7 minute read
La ruta hacia la bodichita
nuestra mente, y más fácil y rápido nos resulta completar la tarea de acumular méritos.
Nos damos cuenta de que esta es una práctica increíblemente preciosa cuando pensamos en sus beneficios, que son infinitos como el cielo, tan extensos que nunca acabaríamos de explicarlos, y nos conducen a lo largo de todo el camino hasta la iluminación, permitiéndonos adquirir las infinitas cualidades de los sagrados cuerpo, palabra y mente de un buda. Entonces, incluso después de eso, seguimos beneficiando a todos los seres de manera que los resultados de esos momentos de compasión no se agotan jamás.
Incluso antes de actualizar la bodichita y convertirnos en un bodisatva, al no trabajar ya solo para nosotros mismos, dejamos de dañar a los demás y, por el contrario, les proporcionamos solo beneficio. Con esto, nuestra vida da un giro completo. Desde tiempos sin principio hemos estado buscando incansablemente solo nuestro propio bienestar, solo la felicidad para nosotros mismos. Ahora, con el desarrollo de la compasión y el amor incondicional, empezamos a trabajar para los demás hasta alcanzar ese estadio en el que nuestro propio bienestar ya no nos preocupa, pues cada uno de nuestros pensamientos es puramente para el bien de todos los seres. Aunque cabe la posibilidad de volver a caer en nuestro interés personal cuando el logro de la bodichita es reciente, ese riesgo disminuye a medida que avanzamos en el camino, hasta el momento en que ya nos resulta imposible actuar de un modo egoísta. Nuestra ruta hacia la iluminación completa es segura. He aquí la grandeza de la bodichita.
LA RUTA HACIA LA BODICHITA
Primero debemos entender lo importante que es desarrollar la bodichita y, luego, necesitamos conocer las técnicas para desarrollarla. Esto es lo que aquí vamos a explorar.
Cuando comprendemos que la mente egoísta que persigue el placer samsárico es una mente insatisfecha, podemos comenzar a
renunciar a ella trabajando por la felicidad de las vidas futuras y renunciando a la totalidad del samsara. Esto implica comprender los diversos temas del lamrim,o camino gradual a la iluminación, como el renacimiento humano perfecto, la muerte y la transitoriedad, el karma y los distintos sufrimientos del samsara. Todos ellos forman parte del proceso de maduración de nuestra mente y la preparan para el desarrollo de la bodichita.
Para la bodichita, necesitamos comprender que todos los demás seres errantes también están sufriendo en el samsara y que es responsabilidad nuestra ayudarlos. Pero no podemos hacerlo mientras sigamos a la mente egoísta. Solo renunciando a una vida egoísta podremos reconocer que toda felicidad proviene de los demás, que todo lo que aporta felicidad a nuestra vida proviene de la bondad de otros seres.
Que una acción sea virtuosa o no lo sea depende de nuestra motivación, de que sea producto de una mente egoísta o de una desinteresada. Aparte de cualquiera de las diez no-virtudes,8 incluso los actos simples como comer, caminar, dormir o tomar café pueden ser no-virtuosos si nuestra motivación es egoísta, aferrándonos a la felicidad de esta vida. Si este es el caso, cuantas más tazas de café bebamos más serán las no-virtudes que creemos; y cuanto más grande sea nuestra taza, mayor será el karma negativo que acumulemos. Necesitamos comprender lo importante que es la motivación correcta para cada una de nuestras acciones, y la mejor motivación es la de la bodichita, el deseo de alcanzar la iluminación por el bien de todos los seres. Esta emerge al ver el sufrimiento de todos los seres errantes y desarrollar en un primer momento la compasión y, posteriormente, la gran compasión por todos ellos, incluso por aquellos que nos dañan.
No hay otra manera de hacerlo. Para guiar perfectamente, sin el mínimo error, a todos los seres errantes hacia una felicidad incomparable, necesitamos conocer todos los niveles de mente y los métodos que mejor se adaptan a cada uno de ellos, lo cual requiere tener una mente omnisciente, un poder perfecto y una compasión plenamente desarrollada.
El desarrollo de esta mente increíble proporciona numerosos beneficios para uno mismo y para los demás. Tradicionalmente se enumeran diez, que examinaremos más adelante, los cuales incluyen entrar en el mahayana y convertirse en un bodisatva, acumular un mérito extenso y purificar mucho karma negativo con cualquier acto que realicemos, y finalmente completar el camino y alcanzar la iluminación.
Luego, sobre la base de la ecuanimidad, nos adiestramos en uno de los dos métodos para el desarrollo de la bodichita o bien, en una combinación de ambos. El primero se refiere a los siete puntos de causa y efecto: (1) Vemos que todos los seres han sido nuestras madres en innumerables ocasiones, (2) recordamos lo bondadosas que fueron cuando eran nuestras madres, y (3) tomamos la determinación de corresponder a su bondad. A partir de ahí, desarrollamos (4) el amor incondicional, (5) la compasión, y luego (6) la actitud especial que asume la responsabilidad de liberarles del sufrimiento. Estas seis causas producen un único resultado: (7) la bodichita.
El segundo método es el de igualarse e intercambiarse con los demás, una técnica más avanzada en la que vemos que nosotros y todos los demás somos iguales. Entonces, recordando las desventajas de una mente egocéntrica y las ventajas de una mente centrada en los demás, nos intercambiamos con ellos. Evidentemente, esto no quiere decir que cambiemos físicamente nuestro cuerpo por el suyo, sino que intercambiamos nuestro interés egoísta por uno altruista, y hacemos cuanto sea necesario para guiarles desde el sufrimiento hasta la felicidad. Hacemos esto mediante una práctica maravillosa del adiestramiento mental, el tonglen —tomar y dar— en el que tomamos sobre nosotros el sufrimiento de los demás a fin de destruir la mente egoísta y les damos toda nuestra felicidad y todo nuestro mérito.
Esto requiere un gran esfuerzo y comprensión, y hay muchas meditaciones que podemos hacer y nos servirán de gran ayuda. Algunas de ellas, como las meditaciones sobre la ecuanimidad,
los siete puntos de causa y efecto y el tonglen, se incluyen aquí.
En La lámpara preciosa, Khunu Lama Rimpoché 9 dijo:
La suprema bodichita es el deseo de eliminar toda falta de cada ser sensible y hacer nacer en ellos inmensurables buenas cualidades. ¡Esto excede toda excelencia!10
En su libro se recogen muchos versos que nos dicen que, de todas las mentes, la bodichita es la mejor, la suprema. ¡Por supuesto que lo es! Es la mente que desea que todos los seres, sin excepción alguna, estén completamente libres de todo sufrimiento. ¿Qué mente puede haber más grande que esta?
Entre todos los pensamientos que podemos tener, el más maravilloso es el de la bodichita. ¿Por qué? Porque el beneficio que nos ofrece a nosotros y a todos los demás seres es increíble. Es el pensamiento de querer liberar a cada ser sensible de cada engaño, de cada sufrimiento. ¿Acaso puede existir algo superior a eso? En este sentido, Shantideva dijo:
Si aspirar a curar tan solo el dolor de cabeza de otros seres con una intención altruista genera méritos incalculables,
¿qué decir entonces del deseo de disipar el sufrimiento interminable de todos y cada uno de los seres y de dotarlos de cualidades ilimitadas?11
El deseo de liberar a una persona de un dolor de cabeza es una mente muy beneficiosa, así que el deseo de liberar a todos los seres de todos los dolores de cabeza es una mente de increíble virtud. No obstante,
si eso lo extendemos no solo a un tipo de problema temporal de los seres, sino a todos los posibles sufrimientos que todos ellos puedan experimentar, burdos y sutiles, físicos y mentales, entonces esa mente es inimaginable, increíble, suprema entre las supremas.
AGRADECIMIENTOS POR LA TRADUCCIÓN ESPAÑOLA
La editorial desea agradecer a la Asociación Complaciendo al Guru su iniciativa y esfuerzo en hacer posible la publicación de Bodichita, del lama Zopa Rimpoché, y muy en especial a las personas que, con su generosa aportación, han patrocinado la traducción de este libro: Anna Saura, Estrella Mampel, Gisela y Nick Dawson, Iago Carbonell y Marta Lorente, Marta Masferrer y Josep Mª Juhé, Juana Muñoz, Leire Etxeandía, Lionel Ciavaldini, María Gual, Matilde Pascau, Mercedes Echevarría, Mercedes Udaeta, y Rosa Pérez, así como a todos aquellos benefactores que han preferido permanecer en el anonimato. También agradecer, desde lo más profundo del corazón, a Amaia Zabala su desinteresado servicio de corrección.
Si tú también deseas unirte a este grupo de personas compasivas y altruistas, y contribuir a la publicación en nuestro idioma de otros libros del lama ZOPA RIMPOCHÉ, ponte por favor en contacto con la Asociación Complaciendo al Guru a través de Mercedes Pérez-Albert, mediante correo electrónico mercedessaturno@yahoo.es o llamando al número de teléfono móvil 627458989.
Por el mérito de haber contribuido a la propagación de las enseñanzas del Buda para el beneficio de todos los seres, que nuestros benefactores, sus familias y amigos tengan una vida larga y saludable, toda la felicidad temporal y última, y que todos sus deseos en el camino espiritual se vean inmediatamente satisfechos.
Ediciones Dharma C/ Elías Abad, 3 bajo (Apdo. 218) 03660 Novelda (Alicante) Whatsapp 609 632 932 // 96 560 32 00 www.edicionesdharma.com pedidos@edicionesdharma.com