Significados y señales / Largo poema de amor a Wiosna

Page 1





Carlos Vázquez: Significados y señales

Largo poema de amor a Wiosna

Diseño de colección: Editorial Elvira

© de la ilustración de cubierta: Gonzalo Quicler y Colin Baldwin © del texto: Carlos Vázquez © de la edición: Mundo Detrás do Marco S.L. (Editorial Elvira) CIF: B27773266 Rúa Santiago, 11

36202 Vigo (Pontevedra)

www.editorialelvira.es

info@editorialelvira.es

Maquetación: Hugo Rodríguez Diseño de cubiertas: Hugo Rodríguez y Rubén Romero Impresión: C.A Gráfica Impreso en Vigo, España

Primera edición Septiembre 2014 ISBN: 978-84-942124-7-5 Depósito legal:

Todos los derechos están reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial de este libro por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía y o tratamientos informáticos, fotocopia o la grabación sin los permisos expresos de los titulares del copyrigth.





Carlos Vázquez Carlos Vázquez Iglesias nace el 4 de abril 1973 en la ciudad de Vigo, Pontevedra. Pertenece al grupo Formas Difusas desde el año 2005 y ha ganado entre los años 1994 y 1995 el primer premio de poesía del I. B. Santa Irene de Vigo así como también el primer premio de relato del I. B. Santa Irene de Vigo. También ha ganado en el año 1996 el primer premio del XI certamen de poesía del I. B. Maria Soliño de Cangas.



Colin Baldwin Colin Baldwin es un pintor formado en el taller de Ángel y Gerardo Chávez López. Estudios de grabado, serigrafía. Exposiciones individuales en galerías privadas e instituciones (obra, colección Caixanova), galerías Abel Lepina, Vigo, Dua 2, Paloma Pintos, Sargadelos entre otras. Exposiciones colectivas en distintas ciudades de Perú, Portugal, España, China, EE.UU. Actualmente nacionalizado español trabaja y reside en Vigo desde 1988.





Significados y Se単ales



Vivos en alg煤n lugar aparente, tales poemas resultan los hijos de una revoluci贸n

proscrita.



La inmensidad del cielo en un minuto, ¡señores pasajeros! La epopeya del océano un millón de metros más abajo. ¡Abróchense los cinturones!



Porque tĂş no eres bonita yo ya no te quiero. Por ello te ves obligada a vivir en cuatro prisiones diferentes.



Resulta un gesto caliente en el momento en que recoges tu paquete de cigarros Camel en la trasera de tu vaquero. Sur Sudoeste cuando me besas.



Un ataúd pequeñito cargado en apariencia de piedras y de humo. La noche con aspecto de Zeppelin marino. He sido ladrón de relojes, farmacias. Aquello es un árbol, esto otro la calle.



Largo poema de amor a Wiosna



Wiosna: Ocurre que a veces en mitad de la noche a soñar vienes a mi costado. Concurro felizmente al banquete -la boda-. De manera atenta accedo a dar las gracias a quien me ha dado penas, convertido en un solícito animal de sangre caliente. Hago un paréntesis, fumo un cigarrillo, aguardo a que el alba apague el tenue fulgor de los siete faroles exactos que he contado a lo largo de la calle. Paseo solitario abandonando alguna que otra flor en el camino, finjo dormir en tranvías y trenes. Tú te acercas, dices: “la flor está en el bosque”, y enumeras de forma constante las olas en la costa.



Wiosna: “Tilo entre las flores”, pequeño y diminuto reloj pasajero al que poder preguntar de tarde en tarde por todos y cada uno de aquellos objetos que arrastra la marea. Pintas un cuadro, muerdes una manzana. La tarde se demora. Ocultas el amor que me profesas. Yo estoy sólo, tú lo sabes. Te acercas, me abrazas, me besas, recoges tus enseres. Yo me fabrico un cadáver en ausencia de ti. Me quedo solo viendo crecer con tristeza cientos de aves a la manera del sol. Quizá lo que tú eres indudablemente también lo soy yo del mismo modo. Me miras con la extraña certeza de un día y otro día. Quiero decir, una suma de minutos. Regresas de tu corto viaje, me abrazas, te beso.



Wiosna: ¡Dong! ¡Dong! Baten, laten campanarios a razón de miles de kms. por segundo. ¡Adiós! ¡Adiós! Pájaros del río, tornasoles de la mañana. ¡Dong! ¡Dong! Rompen a llorar decenas de niños en las playas. -Hoy habrá funerales-. ¡Dong! ¡Dong! Te amo a distintas horas. Irrumpes dulcemente, yo te abrazo. Alguien me ama dentro de ti, yo le busco.



Presas las alas van. El viento llega. Nos enamoramos. Culpamos a la claridad de nuestro querer fragoroso (amantísimo capitolio). Tú me aquietas. Haces del extraño que sin duda yo soy esa otra fuente de alas en desbandada que migran al sur. Las adolecidas señales de mi juventud dedico a descifrar en ti lo que de nuevo soy. Presuroso el viento va y viene… Empleo horas enteras y poemas en quererte. La plena luz del día eres tú.





Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.