Marta García Gómez
DOCE MESES DOCE CAUSAS DOCE PUZZLES En este año diferente cuanto menos, todos hemos tenido que reinventarnos de alguna manera. Todos nuestros trabajos, nuestras actividades diarias, hasta nuestras aficiones se han visto trastocados en mayor o menor medida por la pandemia que nos está tocando vivir. Al comienzo fue la incertidumbre de quedarnos parados, no poder salir de casa, no poder quedar con gente, “no poder” en general. Sin embargo, las personas, en su mayoría, somos seres maravillosos, capaces de adaptarnos y reinventarnos una y mil veces. No quiere decir que el cambio sea fácil, para nada, de hecho, nos cuesta un montón, pero a la vez saca a la luz la imaginación y la creatividad de muchos de nosotros. Cabría esperar que una actividad como la que nos une a todos nosotros, hacer puzzles, no se vería tan afectada por esta situación tan extraña y es cierto que la actividad en sí no, pero todo lo que la rodea y lo que de verdad nos une a todos los aficionados, socios o no de Aepuzz, sí que se está viendo trastocada.
Todos los campeonatos, torneos, encuentros… ya no se podían hacer y aunque al principio parecía algo completamente momentáneo, en seguida unos pocos empezamos a pensar en posibles soluciones, en alternativas para seguir teniendo un vínculo con el resto de amigos puzzleros a los que tardaríamos un poco más en ver. Así, enseguida empezaron a surgir diversas actividades propuestas desde la asociación y en mayo nos hicieron llegar un cuestionario a todos los socios para que propusiéramos actividades que se nos ocurrieran y fueran factibles.
De esta manera, tras la aportación de un socio de AEPUZZ, nació la actividad “Doce meses, doce causas, doce puzzles”. He de decir que en general me puedo entusiasmar con diez de pipas, pero esta actividad me hizo mucha ilusión. El concepto es muy sencillo: elegir un día por votación entre todos los socios, elegir un puzzle medianamente relacionado con la temática del día seleccionado y por último montarlo y compartir en redes la foto el día en cuestión. Lo que más me gusta de la actividad es que es fácilmente accesible para casi todo el mundo. Entre todos nosotros hay muchos aficionados de todas las edades y condiciones. En general para casi toda actividad una vez llegada la pandemia se requiere de acceso a internet y cierto conocimiento informático y es una realidad que no todo el mundo tiene el mismo conocimiento, facilidad, accesibilidad, etc. Entre nosotros hay muchos niños, por ejemplo, que por derechos de imagen hay muchas veces que sus padres, con toda la razón, prefieren que no participen puesto que tienen que salir en fotos o participar en videollamadas. También hay muchas personas con poca pericia informática, a las que conectarse a un Zoom o un Skype o poder comentar en un vídeo en directo de Youtube, les puede causar dificultades. Sin embargo, en esta actividad lo único que tienes que hacer es una foto al puzzle y subirla a alguna red social, que, reconozcámoslo, casi todos tenemos una al menos, ya que gracias a ellas nos enteramos de la mitad de los eventos que surgen en torno al mundo de los puzzles. Por ello, me parece que la actividad puede llegar a muchas personas y de alguna manera unirnos a todas ellas.
Otra cosa que me entusiasma es que tienes un listado muy amplio de opciones para elegir, en cuanto sale el resultado como loca te vas a buscar entre tus puzzles a ver qué encuentras que te pueda servir, con las consabidas risas que todo esto puede ocasionar, porque hay veces que hilas los temas más que con pinzas, como un niño dando una excusa por no haber hecho los deberes… Y ya si no encuentras manera de 25