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Manifiesto Poetico Imaginario
Abigail RodrĂguez / Emma Flores
Dos puntos editorial
Manifiesto Poético Imaginario ©Tegus Cartonera Abigail Rodríguez Emma Flores edición digital ©Dos Puntos Editorial La última ciudad serpiente, Veracruz agosto del 2014 Diseño Jesús Gallegos
[Cada libro debe tener una forma única de latir, de vibrar, de explotar. Nosotros buscamos esa universalidad intentando crear algo más, para que nuestros libros dejen de ser sólo libros: que muten y puedan volar]
http://teguscartonera.blogspot.mx/ http://www.dospuntoseditorial.blogspot.mx/ No. 11
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MANIFIESTO POÉTICO DE TEGUS, EL TORO POÉTICO IMAGINARIO
Tzuyuki Romero
El Manifiesto Poético Imaginario, es para Emma Flores y Abigail Rodríguez, la manera de asumir su forma de vida, la poesía, que también puede ser considerada como una forma de muerte, enfermedad de la que no se salva nadie, aunque quiera. La poesía la padece y la goza no sólo algún joven abstraído de este mundo, en primer lugar porque la poesía no contempla edad ni siquiera ella misma tiene una específica y por el otro lado, la poesía no está dentro de este mundo, mucho menos fuera. La poesía no es cosa de poetas, fertiliza cada terreno que toca, por tanto está en todas partes. No es sólo lo bello, también un grito, las lágrimas llenas de polvo, sangre seca, música, la sonrisa de un niño en el microbús, el viento. Por eso para las autoras intelectuales de Tegus y su manifiesto, la poesía puede encontrarse en los tres estados de la materia: Es líquida y moja a quien lo permite, a otros apenas salpica, es gaseosa y toma la forma del lugar que la contiene pero como nada puede contenerla es total y a la vez nihilista y por último, la poesía es sólida, toma forma de ojo, mano, piedra, ventanas, se deja tocar. El Manifiesto Poético Imaginario, es una muestra de la inquietud de este par de escritoras: sabedoras de que no se librarán de la poesía, la comparten, la saborean, la afrontan, la moldean, la respiran y la convierten en letras que se vierten en ocasiones con sumo cuidado, otras de formas más estrepitosa sobre la páginas con portadas donde se aprecia Tegus, un todo
que no se lidia en el ruedo, sino a diario, en cualquier lado, si se le ve, como ellas lo han logrado y por el que estรกn presentando ahora este manifiesto.
INICIACIÓN EN EL ARTE DE SOBREVALORAR LA SOMBRA DE LUNA
Elena Flores Félix
Al leer los primeros puntos del Manifiesto Poético Imaginario se recuerda la alegría que invade cuando se comienza a dedicar a la poesía, aunque no se escriban poemas. No se necesita ser escritor para saber que más allá de la literatura existe, y está, la poesía. Como se encuentran, en la poesía implícita otras manifestaciones artísticas, sociales y científicas. Ese primer entusiasmo surge, quizá, de la rabia y el encanto de ser joven. Dice Eduardo Lizalde, que todo joven escritor es parricida. Se enfrenta a la tradición literaria aun cuando deviene de ella. Este Manifiesto es a mi pareceré un gran poema que busca reivindicar tanto al poeta que se precie de serlo, en contra de la banalidades y contrariedades que surgen del mundillo literario (que poco a nada tienen poesía); como la poesía, que será siempre un arte mayor, de gran sensibilidad y carácter estético, pero que por su condición no está limitado de ninguna manera a llegar a los recovecos más intrincados de la mente de cualquiera. Es, trabajo de poetas, la poesía. Y como cualquier otro oficio, debe procurar realizar un buen trabajo. ¿Cuál es la fórmula? Difícil será el modo en que cada uno lo descubra, pero el Manifiesto Poético Imaginario parece resumirlo en un punto: Ser honesto con uno mismo; aun en contra de corrientes y comodidades, ya que “la poesía nunca viene sola”, sino que es una gran aventura que comienza a cada rato. O como lo señalan los autores de este manifiesto, la poesía es una enfermedad de la cual la única cura parece ser “un balazo en la frente”, que no es otra cosas que un verso.
CANTAR DEL TORO Hazael Ruíz
I Al primer bufido de Tegus -renacimiento de razase abrió un perfil y los habitantes de la sala de los espejos se vieron en él. Toro-hombre en el centro de ese laberinto.
II Al hijo le nace el padre. No es cabestro, no es ronzal. Duro de cerviz no suelta boñigas. Sus cuernos de lapislázuli son.
III Toro mitológico Toro arquitectónico
Toro astrológico Toro geométrico Toro publicitario Toro viajero Toro social Toro manifiesto Toro cartonero.
IV Con tu poética: - desléngualos, padre, para que no hablen. - túllelos, padre, para que no anden de aquí para allá. - ciégalos, padre, para que no vean eso y aquello. - ensordécelos, padre, para que no las oigan. - cástralos, padre que se hagan bueyes. bucéfalos del 21 a la universidad. bovina van.
V Al final ya no importa quien de los tres, fue la fuente de los otros dos.
Ya hubo sacrificio. Canta negra flor de cuatro patas.
, Manifiesto Poetico Imaginario
I No hay patria más infinita que el lenguaje; no puede ser negada a nadie. Sin embargo, en la literatura, mi nación está fundada en el exilio.
II La poesía es producto del impulso de estar vivos; la poesía debe ser nómada, circular y nutrirse de otros poetas, así sea en un inicio, el sentir más hermético de sus creadores.
III La poesía no es un joven sentando en la orilla del abismo, es un avión sobrevolando la sombra de la luna, nada está fuera de ella.
IV Nadie olvide la melodía de un poema, el corazón tocando los colores del arcoíris poético no deja de pintar a todos.
V La poesía es un árbitro entre el silencio y el ruido; la poesía se nutre de la marcha cotidiana entre el tormento y el goce, la poesía podrá ser radical o ubicarse en los puntos medios, su música entonces estará nutrida de todo.
VI La mejor poesía no tiene autores, no se mancha con nombres colgados de los textos ni se premia con aplausos a los hombres, la poesía es de todos y para todos.
VII La poesía dialoga y se enfrenta cara a cara con su mundo; la poesía no debe ser una actividad elitista, necesita de grandes inversiones creativas.
VIII La poesía es parte de la locura del mundo, de las paredes pintadas de una casa abandonada, la poesía implica dejar la razón como un espectador que palpa pero no tiene pincel.
IX La poesía no debe ser la rutinaria fábrica de mentiras, de embellecedores del mundo. Sus letras hacedoras de imágenes, pueden gritar la barbarie, lo negado, forzar a los mudos a hablar, a los sordos a escuchar; la poesía no debe rendir explicaciones a nadie.
X La poesía como única patria. No más banderas ni fronteras que dividan la sangre poética del mundo.
XI La poesía nos transfiere a los objetos, nos devela tal cual somos reflejados en la identidad de las otredades. Los poetas del mundo deberán ser espíritus nómadas, capaces de trasladarse de objeto en objeto, comprendiendo sus respectivas naturalezas, sus respectivos dolores.
XII El poeta como dador de vida, como inicio de las fantasías de los otros, el poeta como ser incandescente; siendo tinta que se desvanece para crear nuevas formas.
XIII El poeta debe demostrar que la tinta que corre en el papel, no son sólo letras; sino continuaciones sanguíneas de sus venas, de su carne y su mente. El poema es un entretejido orgánico de sensaciones, los textos son fibras palpitantes; la poesía entonces, no debe ser jamás presentada como un bien suntuario.
XIV El poeta es parte del sufrimiento del mundo, un motor que las nuevas generaciones están olvidando.
XV El poeta es un revólver, un dolor incrustado en el corazón del mundo, las pulsaciones rápidas de un ciervo fosforescente que salta sobre nuestros sueños, nada es verdad si no se empapa de poesía.
XVI La poesía es un resquebrajamiento de los mundos. Está presente en los temblores, porque la poesía misma evoca las rupturas y el colapso. La poesía es el antes, el durante y el después; es espacio y tiempo, es círculo y circunferencia del caos.
XVII La poesía es impuntual, no tiene una hora precisa; ni lugar, no combina claro/oscuros del cielo con su naturalidad, no espera un número para atacar una mente, no retiene fechas ni espacios, es liviana, como una pluma que puede tardar en caer a su destino.
XVIII La poesía habrá de comprenderse mejor en los terrenos insomnes, porque hará confluir los escenarios. La poesía puede alterar el ritmo canónico de las horas, porque tiene el poder de engrandecer la noche y reanudar el ciclo diurno cuando quiera. La poesía fecunda las horas, no hay terreno infértil para sus letras.
XIX La poesía es un espejo, todo se encuentra en las líneas poéticas
de un árbol seco o una luna perdida en una galaxia, no es un contrato con el amor ni el romanticismo.
XX La poesía debe ser un órgano auto-gestivo, capaz de generar incluso el mismo útero del que proceden sus imágenes.
XXI La poesía es un canto itinerante, no tiene reglas, no tiene estatus definidos, la poesía está hasta en el paisaje de la basura.
XXII Veinte mil leguas de viaje hacia el alma, no es un camino ni una fórmula detallada o precisa para encontrar la vía de la poesía correcta; porque para la poesía no existen fórmulas. Todo lo que está bien, también está mal, la poesía es relativa, no es unívoca, sus representaciones serán siempre polisémicas, el valor de la poesía se altera dependiendo del ojo que capta sus imágenes.
XXIII ¿Cree usted que la poesía morirá en un barco que navega por el cuerpo inerte de un mexicano? ¿Cree usted que no sobreviviremos a la invasión de las cucarachas? La poesía tiene un cuerpo más fuerte que el de He-man.
XXIV La poesía puede ser un efluvio pesado con propiedades como para evaporarse en el aire. La poesía puede ser los tres estados de la materia; un cuarto que es todos los anteriores simultáneamente. Si otros se niegan a aceptar esta teoría, es porque no han comprendido que la poesía se rige bajo sus propias reglas, unas que no obedecen a las de esta tierra ni a las que están fuera de ella.
XXV Poeta la tinta de tus venas manchará los últimos rincones de la tierra, la poesía podrá leerse en mil idiomas al mismo tiempo, la poesía no sólo navegará en los libros, se presentará en las pinturas, en la música, en los ojos de los niños y de las mujeres que lloran y manchan sus vestidos en busca del mar poético.
XXVI La poesía puede no sólo camuflarse con el cielo, sino convertirse en él. Una vez que el poeta entra en su cárcel, es imposible salir de ella. La poesía puede ser paraíso y nosocomio, es dicha y desdicha, es la unión de todos los contrarios cohabitando en una misma tinta, en un mismo ojo de poeta condenado a las imágenes.
XXVII La poesía nunca olvida, no excluye temas de abordaje, no deja de lado la urbanidad de las almas, no olvida lo sublime del amor, del sexo, de la muerte, NUNCA viene sola.
XXVIII La poesía es un tatuaje que inyecta su tinta en los ojos; todo después de ella transformará con su filtro, un mundo particular que debe expresarse necesariamente por el poeta, en una jerarquía de acciones igualitaria a la respiración.
XXIX Un libro no puede cambiar al mundo, un escritor no puede cambiar al mundo, el mundo se desmundiza cuando el poema viola la privacidad de los hombres, cuando toca las puertas sensibles de cada mente, un mundo puede cambiar a un poema, porque el poema es un ser que se acopla a cada cabeza, un poema siempre tendrá un sin fin de significados.
XXX Es honesto decir, que la matriz de la poesía es casi siempre la misma; un viaje impulsivo e inconsciente por encontrarse con uno mismo y quitarse toda la pesada lama que ha crecido sobre la piel. Poetizar es deshacerse de uno mismo y reinventarse, dotar la realidad de fantasmas, hallar los vestigios de sangre en la fantasía.
XXXI Mi vida es un poema, mi vida es un poema que cuelga de estrellas que se desubican en el plano consciente del mundo, mi vida es la vida de todos los que se acercan a la poesía y no pueden salir jamás.
XXXII Los verdugos de las generaciones anteriores, podrán siempre satanizar las nuevas perspectivas, por tradición, por venganza del antaño; las patologías en papel calca. Hoy, los hijos patearán los úteros y negaran sus influencias, insurrectos y malévolos. La poesía no debe ser un pleito de lavanderas, sino una lucha ontológica verdadera; no panfletos.
XXXIII La poesía no teme, no tiembla ante las grandes cortes de críticas, la poesía nunca será correcta porque lo que se corrige no se siente, siempre tendrá una arista poética, nada hay de malo en un verso de amor, nada hay de malo en una lucha contra la política, en un grito de muerte.
XXXIV Yo hoy le escupo a las generaciones, a todas las etiquetas, yo sólo admito a la poesía que se desliza en los espacios y el tiempo, la poesía es un arma que viola todas las leyes, la poesía siempre quebranta, es la sedición cuando las válvulas de escape no existen. La poesía siempre surge en las crisis.
XXXV Sí la poesía debe dejar de ser humana si es necesario para reinventarse y ser escrita por otras manos y otras garras, la animalidad no será únicamente el yo poético, sino el poeta.
XXXVI La poesía no es más que un pájaro cantando al oído de la luna.
XXXVII En la poesía siempre existirá una carga de simplicidad, no busques lo complicado para llamarlo poesía, no necesitamos de palabras envueltas en empaques procesados, todo debe ser natural.
XXXVIII La poesía es también comestible. La poesía puede traer en sus versos la sazón más delicada para envolver de placeres el paladar, o las más agudas espinas para perforar las encías. La poesía busca emociones, sonrisas; sangre.
XXXIX El poeta debe escribir como si el mundo se fuese a terminar mañana; en caso de que el fin llegue, la poesía cubrirá la estratósfera de versos; la poesía será el manto que cubra el cadáver del mundo.
XL La poesía es una apertura al mundo de los olvidados, la poesía no te dejará vivir de ella, sino para ella.
XLI Uno puede encontrar gente en la poesía, perder gente en la poesía, uno puede olvidar al mundo en la poesía, pero nunca
dejarla de lado, una vez que se entra se convierte el mundo en un sueño infinito.
XLII El poeta no debe ser juzgado por su género; la poesía puede abordar las feminidades y las masculinidades a la par, en hombres o mujeres quienes escriban. La poesía debe ser andrógina y los resultados de esta deben estar por encima de lo visible; la poesía pertenecerá siempre a las emociones.
XLIII La poesía es una sensación, es el clima de algún país descubierto por la soledad, la poesía no necesita traducciones, ella sabe lo que dice.
XLIV La poesía no es un resfriado ni mucho menos un síntoma portador de los hipocondriacos. La poesía es una enfermedad crónica, degenerativa y progresiva que mata día a día a los poetas que la han contraído de verdad. Contra la poesía no hay cura, pensar en ella como un juego de falsedades, es una falta de respeto inconcebible para todos quienes están enfermos de ella.
XLV ¿Podría la poesía existir en un mundo vacío de esperanzas, sin cambios, en un mundo estático, donde la sangre humana no cambie de paisaje constantemente? No.
XLVI Nadie tiene por qué esperar algo de los poetas más que su poesía, todos ellos viven al margen de sus respectivas realidades internas.
XLVII Obligar a la poesía a entrar en estándares, es obligarla a encasillarse de forma unívoca a la catástrofe. La poesía es multiplicidad y libertad. La poesía no debe ser tiranía.
XLVIII El poeta siempre tocará las puertas que lo llevarán al mundo, no es que toda la poesía sea para uno mismo, pero tampoco será toda la poesía para el mundo.
XLIX El génesis de la poesía se encuentra en una mente que -casinunca está consciente de lo que creará.
L Poetizar es curar el dolor de cabeza con un balazo en la frente.
Este libro se terminó de imprimir en la República Poética Imaginar de Tegus Se re-editó e imprimió en La última ciudad serpiente, Veracruz.