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VOLAR SIN LÍMITES
TEXTO ÁNGEL SEPÚLVEDA | EDITOR DEPORTES
Y ESPECTÁCULOS
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Muchos de nosotros hemos sido testigos y/o hemos escuchado historias sobre personas sorprendentes que se han sobrepuesto a las adversidades para convertirse en un ejemplo de vida para los demás. Seres humanos, como cualquiera de nosotros, para quienes el hacer frente a un obstáculo de cualquier índole se convierte, más que en un freno a su vida, en un reto a superar; en un desafío personal para demostrar que el único límite para alcanzar nuestros objetivos está en nuestra mente y que, si así nos lo proponemos, somos capaces de vencer todo infortunio que se nos presente en la vida, sin importar que tan pequeño o grande sea este.
En este mes de abril, en el que celebramos a todos los niños, te presentamos una de estas sorprendentes historias de superación; una historia en el que el protagonista es un joven de tan solo 17 años, pero que desde los seis, ha luchado día a día para alcanzar su sueño dentro
del básquetbol y que pese a presentar una enorme limitación física, con la que prácticamente sería imposible desarrollar un buen nivel competitivo en la práctica del deporte ráfaga, este chico nos demuestra que lo “imposible” no existe y que, de así proponérnoslo, podremos alcanzar nuestras metas.
El protagonista de nuestra historia es originario de Quisqueya, República Dominicana, ahí, llevaba una infancia como cualquier otra, pero una tarde de juego con sus amigos, paso en un instante, a cambiarle la vida. Esa día, en una de las calles del barrio La Fruta, Sector Las Minas, Hansel disfrutaba, como cualquier niño de su edad, de un momento de diversión con sus amigos, lamentablemente una barda en mal estado dió de sí y se derrumbó sobre el cuerpo de Hansel, propiciando varias heridas y, más aún, como consecuencia de las lesiones sufridas, los músculos y tendones de su brazo izquierdo resultaron gravemente dañados, por lo que no quedó más opción que amputarle la extremidad.
Un shock extremadamente difícil de digerir y asimilar tanto para el pequeño Hansel como para la familia, pues a tan corta edad, la mente no comprende lo sucedido y es entonces que, como padre, poder responder las preguntas que tu pequeño hijo te hace sobre su situación resulta sumamente complicado, así lo relata a la cadena Telemundo 31 Hansel ‘Kimika’ Donato.
“El me preguntaba: ¿Papi, cuándo me va a crecer el brazo; cuándo me van a poner mi brazo; por qué ellos tienen dos brazos y yo uno?”.
El derrumbe de un muro que, para muchos, significaría en paralelo el derrumbe de sus aspiraciones y sueños; no lo fue para Hansel. Como lo mencionamos al principio de estas líneas... los límites están en la mente, y este infortunado episodio fue, para Hansel Emmanuel Donato Domínguez, tan sólo la forma de tomar una ruta diferente para continuar el camino hacia sus metas y sueños.
“Me lamenté mucho cuando eso (accidente), pero Dios me dio la fuerza, la mentalidad para salir adelante (...) La pérdida de mi brazo no es un obstáculo en el basquebol” expresó el ahora joven, también conocido como ‘Kimikita’ (por el sobrenombre de su papá) en una entrevista a la cadena televisiva de su natal
República Dominicana: Color Visión.
Palabras que ha sostenido con hechos y sabiendo de otros ejemplos de jugadores que le anteceden en la práctica del basquebol teniendo un sólo brazo: Ben Pimlott, chico de origen chino que nació sin una extremidad y participó, en 2018 en el equipo de la Universidad de Cambridge; Zach Hodskins quién se hizo famoso por ser el primero en jugar en la NCAA División-I [con Florida Gators | 20142016] no obstante su limitación; o Robert Whitaker Jr. que logró llegar al baloncesto profesional con los Sioux City Hornets.
En el caso particular de Hansel, sus declaraciones toman mayor significado e importancia cuando el baloncesto es el deporte con el que convivió desde pequeño, actividad que, a pesar de su discapacidad, quiso practicar –tras el accidente– para seguir los pasos de su padre ‘Kimika’ Donato, jugador profesional y ex seleccionado nacional de la República Dominicana.
Fue precisamente su padre quién lo apoyo en esta decisión y guío sus primeros pasos a través del deporte ráfaga, exigiéndole más que si fuera un niño normal, entrenándole más que a cualquier otro para mejorar sus habilidades, y motivándolo más –cada día– para que logre alcanzar sus objetivos
“Con ese solo brazo tu vas a ser el mejor; con ese solo brazo tu vas a hacer todo lo que quieras hacer” tan solo el ejemplo de las frases motivacionales de ‘Kimika’ a ‘Kimikita’.
Así, con la guía de su padre en el deporte, y el apoyo de su madre y abuela para seguir adelante hacia su objetivo, transcurrió la infancia de este chico; pero el destino le tenía reservado un reto más. A los 12 años, ‘Kimikita’ tuvo que sufrir la separación de su madre, quién emigró a los Estados Unidos por cuestiones de trabajo, el adolescente quedaba entonces al cuidado y cobijo de su abuela, situación que no le hizo desfallecer y, por el contrario, fue un impulso más para seguir en el camino trazado.
Después de poco más de 10 años de esfuerzo, de duro entrenamiento, de sacrificios y
retos superados, las recompensas comienzan a llegar. En enero de este 2021, la Christian Academy de Kissimmee, Florida ofreció una beca deportiva para que Hansel Emmanuel se incorpore al equipo de baloncesto a la par de continuar con sus estudios y rápidamente ha demostrado el porqué está ahí: 25.9 puntos, 6.9 asistencias, 11 rebotes, 2.6 robos y 3.4 bloqueos son sus promedios en la temporada desde que se incorporó con los Lions de Christian Academy.
Esta recompensa deportiva y académica llegó con premio extra, pues después de cinco años de estar separados, Hansel y su madre pudieron reunirse nuevamente; ahora el joven de 1.93 de estatura tiene motivos extra para seguir desarrollando sus extraordinarias habilidades en el básquet y seguir soñando en grande.
Ferviente seguidor de la NBA, ‘Kimikita’ ha sumado entre sus ídolos y ejemplos a seguir (su padre obviamente está a la cabeza de este listado) a LeBron James y Kevin Durant; tercia de jugadores que son su inspiración para cumplir su más grande sueño: hacer historia al jugar en la mejor liga del mundo...la NBA; otra proeza que pareciera imposible de realizar, pero hemos corroborado que para este chico esa palabra no existe.
Hansel Emmanuel se gradúa de High School en 2022, sabe bien que el camino es muy largo aún, que el proceso es día a día (y a veces más difícil de lo que parece); sabe que paso a paso es la manera correcta de avanzar en la ruta trazada y, sobretodo, sabe muy bien que no hay límite para volar.
“La discapacidad no es nada, le pasa a cualquiera. Hay que seguir adelante y nunca rendirse, nunca mirar atrás”, afirma DIMX Kimikita.