CAMAS FIESTAS PATRONALES 2024

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Camas NUESTRO SEPTIEMBRE

NUESTRO TESORO

EQUIPO DE EDICIÓN

Raúl Medina Motilla

Paula Valverde Barneto

Almudena Alegría Roncero

Cristóbal Martínez Bernal

Producción: Editorial MIC

CAMAS/2024

SALUDA DEL ALCALDE

Queridos vecinos y vecinas de Camas,

Es para mí un honor volver a dirigirme a vosotros y vosotras con motivo de nuestra querida Feria y Fiestas Patronales, las cuales celebramos un año más con especial ilusión.

Esta fiesta es una ocasión única para celebrar nuestra identidad y fortalecer los lazos que nos unen como comunidad. Una tradición que refleja historia y cultura, brindándonos cada año la oportunidad de disfrutar de momentos de alegría, convivencia y hermandad.

Quiero aprovechar esta ocasión para expresar mi más sincero agradecimiento a aquellos que hacen posible que estos festejos sean una realidad; desde los empleados municipales hasta todos y cada uno de los componentes de las casetas que trabajan incansablemente para que todo salga a la perfección. Agradezco asimismo a todas las personas, hermandades y colectivos que, con su esfuerzo y dedicación, contribuyen a la organización de este evento, logrando que nuestras fiestas sean cada vez más memorables.

Invito a todos/as a participar activamente en las numerosas actividades programadas, donde viviremos momentos para el disfrute, la diversión y el (re-)encuentro. Deseo que esta Feria y Fiestas Patronales sean recordadas por su ambiente festivo, su alegría y, sobre todo, por la cordialidad y el buen ánimo de los cameros, cameras y visitantes. Disfrutemos de unos días llenos de felicidad y armonía.

¡Viva Camas y viva su Feria y Fiestas Patronales!

Con afecto,

Víctor Manuel Ávila Muñoz

Excelentísimo Alcalde del Ayuntamiento de Camas

SALUDA DEL DELEGADO

Queridos vecinos y vecinas de Camas,

Es un verdadero orgullo dirigirme a vosotros y vosotras un año más en septiembre, un mes que tiene un significado muy especial para Camas. Una fecha que marca el fin del verano y el inicio de un nuevo curso, pero también un tiempo de renovación y celebración. Es el momento de mirar hacia adelante con ilusión y de disfrutar juntos de lo mejor de nuestra tierra en la Feria y Fiestas Patronales.

Nuestras fiestas no son sólo una celebración local; son el corazón de nuestra identidad como comunidad. En estos días nos reunimos para disfrutar, recordar nuestras raíces y mirar con esperanza hacia el futuro. Es el momento de vestir nuestras mejores galas, pasear por un recinto ferial vibrante, bailar y reír con amigos y familiares, y hacer de cada día un recuerdo inolvidable.

Este año es particularmente significativo porque conmemoramos los 25 años del nombramiento de Ntra. Sra. de los Dolores como Alcaldesa Honoraria Perpetua de Camas. Este aniversario es un tributo a la devoción y un recordatorio del profundo vínculo que los cameros y cameras tenemos con nuestra patrona. Celebrar este hito reafirma nuestras raíces y fortalece nuestra identidad como pueblo.

No obstante, nada de esto sería posible sin el esfuerzo y la dedicación de tantas personas que, con su trabajo, hacen que nuestras fiestas sean un éxito. Quiero agradecer de todo corazón a los caseteros y caseteras, que con esmero y cariño preparan sus espacios para acogernos; a las hermandades, asociaciones y peñas, que mantienen viva la esencia de nuestras fiestas; y al equipo de gobierno al completo y a todas y todos los trabajadores municipales, cuya labor incansable asegura que todo funcione a la perfección.

En esta ocasión, me gustaría destacar el valor del libro de feria, que cada año nos ofrece una profunda visión de nuestra historia y cultura. Este libro es mucho más que un simple registro de eventos; es una recopilación de investigaciones y artículos que exploran el pasado, presente y futuro de Camas. Sus páginas son una ventana a nuestra rica herencia cultural, narrada por autores y autoras que aportan sus conocimientos sobre el tema. Agradezco a todos los colaboradores y al equipo que trabaja en la creación de este libro, ya que su esfuerzo convierte cada edición en un testimonio de gran valor.

Como Delegado de Promoción Cultural, Turismo, Fiestas y Eventos, tengo el privilegio de trabajar para cuidar y promover nuestras costumbres y expresiones culturales, asegurando que el testigo pase a las futuras generaciones. No es la primera vez que me dirijo a vosotros, y cada año lo hago con el mismo

compromiso y entusiasmo: preservar lo que nos hace únicos y fortalecer los lazos que nos unen como pueblo.

Me complace por ello anunciar que el próximo curso traerá nuevos proyectos que buscan fortalecer nuestra oferta cultural y seguir haciendo de Camas un referente en la provincia. Creemos que la cultura es el alma de nuestro pueblo y queremos impulsarla para que nuestras tradiciones y nuestro talento brillen cada año con más fuerza.

Para terminar, me gustaría invitaros a participar activamente en el programa de actividades que hemos diseñado con entusiasmo. Éste, refleja nuestro compromiso con la tradición y el desarrollo cultural, pensado tanto para la ciudadanía camera como para quienes nos visitan, asegurando que todos, desde los más pequeños hasta los mayores, puedan disfrutar y sentirse parte de esta celebración especial. Espero por tanto que esta Feria y Fiestas Patronales sean una experiencia inolvidable para todos.

Con todo mi cariño, os deseo una Feria y Fiestas Patronales llena de alegría, encuentros y momentos memorables.

Raúl Medina Motilla

de Promoción Cultural, Turismo, Fiestas y Eventos

SOLEDAD VÁZQUEZ

AUTORA DEL CARTEL

Soledad Vázquez, la autora del cartel de la feria de este año, vivió su infancia y adolescencia en la Barriada Mallorca, recordándola con mucho cariño. Esas tardes que pasaba jugando en la calle con sus amigos o cuando tenía que cruzar las vías del tren para ir hacia su colegio, La Colina.

Desde aquellos tiempos ya tenía claro que le apasionaba crear y diseñar, empezando a hacerlo con sus propios juguetes y juegos, dibujando y pintando tableros, cartas, camisetas, tebeos, etc.

Con especial ilusión nos cuenta cómo conoció a Cristobal, el bibliotecario, quien le mostró la biblioteca como un lugar lleno de vida, en la que además de leer podían desarrollar su creatividad de muchas formas. Recuerda concretamente una actividad que realizó junto con sus amigos en la que primero escuchaban las historias que les contaban los más pequeños para luego ellos ilustrarlas. Todo el mundo aportaba lo que sabía hacer y vivían un ambiente culturalmente enriquecedor.

Y así hasta que llegó el momento de estudiar en la universidad, cuando le decía a su madre que si no aprobaba no sabía que iba hacer, no se planteaba otra cosa, era dibujar lo que la hacía feliz. Hizo Bellas Artes, con especialización en diseño gráfico y grabado. Entre las muchas actividades que realizó, se encontraba el taller de moda de reciclaje, donde hacía sus propios diseños y luego los mostraba en desfiles. Para ella esos años de facultad fueron increíbles. “Cuando algo es vocacional lo disfrutas muchísimo”, nos cuenta.

Al término de sus estudios, estuvo un año trabajando pero en un puesto sin libertad de creación, por lo que decidió un cambio de rumbo y se fue a Madrid a hacer un curso de cine y animación, mientras vivía de la ilustración. En esa vorágine que era para ella Madrid, estuvo un tiempo hasta que decidió volver a Andalucía junto a su marido e instalarse en Chiclana, Cádiz, donde continúa viviendo y trabajando desde casa.

Posteriormente empezó a trabajar en Ale-Hop, desarrollando el departamento de diseño, donde desde sus inicios sintió que confiaban en ella. Ahora, se encuentra en el departamento de papelería e infantil, por lo que la vida la ha llevado al punto desde el que empezó todo; de niña diseñaba sus propios juguetes y ahora tiene la libertad de crear y diseñarlos para el resto del mundo. Aunque este trabajo le ocupa la mayoría del tiempo, también hace trabajos de diseño e ilustración para otros clientes, siendo muestra de ello el cartel de nuestra Feria 2024.

Dicho cartel está realizado en técnica digital y con él ha querido representar la feria de cuando ella era pequeña, un lugar de diversión y reunión con amigos y familia antes de que terminase el verano. En la parte central podemos observar una tipografía moderna, integrada en la composición, con la corona y bastón de mando de nuestra Señora de los Dolores, ya que se cumplen 25 años de su nombramiento como Alcaldesa Perpetua de Camas. En torno a ello, hay personas bailando, mujeres vestidas de flamenca, flores propias de los mantones que su madre hacía cuando era pequeña y también la Casa Consistorial como algo que no ha cambiado a pesar de que Camas ha ido creciendo y transformándose, lo que podríamos llamar un guiño nostálgico. Y todo ello con un fondo de colores vivos, que transmiten la alegría que se vive en la feria. La realización de este cartel ha sido un orgullo para ella, ya que siente que con él formará parte de la historia de Camas.

JUAN MIGUEL GÓMEZ MUÑOZ

PREGONERO DE LA FERIA DE CAMAS

Este año Juan Miguel Gómez Muñoz será el pregonero de nuestra Feria y Fiestas Patronales. Reconoce que la proposición no se la esperaba, pero que ha sido un regalo que le hace su pueblo, una responsabilidad muy grande para los que como él quieren y sienten Camas.

De familia camera, ha estado desde pequeño vinculado a la Hermandad Sacramental y la Hermandad del Rocío a través de su pertenencia a los grupos jóvenes, y desde el ámbito de la parroquia empezó a comprometerse con el pueblo de Camas. Por ello, le hace especial ilusión ser el pregonero este año, cuando se cumplen 25 años del nombramiento de la Virgen como Alcaldesa Perpetua.

Vivir la feria para él no es solo esa semana, es también la anterior con el montaje de las casetas, compartiendo momentos con sus amigos y familiares. Septiembre es el final del verano y el reencuentro con su gente, su pueblo. Nos habla también de las novilladas de la feria y del toro de fuego, “Camas es moderna y en constante avance pero sin perder las tradiciones”.

Aunque sin duda alguna, la procesión de la Virgen de los Dolores el domingo de feria es el momento culmen, ya que la Virgen es el centro de la feria. Juan Miguel vive este momento desde dentro, por su vinculación con la hermandad, y desde fuera como camero.

Su pregón va a ser para la Virgen, la feria y todos los vecinos y vecinas de Camas. Por esta razón, estarán presentes la alegría, el orgullo y la responsabilidad, para que la gente disfrute del pregón y puedan sentirse reflejados en sus palabras.

LA PUBLICIDAD COMO REFLEJO DE LOS CAMBIOS SOCIALES

Una evolución de los carteles publicitarios en el municipio de Camas

La publicidad antigua, en cualquier soporte, es un testimonio del que pueden partir muchas historias. Por ello hemos querido mostrar en este artículo un esbozo de los anuncios que aparecen en los libros de feria pasados que, además de dar a conocer negocios de la época, posibilitaron su elaboración como patrocinadores del mismo. Es por otro lado, una forma de recuperar un patrimonio documental de gran interés para la historia local.

Se debe tener en cuenta que en un mundo sin internet ni redes sociales, el cartel publicitario era la carta de presentación esencial para los negocios, así como las revistas y la prensa eran fundamentales para su difusión. Es cierto que la importancia del cartel publicitario decayó a partir de la segunda mitad del siglo XX con la introducción de la televisión, pero siempre será el medio publicitario por excelencia.

Desde el punto de vista artístico, los anuncios a partir de los años cincuenta se distinguieron por sus ilustraciones detalladas, colores llamativos y un diseño limpio y estéticamente agradable. Las ilustraciones artísticas eran frecuentemente utilizadas, con el objetivo de transmitir una sensación de optimismo y modernidad. Por su parte, los mensajes publicitarios eran generalmente directos y persuasivos, resaltando los beneficios del producto y su potencial para mejorar la vida diaria.

Ya en los años setenta, los diseños publicitarios se volvieron más experimentales y menos formales, destacando gráficos psicodélicos, tipografía creativa y fotografías en lugar de ilustraciones. La publicidad empezó a reflejar movimientos sociales como los derechos civiles, el feminismo y el ecologismo. Las campañas se hicieron más sofisticadas y menos comerciales, con anuncios atrevidos y provocativos que buscaban captar la atención de una audiencia cada vez más escéptica.

Anuncios publicitarios del Banco Bilbao y de la empresa local Los 3/7 Fuente: Anuncios publicados en los libros de Feria de Camas durante la década de los 70.

Los anuncios seleccionados de los libros de la feria de Camas, están enmarcados entre los años cuarenta y setenta, siendo tanto nacionales como locales. En ellos podemos ver el reflejo de los aspectos propios de la publicidad de su época, pero también algunas particularidades propias de la esfera local. Por ejemplo, podemos advertir que éstos no solo cuentan historias personales, como en el caso de los establecimientos “Viuda de Manuel Muñoz Chacón”, sino que también muestran cómo el papel de estas mujeres en el mercado de trabajo progresó hasta que tuvieron sus propios negocios.

-Anuncio Viuda de Manuel Muñoz Chacón, Fábrica de anisados, compuestos y licores, y anuncio de Antonia García, Despacho de Galletas y Caramelos, años 50. / Fuente: Anuncios publicados en los libros de Feria de Camas.

Además, son reflejo de cómo ha evolucionado Camas a nivel social, cultural o económico, su riqueza industrial y comercial (algunos comercios e industrias siguen funcionando hoy día) y el crecimiento que ha desarrollado a nivel urbanístico.

Anuncios de nueva promoción de vivienda en Camas años 70 / Fuente: Anuncios publicados en los libros de Feria de Camas.

Anuncio Fundiciones Maceda y Fundiciones Caetano, años 70 / Fuente: Anuncios

Como podemos ver, la publicidad de antes era directa, estaba centrada en el producto, la mayoría de los anuncios estaban formados por textos en los que se jugaba con el tamaño de la letra, la tipografía. Muy poco a poco, empezaron a utilizarse los elementos gráficos y del blanco y negro se fue pasando al color. Además, estaban acompañados de eslóganes o lemas publicitarios que resumían las excelencias del producto: “Beba Danzón, el refresco que refresca”.

En las imágenes de los anuncios publicitarios, se puede observar que no todos los comercios o empresas recurrían a las mismas estrategias para promocionarse. Mientras algunos diseñaban una imagen distintiva o un logotipo, otros simplemente se limitaban a mostrar su nombre. Esta diversidad en las formas de anuncio debe entenderse en el contexto de una época en la que la publicidad y el marketing no estaban completamente integrados en las prácticas comerciales de muchas empresas, especialmente en el caso de las pequeños negocios ubicados en áreas rurales.

publicados en los libros de Feria de Camas.

Anuncios publicitarios de “Danzón” y “Ducal”, años 1951 y 1970, respectivamente.

La capacidad de anunciarse de manera efectiva estaba en gran medida determinada por los recursos disponibles. En muchos casos, estos establecimientos no consideraban la publicidad como una parte fundamental de sus estrategias empresariales, lo que se reflejaba en una inversión limitada en este ámbito. Esta falta de integración de la publicidad en la gestión empresarial resultaba en una variedad de enfoques y estilos en los anuncios, dependiendo de las posibilidades y la creatividad de cada negocio.

Es particularmente interesante revisar estos anuncios desde la perspectiva actual, ya que forman parte de nuestra memoria colectiva y constituyen un elemento significativo de la historia local. Estos anuncios no solo nos ofrecen una ventana al pasado, sino que también nos permiten apreciar la evolución de las estrategias publicitarias y el desarrollo del marketing como disciplina.

En conclusión, los antiguos anuncios publicitarios no solo representan una parte nostálgica de nuestra historia, sino que también ofrecen valiosas lecciones sobre la importancia de la publicidad y el marketing en el desarrollo de las empresas. Al estudiarlos, podemos obtener una mayor comprensión de las dinámicas comerciales del pasado y su influencia en las prácticas contemporáneas.

Bibliografía

Rodríguez Estrada, A. (1999). Historia de la publicidad en España. Madrid: Fragua. Vázquez Medel, M. A. (1990). Sevilla y la publicidad: pasado y presente. Sevilla: Diputación Provincial de Sevilla.

“El aire que respiramos es un compuesto de nitrógeno, oxígeno y publicidad”. Robert Guérin.

Anuncios publicitarios de “Exportadora Andaluza de aceitunas” y “Bodegas La Montaña”, años 1949 y 1963, respectivamente. Fuente: Anuncios publicados en los libros de Feria de Camas.

CARNAVALES

Una tradición que ilumina el mes de febrero

"Se dice que el Carnaval es una fiesta llamada a desaparecer. Lo que se ve -decía Mairena- es que el pueblo, siempre que se regocija, hace Carnaval. De modo que lo carnavalesco, que es lo específicamente popular de toda la fiesta, no lleva trazas de acabarse. Y desde un punto de vista más aristocrático, tampoco el Carnaval desaparece. Porque lo esencial carnavalesco no es ponerse careta, sino quitarse la cara. Y no hay nadie tan bien avenido con la suya que no aspire a estrenar otra alguna vez" (A. Machado).

Las ciudades y pueblos de Andalucía se llenan de vida durante el carnaval, con desfiles callejeros, conciertos, bailes y actividades para todas las edades. La música y el bullicio son constantes, creando una atmósfera festiva única. Aunque el carnaval se celebra en toda Andalucía, cada región tiene sus propias tradiciones y costumbres. Por ejemplo, en Cádiz, el Carnaval es especialmente famoso por sus comparsas y chirigotas, mientras que en Málaga destacan los desfiles de carrozas y la música en las calles. Y por supuesto, como bien es sabido, una de las características que más resalta del carnaval es la tradición de usar disfraces y máscaras.

El carnaval es sin duda una ruptura con lo cotidiano. Esto ofrece un espacio para la creatividad, la expresión libre y el disfrute colectivo. Además, es una celebración donde se manifiestan signos propios de la identidad cultural. Así, el carnaval no solo es una fiesta, sino también una manifestación de la diversidad y riqueza cultural de un pueblo, reforzando el sentido de pertenencia y comunidad.

¿Por qué celebramos el carnaval?

Se cree que el origen del carnaval en Andalucía tiene raíces en las festividades romanas de la antigüedad, como las saturnales, que eran celebraciones de la llegada de la primavera y la fertilidad.

Con la llegada del cristianismo, estas festividades se mezclaron con celebraciones religiosas, como el período de indulgencia antes de la Cuaresma, asentándose y creciendo en relevancia durante el Antiguo Régimen. El carnaval se convirtió así en una oportunidad para disfrutar y excederse antes de los cuarenta días de ayuno y penitencia, arraigando en Andalucía profundamente a la cultura popular, adoptando elementos propios y únicos a lo largo de los siglos.

En los años treinta, especialmente alrededor de la Exposición Iberoamericana de 1929, los carnavales de Sevilla eran ampliamente reconocidos y populares. Esta época estuvo marcada por un ambiente de renovación urbana y entusiasmo cultural que incrementó la magnitud y la participación en las festividades. Los carnavales incluían desfiles de carrozas, comparsas y murgas con actuaciones satíricas, así como bailes y fiestas comunitarias.

Durante el periodo franquista sufrió una drástica prohibición, y sería ya con la llegada de la democracia cuando volviera a renacer, aunque con menos importancia que en siglos anteriores. A pesar de esto, el Carnaval se ha convertido en la fiesta principal de algunas ciudades y pueblos como Fuentes de Andalucía en Sevilla, Isla Cristina en Huelva y Trebujena en Cádiz. Entre todos, destaca el ya mencionado Carnaval de Cádiz, que ha perdurado a pesar de las prohibiciones y dificultades, y es un modelo para otras localidades que han recuperado sus carnavales (Becerra, 1992).

La tradición carnavalera en Camas

Un ejemplo del renacer del Carnaval en las poblaciones andaluzas, en este caso, de Sevilla, lo tenemos en nuestro propio municipio. Es posible que algunos de los que vivieron su juventud en torno a los años 60, recuerden aún el éxito de la Incubadora. Un lugar de encuentro de adolescentes y jóvenes del pueblo que significó un paso más para la vida social de aquel tiempo en el que España comenzaba poco a poco a resurgir de sus cenizas. Fue precisamente en este local, donde se organizaron unos carnavales, los primeros (de los que tenemos noticia)después de la guerra, en nuestro municipio.

“LA CAMAS DE AQUELLOS AÑOS”

Sin duda fue la juventud de esa época la que abanderó la nueva generación del cambio, y comenzaron también a surgir algunas agrupaciones juveniles como Alkama, quienes también celebraban sus propios carnavales. Uno de sus fundadores, Carlos Sánchez Barbudo, nos habló sobre unos que recuerda especialmente en febrero del año 1972. Se trataba de festividades que aunque seguían arraigadas en la tradición popular, perdieron fuerza a nivel comunitario, y solo desde pequeños grupos se fue manteniendo con vida.

Con la llegada de la democracia, las fiestas tradicionales comenzaron a resurgir con renovado ímpetu en las comunidades locales. En Camas, esta revitalización se tradujo en una integración progresiva del Carnaval en la planificación local, inicialmente gestionado por las asociaciones de vecinos del pueblo.

Fotografías del carnaval del grupo juvenil Alkama en el año 1972. / Fuente: Fotos cedidas por Manolo Santos para el blog “Transición democrática Camas” de Carlos Sánchez Barbudo Santisteban.

A partir de los años ochenta, el Carnaval en Camas dejó de ser una celebración informal para convertirse en un evento oficial, gracias a su inclusión en el calendario de eventos públicos respaldado por el Ayuntamiento. Durante esta primera etapa, los Carnavales se celebraban con eventos destacados como la fiesta de disfraces en la nave de Fembasa. Este evento inicial evolucionó y se trasladó a la sala Zorongo, donde se organizaron varias actividades y se capturaron imágenes que documentaron el espíritu festivo de la época. La cabalgata, otro componente esencial de la celebración, se realizaba en la plaza principal, marcando el inicio de las festividades.

La estructura de los Carnavales durante los años noventa continuó en gran medida como en la década anterior, manteniendo las tradiciones establecidas y la participación de la comunidad. Sin embargo, a partir de los años dos mil, el Carnaval experimentó una transformación significativa. La participación ciudadana creció considerablemente, y se incorporaron nuevos elementos a la celebración, como conciertos y otras actividades culturales. Este auge se debió en gran parte al apoyo continuo del Ateneo, seguido por la influencia del Nuevo Ateneo, que aportó nuevas ideas y recursos para enriquecer las festividades.La estructura de los Carnavales durante los años noventa continuó en gran medida como en la década anterior, manteniendo las tradiciones establecidas y la participación de la comunidad.

Fotos de las carrozas del año 1985 / Fuente: imágenes publicadas en el Libro de Feria de 1986.

Pero no podemos terminar de hablar del carnaval sin mencionar a las chirigotas y comparsas. Camas ha contado con diferentes comparsas, como la de los Fantasmas, y chirigotas. Actualmente solo queda una chirigota, dirigida por Fernando Santos. Ésta comenzó su andadura el pasado 2023, aunque años antes (desde 2012 hasta 2018 aproximadamente) existía otra en la cual el mismo Fernando y Jose Enrique Solado o “Chicho”, autor de las letras, ya formaban parte. En su corta trayectoria ya han actuado en el Gran Teatro Falla, consiguiendo un puesto 25 de 40 y han ganado premios en concursos como los de Carmona o Guillena, obteniendo buenas calificaciones en otros como los de la Algaba. El propio director, nos cuenta cómo han disfrutado esta última edición del Carnaval de Camas, con el pasacalles y la participación del pueblo.

“Tanto chicho como yo, allá por el 2012, cuando creamos por primera vez la chirigota, soñabamos con un concurso de carnaval en el pueblo, cosa que no dejamos de insistir y ofrecer nuestra ayuda para que se haga”. Comenta Fernando Santos.

Carnavales celebrados en la Sala Zorongo, año 1998 / Fuente: facilitadas por la corporación municipal

Un legado cultural

El carnaval, una festividad colorida y alegre que se celebra en numerosas culturas alrededor del mundo, es más que simplemente una oportunidad para la diversión y la extravagancia. Su importancia como patrimonio inmaterial es innegable. Es un reflejo vivo de la identidad cultural de una comunidad. A través de sus rituales, música, danzas y disfraces, el carnaval transmite valores, tradiciones y formas de vida únicas. Es una expresión de la creatividad colectiva y la habilidad para reinventarse a sí misma año tras año, adaptándose a los cambios sociales y manteniendo su esencia. Fomenta la cohesión social y fortalece los lazos entre los miembros de una comunidad. Es un momento en el que las personas de diferentes orígenes se unen para celebrar y compartir experiencias, independientemente de su edad, género o estatus social.

Fotos de la Chirigota de Camas “Cariño, necesito mi espacio”, vestidos de astronautas en el Gran Teatro Falla.

En resumen, el carnaval es mucho más que una fiesta: es un legado cultural invaluable que merece ser preservado y celebrado. Reconocer su importancia como patrimonio inmaterial es fundamental para asegurar su continuidad y valorar su papel en la diversidad cultural del mundo.

Bibliografía

Becerra, S. R. (1992). El Carnaval y lo carnavalesco en las fiestas en Andalucía. En V Congreso del Carnaval. Actas (pp. 9-21). Fundación Machado. Ayuntamiento de Cádiz

Carnavales celebrados en la Sala Zorongo, año 1998 / Fuente: facilitadas por la corporación municipal

DÍA DE LA CULTURA TARTÉSICA

Una fecha para marcar en el calendario

Se dice que el símbolo (symbolon) es aquel que une, lo contrario que el diablo (diábolos) que es el que separa. El 29 de septiembre de 1958 en Camas había un escudo donde aparecía el diseño de una maceta con siete claveles, pero a partir del día siguiente todo empezaría a cambiar.

Por esas fechas, mientras se desarrollaban unas obras en la Real Sociedad del Tiro Pichón, unas niñas subían andando diariamente desde La Pañoleta para trabajar en la casa de la familia que allí vivía. Eran Isabel Goncet y su hermana pequeña Carmen. El día 30 de septiembre, durante sus tareas cotidianas, fueron testigos de un acontecimiento único: había aparecido un tesoro en el Cerro del Carambolo.

Alonso Hinojos del Pino, obrero que estaba rebajando el terreno del cerro, había golpeado con su herramienta una pieza metálica. Tras observarla, tanto él como el grupo de trabajadores que lo

Excavaciones en el cerro del carambolo / Fuente: Fotografías publicadas en: Carriazo, J. de M. (1973): Tartesos y el Carambolo. Investigaciones arqueológicas sobre la protohistoria de la Baja Andalucía. Arte de España

acompañaban, siguieron excavando hasta que apareció un recipiente de barro cocido que contenía muchas más piezas. Creyeron haber encontrado imitaciones de joyas antiguas, hechas de latón o cobre, por lo que no les dieron mucha importancia y empezaron a limpiarlas. Cuando llevaron a lavar el lebrillo, lleno de barro, los que estaban por la zona empezaron a acercarse a ver qué es lo que habían encontrado. Las hermanas Goncet también estaban allí. Fue entonces cuando Carmen, la pequeña, se colocó el collar de oro que reposaba sobre el recipiente como si de un juego se tratase. Aún no era ese collar símbolo de nuestro pueblo, pero lo llegaría a ser al convertirse en el nuevo escudo.

El pasado año de 2023 se conmemoraron los 65 años de este descubrimiento, momento en el cual se aprobó, a través de la Delegación de Promoción Cultural de este Ayuntamiento, la declaración del 30 de septiembre como “Día de la Cultura Tartésica”.

Desde el descubrimiento del tesoro, todo cambió para el estudio de la protohistoria en España y en consecuencia, para el municipio camero: ese día nació la cultura material tartésica. No es de extrañar que a la hora de pensar en un día que pudiera erigirse como “Día de la cultura tartésica” y que, de forma clara, estuviera ligado con este período de nuestra historia e íntimamente vinculado con nuestro municipio, no hubiese una fecha más apropiada y elocuente que el 30 de septiembre.

El Tesoro del Carambolo Fuente: Red Digital de Colecciones de Museos de España (CER.ES)

Tarteso era, hasta ese momento, un testimonio incorpóreo de las fuentes grecolatinas, un fantasma historiográfico necesitado de un corpus material que la que Arqueología de la época pudiera asir, medir, catalogar y mostrar. El Tesoro del Carambolo providencialmente apareció en el momento y lugar adecuados para que fuera coronado como “un tesoro digno de Argantonio”, convirtiéndose así en el primero de los muchos vestigios arqueológicos que, por fin, se podrían estudiar de la misteriosa y legendaria cultura de Tarteso.

Hubo otros tesoros, incluso hallados antes, como el de la Aliseda (Cáceres) en 1920, el de Lebrija en 1923 o el de Ébora (Cádiz) hallado unos meses después que el del Carambolo. Pero ninguno de estos tuvo el impacto mediático ni científico que el hallado en el cerro camero.

Así pues, la elección de esta fecha como día representativo y de importancia destacada para la cultura tartésica está más que justificada. Pero es especialmente relevante que sea nuestro municipio el que defienda y esgrima este día, para recordar y festejar nuestra conexión con el pasado tartésico de la comarca, entendamos por lo que entendamos este “pasado tartésico”.

En estos 66 años, Camas ha crecido y ha cambiado, como así lo ha hecho el término Tarteso entre debates y congresos, toneladas de fragmentos de cerámicos, cientos de páginas de monografías y artículos científicos. En estos años nuestro municipio ha acompañado y hecho suyo el hallazgo del tesoro como forma de aglutinar a su población tras una seña de identidad histórica. En 1969 el escudo de Camas abandonaba la maceta con claveles para vestir el collar del tesoro del Carambolo, arropado entre un lema: locus auri caelati in finibus tartessorum (un lugar dorado, labrado en los confines de los tartesios). También Camas vio cómo entre los años 2002 y 2005, el Cerro del Carambolo, arrojaba nuevos datos que acercaban más al mundo fenicio que al indígena lo que en su día fue indudable y automáticamente tartésico, contribuyendo así a acomodar estos “confines de Tarteso” en una nueva identidad historiográfica que poco a poco se va perfilando en las mesas de debate científico pero que poco a permeado hoy día en la población.

A estos hitos debemos añadir la reciente incorporación a nuestro imaginario local de un nuevo símbolo: la “Marca Camas”. Éste logotipo nace con la intención de convertirse en un referente visual del municipio, una forma de reconocernos y presentarnos al exterior. La adopción de esta nueva imagen de marca basada en la Cultura Tartésica no solo fortalece nuestra identidad y conexión con la historia, sino que también nos posiciona como un municipio orgulloso de su legado y con una visión clara hacia el futuro.

Como no podía ser de otra manera, está inspirado en los símbolos y arte de la civilización tartésica y su orfebrería. Se trata del diseño estilizado de un sol tartésico, simbolizando la luz, la vida y la prosperidad.

Según estudios arqueoastronómicos, la planta del santuario en su fase V, la más antigua, tuvo una orientación concreta hacia la salida del Sol durante el solsticio de verano. En esta fecha, el Sol sale por el punto más al sur posible del horizonte, comenzando así la jornada con más horas de luz de todo el

Marca Camas / Fuente: Ayuntamiento de Camas.

año. Este fenómeno fue interpretado en clave simbólica por numerosos pueblos prehistóricos e históricos como la muerte y resurrección al tercer día de su divinidad solar. Por este motivo, algunos investigadores han relacionado la orientación del edificio de el Carambolo hacia este punto del horizonte con la celebración de la muerte y resurrección de Baal, divinidad fenicia identificada con el Sol (Gómez Peña, 2010).

Fotografías de las vistas actuales del cerro del Carambolo en el emplazamiento del yacimiento arqueológico. Fuente: Imágenes propias.

Rotondas, cartelería y señalética; residenciales y edificios nos recuerdan en cada esquina del municipio nuestra conexión con el tesoro y el pasado tartésico, pero es hora de abandonar lo anecdótico y sumergirnos en el trabajo de fondo. Un trabajo que pretendemos tenga en esa cita anual del 30 de septiembre una fecha clara en la que dar a conocer y compartir el trabajo realizado, en la que festejar y celebrar una seña de identidad que sea capaz de unir en la curiosidad por el pasado de este territorio a las gentes que de tan diversos orígenes componen la población de Camas.

Bibliografía

del

Fernández Flores, A., & Rodríguez Azogue, A. (2007). Tartessos desvelado. La colonización fenicia del suroeste peninsular y el origen y ocaso de Tartessos. Córdoba: Almuzara.

Gómez Peña, Á. (2010). Así en Oriente como en Occidente: el origen oriental de los altares taurodérmicos de la Península Ibérica. SPAL, 19, 129-148.

Notas de la edición

Este artículo ha podido realizarse gracias a la colaboración de Manolo Casado, arqueólogo, y Cristóbal Guerrero, antiguo director de la Biblioteca Pública Municipal Rafael Alberti de Camas. La historia contada sobre las hermanas Goncet, ha sido obtenida gracias a una entrevista que se realizó a los familiares de Isabel Goncet.

Fotografías
nuevo Bulevar del Carambolo / Fuente: Imágenes propias.

EL FLAMENCO EN CAMAS

Un arte arraigado generación tras generación

El flamenco, un patrimonio vivo

Hoy en día, el flamenco es mucho más que un género musical; es una parte intrínseca de la identidad andaluza y forma parte de su patrimonio cultural. Un arte particular y excepcional que, arraigado en Andalucía, se ha extendido y dado a conocer al mundo entero, compartiendo la riqueza de nuestra tierra y declarado por este motivo Patrimonio de la Humanidad en 2010 por la UNESCO. Una declaración que marcó un hito significativo para este arte, pues supuso su reconocimiento como un legado cultural que debe ser preservado y compartido con las generaciones futuras. Naturalmente, ésta resaltó su valor artístico pero, más allá del cante, el toque o el baile, también puso en valor su capacidad para unir a las personas a través de la música y la danza y su contribución a la diversidad cultural global.

Los orígenes de dicho arte parecen estar ligados a Andalucía, teniendo sus principales focos en Cádiz, San Fernando, Jerez de la Frontera y Sevilla junto con sus pueblos aledaños, así como en algunas partes de Murcia, Castilla-La Mancha y Extremadura. Su surgimiento en el siglo XVIII es objeto de controversia, pero la teoría más aceptada es que aparece en el seno del pueblo gitano, asentado en Andalucía desde el siglo anterior, quienes unieron parte de su tradición oriental a los sonidos puramente castellanos con reminiscencias de la cultura sefardí o morisca, iniciándose así un arte propio y singular.

Las raíces flamencas de Camas

El flamenco ha estado arraigado fuertemente en la población de Camas durante generaciones, dejando una huella indeleble en la historia y la cultura de esta comunidad. A lo largo de los años, Camas ha sido testigo de cómo este género artístico ha florecido y se ha convertido en un pilar fundamental de

su identidad. Desde mediados del pasado siglo XX, empezaron a destacar figuras en el mundo del flamenco, muy vinculadas siempre al entorno de las peñas y el toreo como la Peña Curro Romero o Paco Camino.

Uno de los aspectos más interesantes de esta historia es la influencia de Triana en la tradición flamenca de Camas. Varias familias procedentes del barrio sevillano, destacando los Fernández, encontraron su hogar en el barrio de la Pañoleta, aportando un toque distintivo a la escena flamenca local. Esta familia no solo trajo consigo sus habilidades musicales y conocimientos, sino también la pasión y el amor por el flamenco que habían transmitido de generación en generación, destacando figuras tan importantes en el panorama local como Curro Fernández, vecino honorario de Camas.

Curro nace en Triana en 1941, concretamente en la calle Fabié, donde el Ayuntamiento de Sevilla ha colocado una placa conmemorativa en reconocimiento a su labor artística. A la edad de seis años, sus padres se trasladaron a Camas, al barrio de la Pañoleta, en busca de un mejor futuro. Atrás quedaron los corrales, donde vivían aglutinados en pequeñas habitaciones, compartiendo cocina con otras familias y haciendo turnos para ir al retrete. Por aquella época, muchas familias trianeras se mudaron a la misma zona, pues el suelo era bastante barato y la posibilidad de autoconstrucción fomentó el crecimiento urbanístico, dando lugar a un barrio nuevo conocido “La Triana Chica”.

Fue precisamente en Camas, donde Curro comenzó a descubrir los sones del flamenco. Su padre, un gran aficionado y primo de "Los Culatas", organizaba en su casa reuniones con los mejores artistas de la época, floreciendo un ambiente flamenco que inundaría todos los rincones del barrio.

En una entrevista realizada a Curro, él mismo contaba cómo, cuando llevaba la comida a su padre desde Pañoleta hasta Sevilla (cerca de la calle Imagen), se detenía en las barandillas del Puente Triana para escuchar las voces de los cantaores trianeros. A menudo, se retrasaba en su tarea, absorto por la música. Su padre le preguntaba: "¿Niño, dónde te has entretenido?", a lo que él respondía: "¡Los cantes me llevan al cielo!".

Curro inició su carrera como bailaor con los Coros y Danzas de Educación y Descanso (iniciativas franquistas de la época), actuando por toda España. Un día, el cantaor del grupo enfermó y, tras la insistencia de sus compañeros, Curro (entonces conocido como Paco) decidió cantar. Este evento marcó el inicio de una exitosa carrera como cantaor, acompañando a las mejores bailaoras de la segunda mitad del siglo XX. Tras su matrimonio con Pepa Vargas, sus hijos continuaron una dinastía de destacados flamencos que continúa con sus descendientes en el siglo XXI. Entre ellos, Esperanza Fernández, en la cúspide del flamenco, su hijo Paco, gran guitarrista, Joselito, que lleva su arte por todo el mundo y, en las nuevas generaciones, Ismael de la Rosa, conocido como “el Bola”.

El barrio de la Pañoleta se convirtió así en un crisol de expresión artística, donde el flamenco se manifestó en su forma más auténtica y conmovedora. Un legado que sigue vivo, un lazo que conecta las personas de Camas con su historia y su pasión por la música, el cante y la danza.

Izquierda: Curro Fernández. Autor de la fotografía: Diego Gallardo. Derecha: Ismael de la Rosa Fuente: Camas Digital y Pablo Palomares, archivo del autor.

Un lugar de encuentro de artistas: Las peñas de Camas y otras iniciativas flamencas

Desde entonces comenzó a emerger toda una comunidad flamenca que mostraba gran pasión por este arte y que contribuyó a que el flamenco en sus diferentes expresiones estuviese presente en el día a día del pueblo. Una seña indiscutible de ese ambiente flamenco, fue la institucionalización de algunos eventos, especialmente la creación de la I Noche Flamenca de Camas en 1975, con la colaboración, como no podía ser de otra manera, de amantes del flamenco (destacando la labor de Manolo Lezama). El día elegido fue el 5 de junio, siendo el emplazamiento de esta celebración la plaza portátil de toros que por aquellos entonces se encontraba en la Pañoleta y que tan unida a este arte estuvo en sus años de vida. Esta primera edición se dedicó al cantaor El Turronero y se contó para tal acontecimiento con las actuaciones de José el de la Tomasa, El Choza, Gaspar de Utrera, El Chocolate, así como también el mismo Turronero, acompañados en la guitarra por Pedro Bacán y Paco Gutiérrez.

I Noche Flamenca en Camas / Fuente: Imagen publicada en el Libro de Feria de 1976.

de la Peña los 7 Claveles / Fuente: Imagen publicada en el Libro de Feria de 1976.

Como dato anecdótico, esa noche se encontraba entre el público el gran bailaor Farruco acompañado por su hija, los cuales, por aclamación popular, cerraron la velada con una actuación improvisada y llena de emoción.

Dibujo

A raíz de este primer festival, se despertó un nuevo interés por fomentar ese vínculo tan profundo que se sentía desde el municipio camero con el flamenco, y surgió entonces la necesidad y, con ello la iniciativa, de poner en marcha una peña flamenca. Sería unos años después, concretamente en 1980, cuando por fin esa idea vería la luz. Así, el 15 de febrero de dicho año, reunidos los aficionado en el bar “El tubo”, quedó inaugurada la peña flamenca “Los 7 claveles”.

El primer recital organizado por la peña fue de Miguel Funi, acompañado en la guitarra por Pedro Bacán. Posteriormente, actuaron artistas como Paco Taranto, El Chozas, Romerito de Jerez, Paco Herrera (poeta), J. Antonio Rufo, Fernando Góngora, El Nano de Jerez, entre otros. En las guitarras destacaron además del ya mencionado Pedro Bacán, Jose Luis Postigo, Manolo Franco y Manolo Fernández.

Desde la peña flamenca, se iniciaron los “Concursos de cante flamenco” con premios en metálico para el ganador (de hasta 120.000 pesetas de la época). El acto final del concurso coincidía con la feria, y por ello tuvo lugar en la misma. En el primer concurso, se contó con la actuación de Fernanda, Bernarda y Pepa de Utrera, Miguel Funi, Romerito de Jerez, Chiquetete, Curro y Familia Fernández, Pedro Peña, Rafael Mendiola y Paco Ávila. Este evento fue muy mediático, acudieron grandes personalidades flamencas y aficionados, además de aparecer en la prensa sevillana.

La peña promovió también la impartición de clases de baile y guitarra, participando de manera activa en los festejos de la ciudad, contando con la colaboración del Ayuntamiento y otras peñas del municipio. Su labor fue digna de reconocimiento tanto por el fomento y protección de la cultura flamenca, como por su aportación a la cultura general del pueblo camero.

Uno de los personajes más reseñados a nivel local en todo este ambiente flamenco fue sin duda el guitarrista Paco Ávila que, originario del barrio sevillano de San Bernardo, se le consideraba un camero más debido a que vivió más de cincuenta años en esta localidad, siendo incluso nombrado embajador de la guitarra camera más allá de sus fronteras.

Durante su larga carrera como guitarrista, Ávila colaboró con artistas de renombre como Manolo Caracol, Perlita de Huelva, Antonio Mairena, Paquera de Jerez y Juanito Valderrama. Al jubilarse, decidió compartir su conocimiento con quienes amaban la guitarra y el flamenco, dedicando casi veinte años de su vida a enseñar a jóvenes de la localidad.

No podemos dejar de mencionar a otras personalidades destacadas en la esfera local como Juan López Romero Jiménez, más conocido como Juan el Camas o Chiquito de Camas. Fue un cantaor flamenco que destacó por su fidelidad a las tradiciones, siendo su legado más señalado su interpretación personal del fandango, en el que plasmaba las experiencias de la vida cotidiana, desde la explotación laboral hasta las emociones más profundas. Su estilo melódico y emotivo influenció a otros cantaores, especialmente a través de su amistad con Camarón de la Isla, quien popularizó este cante entre sus seguidores.

El flamenco, Camas y Cuba

Otro evento destacado, en este caso por su gran singularidad, fue el encuentro “El son cubano y el flamenco”, el cual inició su andadura con la primera edición en el año 1995, organizado por la Diputación de Sevilla con la colaboración del Ayuntamiento de Camas.

En sus diferentes ediciones, se contó con la actuación de grandes artistas de ambos lados del océano, contando con una gran acogida y participación ciudadana, no solo de Camas sino de Sevilla y pueblos cercanos. Éste, que duraba varios días, solía finalizar con un acto especial donde grupos flamencos y cubanos mezclaban melodías e instrumentos propios en un espectáculo de intercambio cultural único.

Si bien, esta mezcla flamenca y cubana cuenta con una larga tradición. En primer lugar no podemos olvidar que durante el periodo colonial, la conexión cultural entre España y Cuba fue muy fuerte en todos los ámbitos, incluyendo por supuesto el musical.

Poco a poco, los músicos cubanos fueron incorporando elementos del flamenco, algo que es evidente en géneros como el bolero y la guajira, que a veces utilizan escalas y acordes similares a los del flamenco. Pero las influencias se dieron en ambas direcciones, siendo muy interesante como ejemplo el trabajo del guitarrista flamenco Paco de Lucía, quien colaboró con músicos cubanos y exploró los ritmos y armonías de la música cubana; de hecho en su álbum "Cositas Buenas" incluye fusiones con elementos de música cubana.

“El Son cubano y el Flamenco”, año 1997 / Fuente: Imágenes publicada en el Libro de Feria de 1998.

El flamenco como seña de identidad cultural

El flamenco, más que una mera expresión artística, representa una parte del sentir andaluz. Este género, con sus profundas raíces y rica historia, ha sido y continúa siendo un elemento crucial de la identidad cultural de la región. Su influencia trasciende las fronteras andaluzas, resonando a nivel mundial y transmitiendo la pasión, el dolor, la alegría y la historia del pueblo andaluz.

A través del flamenco, se han conservado tradiciones y se ha fomentado un sentido de comunidad y pertenencia, funcionando como puente entre generaciones y transmitiendo valores y sentimientos que definen Andalucía.

Camas, como pueblo que une lazos muy estrechos con el arte flamenco, sigue comprometido con la labor de preservar este valioso legado cultural, siendo importantes todas las iniciativas que se realizan tanto desde la esfera privada como desde la pública. Recordamos en este sentido, la pasada exposición fotográfica dedicada a las grandes figuras del flamenco que tuvo lugar en septiembre de 2023 en la Biblioteca Pública Municipal, organizada por la Diputación de Sevilla. Para su inauguración se contó con la presencia del cantaor flamenco Arcángel, con el cual se entabló una charla sobre su visión del flamenco que resultó ser enormemente enriquecedora.

También nos complace anunciar que se ha puesto en marcha en nuestro municipio la Semana del Flamenco, que tendrá lugar el próximo mes de noviembre, coincidiendo con las vísperas del “Día Internacional del Flamenco”.

En un mundo cada vez más globalizado, mantener y promover el flamenco es crucial para preservar la diversidad cultural. Este arte, en sus variadas formas, desde el cante jondo hasta las bulerías, ofrece una ventana única al alma andaluza, enriqueciendo a su vez a la cultura universal. Apoyar el desarrollo del flamenco y de los artistas es, por lo tanto, una manera de honrar la rica herencia cultural de Andalucía y asegurar que su legado perdure para las futuras generaciones. Así, el flamenco no solo se mantiene vivo, sino que continúa evolucionando, reflejando la vitalidad y el espíritu de Andalucía.

Notas de edición

Para la realización de este artículo se han revisado las referencias al flamenco publicadas en los libros de feria, especialmente sus ediciones a partir de los años setenta, así como otros documentos gráficos (carteles, fotografías…). Para estos trabajos, contamos siempre con el apoyo de la Biblioteca Pública Municipal Rafael Alberti, donde se conservan estos documentos y a cuyo personal agradecemos siempre su colaboración. Por otro lado, la información relativa a la familia Fernández parte de una entrevista personal realizada por Pablo Palomares a Curro Fernández (publicado en Camas Digital) y se ha contado además con la colaboración de Ismael de la Rosa, a quienes mostramos desde la edición de esta revista un profundo agradecimiento.

Inauguración de la exposición “Yo soy Flamenco” en la Biblioteca Pública Municipal Rafael Alberti / Fuente: Imagen propia.

IDENTIDAD, PAISAJE Y MEMORIA

Pedro Almeida y las pinturas de la antigua estación

En el taller de artesanía de su abuelo comenzó todo. Allí, junto a sillas de rejilla de junco, jugaba con las manos y desarrollaba sus inquietudes artísticas. Desde el principio supo que quería dedicarse al arte, y tanto su abuelo como el resto de su familia lo apoyaron en este proyecto.

Creció y realizó el bachillerato de arte, para posteriormente graduarse en la facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla. Optó por dedicarse profesionalmente a este campo, eligiendo el "arte callejero" como su especialidad. Pedro nos cuenta que en sus trabajos huye del enfoque publicitario pretendiendo mediante su arte aportar algo a la ciudadanía, alentando la reacción e interacción entre los espectadores y su obra. Una transformación del espacio urbano a través del arte.

Ha conseguido trabajar de esta forma sin encargos, teniendo libertad en la temática y priorizando su forma de entender el mundo y su moral a la hora de tomar decisiones artísticas. Tiene mucho respeto por el espacio público y pone especial énfasis en que el resultado sea atractivo visualmente.

Pedro pinta las fachadas de los edificios como si fuera el lienzo de un cuadro, con brochas, pinceles y pintura muy aguada. De hecho, si te acercas mucho a sus obras, se pueden ver manchas, chorreones, casi abstracciones por el efecto pictórico que produce la fuerza de la brochada. Pinta capa a capa, mancha todo (incluido él) y vuelve a repasar, así es como disfruta de su trabajo. La gama crómatica que utiliza consta de blancos, negros y grises, pues piensa que no le hace falta el uso de colores más fuertes o alegres para transmitir buenas vibraciones.

Para realizar sus obras, se inspira en lo que pertenece al lugar, se informa mediante fotografías, documentos históricos, tratándolo todo con mucho cariño y respeto. Muestra de ello es el doble mural

que podemos apreciar en el edificio donde se sitúa la luz en la calle Mercedes de Velilla en Camas. Lo llevó a cabo después de investigar sobre el ferrocarril, consultando fotografías y mapas antiguos, a través de los cuales pudo determinar la ubicación de las vías y del recorrido del tren para elegir el lugar y orientación apropiados para su obra. En una parte, observamos la locomotora que exactamente pasaba por ahí y en la otra, un edificio perteneciente a los talleres de la estación de tren, que se encontraba donde hoy está la Hermandad de la Humillación.

Si viajáramos en el tiempo veríamos ese paisaje, creándose un juego visual atemporal. El mural transmite la importancia de este medio de transporte en Camas, como si se tratase de un guiño nostálgico. Pero no todo es real en estos murales; el cielo dramático no es el original, y es que aunque le gusta apoyarse en historias locales, también quiere crear las suyas propias a partir de ellas.Historias que surgen a raíz de sus investigaciones y de las microrelaciones que crea con la gente que pasa mientras realiza su obra, pues habla con ellos y les explica su trabajo, intentando que estas personas lo sientan como propio. Trata el paisaje pictórico como huella de lo que fuimos, somos y seremos, buscando en los pequeños detalles y signos de identidad una manera de interpelar a la sociedad.

Izquierda: Pedro Almeida trabajando en uno de sus murales. Derecha: Imagen de su obra en Camas / Fuente: Archivo del autor.

UNA VENTANA ENTRE EL PASADO Y EL PRESENTE, LAS TERTULIAS DE LA BIBLIOTECA

Con la colaboración de Pedro Reguera

¿Qué sería de nuestra memoria colectiva sin los relatos de quienes nos precedieron? Sus testimonios son un tesoro que debemos conservar con empeño, ya que sus vivencias nos hablan de un tiempo pasado con el que podemos compararnos para ver cuánto hemos cambiado, o tal vez, lo poco que lo hemos hecho. Pero sin duda, un tiempo del que podemos aprender.

En esta ocasión, queremos rendir homenaje a la tertulia que tiene lugar todos los jueves en la Biblioteca Pública Municipal Rafael Alberti, donde se reúnen un grupo de personas para charlar y compartir experiencias y aprendizajes. No pocas veces, han hecho partícipes de ella a jóvenes del municipio, enseñándoles sus modos de vida en una España diferente, en la que hacer una cometa con papel y cartón era el divertimento de todo un verano.

Y para hablar de esta tertulia y sus miembros, no hay mejor manera que presentarles el siguiente texto. Fue escrito con cariño por uno de sus participantes, Pedro Reguera, quien es un pilar fundamental del grupo. Pedro siempre está dispuesto a compartir sus conocimientos y experiencias, y sobre todo, a escuchar.

Cuando me incorporé hace unos años a la tertulia de los jueves en la biblioteca, encontré a una serie de personas (buenas) con las que empecé a compartir experiencias; personas que con sus dilatadas vidas, tanto en lo profesional como en lo personal, tienen mucho que aportar a esta sociedad en los tiempos que corren. Pues es el jueves, el día en el que nos reunimos un ramillete de años, más de mil, alrededor de una mesa de la biblioteca. Así, jueves tras jueves fui conociendo a cada uno de ellos con sus comentarios y vivencias y otros con sus silencios, que tampoco es mala cosa. Pues como dijo George Steiner: “Vivimos en un mundo en el que el poder más terrible es el ruido. El silencio es el lujo más caro”.

Y ahora paso a presentarlos:

Salta al ruedo Manolo González, que para eso fue presidente de una peña taurina y nos cuenta todas sus vivencias metalúrgicas en Fundiciones Maceda o de cuando estuvo al frente de la alcaldía de nuestro pueblo.

El tertuliano Andrés, poco hablador, escucha expectante bajo la mascota de paño que parece no querer dejar salir todo el pasado que guarda en su cabeza. Cuánto tendría que decir de aquellas charlas de barbería cuando aprendía el oficio o como monaguillo en Santa María de Gracia. Y qué decir de Paco Salinas, todo cultura y vivencias del generalato que le tocó vivir y vida campesina, o lo que es lo mismo: historia viva del Gambogaz campero.

Izquierda: Foto de Pedro con la cometa / Fuente: Imagen propia
Derecha: Foto del grupo de la tertulia en la Biblioteca Pública Municipal Rafael Alberti / Fuente: Imágenes cedidas por la Biblioteca.

Si alguien sabe de aguas ese es nuestro secretario Rafael, cuántos canales, embalses y acometidas del preciado líquido fluyen por su canosa cabeza. Con nombre de aroma, aparece “Flores”, quien es la vivencia pura de un barrio llamado “La Fuente”, lleno de gente trabajadora, digna y comprometida, vivero de costaleros de alpargatas y costal.

Se luce en presente Lucía, una vida dedicada a las marismas que la privó de muchas cosas y sobre todo de la enseñanza. Pero ella es catedrática de la vida y ha sabido sortear todas las piedras que se le han puesto en el camino. También Rafaela, o lo que es lo mismo, bordadora de recuerdos, que modela sobre la tela que porta el bastidor de la vida y en cada puntada borda una historia de poesía y de su pasado en corte y confección.

Juan, el hombre que, junto con su compañera Lina, quisiera leer ahora todo lo que no pudo durante su infancia. Y creo que lo está consiguiendo. Esta reunión es para ellos un medicamento emocional, según palabras de Lina.

Antonio, los silencios del tricornio; cuánto debe pesar el capote en las frías noches por caminos y cortijos del ayer. Y luego está Rafael Vargas, hombre de empresas en las que se movió como pez en el agua, dedicándose a ellas en cuerpo y alma. Gran aficionado al mundo de los toros donde incluso hizo sus pinitos.

Y Rocío, trianera de cava y alfarera, de cante y arte, de puente y río, de casa de vecinos solidarios. Echó raíces en nuestro pueblo y se emociona (y no es para menos) cuando se habla del “Cachorro”.

Si un apellido huele a pan en Camas ese es Pineda. Pastora, una de las últimas incorporaciones a nuestra tertulia pero que estoy seguro que debe amasar con harina del ayer grandes episodios de la Camas en la que le tocó vivir.

Isidoro, con su sonrisa y su figura campechana, se hace notar cada jueves al entrar por la puerta de la biblioteca. José, cuando la seriedad se hace patente, pero quien seguro guarda grandes anécdotas imborrables de su Santa Olalla natal.

Miguel, taxista de profesión, con muchas bajadas de bandera y más de un susto nocturno en su dilatada experiencia al volante.

Pues bien, no me digan ustedes que con este ramillete de personas no está garantizada la cátedra de sabiduría y experiencia de vida y que cada jueves sacamos a pasear por esta biblioteca de Camas. Lamentablemente, algunas de estas personas por su edad, faltan a la reunión, pero que para nosotros siempre tendrán su sitio destacado en la mesa. Uno de los que nos dejó fue nuestro amigo Flore, que se marchó con su camioncillo a dar portes por las carreteras celestiales.

Y no me puedo olvidar de Cristóbal, el antiguo bibliotecario y santo y seña de esta reunión, la templanza, el agrado y la implicación son algunas de las virtudes que atesora. Siempre dispuesto a ayudar a todo el que le rodea. Cuánto te echamos de menos, amigo.

Me gustaría desde aquí, invitaros a estas reuniones de los jueves para que os incorporeís a disfrutar de las charlas y compartir las vivencias en nuestro pueblo, pues estoy seguro de que podríais aportar infinidad de anécdotas.

CAMAS Y EL TEATRO

El Teatro en Camas: Una mirada a través de tres voces

El teatro es una de las actividades culturales y artísticas más antiguas que conocemos y ha sido cultivado a lo largo de la historia con muy distintos fines, pero siempre comprendido como una herramienta para comunicar ideas. De hecho, los antiguos griegos lo empleaban como un instrumento de educación religiosa y ciudadana mientras que en las vanguardias del siglo XX vieron en él un campo en el cual podían someter al público a experiencias y reflexiones de distinta índole.

Camas, un pueblo marcado por la historia y la cultura, ha sido el hogar de numerosos talentos que han encontrado en el teatro una forma de expresión y transformación. Una ciudad que apuesta por proyectos teatrales vinculados con la puesta en valor de la historia personal y colectiva, y el desarrollo del sujeto y de la comunidad. Jose Esteban Garrido Carrillo, Julia Carnero, Antonio Campos y May Guzmán, son algunas de las promesas de nuestro pueblo que en el mundo del teatro podemos encontrar.

A través de las experiencias de Juan Motilla, Lorena Ávila y José Carlos Toledano, exploramos cómo el arte escénico ha dado forma a sus vidas y cómo ellos, a su vez, están transformando la escena teatral de la región.

El inicio de un camino

Juan Motilla, nacido en el humilde barrio de Caño Ronco durante la España franquista, creció en un entorno de campo y olivares, donde a pesar de las limitaciones, encontró alegría y libertad. El teatro llegó a su vida de forma inesperada, influenciado por las actuaciones que se realizaban en la Parroquia

Fotografía de Juan Motilla en los Premios Lorca / Fuente: Aleteia Componentes.

de Nuestra Señora de la Fuente con el párroco Don Luis. Esta temprana exposición al arte escénico despertó en él una pasión que lo llevó a unirse a los grupos culturales de Camas como Al-Kama, La Incubadora y Arbolé. Aquí, en un clima de censura y represión, Juan encontró en el teatro una manera de expresarse y de explorar la libertad que no podía hallar en otros ámbitos.

Por su parte, Lorena Ávila, cuya familia materna es propia de Camas, descubrió su amor por el arte desde niña. Su participación en obras escolares, interpretaciones musicales y eventos locales, como los pequeños teatros de la velá del barrio de La Extremeña, fueron sus primeros pasos en el mundo del espectáculo. Aunque inicialmente Lorena se inclinó por la música y la ópera, estudiando piano y canto en el conservatorio, sus estudios universitarios de publicidad y su experiencia trabajando en el extranjero la llevaron a reencontrarse con su verdadera vocación: el teatro. Ingresó en la Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD) de Sevilla a los 23 años, cambiando de rumbo profesional, no sin miedos pero con mucha ilusión.

La experiencia de José Carlos Toledano, hijo de la conocida profesora de baile Tere Toledano, es diferente, pues no tuvo predilección por las artes escénicas desde la niñez, aunque sí las había conocido de cerca por su familia. Tras probar suerte en el deporte, fue en el instituto I.E.S. Tartessos donde un profesor lo introdujo a la poesía y la lírica, despertando en él un interés por la interpretación que lo llevó a estudiar en la Escuela Superior de Arte Dramático.

Un Compromiso con el Arte Escénico

Las trayectorias de Juan, Lorena y José Carlos convergen en su compromiso con el teatro como herramienta de expresión y cambio social. Juan, después de muchos años de lucha combinando

Juan Motilla en su obra El Público / Fuente: Masescena.

trabajos modestos y oportunidades escasas en Sevilla y Madrid, se convirtió en una figura clave en el teatro andaluz. La creación del Instituto de Teatro de la Diputación de Sevilla fue un punto de inflexión que le permitió formarse y más tarde enseñar, formando a una nueva generación de actores.

Lorena, tras su regreso de Holanda y una época difícil durante la pandemia, encontró su lugar en el Teatro Clásico de Sevilla. Bajo la dirección de Alfonso Zurro, su carrera despegó con su papel de Julieta en "El Público" de Federico García Lorca. Desde entonces, ha trabajado con ellos en varias producciones, incluyendo “La violación de Lucrecia” o “La estrella de Sevilla”. Este encuentro no solo significó una oportunidad para Lorena, sino también el inicio de una colaboración que ha enriquecido la escena teatral sevillana.

Izquierda: Lorena Ávila en La Violación de Lucrecia. Derecha: Lorena Ávila representando a Julieta.

José Carlos, por su parte, siguió explorando su pasión por la literatura clásica, lo cual ha hecho posible que adapte al teatro la tragedia griega del enfrentamiento de los hijos del rey Edipo, “Spartois”. La obra se representó en el Templo de Diana durante cuatro días en los que se colgó el cartel de “no hay billetes”. El futuro le deparará nuevamente la presentación de una obra clásica, “Ícaro y el Minotauro”.

Su enfoque en el teatro clásico griego y romano no solo ha sido una expresión de su amor por la historia, sino también una manera de conectar con las raíces culturales de su tierra.

Creando una comunidad teatral en Camas

Estos tres actores, con sus distintas historias y caminos, han convergido en un proyecto común: desarrollar una cultura teatral sólida en Camas. Lorena, junto con la actriz Silvia Beaterio, emprendieron el pasado curso las clases de teatro en Camas. Éstas, impulsadas por el Ayuntamiento, se han convertido en la primera escuela oficial de teatro en el pueblo. Una iniciativa que busca no solo formar a futuros actores, sino también fomentar un espacio de reflexión y crítica en la comunidad.

Juan Motilla, con su compañía Teatro Clásico de Sevilla, continúa explorando nuevas formas de llevar los clásicos al público contemporáneo, ganando reconocimiento y premios por su labor. José Carlos

Toledano, mientras tanto, sigue combinando sus estudios en la ESAD con actuaciones en festivales y obras internacionales, llevando el nombre de Camas más allá de sus fronteras.

Un futuro de Esperanza y Creación

A pesar de los desafíos, Juan, Lorena y José Carlos, entre otros actores y actrices del gremio, mantienen viva la llama del teatro en Camas. Su pasión y dedicación son un testimonio del poder del arte para transformar vidas y comunidades. A través de sus esfuerzos, están sembrando las semillas de un futuro

donde el teatro no solo sea un espacio de entretenimiento, sino también un lugar de encuentro y reflexión para todos los cameros y cameras.

En un mundo cada vez más dominado por lo virtual y lo superficial, la labor de estos actores es un recordatorio de la importancia de profundizar en la experiencia humana y ofrecer a la sociedad herramientas para mirarse en el espejo del arte y reconocerse en sus múltiples facetas. Su trabajo no solo enriquece la cultura local, sino que también inspira a futuras generaciones a seguir explorando y expresándose a través del teatro.

Fotografías de José Carlos Toledano en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, interpretando su obra Spartois Fuente: Jorge Armestar

LA LEYENDA DEL SAMURAI Y LA MARIPOSA AZUL

Pedro Caldas, Premio Barco de Vapor 2024

El 12 de diciembre de 2023 Pedro recibió una llamada inesperada: su libro había sido elegido como ganador del premio El Barco de Vapor. En ese momento, además de incredulidad y entre risas, lo primero que vino a su mente fue la imagen de él mismo siendo niño, sentado en la biblioteca antiguade Camas con el libro en la mano de “La noche y el viajero errante” de Joan Manuel Gisbert. Fue entonces cuando sintió que el círculo se había cerrado.

Una de las mejores anécdotas de esta aventura (y no la del samurái, sino la de Pedro) es que su origen fue totalmente casual. Todo comenzó un fin de semana en Málaga, cuando Pedro, su mujer Pilar y su hijo Daniel paseaban. Se detuvieron frente a un hotel llamado Mariposa, donde había dos esculturas de guerreros orientales con las manos cerca de su pecho, una sobre otra. “Ya sé dónde está la mariposa”, dijo Daniel, señalando las manos de uno de los guerreros. También Pedro encontró algo ese día, la inspiración para comenzar su historia, la cual empezó a trazar esa misma noche.

La idea inicial surgió de la delicadeza de una mariposa en contraposición a la fuerza de un guerrero, pero realmente no tenía conocimientos sobre samurais o cultura japonesa. Por este motivo la creación del libro se desarrolló paralelamente a una investigación sobre el tema. A medida que avanzaba, se enamoraba más del país japonés, tanto que visitarlo con su familia se ha convertido en uno de sus mayores deseos.

El proceso fue emocionante para la familia. Cada sábado, después de escribir un capítulo, Pedro lo mostraba a sus primeros críticos: su mujer y su hijo. Aunque valoraba las apreciaciones y se fijaba en las reacciones, no cambiaba mucho una vez impreso el capítulo.

El propio autor nos cuenta que para él era una satisfacción ver como a su hijo los primeros capítulos le parecían demasiado cortos, pues eso es buena señal en un lector.

Pedro Caldas, psicólogo en la residencia de mayores Alkama, siempre ha tenido la escritura presente en su vida. Para él, escribir es una extensión del juego, algo que comenzó en el colegio con sus primeras historias: “escribir es como jugar, pero con palabras”. Entiende la escritura como una continuación de la lectura, algo que también ha cultivado desde su infancia, una pasión y modo de entender la vida que comparte plenamente con su familia.

Pedro envió su libro al concurso El Barco de Vapor, organizado por la Fundación SM, sin muchas expectativas pero con el objetivo de terminar su obra a tiempo. A pesar de su incertidumbre sobre si encajaría en la literatura infantil, se sorprendió al ganar el prestigioso premio. Esto llevó a que Ediciones SM editara, publicara y distribuyera su libro.

Uno de los aspectos más resaltados de la edición del libro, son sus maravillosas ilustraciones. Éstas han sido realizadas con esmero por el artista Javier Andrada, con el que Pedro ha mantenido una estrecha comunicación, pues en todo momento el ilustrador ha querido plasmar las ideas del escritor en sus dibujos: los escenarios, los colores propios de Japón, las emociones y carácter de los personajes, etc.

El libro ha sido recibido positivamente por escritores y el público, superando las expectativas del autor. Agradecido, Pedro reconoce que sacar su trabajo al mundo tras meses de esfuerzo en solitario es un momento difícil. Agradece la confianza de la editorial y el apoyo de quienes lo acompañaron en el camino. Un camino en el que también han estado presentes escritores como Michael Ende o el ya mencionado Gisbert. Aunque escribió su libro con libertad y sin emular a otros, aprendió de ellos que los niños pueden disfrutar de historias complejas con un lenguaje rico.

Tras recibir un premio, Pedro le escribió al propio Gisbert, hablándole de la influencia de su literatura, esperando que "La leyenda del samurái y la mariposa azul" pueda causar ese efecto en los niños y niñas.

Si bien no se trata de su primer libro, pues tiene otro llamado “Cerca”, si es su primera publicación en el ámbito infantil, y aunque está feliz por la experiencia, no sabe hacia dónde le llevará su imaginación en el futuro. Desde la edición de este libro de feria queremos agradecer a Pedro Caldas el habernos transmitido su historia con tanto entusiasmo y sensibilidad, deseándole una vida llena de grandes aventuras y que volvamos a leer alguna de ellas.

Pedro Caldas. Fotografía tomada el día de la rueda de prensa en abril de 2024.
Fuente: Fotografía de Sergio Cuesta. Editorial SM.

MERCEDES DE VELILLA Y CONCEPCIÓN ESTEVARENA

Un legado literario. Por Inmaculada Palomar

Aunque haya pasado más de un siglo desde que ya no están entre nosotros, no se apagan ni sus versos ni sus ansias de libertad. Sus almas siguen estando a nuestro alcance, enseñándonos cuánto podemos aprender de nosotros mismos.

Hablar de Mercedes de Velilla (Sevilla 1852 - Camas 1918), no solo es recordar su rica y hermosa poesía en la estela de las rimas de Bécquer. Hablar de Mercedes es también relacionarla con la poesía simbolista, o modernista, que nació a fines del siglo XIX con Machado, Rubén Darío y Juan Ramón Jiménez. Ahí estuvo también Mercedes, hecho menos conocido y apenas puesto en valor. Desde que conoció a Juan Ramón Jiménez en el Ateneo de Sevilla, les unió una gran amistad, surgiendo así sus nuevos versos. Escasos poemas nos han quedado de esta última etapa de Mercedes, que justamente fue la que vivió en Camas. Pocos pero suficientes para descubrir que dio ese gran salto al simbolismo, la nueva poesía directa, sencilla y natural, que alcanzaría la madurez en el siglo XX.

De hecho, fue la única autora sevillana que dio ese paso y de ahí su gran valor y originalidad, siendo por ello una auténtica pionera de la generación feminista posterior. La originalidad de Mercedes se extiende a dos aspectos especialmente: al valor de romper con “el instante parado”, tal como Juan Ramón Jiménez llamaba al decadente romanticismo sevillano; y al carácter sutil con el que nos contó la verdad de su vida, afrontando su austera situación en nuestro pueblo, desde los primeros años del siglo XX.

Como siempre en Mercedes, escritura y vida van juntas, ofreciendo esa mirada reflexiva hacia todo lo que rodeaba su alma, no exenta de su exquisita nostalgia. Un claro ejemplo se ve en este fragmento de su poema “En la altura”, uno de los últimos que escribió en Camas en 1918; poema que incluimos en el libro “Un Sueño de Libertad” (2018) y que había permanecido inédito hasta entonces.

Logré al fin con esfuerzo sobrehumano a la cumbre subir de esta montaña: muéstrase abajo, en pequeñez extraña, el bosque espeso, la colina, el llano. Con cendales de púrpura engalano mi frente altiva que en la luz se baña; la estrella de la tarde me acompaña, y el sol declina cerca de mi mano.

Fotografía de Mercedes de Velilla Fuente: Biblioteca Digital Hispánica

Por su parte, hablar de Concepción de Estevarena (Sevilla 1854- Jaca 1876), también poeta sevillana becqueriana, es rememorar de entrada su gran amistad y afinidad poética con Mercedes. Con tan solo 22 años de existencia, no solo desarrolló plenamente sus sentimientos poéticos con una fuerza y originalidad sorprendente, sino que fue toda una anticipada a su época. Su energía y sentimientos de libertad la colocan también entre las pioneras del simbolismo y el feminismo. Por desgracia, Concepción se nos quedó en su primera y única etapa de poeta. La más confusa y atropellada, aunque

igualmente brillante. Con Mercedes compartió la amistad y la complicidad de sentirse libre, dentro de su esclavizada situación familiar. Mercedes, autora ya reconocida, la ayudó en todo para que irrumpiera en la vida literaria sevillana. Con su inconfundible atrevido estilo propio, logró enorme acogida y un gran éxito, que su prematura muerte truncó.

¿Y qué tiene que ver Concepción Estevarena con Camas, se preguntarán ustedes? Lo más seguro es que nunca pasara por aquí. Falleció y sus restos mortales están en Jaca (Zaragoza), desde 35 años antes de que Mercedes viniera a vivir a nuestro pueblo.

A pesar de esto, por extrañas circunstancias de la vida, por la literatura y la amistad, Concepción Estevarena tiene mucho que ver con Camas. De hecho sentimentalmente está aquí, en nuestro pueblo. La clave está en los lazos tan cercanos entre Concepción y Mercedes, y con toda la familia Velilla, que llegó a convertirse en la suya propia, aún en la distancia. En la última carta que escribe, Concepción declara a Mercedes su albacea y heredera, diciéndole:

Marcho ya por la senda del olvido, como tú por la senda de la gloria; más en la hermosa patria en que he nacido tu harás que no se extinga mi memoria.

El alma de una poeta viaja en papeles de oro, y a veces van a parar a los lugares más insospechados. Toda la vida de Concepción, todos sus poemas se fueron con Mercedes, tal como ella quería. Ella los organizó y editó su primer libro, “Ultimas Flores”, un año después de su muerte, con el precioso prólogo de su hermano José de Velilla. Durante sus vidas hicieron todo lo que pudieron para mantener viva su memoria. Ese fue su legado. Siendo así, ¿por qué no reconocerle, gracias a la amistad, esa vinculación con nuestro pueblo? Pues sería un honor y una suerte para todos nosotros.

Aún queda mucho por hacer por Concepción y por Mercedes, ya sea en Camas, Sevilla o Jaca. Nos vamos por hoy, con dos poesías de las muchas que se dedicaron mutuamente, en ese júbilo poético compartido.

“A Concepción” (Mercedes de Velilla) Del libro “Un sueño de Libertad”

Ráfagas somos las dos

En aire ardiente girando,

Aire que nos va lanzando

De unastro fúlgico en pos.

Cielo azul o ennegrecido

Presenta a nuestra memoria

El resplandor de la gloria,

La oscuridad del olvido.

¿En qué cielo alcanzará

Vivir nuestro nombre un día?

¿La suerte tuya y la mía

Adónde nos llevará?

Grabado de Concepción Estevarena, 1876. / Fuente: La Ilustración Española y Americana Año XX, n. XLVI de 15 de diciembre de 1876 p. 373.

“A Mercedes de Velilla” (Concepción de Estevarena) “Últimas Flores”

Guarda estas blancas hojas sin fortuna, Si tu amistad por mi desgracia mides, Que miamorhagrabadoencadauna

Estas dulces palabras: “No me olvides”

Blancas hojas te ofrezco, semejantes

Ala amistad que guarda el pecho mío;

Otros le den colores deslumbrantes,

Yo les daré mi llanto por rocío.

He devivir de cuanto quiero ausente,

Y hedequererte aún cuando no te vea:

¡Yo he sorprendido en tu ardorosa frente

El paso misterioso de la idea!

Caricatura de Mercedes de Velilla. / Fuente: Grabado publicado en la revista Perecito: periodico satírico literario (1888). Obtenido del Catálogo Fama de la Universidad de Sevilla.

LAS COFRADAS EN CAMAS EN LOS SIGLOS

XVI - XVII

Por Miguel Ángel Baños

El Prior Diego Martínez realizó una recopilación sobre las iglesias y sus rentas en el llamado Libro Blanco del Archivo de la Catedral de Sevilla donde, en fecha anterior a 1411, ya se certificaba la existencia de una única iglesia parroquial en Camas. La Iglesia parroquial de Santa María de Gracia fue testigo del origen cofrade en nuestra localidad en los siglos XVI y XVII. Asimismo, se convirtió en la sede canónica de las hermandades de la Vera Cruz, de San Sebastián y del Santísimo Sacramento desde sus inicios.

El punto de inflexión en el tratamiento de cofrades y cofradas dentro de las hermandades coincide con el fin del Concilio de Trento en 1563 o, en el caso del antiguo Reino de Sevilla, con el Sínodo del Cardenal Fernando Niño de Guevara de 1604. Las mujeres de los siglos XV y XVI encontraron en las cofradías de tradición bajomedieval un espacio de igualdad y de convivencia con sus homólogos varones, disfrutando de cada uno de los actos y cultos que la institución les ofrecía. Sin embargo, el siglo XVII y las cofradías barrocas trajeron una clara involución en la vida cofrade de las féminas. La mujer representaba el pecado y, por tanto, debía ser expulsada de la institución.

La libertad de ingreso de hombres y mujeres a las cofradías cameras de la Vera Cruz (1567) y de San Sebastián (1572) era notoria, siempre que cumplieran con unos requisitos mínimos: demostrar ser cristianos viejos, llevar una vida de buena fama y costumbres, además de pagar una cuota de entrada y una candela de cera con el escudo de la corporación pintado. Sin embargo, ¿podemos afirmar que los cofrades de ambos géneros contaban con los mismos derechos y obligaciones en ambas corporaciones? Las cofradas cameras participaban en casi todos los actos y cultos organizados por sus hermandades y, además, recibían las mismas misas de réquiem y exequias que los hombres a la hora de la muerte. La Cofradía de la Vera Cruz, por su sesgo pasionista, contaba en su haber con cofrades

de luz y de sangre, dependiendo de la función que cada uno de ellos ejercía en la procesión del Jueves Santo: unos alumbraban el cortejo y otros realizaban la disciplina pública. Según el aditamento incluido en la regla de esta corporación, las mujeres no podían flagelarse ni participar en la procesión a rostro descubierto. Si existía la expresa prohibición en regla, podemos deducir sin errar que las mujeres sí practicaban la disciplina pública hasta ese momento, en el que el sínodo hispalense estaba en ciernes de celebrarse. La Cofradía de San Sebastián, en cambio, se mostraba más aperturista. De hecho, encontramos un valioso elenco manuscrito donde aparece el nombre de Catalina de Guzmán como asistente a un cabildo general de hermanos. Excepcional o no, Catalina consta como la primera mujer en asistir a este tipo de actos en toda la archidiócesis de Sevilla (figura 1).

Los orígenes de la Hermandad Sacramental de Camas se remontan al siglo XVII. Por tanto, esta cofradía bebía claramente de las fuentes del concilio tridentino y de las conclusiones extraídas del sínodo hispalense de 1604. El proceso de ingreso en la misma no difería de lo establecido en las cofradías cameras del siglo anterior, pero ¿era el trato hacia las mujeres igualitario? Los pleitos interpuestos por estas a la hermandad nos dicen que no. En el primero de los casos (1650), los oficiales de la junta rechazaron el expediente de limpieza de sangre de Isabel Blanco, entre otros asuntos, para no dejarla formar parte de la corporación. En el segundo de los casos (1671), los oficiales retiraron la candela a Inés Lorenzo alegando que el nombre de esta no estaba registrado en el libro de hermanos. En ambos casos, la autoridad eclesiástica competente dictaminó a favor de ellas, sin tener en cuenta la oposición de las juntas dirigentes en cada momento.

Como hemos podido comprobar en este pequeño extracto, las cofradas tuvieron que adaptarse al papel que les correspondía en cada momento, obteniendo estas mayores o menores beneficios dependiendo del tipo de cofradía a la que pertenecían o del tiempo que les tocó vivir en el seno de ellas. El siglo XVII no vino cargado de buenos augurios en cuanto a derechos de las mujeres. Las cofradas cameras, sin embargo, no cejaron en su empeño y consiguieron que la autoridad eclesiástica pusiera de su parte cuando la razón imperaba.

Figura 1. Listado de hermanos donde aparece el nombre de Catalina de Guzmán en último lugar. / Fuente: Reglas de la Cofradía de San Sebastián de Camas (fotografías realizada por el autor).

NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES

ALCALDESA PERPETUA DE CAMAS DESDE 1999

En el año 1999, siendo hermano mayor de la Hermandad Sacramental de Camas Emilio Arregui, se decidió algo que en muchos pueblos ya se hacía: nombrar a la Virgen de los Dolores Alcaldesa Perpetua de nuestra localidad. Para ello se pidió la colaboración al consistorio municipal, tras lo cual este llevó a pleno la propuesta aprobándose por unanimidad de todos los grupos políticos, enriqueciendo de esta forma el vínculo entre ambas instituciones.

Fotografía de la procesión extraordinaria de Ntra. Señora de los Dolores. / Fuente: Fuente: corporación local.

Si bien en septiembre del citado año se llevaron a cabo no uno sino dos actos honoríficos en torno a Nuestra Señora de los Dolores. En el primero de ellos, Camilo Olivares, capellán real, intercedió para que el fajín del Capitán General Manuel Maroto González fuese entregado a la Virgen. Así fue como la hija de éste, Angela Maroto Cervera, ofreció el fajín al Teniente General Juan García Martínez, quien a su vez se lo impuso a nuestra Patrona.

El segundo acto, días más tarde, fue el de concederle el bastón de mando, simbolizando su nombramiento como Alcaldesa Perpetua, ya que es un complemento protocolario que denota dicha autoridad. Para el otorgamiento del mismo, la patrona salió de su sede, la iglesia de Santa María de Gracia, y recorriendo la plaza que lleva su nombre, se dirigió hasta una estructura efímera que el ayuntamiento había establecido para que se desarrollase el acto. Allí se encontraba el alcalde, por entonces Antonio Rivas, quien entregó una reproducción más pequeña de la vara de mando del consistorio, realizada por los talleres de Orfebrería Villarreal, la cual se situó en un angelito de plata a los pies de la Virgen y de esta forma procesionó el 19 de septiembre de 1999. Este año se conmemora el 25 aniversario de Nuestra Señora de los Dolores como Alcaldesa Honoraria Perpetua de Camas por ello hemos querido narrar los hechos acontecidos aquel mes de Septiembre tan especial.

Notas de edición

Agradecemos la colaboración de Antonio Rivas, Antonio J. Herranz, Emilio Arregui y Concepción Ávila. Para más información sobre estos eventos, recomendamos la lectura del texto escrito por Alfonso Gutierrez Dabán publicado en el Libro de Feria del año 2000 (a disposición del público en la Biblioteca Pública Municipal Rafael Alberti de Camas) y en el Boletín de la Hermandad Sacramental núm. 21 de Febrero de 2000.

Izquierda: Fotografía de Ntra. Señora de los Dolores en su camarín

Derecha: procesión extraordinaria de Ntra. Señora de los Dolores / Fuente: corporación local.

CARTEL Y CULTOS DE LAS FIESTAS PATRONALES

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