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Concurso Crónica de tu Maratón
II concurso “Crónica de tu Maratón”
Plazo de envío de los trabajos estará abierto desde el 19 de febrero hasta el día 4 de marzo.
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La segunda edición del concurso de relatos “Crónica de tu Maratón”, organizado por la Asociación de la Prensa Deportiva de Castellón, va destinada a aquellos corredores inscritos en la VIII Maraton BP Castelló o en el 10K FACSA Castelló que quieran describir, en clave periodística, sus vivencias y experiencias personales tras recorrer cualquiera de las dos carreras. Más información en la página oficial de la Asociación de la Prensa Deportiva de Castellón (APDCS).
El termini d’enviament dels treballs estarà obert des del 19 de febrer fins al dia 4 de març.
La segona edició del concurs de relats “Crònica de la teua Marató”, organitzat per l’Associació de la Premsa Esportiva de Castelló, va destinada a aquells corredors inscrits a la VIII Maraton BP Castelló o en el 10K FACSA Castelló que vulguen descriure, en clau periodística, les seues vivències i experiències personals després de recórrer qualsevol de les dues carreres. Més informació en la pàgina oficial de l’Associació de la Premsa Esportiva de Castelló (APDCS).
Relato ganador del I concurso “Crónica de tu Maratón”
Autor: Ramón Balaguer Mellado. Nº Dorsal: 1513
Me levanto. Sensaciones negativas. No me siento pletórico. Mal comienzo. Dudas y más dudas. Me incorporo, dispuesto a desayunar como un jabato. La prueba lo requiere. Lleno los depósitos todo lo que puedo: carbohidratos, azúcares, proteínas.... Para dar todo lo mejor de mí. Para darlo todo. Hasta vaciarme. Esto es así, todo o nada. Darlo todo, hasta la extenuación, aproximándote a tus límites.
Momentos antes de la carrera estiro, troto, me concentro. Observo. Ya en el cajón de salida, miro a mi alrededor. Compartimos sensaciones, pulso, energía, ganas de salir ya. Estrés a flor de piel. Un murmullo rugiente espera al ansiado disparo que dé salida a nuestra necesidad, quizás extrema, de correr. Nueve en punto, hora de empezar. Transcurren los primeros kilómetros con la conciencia relajada y el pulso a tope.
Necesito equilibrar, y lo hago. Sé que esta prueba es de resistencia, no de velocidad. Acompaso mi cabeza con mi corazón. Necesito que el primero le dé sentido y razón al segundo. Ya en el Grao, el ecuador de la prueba te revela a las mil maravillas que ahora empieza la otra mitad, la más dura, la que decidirá si podrás aguantar el ritmo, si conseguirás atravesar la meta, una vez más. Siento la leve pendiente que nos lleva a Castellón. Una hora después, llega el kilómetro 32. El cansancio hace mella en mí. Me hidrato, como, me arengo. Me animo. Sé que ahora empieza el infierno.
A medida que avanzo, la fatiga se apodera de mí, no sé si puedo correr, seguir corriendo o parar. Sigo. Y llega, por supuesto, llega el muro. El temido muro. Maldito muro. Mi pulso se acelera con la misma intensidad que mi ritmo decelera. Es normal. Sufro. 36, 37, 38....aún no veo el 40. Pero llega. Ya sólo quedan 2...., 41, empiezo a oler el final, la gente también lo sabe, y me anima, corren conmigo, ellos me dan fuerza, y lo consigo, llego al ansiado 42 y saco fuerzas, sí, de flaqueza, y de orgullo, de pundonor, de constancia y de sacrificio, de mi familia y mío, y acelero cuando veo ya el arco de meta. Alzo el brazo, aprieto el puño mientras sonrío y veo a mi familia compartiendo mi felicidad por haber llegado, una vez más, a superar esta gran batalla, de la que he salido victorioso. Y me derrito en lágrimas. Me vacío. •••