Presidenta de la Junta Diocesana de CC. y HH

Beatriz Gandulla Soriano

Presidenta Junta Diocesana de Cofradías y Hermandades de Semana Santa

Estimados hermanos en la fe:

Es para mí un honor dirigirme a vosotros desde las páginas de esta publicación.

Como sabéis, accedí recientemente a la presidencia de la Junta Diocesana sucediendo en el cargo a D. José Vicente Más Zaplana, al que siempre agradeceré la oportunidad que me brindó en su día de conocer y seguir conociendo tantas y tan variadas Semanas Santas como tenemos en nuestra diócesis.

Este año, el plan diocesano de pastoral nos invita a compartir la mesa con el Resucitado. No me resisto a recordar que nuestras estaciones de penitencia no acaban con la muerte de Jesús. Tienen un final gozoso, la Resurrección, y esta es nuestra alegría, pues, parafraseando a San Pablo “si Cristo no ha resucitado, vana es nuestra fe”.

Tras dos años en los que nuestras procesiones no se han podido realizar, todos esperamos con fe y esperanza el momento en que nuestra catequesis en la calle vuelva a producirse.

Pero en este tiempo no hemos dejado de trabajar. Si no hemos podido hacerlo en nuestros cultos, sí lo hemos hecho en lo que debe ser uno de nuestros fines principales, la caridad.

Han sido, y siguen siendo, tiempos difíciles para muchos, por lo que os invito a que no dejemos de “compartir nuestra mesa” con aquellos que más lo necesitan, en el convencimiento de que Cristo está presente en el día a día de cada uno de nosotros y en nuestro prójimo.

Caridad es igual a amar y a fraternidad, y eso es lo que, como cristianos y como cofrades debe caracterizarnos y ser uno de nuestros más fuertes compromisos.

Pidamos a nuestro Señor y a su Madre, que es la nuestra, que nos proteja en nuestras vidas y nos den fuerzas para encontrarles en el prójimo en esta Semana Santa.

Un abrazo en Cristo Resucitado.