero» corresponde decir «18 de enero».
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COMPARTIENDO NUESTRO TESORO SANTOS
El Papa Bueno y el Papa de la Misericordia El 27 de abril, segundo domingo de Pascua y fiesta de la Divina Misericordia, en Roma, serán canonizados los beatos Juan XXIII y Juan Pablo II. Compartimos dos artículos con semblanzas de ambos pontífices.
JUAN XXIII: la ternura de Dios y los pilares de la paz Escribe: CARLOS MARÍA GALLI, doctor en Teología (*)
æEl 3 junio de 2013 se cumplieron cincuenta años de la muerte de Juan XXIII, il Papa buono. Un poco antes, el 11 de abril de 1963, en su último Jueves Santo, él dio a conocer la encíclica Pacem in terris (PT). El mismo nombre muestra que su mensaje es un eco de la Buena Noticia de la Navidad: «gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres» (Lc 2,14).
presan el Evangelio y acercan a los dos pontífices. Ambos muestran la bondadosa humanidad de nuestro Dios. El 11 de octubre de 1962, en el discurso inaugural del Concilio Vaticano II, Juan XXIII invitó a emplear la medicina de la misericordia. El 17 de marzo de 2013, en su primer Ángelus, Francisco llamó a descubrir la ternura de Dios. En estos dos siglos, marcados por tantos odios y violencias, ellos invitan a la Iglesia a tener el corazón lleno de bondad, a ser la Iglesia de la Caridad.
Los dos papas expresan la fraternidad universal, llaman a volver al corazón del Evangelio y promueven la reforma de la Iglesia. Juan XXIII fue el profeta que convocó e inició el Concilio Vaticano II; Francisco es un Papa conciliar que lidera la nueva evangelización por el testimonio, el servicio y el diálogo. Los dos atraen multitudes esperanzadas y abren la Iglesia hacia el futuro. Cada uno, desde sus experiencias históricas, impulsa el compromiso ecuménico por la unión de los
cristianos y el diálogo interreligioso con el Judaísmo y el Islam. Desde la sede de Pedro, con desafíos distintos, ambos asumen la causa de la paz. ¿P az en la tier ¿Paz tierrra? Pacem in terris nació en octubre de 1962 ante la crisis cubana. El texto fue gestado silenciosamente con la ayuda del teólogo Pietro Pavan. Fue el primer documento dirigido no sólo a los católicos sino «a todos los hombres de buena voluntad». Por eso
Juan XXIII y Francisco Bondad, amor, misericordia, ternura, paz son palabras que ex-
(*) Extracto de Vida Nueva (Cono Sur) 9 (2013) 33-35, Buenos Aires, Argentina
JUAN PABLO II: el Papa de la misericordia Escribe: P. GABRIEL GHILARDINI, Los Toldos
æEl próximo 27 de abril de 2014, fiesta de la Divina Misericordia, será declarado Santo Karol Józef Wojtyla, conocido como Juan Pablo II desde su elección al papado en octubre de 1978. Es imposible, en un solo y breve artículo, explayar el semblante del Papa Magno, quien fuera el Vicario de Cristo con el tercer pontificado más extenso en los 2.000 años de Iglesia, casi 27 años. Por tal motivo, como homenaje a tan insigne persona, tomo un solo aspecto en este semblante: «la Misericordia»; movido por el hecho de que Juan Pablo II regaló al mundo la Carta Encíclica «Dives in Misericordia» (Dios Padre, rico de misericordia, 1980), beatificó y canonizó a sor Faustina, quien recibió de Jesús la misión de dar a conocer al mundo el mensaje de su Divina Mise-
lo envió a todos los jefes de Estado y a U. Thant, secretario de la ONU. Juan XXIII confiaba en la capacidad de la razón y en la buena voluntad que Dios puso en todo ser humano. En sus cinco partes, la Encíclica expone la dignidad de la persona humana, fuente de los derechos y los deberes que regulan la convivencia (8-34); fija las relaciones de los ciudadanos con la autoridad pública (35-66); analiza la constitución del Estado democrático y republicano (6779); brinda –en la sección más novedosa- principios para las relaciones entre los Estados (80162); reflexiona sobre la paz como don de Dios y tarea humana (163172). Juan XXIII fijó estos fundamentos de la paz y dejando la escena de este mundo en Roma, en 1963.
ricordia y, además, Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005, vísperas de la fiesta de la Divina Misericordia, creada por él en la liturgia. Aunque el mayor argumento para esta elección son sus mismas palabras que manifiestan el carácter y la imagen de su pontificado, tal como lo expresó en su visita al santuario de la Divina Misericordia: «Vengo a este santuario como peregrino para unirme al canto ininterrumpido en honor de la divina Misericordia… Siempre he apreciado y sentido cercano el mensaje de la Divina Misericordia. Es como si la historia lo hubiera inscrito en la trágica experiencia de la segunda guerra mundial. En esos años difíciles fue un apoyo particular y una fuente inagotable de esperanza, no sólo para los habitantes de Cracovia, sino también para la nación entera. Ésta ha sido también mi experiencia personal, que he llevado conmigo a la Sede de Pedro y
que, en cierto sentido, forma la imagen de este pontificado. Doy gracias a la divina Providencia porque me ha concedido contribuir personalmente al cumplimiento de la voluntad de Cristo, mediante la institución de la fiesta de la Divina Misericordia. Aquí, ante las reliquias de la beata Faustina Kowalska, doy gracias también por el don de su beatificación. Pido incesantemente a Dios que tenga ‘misericordia de nosotros y del mundo entero’» (Cracovia 7/6/97) Así como Juan Pablo II sintió siempre cercano en su vida este mensaje de Dios Padre, rico en misericordia, es providencial que este mensaje llegue nuevamente a nuestro corazón, lo hagamos cercano a nuestras vidas con ocasión de su canonización. Aunque no todos vivimos la experiencia de una guerra mundial, nuestra época sigue marcada por injusticias, violencias, odios, desesperanzas, muertes, pecados,
etc., y, por tanto, podemos encontrar, en nuestros tiempos difíciles, la ayuda y la fuente inagotable de esperanza en la misericordia divina. Que este amor misericordioso llegue a toda la humanidad era, y sigue siendo, el deseo de Cristo como lo revela el Evangelio de Lucas 12, 49: «Yo he venido a traer fuego sobre la tierra, ¡y cómo desearía que ya estuviera ardiendo!». De igual manera, Juan Pablo II, actualiza y remarca este deseo de Jesús cuando nos dice: «Es preciso transmitir al mundo este fuego de la misericordia. En la misericordia de Dios, el mundo encontrará la paz, y el hombre, la felicidad. Les encomiendo esta tarea a ustedes... a todos los devotos de la misericordia divina que vengan de Polonia y del mundo entero. ¡Sean testigos de la misericordia!» Ante el pedido de transmitir este fuego del amor misericordioso al mundo entero, para que el
hombre moderno encuentre la paz y la felicidad que reclama su dignidad, cómo no recordar aquél valiosísimo ejemplo del Papa cuando fue a ofrecerle el perdón a quien había atentado contra su vida en la misma plaza de San Pedro. Puso en práctica las palabras del apóstol Juan: «Hijitos míos, no amemos solamente con la lengua y de palabra, sino con obras y de verdad» (1Jn. 3, 18); hizo carne la afirmación de Jesús: «Sean misericordiosos, como el Padre de ustedes es misericordioso» ( Lc. 6, 36). El domingo de la Divina Misericordia es un día extraordinario por las promesas dadas por Nuestro Señor: «En este día están abiertas todas las compuertas divinas a través de las cuales fluyen las gracias» (D.699). Fue la fecha escogida por Dios para llamar ante su presencia a Juan Pablo II, y será, en este 2014, la fecha de su canonización, la del infatigable apóstol de la Divina Misericordia que ya no llega al santuario como peregrino, sino que la Iglesia lo declara como un nuevo santo en el Cielo que ¡cantará eternamente las misericordias del Señor!
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LA IGLESIA HOY ACTU ALID AD DIOCESAN A CTUALID ALIDAD DIOCESANA EN LA ARGENTINA
EN EL MARCO DEL CONGRESO INTERNACIONAL «SACROSANCTUM CONCILIUM» En un año, en la Argentina fueron designados quince nuevos obispos æContrariamente a la morosidad con la que, anteriormente, la Santa Sede procedía a designar nuevos obispos para las sedes vacantes, ahora se nota en este aspecto una mayor agilidad. Desde la elección a la cátedra de Pedro del cardenal Jorge Mario Bergoglio, que cumplió un año como papa Francisco, la Argentina cuenta con quince nuevos obispos (siete diocesanos, siete auxiliares y un arzobispo titular), y traslados en ocho diócesis y prelaturas. El Papa a excombatientes de Malvinas: «Los llevo en el corazón» æEl papa Francisco saludó a excombatientes y familiares de los caídos en la Guerra de Malvinas, a quienes les dijo que los ¨lleva en el corazón¨ y bendijo una réplica de la imagen de la Virgen de Luján que hay en el cementerio de Darwin. El pontífice dialogó por varios minutos con sus compatriotas y se sacó fotos con ellos. ¨Francisco nos exhortó a seguir trabajando por la paz¨, dijo a la prensa uno de los excombatientes. Día del Niño por Nacer Nacer:: la Argentina celebró la vida æ El martes 25 de marzo, solemnidad de la Anunciación del Señor, se celebró en la Argentina y en distintos países del mundo el «Día del Niño por Nacer». Por esto, a lo largo del país se organizaron celebraciones y actividades destinadas a la concientización sobre la necesidad de defender la vida desde la concepción y en todas sus etapas. La fecha fue establecida en el país por el Decreto 1406/98 del Poder Ejecutivo Nacional, del 7 de diciembre de 1998. Fuente: Aica
Encuentro y saludo del obispo Martín al papa Francisco El sumo pontífice se interesó por el estado de la diócesis, envió su bendición y su saludo afectuoso.
D
urante la audiencia general del 19 de febrero pasado, el obispo Martín de Elizalde tuvo oportunidad de saludar al papa Francisco quien recibió a los participantes del Congreso Internacional «Sacrosanctum Concilium», gratitud y compromiso para un gran movimiento de comunión eclesial que se celebró en Roma conmemorando el 50° aniversario de la promulgación de la Constitución sobre la Liturgia del Concilio Vaticano II. «Fue un encuentro breve, sumamente cordial; el Papa se interesó por el estado de la diócesis, envió su bendición y su saludo afectuoso, pidiendo, como lo hace siempre, que rueguen por él. Le trasmití el afecto de nuestras comunidades, la seguridad de la oración por él y por su ministerio y la adhesión sincera a su magisterio», señaló el obispo de Nueve de Julio. Jesús encomendó a Pedro el cuidado y la guía de sus hermanos; por eso, para un obispo acudir a rezar en los sepulcros de los
«Le trasmití el afecto de nuestras comunidades, la seguridad de la oración por él y por su ministerio y la adhesión sincera a su magisterio», dijo el obispo Martín. grandes apóstoles Pedro y Pablo y poder estar con el Papa, sucesor de Pedro y obispo de Roma, la iglesia que preside en la caridad, es una ocasión privilegiada. En ella se experimenta el vínculo de la comunión eclesial y se renueva el compromiso por la misión pastoral, con la fuerza de la
gracia que Dios concede por medio de su Iglesia, con la intercesión de los santos y el magisterio del Romano Pontífice. «Que la bendición del Papa Francisco, el estímulo de su palabra y el ejemplo de su dinamismo apostólico, nos ayuden a todos los miembros de esta iglesia de
Nueve de Julio, sus sacerdotes y diáconos, seminaristas, consagrados y fieles, a renovarnos en la vocación recibida, con el compromiso de la fe, la santidad de vida, la audacia evangelizadora y la caridad generosa», concluyó el obispo Martín.
AMERICA
Pascua Joven æ El encuentro será del 17 al 20 de abril en la localidad de América, bajo el lema «Hoy tengo que alojarme en tu casa» (Lc. 19,5) Está destinado a jóvenes diocesanos a partir de 5° año. Llevar: biblia, bolsa de dormir, mochila, ropa, abrigo, algo impermeable, elementos de higiene personal, vaso irrompible, cubiertos, platos, repelente, lapicera, papel, linterna.
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LA IGLESIA HOY ACTU ALID AD DIOCESAN A CTUALID ALIDAD DIOCESANA
EN EL MUNDO
CAÑADA SECA
La Iglesia acompaña la Copa del Mundo, pero también denuncia æEl Consejo Permanente de la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil difundió un mensaje sobre la Copa Mundial de Fútbol en el que sostiene que «acompaña, con presencia amorosa, materna y solidaria» el certamen deportivo, aunque también denuncia que en su preparación haya prevalecido el aspecto económico por sobre los demás, resultando de este comportamiento una vulneración de varios derechos ciudadanos.
Vivir la alegría del Evangelio
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el 26 al 30 de enero, bajo el lema «Vivir la alegría del Evangelio», la localidad de Cañada Seca (partido de General Villegas) recibió nuevamente a los misioneros de la Parroquia San Juan Nepomuceno de Emilio V. Bunge. El equipo estuvo integrado por jóvenes de las comunidades de Santa Regina; Cañada Seca; Emilio V. Bunge y General Villegas, con la coordinación del diácono Tomás Penacino. Dentro de las actividades realizadas el grupo misionero llevó adelante el rezo del Rosario Misionero; la proyección de la película «Hermano sol, hermana luna» sobre la vida de san Francisco de Asís; una jornada para jóvenes que incluyó mateada, fútbol y vóley; celebración del Vía Crucis; fogón comunitario; encuentro sobre «La misión
como destino» para adolescentes y jóvenes que quieren perseverar en la huella de Jesús; y otros
momentos comunitarios como: la oración de la mañana y distribución de la comunión, visitas a los
hogares, encuentro con los niños y rezo del Ángelus.
ESPACIO JOVEN
La vida nueva de la Pascua æ Jóvenes, ya vivimos un tiempo especial de Cuaresma, que nos guió para caminar por el Desierto hacia la Vida, hacia la Pascua, hacia la Resurrección. Toda nuestra existencia es un peregrinar hacia el encuentro del Padre, siguiendo las huellas de Cristo, bajo la fuerza del Espíritu, y aprovechamos especialmente estos cuarenta días que precedieron a la Pascua para acercarnos a Él con mucha más intensidad. Durante la Cuaresma, se nos llamó a intensificar la oración, el retiro, los ejercicios espirituales, a dar nuestro tiempo a los hermanos que lo necesitan... incluso desde la simple predisposición de apagar la televisión, abandonar los auriculares, olvidarse de la PC y entrar en nuestro «aposento interior» (Mt 6,6) donde, «cerradas las puertas» podemos escuchar la voz de la propia conciencia. Nos detuvimos ante el ritmo acelerado de la vida, y avanzamos en la oportunidad de descubrir el amor de Dios, que es el único que nos puede hacer cambiar desde el fondo de nuestro ser. Nos convertimos a Dios, cambiamos actitudes que nos hacen sentir más hijos de Dios y hermanos de todos, y todo porque queríamos celebrar la Pascua, que es la fiesta de la resurrección, de la vida nueva, de la Vida con mayúsculas, la que Dios nos ofrece. La Pascua llegó. Jesús caminó llevando una pesada cruz, no se dejó vencer por el miedo, por el dolor, el cansancio -nunca bajó los brazos. Jesús fue burlado por muchos pero nunca dudó, nunca titubeo, solamente nos amó y se entregó incondicionalmente al amor del Padre para salvarnos. Murió y murió por nosotros, se entregó por nosotros, derramó su sangre, dejó que lo hirieran, que le pusieran una corona de espinas, que lo humillaran –y todo por nosotros, por vos y por mí.
Aprendamos de Jesús en esta Pascua, copiémonos de su Amor, dejemos que nos contagie de Misericordia, abramos el corazón y tendámosle una mano para ayudarlo a llevar la cruz, seamos participes de su sufrimiento haciéndolo participe a Él del nuestro. Entreguemos a Jesús nuestra cruz para que nos ayude también Él a llevarla. Dejemos todo en sus manos. Te preguntarás ¿cómo hago para ayudarlo yo a Él? Es sencillo, mira a tu alrededor. Todos los que te rodean llevan una cruz, mas grande o más chiquita, más liviana o más pesada, pero cruz al fin. Y es ahí donde está Jesús. Es al que tenés al lado al que tenés que acompañar, al que tenés que escuchar, el que te necesita. Y es a ese también al que le tenés que pedir ayuda. Que en esta Pascua aprendamos a mirar con otros ojos, con los de Dios, los del Amor y hagámoslo con fe, con la fe que nos demuestra que Jesús camina al lado nuestro todos los días, a veces haciendo ruido para que lo escuchemos, pero a veces muy en silencio. Hagamos esto para festejar, para celebrar y con esperanza, porque esta Pascua, además de hacernos revivir el dolor de Jesús para que tomemos conciencia de lo que hizo por nosotros, nos recuerde que la mayor alegría llego tres días después, cuando resucitó para quedarse entre nosotros. Salí a contar por todos lados que el sepulcro está vacío para que Jesús te encuentre gritando… ÉL ESTA VIVO! Gretel Serra
El episcopado latinoamericano agradece al Papa su ter nur ay tern ura sabiduría æAl cumplirse el primer aniversario de la elección del cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio SJ, como obispo de Roma y sucesor de San Pedro, los cuadros directivos del Consejo Episcopal Latinoamericano, así como los secretarios generales de las conferencias episcopales de América Latina y el Caribe, le hicieron llegar un saludo de felicitación, amor y fidelidad. En su carta los obispos latinoamericanos y caribeños manifestaron su cercanía y comunión con el papa Francisco, quien: «nos ha hecho creer con más alegría, amar con más fuerza, esperar con más decisión» «Para que todos sean uno», lema de la peregrinación de Francisco a Tier Tierrra Santa æ «Para que todos sean uno», será el lema que guiará la peregrinación que hará el papa Francisco del 24 al 26 de mayo próximo, inspirado en el ruego de Jesús al Padre. El logo elegido representa el abrazo de los primeros dos discípulos llamados por Jesús, en Galilea, los hermanos Pedro y Andrés. Lema y logo fueron elegidos y aprobados en la reciente Asamblea de Ordinarios Católicos de Tierra Santa. Fuente: Aica
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EN EL CAMINO DE EMAUS La Biblia y nosotros
El ciego que gritaba... (y el paralítico que subía y bajaba)
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eamos Marcos 2, 1-12 y 10,46-52. Lentamente, varias veces si hace falta. Imaginar bien las dos escenas (rotura del techo…polvo, pedazos que pueden haber caído… gritos desaforados… molestos…). Todos los comentarios y meditaciones suelen interesarse por la fe de los dos enfermos, y la prontitud y bondad del Señor en responderles y enseñarles una vez que salva a todo el hombre: Tu fe te ha salvado. Sin embargo, en ambos casos hay un detalle de comportamiento colectivo, de grupo, que puede tener sus sugerencias para la Iglesia, las parroquias y los grupos, instituciones y movimientos. Fijémonos: ¿Por qué tuvieron que romper el techo? ¿Por qué tenía que gritar cada vez más fuerte el ciego? ¿Nadie le avisó al Maestro que alguien lo requería? En otra ocasión, cuando lo fueron a ver su Madre y sus primos, le avisaron. En estos dos casos, los que estaban cerca de Jesús y se creían cercanos a Él, que escuchaban su Palabra, no se interesaron por el necesitado, lo ignoraron, le querían impedir que llegara al Señor. ¿Cómo se entiende eso? ¿Qué aprendían de Jesús? La Iglesia La inmensa mayoría de los fieles, estamos contentos y agradecidos, con la Iglesia que quiere construir el Papa Francisco: sencilla, pobre, abierta, amistosa, con los brazos abiertos a equivocados y pecadores, dándoles lugar y posibilidad de cambio, de conversión y de amistad y afecto. Lejos de condena o marginación: no al pecado y al delito, sí a la persona que quiere salir de eso. Paciencia, tolerancia, ayuda, abrigo, amistad, afecto: estás en casa, en la casa del Padre. Eso, ¿se intenta en el resto de la Iglesia, en otros lugares que no sean donde está Francisco? No estamos hablando de abandonar principios ni de abaratar las exigencias cristinas, evangélicas. Estamos hablando del trato a personas, que necesitan de la misericordia, del amor y el perdón de Dios y del amor y amistad de sus hermanos. Estamos hablando de que antes que nada, la persona se acerque, descubra a Jesús, y ya empezará el proceso de vida. Cada cual tiene su tiempo y Dios lo respeta. Pero que ese tiempo transcurra en casa, a la vista y compañía de Jesús, con el afecto y acompañamiento de hermanos verdaderos.
Unos días después, Jesús volvió a Cafarnaún y se difundió la noticia de que estaba en la casa. Se reunió tanta gente, que no había más lugar ni siquiera delante de la puerta, y él les anunciaba la Palabra. Le trajeron entonces a un paralítico, llevándolo entre cuatro hombres. Y como no podían acercarlo a él, a causa de la multitud, levantaron el techo sobre el lugar donde Jesús estaba, y haciendo un agujero descolgaron la camilla con el paralítico. Al ver la fe de esos hombres, Jesús dijo al paralítico: «Hijo, tus pecados te son perdonados». Unos escribas que estaban sentados allí pensaban en su interior: «¿Qué está diciendo este hombre? ¡Está blasfemando! ¿Quién puede perdonar los pecados, sino sólo Dios?». Jesús, advirtiendo en seguida que pensaban así, les dijo: «¿Qué están pensando? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: «Tus pecados te son perdonados», o «Levántate, toma tu camilla y camina»? Para que ustedes sepan que el Hijo del hombre tiene sobre la tierra el poder de perdonar los pecados -dijo al paralítico- yo te lo mando, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa». Él se levantó en seguida, tomó su camilla y salió a la vista de todos. La gente quedó asombrada y glorificaba a Dios, diciendo: «Nunca hemos visto nada igual». Mc. 2, 1-12
Después llegaron a Jericó. Cuando Jesús salía de allí, acompañado de sus discípulos y de una gran multitud, el hijo de Timeo -Bartimeo, un mendigo ciego- estaba sentado junto al camino. Al enterarse de que pasaba Jesús, el Nazareno, se puso a gritar: «¡Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí!». Muchos lo reprendían para que se callara, pero él gritaba más fuerte: «¡Hijo de David, ten piedad de mí!». Jesús se detuvo y dijo: «Llámenlo». Entonces llamaron al ciego y le dijeron: «¡Ánimo, levántate! Él te llama». Y el ciego, arrojando su manto, se puso de pie de un salto y fue hacia él. Jesús le preguntó: «¿Qué quieres que haga por ti?». Él le respondió: «Maestro, que yo pueda ver». Jesús le dijo: «Vete, tu fe te ha salvado». En seguida comenzó a ver y lo siguió por el camino. Mc. 10, 46-52
Escribe: Pbro. Carlos Mateos
Par arrroquia, g grr upos e instituciones Nuestras instituciones y grupos, nuestras organizaciones, horarios, salones ¿facilitan, invitan, antes que nada, a encontrarse con Jesús, a descubrirlo, a querer conocerlo? O más bien por rutina, o desinterés por el necesitado (material o espiritual), lo que en realidad hacemos es no facilitarle el encuentro… si no impedirlo decididamente. En una reunión del clero, en Brochero, el entonces cardenal Bergoglio, comentó: «Para qué queremos una parroquia bien organizada, con sus horarios y reuniones, si en la otra cuadra hay una persona no sabe el Padre Nuestro». Estamos en cuaresma, tiempo de penitencia y conversión. Penitencia y conversión que, desde el punto de vista cristiano, son impensables sin el acercamiento al prójimo, sin la mirada amistosa «al otro», alejado y necesitado. Sería muy beneficioso y provechoso, analizar en humildad y sinceridad, cómo son nuestros ambientes parroquiales, la capacidad que tienen o no- de apertura, de invitación, de acogida; pero sobre todo, qué capacidad de mostrar a Cristo, antes que nada. ¿Cuál debe ser la recepción, después de mirar lo que pasó en los dos episodios evangélicos, con los que se sentían y creían cercanos a Jesús y la invitación a los demás, a los más alejados, a los dudosos, a los incrédulos, a los que nos critican -a veces con razón? ¿Se nota la amistad, la calidez, el sentirse en casa a pesar de la propia conducta? Sos de los nuestros, sos de la familia, mirá a Jesús…después hablaremos de tus macanas; pero ahora, encontrate con Él. ¿O empezamos por: «te tenés que casar por la Iglesia», «tenés que hacer el curisllo», «tenés que ir a misa los domingos», «no tenés que ir más al boliche», tenés…tenés…no tenés…? Cuaresma: tiempo de oración, de reflexión a la luz de la Palabra, de humildad y realismo…tiempo de conversión, «de la nuestra», antes que la de los otros. Y en el sentido que nos indica Francisco… no sólo conversión personal, sino comunitaria, institu-cional, parroquial, grupal. Comunidad = Casa Grande… no un montón de islas chiquitas, incomunicadas, aisladas, rutinarias y aburridas… Dios nos conceda esa gracia… pidámosla con humildad.
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PASTORAL ENCADI VOCACIONAL 2012 INGRESOS AL SEMINARIO
«...El ya esperaba su llegada con los brazos abiertos»
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os dice el papa Francisco en una de las primeras páginas de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium: «Al que arriesga, el Señor no lo defrauda, y cuando alguien da un pequeño paso hacia Jesús, descubre que Él ya esperaba su llegada con los brazos abiertos.» (Nº 3). Y de esto hay muchísimos testimonios, de cómo el Señor nos «primerea» en el amor, y cómo siempre, como el Buen Pastor, sale al encuentro de sus ovejas, especialmente de aquellas que con miedo se quedan paralizadas frente a las realidades que nos asustan y nos dejan sin ganas ni fuerzas de seguir. Muchas almas enamoradas en algún momento gritan al Señor esperando de Él una respuesta, su clamor es la del alma que llora con pasión porque ve a su Señor pero no sabe cuál camino seguir para no perderse. Y el Señor no puede verlas solas y sufriendo de amor, y responde incluso antes de que ese grito llegue a resonar en el cielo. Dice el Señor: «Antes que llamen, yo les responderé; estarán hablando, y ya los habré escuchado» (Is. 65, 24). ¡Enorme experiencia de un Dios vivo que se preocupa por
Este año, en la diócesis de Nueve de Julio, cuatro jóvenes ha sentido el llamado de Jesús a seguirlo de una manera muy cercana, entregándole toda su vida, y ellos dieron ese primer «SI» del que nos hablaba el papa Francisco. todos y por cada uno de nosotros! Experiencia que todo cristiano debería tener, la del encuentro personal y vivo con Jesús Resucitado. Experiencia que han tenido muchos, y por eso han podido responder al llamado del Señor. Este año, en la diócesis de Nueve de Julio, cuatro jóvenes han sentido el llamado de Jesús a seguirlo de una manera muy cercana, entregándole toda su vida,
y ellos dieron ese primer «SI» del que nos hablaba el papa Francisco. En lunes 17 de marzo del presente año han ingresado al seminario trece jóvenes de distintas diócesis (Mercedes-Luján, San Justo, Obispado Castrense, Bahía Blanca, Chascomus y Nueve de Julio) dispuestos a seguir al Señor, de los cuales cuatro pertenecen a nuestra diócesis. Esto es fruto de la oración comunitaria
30 AÑOS – GRUPO SCOUT NUESTRA SEÑORA DE FÁTIMA – NUEVE DE JULIO
Baden P owell y los cuent os Po cuentos
E
l método scout se basa en el juego, una forma de llegar a los niños de manera divertida, puede ser a través de un cuento. Sin duda alguna Baden Powell usó esta forma narrativa como herramienta para transmitir ideas, enseñanzas y valores... En 1907, se realiza en la Isla de Brownsea el primer campamento Scout. Dentro de la programación del mismo, se incluían actividades nocturnas junto al fuego… momento que aprovechaba entre otras cosas para contar historias de sus campañas como militar adaptándolas en forma de cuentos. Baden Powell disfrutaba de la escritura… escribió muchos libros, los cuales actualmente se siguen utilizando para llevar a cabo el método scout casi sin ninguna modificación, solo algunas adaptaciones.
Si bien estos libros fueron en principio creados/ideados/inspirados para y por el escultismo, (escribió más de 30) algunos bien pueden leerse para alimento propio… Para darnos una idea de cuán importante era la narrativa en su vida, a continuación adjuntamos un relato escrito por él en el que podremos conocerlo en resumen. (Esta carta fue escrita antes de morir como bien lo aclara el texto) Si alguna vez han visto la obra de «Peter Pan», recordarán cómo el jefe de los piratas estaba siempre haciendo su último discurso de despedida por temor de que, posiblemente, cuando llegara la hora en que habría de morir, no fuera a tener tiempo para darlo a conocer. Así me sucede a mí, y aun cuando no me estoy muriendo en
este momento, esto tendrá que suceder uno de estos días, y deseo decirles una palabra de despedida. Recuerden: esta es la última que oiréis de mí, por lo tanto, medítenla. He tenido una vida muy dichosa, y deseo que todos ustedes tengan también vidas muy dichosas. Estoy convencido de que Dios nos ha puesto en este mundo maravilloso para que seamos felices y gocemos de la vida. Pero la felicidad no proviene simplemente de la riqueza, ni de tener éxito en la carrera, ni dándose uno gusto a sí mismo. Un paso hacia la felicidad es hacerse uno sano y fuerte cuando niño, para poder ser útil y así poder gozar de la vida cuando se es hombre. El estudio de la naturaleza les enseñará cómo Dios ha llenado de cosas bellas y maravi-
por el aumento, perseverancia y santificación de las vocaciones sacerdotales y a la vida consagrada. Muchas personas y comunidades enamoradas de Jesús, se han puesto de rodillas a los pies del Santísimo Sacramento, pidiéndole al Señor que llame a jóvenes a seguirlos ¡Jóvenes, el Señor confía en ustedes! ¡No tengan miedo de seguirlo! «La Iglesia confía en los jóvenes. Son para ella esperanza. Ve en la juventud
llosas este mundo para que lo puedan gozar. Estén satisfechos con lo que les haya tocado y saquen de ello el mejor partido que puedan. Vean siempre el lado bueno de las cosas y no el malo. Pero la verdadera manera de obtener la felicidad es haciendo felices a los demás. Traten de dejar este mundo en mejores condiciones de cómo lo encontraron; de ésta manera, cuando les
un verdadero potencial para el presente y el futuro de la evangelización.» (Puebla, Nº 1186). No es menor el trabajo realizado por la ODVE (Obra Diocesana por las Vocaciones Eclesiales) que con su oración constante y ferviente no dejan de pedir al Señor que envíe trabajadores para su cosecha. Agradecemos al Señor por regalarnos trabajadores jóvenes que quieren entregarle toda la vida para construir el Reino; también damos gracias a todos y a cada uno de aquellos que han ayudado y acompañado a los seminaristas en su proceso de discernimiento, ya sea con su testimonio de vida entregada, ya sea con la oración como puente entre el Cielo y la tierra, puente entre los hombres y Dios, puente que hecho con amor une y nada lo puede romper. Nos comprometemos a seguir orando por el surgimiento, perseverancia y santificación de las vocaciones sacerdotales, religiosas, a la vida consagrada, misioneras y a la vida matrimonial. Bendiciones de la mano del Resucitado.
Equipo de Pastoral Vocacional Diocesana
llegue la hora de morir, podrán hacerlo felices porque, por lo menos, no perdieron el tiempo e hicieron cuanto les fue posible por hacer el bien. «Estén listos» en ésta forma, para gozar de una vida dichosa y morir dichosos: aférrense a su Promesa Scout siempre, aun cuando hayan dejado de ser muchachos. Que Dios los ayude a hacerlo así. Su amigo, Baden Powell
ABRIL 2014
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LO SUYO, LO MIO, LO NUESTRO
La dimensión social de nuestra gracia
A
migos lectores. Ya al comienzo de nuestras entregas mensuales, mes pasado, he querido titular esta columna como «LO SUYO, LO MÍO, LO NUESTRO». El título de la columna surgió de la charla con mi amiga Lis, de Miramar, el verano pasado. Por mi parte quería encontrar alguna expresión que involucrara a Dios, a cada uno en particular y a todos en general para hablar de la fe, la gracia y la responsabilidad social que surge de celebrar sacramentalmente nuestra fe en comunidad. Queda claro que la gracia y la fe son don de Dios, es «LO SUYO» que se nos ha compartido. La Vigilia Pascual que viviremos este mes nos introducirá a los misterios redentores de Cristo en los cuales fuimos injertados por el Bautismo. Lo «suyo» de Dios: su vida, se ha hecho «LO MÍO» por el amor generoso y gratuito por el que fuimos predestinados y llamados a una nueva vida. De esta forma, fuimos también injertados en el Misterio de la Iglesia. Lo «mío» es también «LO NUESTRO» que vivimos en comunidad y celebramos en cada Eucaristía. Como signo máximo de comunión. Es un «NUESTRO» hacia adentro: los bienes espirituales, sacramentos, dones, experiencia comunitaria, peregrinaciones, y tanto compartir que nos enriquece como
Iglesia en comunidad y diocesana. También es un «NUESTRO» que se abre a la realidad transformadora de la sociedad en sus estructuras de pecado y de cada realidad particular; en «nuestra» realidad donde estamos llamados a testimoniar la liberación que trajo Cristo: a cada pobre, enfermo, preso, abandonado, esclavizado, a quienes tuvo presente sus palabras en la sinagoga de Nazareth. Parte de un «nuestro» personal que se expande al «nuestro» más grande y comprometido que es la sociedad en la que vivimos y estamos llamados a «pascualizar» (iluminar con la Luz de la Pascua nuestras realidades). Me apoyaré para la reflexión en un capítulo de Víctor M. Fernández «Dimensión fraterna y social de la gracia» en su libro «La gracia y la vida entera» para lo que sigue, como en los siguientes artículos. Nuestra sociedad occidental desarrolló a lo largo de los siglos una doctrina muy intimista e individualista sobre la realidad de la gracia (la vida de Dios en nosotros). Aún hoy arrastramos esta secuela cada vez que al hacer nuestro examen de conciencia no aparecen las obras de omisión hacia el prójimo (especialmente el necesitado). Sin duda que nuestro modo de actuar o de reflexionar sobre la vida se vio influenciado por
P. Luis Diehl
PENSAMIENTOS BREVES
Escribe: Pbro Germán Loriente
Centrar nuestra reflexión en afirmar la dimensión social que tiene la gracia, y cómo ello nos «obliga» con el hermano, es romper el círculo vicioso de ver nuestro propio ombligo continuamente. Poner al otro en el horizonte de nuestra vida no es una simple proposición altruista, sino una vinculación profunda que brota desde el bautismo y se acrecienta celebrando cada uno de los sacramentos. El otro no es un fin, el otro es mi hermano con el que estoy unido realmente, y al que no puedo desconocer. doctrinas que se enarbolaron en su momento para defender la ortodoxia de la fe; pero al exagerar sus posturas ellas mismas se transformaron en herejías. Es en el jansenismo (s. XVI) don-
X OfrezcamosAnte la persona de Jesús, no busquemos pruebas de su divinidad. Pidamos la gracia reexperimentar su Amor, y creeremos en Él.
de la gracia alcanzó un lugar relevante: lo único importante es la relación del individuo con Dios, y la concupiscencia se identificaba excesivamente con las inclinaciones sexuales. No se advertía con claridad la primacía del amor al prójimo y las exigencias sociales del Evangelio como criterios principales para discernir la relación auténtica con Dios, el «otro» no es ni regla ni camino indispensable para ser verdaderamente feliz. Me pregunto si no hará más o menos cinco siglos que nos venimos confesando como jansenistas… Partiendo del único mandamiento: «Amar a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a uno mismo» hoy debemos acentuar todas las dimensiones por dónde el hombre debe desarrollar la vida de la gracia, particularmente en su relación con los demás. Claro, es verdad, no estamos en el mejor de los mundos. Ya no son sólo herejías o posturas ideológicas que nos envuelven, y con las cuales debemos luchar, sino con «una sociedad consumista e individualista que enferma a la persona en su apertura al hermano, provocando así la creciente disolución de los vínculos sociales. Se advierte la marcada tendencia a que cada uno viva para sí y piense sólo en sí mismo. Sin embargo, los valores de la fraternidad no se desdibujan del todo, ya que se aprecia profundamente a las personas que dan la vida por los demás-La acusación que suele brotar espontáneamente cuando hay conflicto en una pareja es: «Eres un egoísta». Es precisamente una debilidad de ésta época (posmoderna) la de apre-
ciar claramente los valores comunitarios, pero optando de hecho por una vida clausurada en los propios intereses… Hay un hondo deseo de encuentro, pero al mismo tiempo un tremendo temor a comprometerse, a involucrarse, a ser limitado o perjudicado por el otro». Esto ha de ser «sanado». Justamente, cuando hablamos de «gracia de Dios» estamos hablando de aquella fuerza amorosa de Dios que restaura al hombre por la Pascua de su Hijo. Y la gracia debe inundar toda realidad humana para que ésta pueda ser «sanada». Entonces, si hay una tendencia al individualismo, la gracia debe evitar una falsa religiosidad que provoque aún más una acentuación o una justificación de encerrarnos en falsos pietismos. Centrar nuestra reflexión en afirmar la dimensión social que tiene la gracia, y cómo ello nos «obliga» con el hermano, es romper el círculo vicioso de ver nuestro propio ombligo continuamente. Poner al otro en el horizonte de nuestra vida no es una simple proposición altruista, sino una vinculación profunda que brota desde el bautismo y se acrecienta celebrando cada uno de los sacramentos. El otro no es un fin, el otro es mi hermano con el que estoy unido realmente, y al que no puedo desconocer. Descubrir esta dimensión social en nuestra vida es denunciar proféticamente nuestro mundo occidental y desarrollado, aparentemente libre, capaz de grandes progresos, pero frecuentemente clausurado en sí mismo, incapaz de mirar más allá de sus propios intereses de consumo, comodidad y placer.
X La Sangre gloriosa de Cristo nos ha purificado para que seamos miembros fecundos de su Cuerpo, que es la Iglesia. X El Señor nos acompaña y nos defiende. ¿Qué mal nos podrán hacer los hombres?
Es una publicación de la diócesis de Santo Domingo en Nueve de Julio
www.diocesis9dejulio.org Año XV - N° 146 ABRIL de 2014
DIRECTOR Pbro. Germán Loriente germanloriente@gmail.com
diocesisdenueve EDICION INTEGRAL Fabricio O’Dwyer fabricio1969@gmail.com