Areíto
Zona de la Cultura y de las ideas
www.hoy.com.do Editor: Nelson Marrero Diseño: Carla González SÁBADO 28.01.2012
PERFIL
Socorro Castellanos cuenta en expresivo libro su relación con hija fallecida Pág. 3
El universo visual
de Fernando Tamburini ”Provocador” en sus “Caminos Azules”, la celebrada muestra que presenta en Altos de Chavón Página 7
Para buscar el propio origen
Todo lo escrito sobre el merengue
Debate sobre una antología
El genealogista Julio González orienta a los lectores interesados en establecer sus orígenes familiares sobre las formas de utilizar páginas web para un maravilloso viaje al pasado.
Fernando Casado, cantante, poeta e investigador, presenta una bibliografía de textos nacionales e internacionales para reafirmar que el merengue nació en la República Dominicana.
Diógenes Céspedes expone la segunda parte de su crítica a “La poesía del siglo XX en República Dominicana”, editada por Estafeta del Viento para la colección Visor de Poesía, de España.
Página 4
Página 4
Página 5
HOY
AREÍTO
Sábado 28 de enero de 2012
Zona Areíto Areito
2
Mu Kien Adriana Sang (historiadora y escritora) Tenemos una cita el 4 de febrero. Vuelvo a Areíto con los “Encuentros”. Para analizar y dialogar , para llorar, reir y reflexionar sobre los temas que acongojan nuestras almas. LA GUIA
CIELO NARANJA
Marivell Contreras
POR MIGUEL D. MENA
LIBROS
Libros y cementerios: los paseos posibles
“
Anticuarios”, “libros de viejo”, “librería de libros usados”, da lo mismo: entre ellos y los cementerios hay un orden que conduce a los saltos. En el cementerio de Montmartre, Heinrich Heine cerca de François Truffaut; en el de la Ave. Independencia, Jacques Viau en la misma acera que Vigil Díaz. Escribo “saltos” porque cada nombre abre puertas. Pienso en esas maneras que tuvo Heine de rodar por Francia y Bélgica, mientras su pluma era un escalpelo que le sacaba la verdadera textura autoritaria al imperio germano. Con Truffaut el viejo Cine –o Teatro- Capitolio abre sus puertas frente al Parque Colón, para que aquella cajera-portera y rubia mítica haga su entrada, con aquellos que sonaban tanto. De Viau, ¿cómo no volver a “Permanencia del llanto”. Aquél poeta –a quien definitivamente le deberíamos reconocer su nacionalidad dominicana- fue de los primeros en acercarnos a una noción de dolor del ser. Quienes lo habían intentado antes, como Franklin Mieses Burgos y Freddy Miller, entre otros, lo habían hecho desde cierto afuera, como si tuviese que ser reconocido por los otros antes que sentido por el sujeto escribiente. Aquel poemario, escrito cuando apenas rozaba los 22 años, todavía espera sus lectores. Quienes en los Sesenta se acercaron a esos versos, tal vez estaban muy rodeados de pólvoras y trincheras para darse cuenta de que ahí se trataba de una teoría del sujeto y no sencillamente de su “ser social”. Otro tanto se podía acotar sobre Vigil Díaz, los ojos insulares con que llegaba al Nueva York y luego al París previo a la Primera Guerra. “Góndola” (1912) fue un poemario que nos conectaba con el mundo del Art Noveau. Barroco en sus nomenclaturas, removiendo las cajas de las herramien-
tas conceptuales, Vigil Díaz se convertiría en el primer autor decididamente vanguardista de la literatura dominicana. A las comparaciones entre librerías y cementerios bien que podrían seguir muchas otras, como la que hacía Walter Benjamin en “Dirección única” entre prostitutas y libros. Al final la idea es la misma: los encantos de la amalgama, de las sorpresas, el tirarse contrario a las corrientes y dejarse sorprender por los encantos de algo que aunque no esté consciente, es un andamio de nuestra realidad: la yuxtaposición. Es como si los autores, las palabras y las definiciones que entendíamos lógicas y suficientes como para sustentar edificios, un día se nos revelen como simples puntos de una ruta a seguir. Los procesos de centralización conllevan consigo imposición de gustos que son al mismo tiempo maneras de utilizar nuestro tiempo libre. Siempre habrá autores y temas cayendo de la mesa, mientras la masa esperará, como jauría hambrienta, los últimos trozos. En las “librerías de segunda mano” y en los cementerios hay respuestas: los libros que le sobran a la ciudad, la habitación última de sus habitantes. Leer es también pasear. Enfrentarse a destartalados manuales procesales con alguna edición de Baudelaire tiene sus encantos. Buscar la tumba de Abelardo Rodríguez Urdaneta –que nunca encontrarás- será muestra de que tienes al “Uno de tantos” y al “Caonabo” en alguna parte de tus viejas emociones. Pulirle nuestras nociones de viaje: de eso se trata. cielourbano@googlemail.com
Lo mejor del periodismo de América Latina (2 tomos) Bajo el lema de “No basta con ser el mejor, sino que se sepa" de Gabriel García Márquez se publica este libro antológico con los trabajos más importantes que los mejores periodistas de Latinoamérica presentaron en la segunda y tercera convocatoria del afamado Premio Nuevo Periodismo CEMEX. Los incluidos, fueron elegidos por el jurado del premio y el afamado escritor argentino Tomás Eloy Martínez (QEP) , editor del mismo. “Esta Antología de gran periodismo puede ser leída como un panorama de las sociedades latinoamericanas, como un referente para los profesionales en ejercicio o como fuente de inspiración para nuevos periodistas. Libería Mateca, RD$3,200.00.
Caballo de Troya 9 Del afamado escritor Juan José Benítez (Pamplona, 7 de septiembre de 1946), mejor conocido como JJ Benítez, es un escritor que lleva más de 50 novelas publicadas. Especialista en ufología o seres de otros planetas, conocimiento que ha puesto al servicio de la saga Caballo de Troya, que con este libro llega al final de la Saga. Casi 30 años trabajando la vida
de Jesús desde el punto de vista de lo que “no nos han contado las religiones”. Usando los libros canónicos y a dos investigadores que ficticiamente se trasladan hasta la época de la vida de Jesús. Temas que han dado vida a este libro. Al leerlo cualquiera puede llegar a la conclusión de que “todo lo contado sobre Jesús de Nazaret conviene ponerlo en duda”. Benítez ha dicho que está cerrando la saga con la intención de que se mantenga la magia de la historia e incluso comparte unas páginas secretas que solo deben ser abiertas y leídas al final de la obra. Esta trama empieza por casualidad en México y termina en México “yo no me he propuesto nada, se ha cuadrado así”. Los caballos en el 9 tienen sus mensajes subterráneos enmarcados en los números, por lo que el autor recomienda leerlo con mucha atención. Librería Cuesta RD$1,500.00. _v _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
Vivo o muerto Del afamado escritor estadounidense Tom Clancy, quien publicó su primer libro en el 1984, “La caza del octubre rojo”, fue el título de esta novela que dio inicio a una exitosa serie de tecnothríllers que lleva millones de copias vendidas en el mundo. En 1994, publicó Deuda de honor, cuya historia coincidió con lo que pasó 7 años después en el el 11-S “al contar cómo un 747 se estrellaba contra el Capitolio”. “Y ahora, con Vivo o muerto, acompañado por el ex militar Grant Blackwood, ha roto un largo silencio para revelarnos la actualidad de las dos esferas en las que es un experto: el terrorismo y las agencias secretas que contra él se enfrentan”. Este libro cuentra como “Clancy se adentra en trabas burocráticas y presupuestarias, la CIA no puede ya responder con garantías a la amenaza del terrorismo internacional”. Ahí aparece Campus, una organización creada por el ex presidente Jack Ryan que ampara que no tenga que dar cuentas a nadie. Librería Cuesta, RD$1,500.00
LA HISTORIA
1960
PERSECUCIÓN TRUJILLISTA. La dictadura de Trujillo recrudece la persecución a desafectos, mientras en la sociedad crece el malestar por la crueldad del régimen que fusiló a decenas de expedicionarios que llegaron desde Cuba en 1959. Mete a prisión a cientos de jóvenes de todo el país. _ orifices telephoned very spe edy mats, five sheep almost drun towed botulism silly trailers orifices tele phoned very speedy mats.
1802
(DÍA 29) LECLERC. Llega a Samaná una escuadra enviada por Napoleón a combatir sedición contra Francia.
1856
NACIMIENTO. Nace en Moca Leonte Vásquez Lajara, diplomático y político que combatió con celo patriótico la Convención Domínico Americana que en 1907 afectó la soberanía.
_
1922
(DÍA 30) CONTRA LA PRENSA. Las tropas norteamericanas de ocupación ordenan en Santiago el cierre del diario La Información que el día anterior había recogido en sus páginas un documento contrario a la ocupación militar. El hecho a su vez originó protestas de sectores de la ciudad de los 30 caballeros. Se vieron obligados a reabrirlo.
1905
(DÍA 31) SENSIBLE PÉRDIDA. Muere el compositor José Reyes, autor de la música del Himno Nacional dominicano.
_
1960
HISTÓRICA PASTORAL. La represión incrementada por el absolutismo de Trujillo provoca la reacción de la Iglesia Católica que emitió una carta pastoral que fue leída en todos los templos formulando críticas a la dictadura.
AREÍTO
Sábado 28 de enero de 2012
HOY RAFAEL SEGURA
‘‘
Perfil
Mi vida está regida por Dios”
Dos de sus libros
Con su hijo Willy.
Debut en sociedad de Santiago.
Socorro Castellanos: sentidos de la vida
ÁNGELA PEÑA
F
ueron 44 años de intenso peregrinar por otras tierras en busca de diagnósticos, tratamientos, de recorrer escuelas del país y visitar consultorios de psicólogos, psiquiatras, maestros especiales. Después sobrevino el cáncer de esta hija que tuvo limitaciones desde su nacimiento y estuvo a su lado “y lo estaría siempre”. Como terapia por la partida de esta niña con la que le tocó andar sola y tras recuperarse de una isquemia que la dejó hemipléjica de la parte derecha de su cuerpo, con un pie y un brazo rotos, Socorro Castellanos escribió la historia de ese amor entrañable, único, que fue calvario y dolor por la actitud cruel del prójimo que hacía sentir rara a Johanna. “Johanna, mi hija” reconoce a médicos sensibles, capaces, y desnuda a insensibles e ineptos. Revela el alto costo económico que representa padecer cáncer y la frialdad e indiferencia de algunos especialistas que lo tratan. Narra la impotencia ante el sufrimiento del ser querido. Es un libro desgarrador, humano, escrito con la valentía de una madre luchando con la muerte que, por suerte, encontró samaritanos cuyos nombres, gestos, apellidos, se ofrecen en la obra. Al conocer la corta pero traumática existencia de Johanna el lector se preguntará cómo podía presentarse tan fresca ante las cámaras, tan cálida en la radio, flamante, serena, inmutable en sus maestrías de ceremonia, sabia y profunda en sus libros y suplementos culturales esta abnegada mujer que a veces desempeñó hasta cinco trabajos simultáneos. “Johanna fue una contención, aprendí a no querer cambiar la realidad, aceptarla con alegría. Nunca lamenté dejar de ir a sitios. Johanna, tan buena, me decía: mami, vete. Hoy siento no haberle dado más, más tiempo, entenderla mejor. Ella fue una bendición, no sabes la falta que me hace, era mi compañera, no he dejado de ir un solo domingo al cementerio, a veces voy hasta dos veces”, cuenta con ojos humedecidos por las lágrimas. Johanna murió hace dos años.
Socorro es ahora ministro consejera de la embajada dominicana en Cuba. Vino al país a fin de año, puso en circulación el impresionante ejemplar, pinta con su mano izquierda, prepara otro volumen, “El sabor de mi tierra”, que se agregará a “Con los cinco sentidos” y regresa a La Habana con un fardo de proyectos para promover el país y hermanar más a las dos patrias. Aún anda con bastón, pero está lúcida y reconfortada con el poder de haberse bautizado y reconocido a Dios como su Señor y Salvador en la iglesia “Más que vencedores”. El encuentro con ella es cátedra de virtudes, fortaleza, conocimientos, reciedumbre, ternura. Nació en Santiago de los Caballeros hija de Miguel Castellanos, recordado ejecutivo de “La Tabacalera”, y Ana Tavares, activa a sus 95 años. Es sobrina-nieta del combativo padre Castellanos quien en cada triunfo contra el opresor llegaba a la casa de los abuelos de Socorro cantando “La Bayamesa”. Estudió en el colegio Sagrado Corazón de Jesús del que recuerda monjas, la guagua y los cuentos que escribía y vendía. A los 16 años fue “Miss Piscina” del exclusivo Gurabito Country Club y por su hermosura y simpatía cautivó el corazón de Ramón Pumarol con quien casó tres años después. Fue el padre de Johanna, Willy y Jimmy. Castellanos tuvo otros dos matrimonios.
“Tiempo de privilegio”. Supo imponerse cuando la política, en la comunicación, era monopolio de los hombres, y enfrentó mujeres que se erigieron en sus adversarias. Cuando le ofrecieron “Hoy mismo” lo rechazó porque estaba “presa del nombre de mi programa, Buenas tardes a la orden” y querían cambiar la identificación. “¿Por qué tenía que ser empleada de un grupo de hombres si yo tenía mi propio espacio?”, cuestiona. Está en televisión desde los 60 cuando sustituyó a Monina Solá y acompañó a Annie Helú en esa producción, entonces de unos argentinos que lo parafraseaban con otro de allá llamado “Buenos días, muchas gracias”.
En El jardín de Tintinola, Bobalín y don Chispín; A buen tiempo, El show del mediodía, De noche, Punto final, Alta cocina, Entrega especial, En otra onda, Socorro Castellanos, Con los cinco sentidos, revista Eva, El Nacional, Hoy, están sus huellas. Presidentes como Héctor García Godoy y Salvador Jorge Blanco, primeras damas como Matilde Pastoriza de García Godoy y Margarita Cedeño de Fernández, políticos como Hatuey De Camps han intervenido, para bien o para mal, en su carrera. Trabaja en el ministerio de Cultura, en la Superintendencia de Pensiones y mantiene su programa “Con los cinco sentidos” en “Cadena de Noticias”. El 24 de diciembre de 2008, poniendo las lucecitas navideñas junto a Johanna, quedó inmóvil, sin habla... Estuvo en silla de ruedas después de 16 días en Cuidados Intensivos. Tras nueve meses de terapia su instructor la animó a volver y ella se demostró que “es necesario enfrentar las adversidades y vencerlas”, aunque piensa que quien la ha ayudado es Dios y que vive “un tiempo de privilegio”. Tiene la convicción de que “la enfermedad final, la muerte de mi hija, fueron para algo muy bueno, estoy en Cuba, eso me da mucha ilusión”. No alberga rencores pero lamenta “que existan personas que puedan morder la mano que les da de comer”. Piensa que “lo más terrible en la vida es la traición, te enferma físicamente pero a la vez te libera, te da fuerzas cuando conoces esa traición”. Se declara ecuménica, no peleada con ninguna religión, confiesa estar “con Dios, mi vida está regida por Él” y cuenta entre sus satisfacciones “haber conocido las luces de un muchacho que trabajó conmigo en Entrega Especial: Leonel Fernández”. Afirma que nunca ha sido sectaria y disfruta el contacto cotidiano con la gente a través de la radio. “Todos los días pontifico, eso es lo mío, soy comunicadora”.
3
AREÍTO
Sábado 28 de enero de 2012
CÁPSULAS GENEALÓGICAS www.idg.org.do/Julio González
Genealogía y computadora Como en todas las actividades de la vida hoy en día, las computadoras resultan una valiosa herramienta para el manejo de la información. La genealogía no es la excepción. El cotejo de nombres, fechas, notas, fotos, documentos, lugares y relaciones familiares se hacen extremadamente fáciles con una serie de programas especializados que se han desarrollado para tales fines. El resultado son una gama de reportes y cuadros que se pueden generar, que hacen más entendibles los árboles genealógicos de una familia. Algunos de los programas de genealogía disponibles hoy en día, son los siguientes:
Aporte
HOY
FERNANDO CASADO
4
Personal ancentral file. También conocido como PAF, es un programa diseñado y distribuido por Family Search, portal operado por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Es gratuito y ha sido traducido a muchos idiomas, incluyendo el español. Opera básicamente con archivos en GEDCOM, lo que lo hace compatible con otros programas comerciales.
Family Tree 1.5 Programa de genealogía diseñado por Igo Leikakh, muy sencillo y sin complicaciones, con los datos justos y necesarios para no abrumar al usuario. Podrás con él construir tu árbol familiar. Se puede bajar en español y es totalmente gratuito.
Family Tree Builder. Programa diseñado y distribuido por My Heritage. Te permite construir tu propio árbol genealógico de forma práctica y fácil. Además, puedes agregar fotografías y documentos, resultando el diseño muy agradable a la vista. Igualmente puedes publicar tu información en la web sin tener que ser un experto en esto. El nivel básico es gratis. Sin embargo, para desbloquear sus características que lo convierten en “Primium” debe pagarse una cierta cantidad de dinero.
Agelong Tree. Sencillo pero potente programa que te permite organizar toda tu información genealógica y compartirla con los demás. Además de poderle incluir fotos, videos y grabaciones. La versión de prueba sólo acepta 40 personas. A partir de ahí, se paga de acuerdo al nivel que se quiera adquirir.
Family Tree Pilot. Este programa es muy sencillo y simple. Es totalmente gratuito y funciona perfectamente con las diversas versiones de Windows.
GedDmill. Software fácil de utilizar que ayuda a crear tu sitio en la web con toda la información que quieras acerca de tu familia. No necesitarás tener conocimiento de diseño de página web.
Deudos. Este es un potente programa de creación de árboles genealógicos con el que podrás llevar un recuento total de todo tu legado familiar, de una forma simple, rápida y elegante. Family tree maker . Quizás el más popular de los programas de genealogía en República Dominicana. Su licencia es vendida a un precio muy razonable. Cada año sale una nueva actualización. Si se compra todos los años se obtiene un descuento. Con este programa surgió un caso inexplicable. Hasta el 2006 era posiblemente uno de los mejores y el más completo programa en el mercado. A partir de 2007 se cambió totalmente la apariencia y el mismo fue degradado considerablemente en relación a su versión anterior. En los años siguientes, incluyendo la versión 2011, se ha mantenido el bajo nivel de eficiencia lo que ha producido que muchos genealogistas nos hayamos quedado con la versión 2006. Otros programas también disponibles son: Gedlink Editor, Family Builder full, GreatFamily, Family Tree Legends, GenPro, RootsMagic, Ages, RapidGen y First Name Almanac. Osea que la oferta para usar la tecnología en genealogía es muy amplia y variada. Instituto Dominicano de Genealogía
Derechos de la niñez Indice El Observatorio de los Derechos (Odna) presentará el “Índice de cumplimiento de los Derechos de la Niñez y Adolescencia en la R.D.”, en un acto en la Biblioteca de la Universidad Católica Santo Domingo, el 8 de febrero, a las 7 pm.
El merengue en la isla
“
I have travelled everywhere in your sea of the Caribbean… from Haiti to Barbados, to Martinique and Guadalupe, and I know what I am speaking about: (“He viajado dondequiera en vuestro mar Caribe… desde Haiti hasta Barbados, a Martinica y Guadalupe, y yo se de lo que estoy hablando”). You are all together, in the same boat, sailing on the same uncertain sea… Citizenship and race unimportant, feeble little labels compared to the message that my spirit brings to me: that of the position and predicament which History has imposed upon you… I saw it first with the dance… the merengue in Haiti: (“el merengue en Haiti”)… the beguine in Martinique and today I hear, de mon oreille morte, the echo of calypsos from Trinidad, Jamaica, St. Lucia, Antigua, Dominica and the legendary Guiana… Aplicando principios elementales de lógica racional al contexto de las primeras frases del párrafo de Labat, se evidencia que: “from Haiti to Barbados, etc.”, es referencia al nombre de las islas que éste habría visitado y no a nación o pueblo alguno. Dicho párrafo, que inscribe la categórica frase: “THE MERENGUE IN HAITI”, aparece citado en 17 obras y publicaciones importantes. Aunque idealizando su innegable valor intrínseco, coherente con un discurso pan-insular afro-caribeño, lucen desinteresados en puntualizar que en aquel contexto crono-histórico, solo estaría refiriéndose al legendario nombre aborigen: (“Process of unity in caribbean ideologgies and literature”, Ileana Rodríguez, Mark Zimmerman (P. 106). “The caribbean, the genesis of fragmented nationaism”, Franklin W. Knight (p. 307). “No island is an island: selected speeches of sir Shridath Ramphal”, S. S. Ramphal, David Davydeen, John Gilmore (P. 7 y 16). “Race, etnicity and class: forgin the plurar society in latin”, Franklin W. Knight (P. 35) “Main currents in caribbean thourght: the historical evolution of...”, Gordon K. Lewis (P. 93). “The Growth of the modern west indies”, Gordon K. Lewis (P. 35) “The Repeating island: the caribbean ande de postmoderna perspective”, Antonio Benítez Rojo, James E. Maraniss (P. 35). “The caribbean revolution”, Cheddi Jagan (P. 87). “One world to share: selected speeches of the commowealth”, S. S. Ramphal (P. 342). “Insperabale humanity: An anthology of reflections of shridath ramphal”,, S. S. Ramphal, Ron Sanders (P. 85) “Readings on federalism”, A. B. Akimyemi, P. Dele Cole (P. XIX). “Dominica”, Basil E. Cracknell “Tierra firme”, Volumen 12 (P. 188) “Cuadernos hispanoamericanos”, Instituto de Cultura Hispánica (España). Volúmenes 451-453 (P.219) “Casa de las Américas”, Números 118-120 (P.70) “Escandalar”, Procedencia del Original: Universidad de Texas. Volumen V (P. 90). “French Politics, culture and society”, Volumen 22 (P. 32) Gordon K. Lewis, quien inserta en su obra “Main Currents in Caribbean Thought” el categórico párrafo de Labat, enfoca procesos integradores e incisiones de carácter popular, que marcaron perdurables argumentos culturales, cuyo reflejo tuvo notoria acentuación en el canto ritualista en Antillas de espesa carga africana: “Muchos de los temas eran familiares o domésticos, como el Xango, canción de cuna que aparece, en diferentes versiones, en Brasil, Cuba, y las Antillas de habla inglesa. Otros son comentarios críticos o humorísticos sobre eventos comunes, el más conocido sobreviviente de este género es, por supuesto, el popular género de música del Calipso de Trinidad”. La mención: “Calipso”, tiene fundamentación en el párrafo de marras. Labat inscribe “Merengue” conjuntamente con “Calipso” y “Beguine”, como géneros históricos ancianos. La única razón para que este autor excluya entre los “géneros sobrevivientes” nuestro ritmo, es porque el “Merengue” ca-
rece de argumentos sólidos para categorizarle africanías, como en los mencionados, cuyos ancestros parten de corrientes colonizadoras esclavistas (Ingles, holandés, portugués, Francés, etc.), que es, esto último, a lo que responde, fundamentalmente, la razón de ser de la obra de Lewis. En los seis primeros volúmenes publicados por Labat, la palabra “Ayti”, aparece mencionada una única vez. Dicha mención confirma el sentido de su correcta interpretación. Sus conocimientos enterados de elemental documentación histórica, ratifican el único significado específico que el rigor de la Historia permitiría aplicar en aquella época (1694-1705)”: el nombre legendario con que nuestros aborígenes habían bautizado la isla: “1700… Elle fur découverte par Chriftphle Colomb dans fon premier voïage en 1492. fes anciens Habitans la nommoient Ayti. Colomb la nomma d`abord Hifpaniola, c`eft-à-dire, la petite Efpagne;…” (“La misma fue descubierta por Cristóbal Colón en su primer viaje en 1492. LOS ANTIGUOS HABITANTES LE NOMINARON HAITI. Colón más tarde la nombró La Española, es decir, pequeña España”). (Vol. II, p.199). Sus palabras son epitafio irrefutable sobre cual “AYTI” estaría en su psiquis, cuando, cual Diógenes, iluminara la enramada crepitante del “Merengue”. En la página 198, antecedente al documento referido, Labat incluye un elocuente mapa. Sus descripciones geográficas confirman los nombres históricos que denominaban oficialmente la isla: “ISLE DE ST. DOMINGUE OU LA ESPAGNOLE”. Esta invaluable prueba documental, aparentemente desconocida por la Historiografía Dominicana, no aparece incluida en el enciclopédico tomo “Mapas y Planos de Santo Domingo”, editado en 1979 por Rodríguez Demorizi. Es concluyente y lapidario, que, precisamente en éste mapa, concebido por Labat, NADA aparezca denominando: “Haiti”. Los “CITOYENES” nombraron su nación: “Haiti”, pero… hasta el segundo antes de firmar esa “calificación” en 1804… o si la independencia haitiana hubiese fracasado y no existiese el calificativo… ¿A cuál “Ayti” habría estado refiriéndose Labat en lo escrito… desde más de un enorme siglo atrás? La trascendental identificación del Merengue con la isla, confirma una avanzada profundidad cultural. Enraizada expresión tradicional, el eco del canto rebotando entre lomas y caminos, descarta insinuaciones exageradas de insostenibles africanías; el dato armoniza las raíces lógicas del Merengue a la riqueza creativa innegable del ser criollo y a nuestra conformación colonizadora básica, sin desbordes culturales primitivos, como sí ocurrió en el resto de las Antillas, donde la esclavitud y sus prejuicios de raza, desaforada por el deshumanizado enriquecer europeo, dejo encadenadas sus culturas y sucia de injusticia el alma del hombre: amos y esclavos, blancos y negros, ricos y pobres. Esa es y será… nuestra diferencia. Azúcar de sabor amargo, tan amargo, que aun salpican los cadalsos lodosos cargando de amarguras las carretas y el hierro baboseante al hocico del buey… el latigazo despellejando el viento asustadizo… azuzando tambores y fantasmas al carbón… mordiendo el bagazo de la vida en el cañaveral de espinas y sudores y sangre… oscurecido el rostro del odio despreciando los cielos… transpirando la angustia encadenada de sentina fétida y un olor injusto de miseria eterna… inevitable… hasta que el sollozo del tren completa el funeral… no importa el tiempo muerto de sus ojos… las lágrimas tendrán todas el mismo color infame... y un mismo rincón de cieno… en el dolor.
Crítica
AREÍTO
Sábado 28 de enero de 2012
HOY
La antología poética de Mármol y Belliard
DIÓGENES CÉSPEDES
E
l primer pecado capital de la antología de Mármol y Belliard radica en que ellos mismos se incluyeron en su propia obra, es decir, que se convirtieron en juez y parte, en vez de esperar que fueran otros antólogos con crédito poético reconocido quienes les incluyeran y no los que por amistad, encargo, política y adhesión generacional les han incluido en antologías o estudios facilones, como se ha visto en ciertos libros nativos y extranjeros donde a simple lectura curricular se observa el favoritismo, los intercambios de viajes feriales o de otro tipo. ¿Por qué un antólogo se incluye en su propia obra? Por narcisismo e impudor del yo. Aparte de esta explicación, está la falta de modestia y una excesiva confianza en la propia valía literaria. Mármol y Belliard se incluyen debido a esta confianza, sin desmedro del narcisismo y el impudor. Pagados de sí dicen en el prólogo que los incluidos en su antología lo están por su capacidad “crítica e investigativa y, por supuesto, de la valoración que sustenta la jerarquía de autores o el canon poético.” (p. 7) Es verdad que José Castellanos, nuestro primer antólogo, no era poeta. Pero si lo hubiese sido, no se sabrá si se hubiese incluido en su propia obra, razón por la cual “La lira de Quisqueya” (1874) no es modelo de inclusión para Mármol y Belliard, libro que citan en el prólogo. Si no yerro, no habrá antologías poéticas hasta 1951, con la de Pedro René Contín Aybar, quien cultivó la poesía, pero no se incluyó en su obra. Luego vino la de Antonio Fernández Spencer en 1953, más limitada en sus alcances, pues eliminó a los malos poetas trujillistas que Contín Aybar había incluido profusamente. La de Fernández Spencer sí es un modelo de inclusión para Mármol y Belliard, ya que el “canon” reconoce al autor de “Diario del mundo” como gran poeta y crítico. Si él se incluyó en su propia antología, ¿por qué Mármol y Belliard habrían de excluirse si ellos también se autodefinen como grandes poetas, críticos o teóricos de la poesía? Ese es su razonamiento lógico, pero falso. Hasta antes y después de Contín Aybar lo que hubo fueron “historias literarias” destinadas a fines pedagógicos primero y, luego, a fines culturales. La de Abigaíl Mejía Solière de 1929 y 1939; la de Contín Aybar en 1951, experta en impresionismo; la de Estervina Matos en 1955, carente de criterio, incluye a María Martínez de Trujillo como teatrista; la de Max Henríquez Ureña, quien excluyó a los escritores vivos (publicada en 1965, pero inédita desde 1944); la de Balaguer, libro de texto desde 1956 hasta finales de 1960; la de Néstor Contín Aybar, de 1982-86, experta en amistades y pujos aristocráticos. No examino, para no abultar, las historias literarias que, luego de la exclusión de la de Balaguer del programa de bachillerato de la Secretaría de Educación, han sido escritas por profesores de literatura o escritores aficionados a la didáctica literaria (Santillana, Disesa, etc). Lo importante es analizar críticamente en estas antologías e historias literarias las entradas y salidas de autores y las nociones historicistas y las ideologías impresionistas con que están compuestas. El “canon” o norma establecida por las antologías e historias literarias del pasado es el peso muerto al cual se aferran Mármol y Belliard. Operan de la misma manera que sus antecesores y a veces peor, pues en punto a selección de los textos incluidos en su antología, no aparece el juicio crítico o valoración de cada poema, sino que lo que aparece, a veces, es una biografía escuetísima de cada autor seguida de la enumeración de los libros publicados. Es el juicio crítico o valoración lo que he buscado, en vano, para comprobar que los antólogos no han hecho lo que dijeron que iban a hacer: labor crítica e investigativa y valoración que sustenta la jerarquía de autores o el canon poético (prólogo, p. 7). El canon poético es la ideología irresponsable que deja en manos de los antólogos del pasado la valoración de los poetas elegidos por los antólogos del presente. Que se equivoquen los otros, parecen decir Mármol y Belliard, al imitar el modo de operar de Max Henríquez Ureña en el pasado. Los antólogos hacen caso omiso de las corrientes que propugnan por la eliminación del impudor en las investigaciones literarias
del presente: Que los antólogos no se incluyan en su antología; que se discuta el problema de la introducción del verso libre en el país; que se discuta si el creador del vedrinismo fue Zacarías Espinal y no Vigil Díaz; la que afirma que la ideología del autor no es tal vez la de la obra, lo que explicaría el valor literario de la mayoría de los poemas del libro “Poemas de una sola angustia”, del excluido Héctor Incháustegui Cabral; la que reafirma el valor literario de “Rosa de tierra” y “Norma”, su arte poético” del también excluido Rafael Américo Henríquez; la que reafirma el valor del poema “El fuego”, de Manuel Llanes; la que explica que el poema “Una mujer está sola”, de la excluida Aída Cartagena es superior a los de las poetisas incluidas en la antología de Mármol y Belliard; la que reafirma que el excluido Juan Sánchez Lamouth tiene en cada uno de sus libros, poemas caracterizados por su valor y crítica de las ideologías de época superiores a los de los jóvenes amigos incluidos en su antología por los antólogos; que la selección de José Enrique García, Cayo Claudio Espinal y Alexis Gómez revela, inconscientemente, la lucha entre la poesía artesanal y la poesía cuyos sentidos se orientan a la crítica de las ideologías del sistema social establecido y que la poesía artesanal, hecha en su mayoría de ripios y clichés, filosóficos o no, con su sentido neutro y su mímesis de lo cotidiano, deja las propuestas literarias y políticas como las encontraron los poetas de la artesanía estilístico-esteticista. Los poemas de las generaciones de los 80 hasta hoy cultivan la ironía como rebelión política, pero dejan intacto el sistema literario tal como se nos presenta (reconocimiento de la autoridad anterior, incluso la de un excluido como su maestro Víctor Villegas). Deja también intacto el sistema social, ya que los sentidos de los poemas de esos poetas de los 80 hasta hoy no opera una crítica radical del poder y sus instancias y tam-
poco realiza una crítica radical de la metafísica del signo y sus rituales religiosos, sagrados o divinos (lo cual sí hizo Manuel Rueda en “Las metamorfosis de Makandal” (1998). A esto llama la poética crítica radical del poder, sus instancias y las ideologías de época. Rueda figura en la antología. Al contrario de lo que hicieron poetas como Mieses Burgos, Del Cabral, Hernández Franco, Incháustegui Cabral, Gatón Arce, Aída Cartagena, Luis Alfredo Torres o Sánchez Lamouth en el ámbito de la crítica a las ideologías de la época de la dictadura totalitaria, los poetas del 80 hasta hoy, plétoricos de libertad y democracia representativa, aparecen en sus textos condonando el mundo ideológico de la publicidad, las devociones altagracianas y teístas. Algunos se permiten incluso el lujo de reproducir en sus textos las ideologías del pasado como la rebeldía romántica, el nihilismo decimonónico, el misticismo, el neobarroquismo y el impudor del yo en esta era del vacío y lo efímero (Lipovetsky y Vatimo) y de la cultura “light” a la cual se aferran algunos poetas e intelectuales en sus comparecencias por televisión o en las entrevistas que conceden a los periódicos en sus páginas sociales o de farándula en estos momentos de desorientación política del sentido vividos por los escritores como una crisis. En la próxima entrega examinaré el funcionamiento de lo político como acción semiótica de los poetas y escritores que son funcionarios públicos, lo cual les condiciona a dejar intacta su crítica al sistema social. Al ser la adhesión al gobierno un inhibidor de la crítica al Poder, sus instancias y las ideologías que reproducen y legitiman el orden social, el intelectual dominicano abandona su misión estratégica de crítico del poder y los poderosos, como lo señalan Octavio Paz, Vargas Llosa y Meschonnic. La claudicación le aleja cada día más de la dialéctica de la homogeneidad entre el decir-hacer y de la ética política del vivir-escribir.
5
AREÍTO
Sábado 28 de enero de 2012
Aporte
HOY
De “La Mujer de Agua”a“Lucía” WILSON MORFE
L
MELANIA EMETERIO RONDÓN
6
os nombres de las obras que encabezan el título precedente son de autores dominicanos, pero escritas en géneros literarios distintos. Al leerla se pueden observar similitudes en su modo de pensar y expresar la idea de lo femenino siguiendo modelos estereotipos. Es así como interpretamos la novela “Mujer de agua”, de Ramón Lacay Polanco, y el poema ”Lucia”, cuyo autor es Joaquín Balaguer. En estas joyas de la literatura dominicana los autores evidencian su don de afortunados maestros en el uso diestro de la palabra escrita y el empleo elegante de la misma. De su parte la novela de Lacay Polanco es una lectura que incita a leerla una y otra vez Todo el transcurrir de ella es el encuentro con un hermoso poema, por lo que viene al caso lo externado por Pedro Peix en su “Narrativa Yugulada”, al decir que Lacay Polanco transmite siempre a sus textos un poderoso flujo poético”. De ese flujo poético hablan estos pensamientos: “Yo la sentía distante, más que antes, huidiza por el color del sol que entibiaba su silencio. Ella, mujer de agua, sencilla y patricia para amar, había tenido aquella vez lentitud de cielo que agoniza, callada expresión de sombra que se fuga pero que deja en rincones y puertas pinceladas de recuerdos “. Y es desde esa belleza escritural y única que se estructura un discurso para delinear el perfil de una mujer imaginada, dibujada desde los parámetros de una mente atrapada en un idealismo que brota con una visión modélicamente estereotipada de lo femenino. El narrador describe lo que piensa y lo que percibe desde sus sentidos interiores recreando una figura femenina, sublime, inalcanzable e inefable llamada Mabel, la mujer de agua, nombre ideado, y al que se acomodaron todos los atributos corpóreos imaginados. Esa mujer era desconocida en principio, pero el recurso de la obsesión y la persistencia desde el pensamiento, la hizo aparecer colmada de las cualidades preconcebidas. Esta novela es una narración en primera persona. El protagonista es personaje testigo de todo lo acontecido desde el inicio hasta el final de lo narrado. Aquí el tono es siempre grave, marcando así todos los episodios de la novela que tiene un marcado carácter sicológico. Se trata de un amor idílico que no llegó a enraizarse en el plano afectivo. Es un amor matizado de imposibles, que conduce a la muerte en vida del protagonista -narrador, muerte que se renueva en cada regreso de Mabel, creando en él una parálisis afectiva y un nuevo extrañamiento. En la relación del título con el contenido “La mujer de agua” entraña una simbología que nace en su primera aparición una tarde de lluvia, y en su reaparecida en una triste noche de lluvia. La simbología se extiende en el sentido de mujer que encarna un amor que se disuelve en el tiempo y se escurre como agua en unas circunstancias que convierten la ilusión en nada. Véanse estos pensamientos: “Mabel surgía como una densa oleada de humo. Parecía una presentida expresión de llanto regresando. Rodó como una lágrima y se disolvió sobre la mejilla de la estatua marmórea”. La idealización que de la mujer se hace retrata el imaginario de un hombre perturbado, cargado de inseguridades y de misterio. Esa manera de concebir el modelo de feminidad se plasma en construcciones como estas: Mabel no debería ser mujer. Mejor: diálogo de novela o color de pinturas, serenidad de mármol sin contornos Mabel es tan femenina como el agua, sencilla como brisa, callada como rosa. Tiene formas modeladas en crepúsculos, palabras en sus manos que germinan plegarias. La adivino escapada de zonas de nieblas con campanarios y cenizas. Aquí se unen elementos culturales que moldean lo masculino y lo femenino colocando a este último como el sinónimo de lo frágil, voluble e inexacto, por eso, leyendo la novela vemos en Mabel desde su perfil sicológico a una mujer traumatizada, impedida de aclarar y de expresar sus sentimientos.
Una mujer semejante a Mabel la encontramos en el poema “Lucía”, bello referente de la poesía dominicana. Veamos: Tan lánguida tan leve/Y tan sublime/ cual de la luna/El tímido temblor/ Es su piel que parece/cuando oprime que no/ Tiene más peso que una flor/ En una flor debió de haber/ nacido y a veces se diría/Que su piel es un velo/ Translúcido tendido sobre/Su fino cuerpo de clavel/Y a través de su carne// Transparente como a través/ De un vaso de cristal/Se mira dilatarse la corriente/ De su sangre de púrpura ducal Lucía es un texto de extensión breve, en cuyos versos reina la armonía y la musicalidad desde el inicio hasta el final del poema, el cual también alude a una mujer tan idealizada y estereotipada como “La mujer de agua”. Son versos predominantemente de arte menor, bien depurados, con rima asonante y consonante. La descripción poética en Lucía está hecha de recursos como metáforas, símiles y adjetivos calificativos quedando esta moldeada por la fragilidad y la inconsistencia deducible de los adjetivos: leve, lánguida, sublime, tranparente, translúcido, así como de metáforas: Su piel es un velo translúcido, su fino cuerpo de cristal, su sangre de púrpura ducal. Estos recursos traen en su envoltura el elemento ideológico, a través de una percepción de lo que es la figura femenina idealizada a un alto grado de abstracción. Esa mujer es como un ser halado, etéreo, que solo puede concebirse en un punto fuera de la tierra. “Lucia” con su refinada belleza retrata a una mujer de cuerpo transparente y liviano pues “no tiene más peso que una flor”. Más allá de lo poético, estas son mujeres improbables en el espejo de la realidad concreta. Tanto “La Mujer de agua” de Lacay Polanco como la “Lucia” de Joaquín Balaguer, siempre han tenido espacio en el pensamiento poético desde donde se proyecta una humanidad angelical, sumisa, mujeres desdibujadas, con posibilidades ninguna de erigirse en sujeto de su propia historia y ejer-
ciendo su ciudadanía plena, o reprochando al mundo la falta de equidad. Pero sin que resulte extraño, el mismo imaginario que crea esa mujer mítica, endeble, es el mismo que rechaza la existencia de la que actúa en un plano contestatario frente a esos esquemas que moldean y marcan lo femenino y lo masculino y que niegan a ambos la posibilidad de interactuar en un plano igualitario, equitativo y solidario. Extendiendo la comparación entre la realidad y la ficción caemos en la cuenta de que hombres que matan a las mujeres e incluso los que luego del feminicidio se quitan la vida es porque desde su imaginario ven a las mujeres como Lucía y como Mabel pero al ver que ellas no les corresponden como tales, se desconciertan y apelan a lo peor. Y es que estos esquemas mentales no surgen de la nada sino de las creencias arraigadas, de la formación de la “conciencia” sobre los roles de género. Carmen Monreal - Belén Martínez en la pag. 89 del libro “ Intervención Social de género”, dicen que “este desfase entre el estereotipo y la realidad social se agrava debido a dos propiedades: su fuerte resistencia al cambio y su efecto de autocumplimiento” Esas creaciones mentales proyectan a la mujer con una forma corpórea que semejan trazos caricaturescos es porque los estereotipos culturales han forjado su imaginario. Como dicen las autoras mencionadas, “Los esquemas mentales son construcciones simplificadas de la realidad con un carácter adaptativo.”. Esa visión de lo femenino en la creación novelística de Lacay Polanco y poética de Joaquín Balaguer son arquetípica, “Lucía” es excelente modelo. Ezequier Ander Egg en La Mujer irrumpe en la historia, ilustra diciendo: “Los arquetipos de la feminidad y de la masculinidad son un conjunto de la ideas e imágenes que configuran estereotipos interactuantes entre si “.
Arte contemporáneo
AREÍTO
Sábado 28 de enero de 2012
La magia azul de Fernando Tamburini
H
AMABLE LÓPEZ MELÉNDEZ
HOY
asta el domingo 29 de enero, en la Galería Principal de la Fundación Centro Cultural Altos de Chavón, se puede ver la exposición titulada “Caminos Azules, compuesta por más de 20 obras, entre pinturas, esculturas e instalaciones, de Fernando Tamburini, quien no sólo es uno de los artistas dominicanos más talentosos y reconocidos, tanto a nivel nacional como internacional, sino también un popular miembro de la comunidad de Casa de Campo, La Romana, donde vive y expone con frecuencia desde hace casi dos décadas. En efecto, durante los últimos 17 años, Tamburini se ha convertido en una verdadera celebridad en Altos de Chavón-Casa de Campo. Sus esculturas y pinturas, con remisiones instantáneas hacia la naturaleza y las expresiones culturales dominicanas más notables, son exhibidas con orgullo por nacionales y extranjeros en muchas de las lujosas villas de Casa de Campo. Durante su prolongada estancia en La Romana, Fernando Tamburini transita las atmósferas, los personajes y las superficies sombrías, visceralmente existencialistas, llegando a materializar un universo visual caracterizado por sus colores cálidos, brillantes, fuertemente contrastantes; la simplicidad formal y las sutiles trasparencias, ardiendo siempre en su obra una imaginería deliciosamente mágica y profundamente identitaria. La producción global de Tamburini resiste a base del rigor de factura, la vitalidad de su policromía, la irreverencia ante el mito de lo real, el humor cáustico y la depuración estilística. Y esto es revelación cristalina en obras como las tituladas “Florero”, “Casa Azul”, “La Rosa”, Escalones”, “Perro Azul”, “Dos Chivos” “(Siamés)”, “Cielo Azul” y en otras de su más reciente producción, tales como “At Dream”, “Caribbean Retreat”, “The flight”, “Yola llena de peces”, “Fishing town”, “Yola, casa y pez”, “The Journey”, “El Arbol” y “Red Bird”, ejecutadas en diversas técnicas y materiales, tales como tela, papel, pigmentos, cartón y madera de distintas calidades. La formidable síntesis de recursos técnicos, formales y expresivos con que Tamburini logra concretizar sus visiones más graciosas y sueños más enigmáticos, es equivalente a la precisión de su sensibilidad poética y a los atrevidos juegos espaciales de sus “cinéticas” composiciones bidimensionales; a la potencialidad imagética de las texturas y superficies pictóricas; a la intensificación del juego con lo surreal y lo imprevisto y a la misma calidad de imaginación que ahora despliega en el fascinante extracto expositivo de sus “Caminos Azules”. La mujer, la casa, el mar, la Yola, el paisaje, los arboles, las flores, los peces, las frutas, el vuelo de los pájaros, las nubes, el horizonte, las transparencias, “el aire de la isla”, son sig-
Fernando Tamburini
Yola, casa y pez. Escultura. Mixta, papel y madera.
Nace en el Batey Central de Barahona, hoy Villa Central, en 1961. Graduado en la Escuela de Altos de Chavón, inmediatamente (1987) se establece en la ciudad de Nueva York donde trabaja como diseñador de modas y textiles. Entre 1990-1994, expuso de manera colectiva en importantes galerías y museos de los Estados Unidos, tales como Jadite Gallery, Jeshiva University y The Paterson Museum, New Jersey. Su obra forma parte de importantes colecciones privadas en los Estados Unidos, Europa, América Latina y el Caribe. En 1995 participa en el programa Artista en Residencias de la Fundación Centro Cultural Altos de Chavón y en este mismo año se hace cargo de la Galería de Altos de Chavón, al frente de la cual realiza una labor memorable hasta finales de 1997. Actualmente vive y trabaja en La Romana. Su estudio está en la calle Castillo Márquez, No. 45-B. Su exposición “Caminos Azules”, inaugurada el pasado 28 de diciembre, estará abierta hasta el domingo 29 de enero del 2012, todos los días a partir de las 9:00 am. hasta las 6:00 pm. (excepto los miércoles) en la Galería Principal de Altos de Chavón.
Fishing town. Escultopintura.
nos y símbolos perpetuos en las pinturas, esculturas e instalaciones que conforman esta exposición de Tamburini en Altos de Chavón. La “casa” puede operar como metáfora del espacio sociocultural: hogar, protección, fragilidad, sueño e ilusión… Alternativamente, los peces, el árbol y la yola, nos remiten hacia los signos radicales de nuestra cotidianidad insular, así como hacia los afilados límites del absurdo, la esperanza, la profecía y el milagro, pero el azul es pura magia, encantadora y fresca taumaturgia; juego libre e infinito, materializado por Fernando Tamburini con ardiente persistencia, maestría y gracia inevitable. La Técnica del “papier mache”, ensamblaje o “collage” a base del recurso del reciclaje
de papeles de periódicos, revistas, cartones, maderas y diversos tipos de impresos, es dominada de forma lúcida y virtuosa por Fernando Tamburini, permitiéndonos el disfrute y la confrontación de un proceso creativo en el que la obra adquiere una asombrosa capacidad autosignificativa como objeto y como imagen. En el extracto de estos “Caminos Azules”, las tipologías, los símbolos, las superficies y las atmósferas cromáticas se reactivan mediante un juego alucinante de tonalidades y matices azules, cálidas y transparentes, definitivamente atractivas y todavía más provocadoras, gracias a la fina carga humorística con que en la obra de Fernando Tamburini se contrastan el signo y el bestiario.
7
8
HOY
Sรกbado 28 de enero de 2012
AREร TO