AlĂŠgrate
nĂşmero 190
enero-marzo 2020
Intenciones del mes de la Conferencia Episcopal Española
Sumario Editorial: Domingo de la Palabra de Dios 3 Catequesis Paulina: En el camino de Cristo 4 Insituto San Gabriel: Nuestra historia /1 6 Instituto Virgen de la Anunciación: Al servicio del evangelio 8 Instituto Santa Familia: Sanctifiquemos el tiempo... 10 Instituto Jesús Sacerdote: Espiritualidad sacerdotal 12 Donec Formetur 14 Antonietta Guadalupi 17 El Evangelio vivido: Compartiendo la Palabra /1 20 Institutos Agregados Paulinos Congresos intercontinentales 22 Vida Paulina 24 Calendario 27
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Julio Enero Por la unidad de todos los cristianos, para que pronto llegue el día en que se alcance la unidad visible de la Iglesia, como lo quiere el Señor.
Febrero Julio Por las mujeres que se encuentran en situación de pobreza, marginalidad, discriminación, abuso o violencia, para que sean siempre respetadas en su dignidad y puedan salir de esas situaciones injustas.
Julio Marzo Por las jóvenes y los jóvenes que son llamados a una vocación de especial consagración, para que escuchen la voz de Dios que les llama y nuestras Iglesias se vean enriquecidas con abundantes ministros y testigos del Evangelio.
Editorial
DOMINGO DE LA PALABRA DE DIOS
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l Papa Francisco instituyó el “Domingo de la Palabra de Dios”, que la Iglesia Universal celebrará cada tercer Domingo del Tiempo Ordinario—este año el 26 de enero—para hacer “crecer en el pueblo de Dios la familiaridad religiosa y asidua con la Sagrada Escritura”. Así lo indicó el Santo Padre con la Carta Apostólica en forma de “Motu Proprio” titulada “Aperuit Illis”, publicada el pasado 30 de septiembre, memoria litúrgica de san Jerónimo. El título de esta Carta Apostólica se basa en el pasaje bíblico del evangelio de san Lucas, capítulo 24, en el que se describe el gesto de Jesucristo a los discípulos con el cual “les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras”. “Dedicar concretamente un domingo del Año litúrgico a la Palabra de Dios nos permite, sobre todo, hacer que la Iglesia reviva el gesto del Resucitado que abre también para nosotros el tesoro de su Palabra para que podamos anunciar por todo el mundo esta riqueza inagotable”, escribió el Papa. Asimismo, la Carta Apostólica cita la Constitución dogmática “Dei Verbum” del Concilio Vaticano II y la Exhortación apostólica “Verbum Domini” de Benedicto XVI como fruto de la Asamblea del Sínodo de los Obispos de 2008 con el tema “La Palabra de Dios en la vida y misión de la Iglesia”. En el texto citada carta apostólica “Aperuit Illis”, el Papa Francisco señala que el Domingo de la Palabra de Dios “se colocará en un momento oportuno de ese periodo del año, en el que estamos invitados a fortalecer los lazos con los judíos y a rezar por la unidad de los cristianos”, y añade que “no se trata de una mera coincidencia temporal: celebrar el Domingo de la Palabra de Dios expresa un valor ecuménico, porque la Sagrada Escritura indica a los que se ponen en actitud de escucha el camino a seguir para llegar a una auténtica y sólida unidad”. Esta jornada eclesial, que además coincide con la clausura del Año Vocacional de la Familia Paulina, está en plena sintonía con nuestro carisma. Baste recordar las continuas llamadas del Padre Alberione, dirigidas a sus hijos e hijas, invitándonos acaloradamente a leer, meditar y difundir la Palabra Dios en todos los lenguajes de la cultura de comunicación y en todos los medios. Podemos decir con toda razón, que esta Jornada es especialmente nuestra. Muchísimas gracias al papa Francisco por haberla instituido.
P. Antonio Maroño, SSP
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Catequesis paulina
En el camino de Cristo En estas reflexiones Cristo ha sido y es el centro, como no podía ser de otro modo. Y si Él, Cristo, es nuestro camino, ¡caminemos el camino de Cristo!, que diría la Santa abulense.
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olamente podremos encontrar a Dios en tanto seguimos a Jesucristo. Es, pues, fundamental, ante todo, este seguimiento, la orientación de toda la existencia al encuentro con Jesús. Pero no nos engañemos, este seguimiento implica renuncia; diríamos que traído al momento actual: seguir a Cristo es ir contra corriente; porque en un mundo materializado hasta el extremo; egoísta, donde prima el “yo” por encima de cualquier otra consideración, seguir a Jesús es asumir estas palabras suyas: “quien quiera venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz de cada día, y sígame” (Lc 9,23). Esto suena tan contrario a los criterios humanos, que el seguimiento de Jesús se convierte en ir contra todos los criterios imperantes. ¿Merece la pena?... 4 Alégrate
¡Cómo no! Nosotros como Pedro, hemos de decir a Jesús: “Solo Tú tienes palabras de vida eterna, ¿a quién vamos a ir?” (Jn 6,68). Señor: nuestro corazón anda inquieto y desasosegado, y sólo Tú puedes darnos la paz y la felicidad; no como la da el mundo, que es efímera y falsa, sino la verdadera plenitud de cuanto el corazón anhela. Además, sabemos que seguirte es lo que llena el corazón de alegría y da sentido pleno a nuestra existencia. Mas para captar y vivir estas realidades es necesario una vida: viva de fe. La fe es el don de Dios al hombre y es, al mismo tiempo, la entrega libre y total del hombre a Dios; la fe implica la dócil escucha de la Palabra del Señor, que es ´lámpara´ para nuestros pasos y ´luz´ en nuestro camino. Si abrimos con confianza el corazón a Cristo,
si nos dejamos conquistar por Él, es posible experimentar que: nuestra única felicidad en esta tierra consiste en amar a Dios y saber que Él nos ama. El Papa Benedic to X VI ya alertaba sobre este seguir a Cristo, como único medio para que el hombre llegue a su plenitud: “Ser cristianos –decía el Papa-, significa considerar el camino de Jesucristo como la vía justa para ser hombres, como aquel que conduce a la meta, a una humanidad plenamente realizada y auténtica. Ser cristiano es un camino, o mejor: una peregrinación, un ir juntos con Jesucristo. Un ir en aquella dirección que Él nos ha indicado y nos indica” (D. de R. 2010). El seguimiento de Cristo: es una ascensión a la verdadera altitud del ser humano. El hombre puede elegir un camino cómodo y descansar de toda fatiga. Puede incluso descender hacia lo bajo, a lo vulgar. Puede hundirse en el barro de la mentira y lo superfluo. Pero Jesús nos guía hacia lo que es grande, hacia la vida según la verdad; hacia el coraje que no se deja intimidar por la habladuría de las opiniones dominantes; hacia la paciencia que soporta y sostiene al otro. “Jesucristo nos conduce hacia el amor pleno, y ese amor nos lleva a Dios”. Sin embargo, no hay que olvidar lo que apuntamos al principio: que el seguimiento de Cristo, el hacer su camino, implica la Cruz; ella forma parte de la ascensión que
...El seguimiento de Cristo requiere, además, que se escuche su Palabra y que se la viva: en la fe, la esperanza y el amor. nos lleva a la altura de Jesucristo. La Cruz es expresión de lo que significa el amor: “sólo quien se pierde a sí mismo, se encuentra”. Resumiendo: el seguimiento de Cristo requiere, además, que se escuche su Palabra y que se la viva: en la fe, la esperanza y el amor. Al comenzar el nuevo año, es momento opor tuno para replantearnos nuestra vida de consagrados, seguidores de Cristo en todo lo que ello implica, con todas las consecuencias. El tiempo pasa rápido; todo el será una pérdida lamentable si no conseguimos lo fundamental: seguir el camino de Jesucristo para llegar a identificarnos con Él, de tal forma que podamos decir como san Pablo: “Vivo yo, pero ya no soy yo, ¡ES CRISTO QUIEN VIVE EN MI!” (Gal 2,20). No seamos mediocres, tibios; porque mereceremos que se nos digan las palabras del Apocalipsis: “Por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca” (3,15). Maite Ballesteros, ISF
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Instituto san gabriel arcangel
NUESTRA HISTORIA / 1
En coincidencia con el 60º aniversario de la fundación de los Institutos Paulinos de Vida Secular Consagrada Agregados a la Sociedad de San Pablo, he aquí algunos rasgos de los primeros pasos de los Gabrielinos.
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esde la adolescencia, Santiago Alberione se distingue por su destacada p e r s o n a l i d a d y a u to n o m í a respecto de su ambiente. Se va formando gradualmente una conciencia crítica sobre los hombres y la sociedad, haciendo una profunda lectura y análisis. En sus años de estudiante (1897-1907) se muestra abierto a los eventos socio-religiosos de su tiempo. Su atención se concentra en profundizar el perfil exquisitamente “laico” del mismo Cristo. Escribirá en 1953 que en sus años de estudio «meditó el 6 Alégrate
gran misterio de la vida laboriosa de Jesús de Nazaret. Un Dios que redime al mundo con las virtudes domésticas hasta la edad de 30 años». Iluminado sobre las realidades terrenas de la esperanza cristiana, Alberione descubre en la sociedad de su tiempo aspectos constructivos, afirmando también que en ella se revela la presencia de Dios, «que cuida las cosas pequeñas y grandes: desde el átomo, el pelo de la cabeza, del lirio de los campos hasta el desarrollo del mundo físico, intelectual, moral». Está convencido de que «desde la
creación hasta su consumación la vida está alegrada por una luz que procede» y que «el cristiano, entre los hombres, es el más decidido exaltador del progreso científico-técnico». Objetivo En una vigilia, al comienzo del siglo XX, «decisiva para la misión específica y el espíritu particular en que iba a nacer y vivir la Familia Paulina», comienza a proyectar el futuro de sus fundaciones bajo la «particular luz de la Hostia». Fija algunos puntos del proyecto que irá definiendo cada vez mejor: en primer lugar «almas generosas» che «habrían de sentir cuanto él sentía e […] asociadas en organización». Para conseguir este fin, hace referencia a los compañeros de estudio: «él con ellos, ellos con él, recibiendo todos del Tabernáculo», apoyándose firmemente en algunos objetivos: «la Eucaristía, el Evangelio, el Papa, el nuevo siglo, la necesidad de un nuevo grupo de apóstoles […], la oración, el trabajo interior, las aspiraciones». «La idea, al principio muy confusa -referiráse aclaraba y con el pasar de los años llegó a aclararse». Comprometido en un ámbito social Desde 1908 hasta 1914 el joven sacerdote desarrolla una gran actividad y, sobre todo, presta especial atención a los
seminaristas conferencias sobre temas sociales y participa en congresos regionales y nacionales, ya sea en nombre propio, ya sea como representante del clero diocesano; también organiza «jornadas sociales» en la diócesis. Se propone tutelar los bienes supremos de las almas y de la patria»; pone en guardia sobre las ideologías y las corrientes sociales imbuidas de liberalismo y dominadas por la masonería. Escribirá que «acción y oración orientan hacia un trabajo social cristiano orientado a sanar de raíz gobiernos, escuela, leyes, familia, las relaciones entre las clases e internacionales». Documentación Paulina
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Instituto Virgen de la anunciacion
AL SERVICIO DEL EVANGELIO “El fin especial del Instituto consiste en servir y cooperar con la Iglesia en dar a la humanidad a Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida, con la difusión del pensamiento y la moral cristiana” (Beato Alberione)
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l Instituto Virgen de la Anunciación está integrado por mujeres célibes, llamadas preferentemente en su juventud, que quieren profesar la total consagración a Dios mediante los consejos evangélicos de castidad, pobreza y obediencia. De estas mujeres, apóstoles seglares, escribe así san Pablo VI: “Dicen al mundo que se puede amar con el desinterés y la perennidad que brotan del corazón de Dios, y que pueden dedicarse a todos sin atarse a ninguno, preocupadas principalmente de los más abandonados (castidad); que se puede vivir entre los bienes 8 Alégrate
temporales, y se pueden utilizar los medios de la civilización y del progreso, sin hacerse esclava de ninguno de ellos (pobreza); que se puede ser feliz sin encerrarse en una cómoda elección personal, permaneciendo plenamente disponibles a la Voluntad de Dios como aparece en la vida cotidiana y en los signos de los tiempos (obediencia)”. Estas consagradas viven su donación a Dios como seglares. No lucen en su indumentaria ninguna señal externa que las distinga de las demás compañeras de trabajo y profesión. No abandonan su campo de acción profesional, sino
que lo convierten en apostolado. Evidentemente, todo esto repercute en la práctica de los votos, en el modo de ejercer el apostolado y en su estilo de vida. En realidad, no puede hablarse de un apostolado propio del Instituto, pues la elección del mismo depende de la sensibilidad particular de cada miembro y de las necesidades del ambiente donde cada una se mueve. No obstante, y según el pensamiento del Fundador, reser van una preferencia hacia los apostolados de las Congregaciones Paulinas. Por tanto, este Instituto presenta un campo de acción amplísimo donde cada persona puede inserirse, de acuerdo con sus posibilidades. Teniendo siempre presente que es, sobre todo, su propio testimonio el que se impone, a ejemplo de María, la mujer nueva.
Las Anunciatinas se nutren de la única espiritualidad paulina, que se centra en vivir íntegramente el Evangelio de Jesucristo Camino, Verdad y Vida, en el espíritu del apóstol San Pablo y bajo la mirada de María, Reina de los Apóstoles. La síntesis más completa de esa espiritualidad la expresa magistralmente san Pablo: “Vivo yo, pero no soy yo; es Cristo quien vive en mi” (Gal 2,20). En estas palabras se las ha reiterado en multitud de ocasiones el Fundador a las Anunciatinas, mismo que a los demás miembros de la Familia Paulina, para reiterarles la necesidad de llevar adelante, siempre juntas, la unión con Cristo y su entrega al apostolado. Además, veneran a San Pablo como padre, como maestro e inspirador. De él aprenden el universalismo, que las debe empujar a llevar el mensaje de la salvación a todos. La fisonomía de consagradas y apóstoles les viene también de María, bajo la advocación de Virgen de la Anunciación, Madre de Dios, por ser ella “ejemplo de aquel amor maternal con que es necesario que estén animados todos aquellos que en la misión apostólica de la Iglesia cooperan a la regeneración de los hombres”. Ella es la inspiradora de todo apostolado; es el modelo perfecto de la plena disponibilidad a Dios y a los hombres. Redacción
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Instituto Santa Familia
SANCTIFIQUEMOS EL TIEMPO QUE DIOS NOS DA Los gandres hombres de la historia, cuando llegaron a entender el valor del tiempo, desde ese mismo momento no lo han vuelto a desperdiciar
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l tiempo vuela y no vuelve. Se puede remediar el desperdicio de las riquezas, quizás también el de la salud, pero nunca el derroche del tiempo. Así nos lo advierte Benjamín Franklin al sentenciar que “el tiempo es aquella cosa que no podemos prestar y menos aún ahorrar. Lo único que podemos hacer es vivir bien el tiempo que se nos da”. Entonces, ¿cómo podemos vivir el tiempo? Los gandres hombres de la historia cuando llegaron a entender el valor del tiempo, desde ese mismo instante no lo han vuelto a desperdiciar. Por ejemplo, el santo Juan Pablo II decía: “El día pasado ya no te pertenece. El mañana no es seguro. Solo el hoy te pertenece”. Por su parte, el gran Primado de Polonia, el cardenal Stefan Wyszynski, decía: “Si se dice que el tiempo es dinero, yo digo que el 10 Alégrate
tiempo es amor. El dinero perece, pero el amor dura in eterno”. Por esto se las arregló para vivir bien el hoy, no desperdiciendo ni siquiera un minuto. Estaba convencido de que la vida del cristiano no se debería contar por el dinero, sino por los latidos de amor a Dios y a los heramnos”. Si el hoy está en nuestras manos, nosotros, en cuanto cristianos, estamos invitados a vivir bien todos los segundos, todas las horas, todos los días, todos los meses, todos los años y ofrecerlos a Dios. Dios nos los ha dado, y Él
nos pedirá cuentas, instante por instante. Siendo consapévoles de esto, santifiquemos el tiempo que se nos ofrece. ¿Cómo? San Pablo nos enseña: “ya sea que comáis, ya sea que bebáis, hacedlo todo por la gloria de Dios” (1 Cor 10, 31). En la práctica, esto significa tener una recta intención de ofrecer cada día nuestros pensamientos, todos nuestros trabajos, los sentimientos y también nuestros pecados a Jesús por las manos inmaculadas de María. Preguntémonos, entonces, si somos capaces de perder nuestro tiempo por Dios. Hoy tenemos tiempo: para comer, para dormir, para trabajar, para ir al cine, para jugar la partida, para la compañía... No se tiene tiempo: para rezar, para ir a la Misa, para instruirse en las verdades de fe... Quede claro: la vida se nos ha dado para ganar la salvación. El que no encuentra tiempo para ocuparse de esto, oirá que se le dice: “más le valdía no haber nacido”. Es el único verdero fracaso, y es definitivo. Y para no presentarnos un día ante Dios con las manos vacías, con el corazón frío y el alma muerta, aprendamos a tener cuidado
...guardemos en el corazón la verdad de que el tiempo es de Dios, que tanto nuestros días, como los siglos, están en sus manos.
de los minutos para Dios. Nos lo enseña nuestro Fundador, el beato Santiago Alberione: “Tener cuidado con los minutos. Es una palabra inapropiada, pero aclara una idea. «Perder tiempo, al que más sabe, más le desagrada» (Dante. Purgatorio). Los cinco-diez minutos multiplicados por 5-10 veces al día, dan media hora e incluso horas; ¿y mutiplicados por un año, diez, veinte años? ¿o más años? Así, aquel clérigo que leyendo diez minutos, todos los días, un libro de ascética, o de sociología, historia, literatura, etc., restando el tiempo a conversaciones inútiles y a fáciles disipaciones y a lecturas indiferentes, ha adquirido un bagaje cultural más amplio que el de los compañeros y preciosísimo. Dígase lo mismo del Discípulo que ha llegado a adquirir una verdadera competencia en cualquier parte” (beato Santiago Alberione). En consecuencia, guardemos en el corazón la verdad de que el tiempo es de Dios, que tanto nuestros días, como los siglos, están en sus manos. Y tanto para Cristo, como también para nosotros, la vida debe ser una realidad de crecimiento. Crecimiento que, para nosotros, debe realizarse, no solo en el orden natural, humano, sino que también en el orden sobrenatural, porque, como hijos de Dios, estamos llamados a la vida eterna. Slawomir Sznurkowski, SSP
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Instituto Jesus Sacerdote
ESPIRITUALIDAD SACERDOTAL La espiritualidad sacerdotal es un modo de concreto de seguir a Jesús, un modo de vivir la fe centrados en la persona de Cristo.
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o resulta fácil profundizar en una definición o descripción de “espiritualidad sacerdotal”. Rastreando las páginas de la teología y la experiencia cualificada de los grandes místicos descubrimos que la espiritualidad es el ahondamiento de la Palabra de Dios que realiza el misterio de Cristo en la vida del sacerdote y de la Iglesia, y ésta se desarrolla bajo la acción del Espíritu Santo y la colaboración humana. Es un modo de concreto de seguir a Jesús, un modo de vivir la fe centrados en la persona de Cristo. Este seguimiento se hace desde una referencia a una experiencia de respuesta a la llamada vocacional. Se trata de una acción específica que Dios realiza por medio del 12 Alégrate
Espíritu Santo y que, actualizando y potenciando la transformación b a u t i s m a l, l l e v a a p l e n i t u d existencial la identificación con Cristo a la que el sacerdote se sabe llamado. Como fruto de esa acción nace el ser del sacerdote secular; y, como expresión externa de ese nuevo ser, brota la misión del sacerdote secular, su “ministerio”. Por lo tanto, esa misión no es un simple quehacer que uno pueda elegir arbitrariamente, sino una consecuencia ineludible de la nueva vida que surge de la acción de Dios en el alma. Ésta es una transformación tan profunda y peculiar que podemos decir que la gracia que la produce es
una verdadera consagración. Por esta consagración, Dios toma al sacerdote como propiedad personal suya y lo bendice con toda clase de bienes espirituales, para que reproduzca el ser de Cristo en su propio ser y sea así alabanza de la gloria de Dios en la sociedad. Esto es consecuencia de un principio general que rige la vida espiritual y que consiste en el hecho de que, cuando Dios encomienda una misión a alguien, lo transforma de antemano, capacitándolo para que pueda llevarla a cabo. La norma general que regula la concesión de gracias singulares a una criatura racional determinada es la de que, cuando la gracia divina elige a alguien para un oficio singular o para ponerle en un estado preferente, le concede todos aquellos carismas que son necesarios para el ministerio que dicha persona ha de desempeñar. Cuando san Pablo menciona los principales “ministerios” dentro de la Iglesia, afirma previamente que Cristo resucitado otorga la gracia para realizar todo ministerio, como don que es para la Iglesia: “A cada uno de nosotros se le ha dado la gracia según la medida del don de Cristo” En la teología paulina sobre la Iglesia, Cuerpo de Cristo, se subraya la amplitud y diversidad de los dones con los que el Espíritu Santo enriquece a la Iglesia, capacitando a cada uno para la misión con la
que contribuye al bien común (1Co 12,4-11). La “espiritualidad” sacerdotal es vida según el Espíritu. No es una espiritualidad prestada, colonizada o un añadido a la realidad personal, socio-cultural y eclesial de su “ser presbítero”. Esta nace de una clara conciencia de la propia identidad: Configurados con Cristo para construir y edificar su cuerpo que es la Iglesia.
La "espiritualidad" sacerdotal es vida según el Espíritu. Antonio Díaz Tortajada, IJS
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Donec Formetur
Ejercicios Espirituales: "NUESTRA TRANSFORMACIÓN EN DIOS"
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acer morir al hombre viejo y hacer vivir en nosotros a Jesucristo”. Hemos visto que este es el punto de partida del camino. Surge de manera espontánea una pregunta: ¿Hasta qué medida Jesucristo quiere vivir dentro de nosotros? La respuesta del Fundador es clara: hasta “nuestra transformación en Dios”. DF, pp. 11-12 La acción santificadora del alma consiste en nuestra transformación en Dios «ut homo fieret Deus» (Ireneo, Adv. Haer. III, 19.I) por medio del alimento Jesucristo, nutriéndose cada día de Jesucristo camino, verdad y vida. Este es el alimento que Dios da al hombre. Es necesaria la comida y la 14 Alégrate
asimilación. Dios ha preparado la mesa: «compelle intrare» (Lc 14,23). «Por una parte, pues, la gracia: eucaristía, evangelio (misa, comunión y visita); por otra, cooperación mediación, examen de conciencia, confesión, dirección espiritual. «Non ego autem, sed gratia Dei mecum» (Icor 15,10), «Cooperatores enim Dei sumus” (2Cor 3,9). Son necesarios: el examen de conciencia hecho tres veces al día con método… El ejercicio de la mortificación para formar una voluntad indiferente a las cosas: salud o e n f e r m e d a d, a l a b a n z a o humillación, riqueza o pobreza, etc. (…).
Así, con la mortificación se tendrá el camino Jesucristo; con el evangelio y la meditación se vivirá la verdad Jesucristo; con la comunión, visita y misa se tendrá la vida Jesucristo. “Donec formetur Cristus in vobis”». Nos espera nada menos que nuestra “¡nuestra transformación en Dios!”. La cual hemos de entenderla como el máximo don que Dios puede conceder al hombre. Lo que la criatura humana quería alcanzar con sus fuerzas, ahora le es “regalado” ¡por Dios, por su sorprendente benevolencia! El P. Alberione lo subraya reclamando, aunque de forma abreviada, la conocida máxima latina: «Factus est Deus homo ut
homo fieret Deus. Dios se hizo hombre para que el hombre llegara a ser Dios». Está prevista, por lo tanto, para el creyente, para cada miembro de la Familia Paulina una auténtica divinización. Para tal fin está a disposición, desde siempre, el alimento, que llega incluso a identificarse con la Persona de Jesús. De tal comida -Jesucristo Camino, Verdad y Vida- estamos invitados a nutrirnos cada día, porque es la comida “dada por Dios al hombre”. Será Jesús, por lo tanto, nuestro alimento cotidiano, que nos transformará en Él: y nosotros descubriremos con sorpresa que se verifica lo que escribe san Pablo: “somos transformados en aquella misma imagen (2Cor 3,18), esto es en Jesús, ¡imagen del Dios invisible! Todo esto compor ta que se cuiden “la manducación y la asimilación” de la comidaJesucristo. En perfecta analogía con el proceso del desarrollo físico, para el crecimiento espiritual son indispensables la cotidiana nutrición (“la manducación”) de la misma persona de Jesús y el consiguiente trabajo de “asimilación”. A este punto, el Fundador no deja de sugerir la disposición fundamental: se trata de dar la propia, personal cooperación. La obra de Dios es segura; en
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cambio, es la cooperación del hombre lo que a veces falta. La adhesión férvida de la persona llevará a valorar todos los “medios de gracia” (Misa, Comunión, Visita; meditación, examen de conciencia, confesión, dirección e s p i r i t u a l… ) : s i e m p re c o n fidelidad y constancia. Hay que advertir el subrayado sobre “ejercicio de la mortificación”. El Fundador nunca presenta la mortificación principalmente en sentido negativo (por ejemplo: imponerse alguna renuncia, cosa en sí buena y necesaria), sino de manera positiva: una precisa aplicación de la persona encaminada a “formar la voluntad indiferente a las cosas creadas” (una evidente referencia a los ejercicios espirituales de san Ignacio de Loyola. Esta visión positiva de la mortificación se convertirá en un punto constante en la enseñanza del P. Alberione. De este modo, el Fundador puede concluir, con esta feliz síntesis: • Con la mortificación se tendrá el camino Jesucristo: no solo se tendrá el camino que nos ha sido indicado por Jesús, sino a Jesús-mismo-Camino. • Con el evangelio y la meditación se vivirá la verdad Jesucristo: no solo la verdad que nos enseña Jesús, sino al mismo Jesús-Verdad; además, 16 Alégrate
no solo se conocerá la verdad, sino que se vivirá la VerdadJesús. • Con la Comunión, Visita y Misa se tendrá la vida Jesucristo: también aquí, se tendrá no solo la vida que nos viene de Jesús, sino que se encontrará y se tendrá a ¡Jesús-Vida en persona! Todo ello, sin solución de continuidad: «Hasta que Cristo esté formado en vosotros”. Don Guido Gandolfo, SSP
Antonietta Guadalupi
ANTONIETTA GUADALUPI Apertura del Proceso de Canonización
El día 8 de enero tuvo lugar la apertura del Proceso de Canonización, en la fase diocesana, de la sierva de Dios Antonietta Guadalupi (1947-2001), perteneciente al Instituto Virgen de la Anunciación, fundado por el beato Santiago Alberione
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l acto tuvo lugar en la catedral de Brindisi (Italia), el día 8 de enero a las 6 de la tarde, en el marco de la oración de Vísperas y en presencia del arzobispo Monseñor Domenico Caliandro. Los promotores del evento son el mismo Instituto Virgen de la Anunciación y la diócesis de Puglia. El autor del caso es el P. Domenico Soliman, de la Sociedad de San Pablo, Postulador General de la Familia Paulina. Partiendo de una expresión afortunada del cardenal Carlo María
Martini, Antonietta Guadalupi puede ser contada entre los “profetas menores de nuestro tiempo”. Nació en Brindisi, el 22 de noviembre de 1947. A la edad de 13 años, perdió a su madre y decidió interrumpir sus estudios para cuidar de su padre y su hermano. Después de reanudar la escuela, unos años más tarde, tuvo que interrumpir de nuevo sus esstudios debido a la muerte de su padre. Tenaz y muy persistente en sus propósitos, Antonietta logrará
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más tarde el grado de la madurez clásica y se inscribe en la Facultad de Medicina y Cirugía de Bari, aunque no logrará completar el curso de sus estudios. A los 19 años ingresa en el Instituto Virgen de la Anunciación, Agregado a la Sociedad de San Pablo, fundado por el Beato Giacomo Alberione y perteneciente a la Familia Paulina. En 1974, aconsejada por P. Gabriele Amorth, por entonces director espiritual de la Anunziatina (como comúnmente se llama a los miembros de este Instituto), se dirigió a Milán para matricularse en el Instituto Nacional de Tumores. En el corazón de su proyecto espiritual e stá la ple na co n fo r mació n a Cristo según el mensaje más genuino de San Pablo (cf. Gal 2.20), 18 Alégrate
consigna asumida personalmente y transmitida a sus hijos e hijas por el beato Santiago Alberione, fundador de la Familia Paulina. Y como “asistente de atención médica” conforta y consuela a los enfermos que atiende y a sus familias. Antonietta se convierte así en el primer “asistente de salud”, una tarea en ese momento muy innovadora y diseñada para acompañar personalmente al paciente y a su familia en el difícil camino de la atención médica. Pasa más de 25 años de su vida en lo que es una verdadera misión para ella, poniendo en la tarea, no sólo gran dedicación y competencia, sino convirtiéndose sobre todo en un verdadero
testimonio evangélico de entrega gozosa, siempre apoyada por una fe inquebrantable, incluso en momentos de fatiga y oscuridad. En su lugar de trabajo siempre ha habido un gran ambiente de acogida y serenidad, que los pacientes captan inmediatamente. A veces los enfermos y sus familias le piden lo imposible. Y ella, en lugar de desanimarse, apoyándose sólo en su fe, se dirige a Aquel a
quien “todo es posible”. Cuanto más fuerte y casi sin esperanza son el dolor y el sufrimiento, ella siempre logra, con su gran fe en la Providencia, transmitir paz y consuelo. Tanto en las situaciones ordinarias como en las más difíciles, se escuchan de su boca expresiones como: “¡Gracias!” y “¡Es una alegría perfecta!” Antonietta, con su estilo de vida, comunicó el amor del Señor, en su entrega a los demás, y personificó esa “cultura del encuentro” que representa una de las piedras angulares del Magisterio del Papa Francisco. La sierva de Dios Antonietta Guadalupi, murió el 30 de julio del año 2001, de un cáncer de intestino, a la edad de 53 años de edad. Sus restos mortales descansan en el cementerio de Brindisi. de la revista Famiglia Cristiana
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el evangelio vivido
Compartiendo la Palabra / 1 Es muy bueno que, cuando nos acerquemos al Evangelio, anotemos las reflexiones que el Señor nos inspire, de otra forma, con el tiempo, se nos borrarán de la cabeza.
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omo a lo largo de los ciclos litúrgicos se van repitiendo los textos, podemos recordar las reflexiones si las tenemos anotadas, y las vamos ampliando con un gran enriquecimiento, porque el Espíritu Santo, cada vez, nos inspira cosas nuevas. Y es muy fácil ordenarlas en un cuaderno de hojas recambiables, siguiendo el mismo orden que nos proporcionan los textos sagrados de nuestra Biblia. Como en el Boletín del número anterior proponía compar tir 20 Alégrate
algún Evangelio del Domingo, he buscado alguno que pueda ayudar para cualquier momento, independiente del ciclo litúrgico; aunque éste corresponde al Domingo de la Santísima Trinidad del Ciclo C; es sobre el Espíritu Santo: “Cuando venga él, el Espíritu de la Verdad, os guiará a la verdad completa. Pues no os hablará por su cuenta, sino que os dirá lo que ha oído y os anunciará las cosas venideras (Jn 16,13)
Jesús nos envía al Espíritu Santo para que nos conduzca, nos ilumine, esté con nosotros. Él nos lleva, nos guía cuando somos pequeños en la fe. Pero llega un momento en que hemos de prestarle mayor atención, y que en la medida que lo acojamos y escuchemos es como podremos crecer, si no, seguiremos pequeños. Aspirar a que el Espíritu Santo sea nuestro compañero de camino, sea Él quien nos conduzca siempre hacia la Verdad de la que nos habla Jesús para no equivocarnos. Cuando Jesús nos habla, a través de su Palabra, o al corazón, podemos escucharle gracias al Espíritu Santo, que es como si tradujese todo lo de Jesús, para que podamos entender y comprender las Escrituras. Todos estamos llamados a llegar a la verdad completa. Si en este momento de mi vida el Señor me quiere llevar a su verdad, tengo que esforzarme en seguir a su Espíritu, y es reconfortante pensar que muchos hermanos y hermanas están viviendo lo mismo en la Iglesia; y que antes, empezando por los Apóstoles, innumerables hermanos y hermanas hicieron el mismo camino. Gracias a ellos y al Espíritu Santo caminamos nosotros hoy. Por tanto, dejarnos llevar por el Espíritu Santo y estar abiertos a lo que Él desee de nosotros. Según los momentos de nuestra vida, algunas veces no se
nos ocurre nada por mucho que leamos el texto evangélico. No debe inquietarnos porque lo más importante es estar con el Señor. Él nos dará lo que necesitemos a través de ese texto. Lo que pasa es que sus caminos no son los nuestros. Y nunca nos va a defraudar y dejar que nos vayamos de vacío. Lo hará a su manera. Otro detalle a tener en cuenta es que, cuando compartimos, hemos de estar también muy atentos para escuchar lo que el Señor nos quiere decir a través de los demás. Mari Múñoz, ISVA
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Institutos Agregados Paulinos
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Congresos Intercontinentales
l próximo 8 de abril se cumplirá el 60º aniversario de la aprobación, por la Santa sede, de los teres Institutos Agregados: Jesús Sacerdote, San Gabriel Arcángel y Virgen de la Anunciación. A ellos se sumará también el Instituto Santa Familía, aunque su aprobación oficial tuvo lugar algunos años más tarde. Con tal motivo, el Gobierno General de la Sociedad de San Pablo ha convocado 3 Encuentros Intercontinentales, que se celebrarán: A) en Roma, para los países de Europa, los días 25 al 27 de febrero; B). En Argentina, para los países de Iberoamérica; C). En Filipinas, para los países de lengua inglesa. Participarán en estos Encuentros los Superiores de Circunscripción; 22 Alégrate
los Delegados de cada Instituto; 2 o 3 miembros de cada Instituto. De acuerdo con estos criterios, dados por el Gobierno General, por parte de España participarán en el Encuentro de Roma, el P. Lázaro García, Superior Provincial; el P. Antonio Maroño, Delegado de los 4 Institutos en nuestro país; Don Antonio Díaz Tortajada, por el Instituto Jesús Sacerdote; Dolores Andréu, por el Instituto Virgen de la Anunciación; y María Teresa Ballesteros, por el Instituto Santa Familia. Del Instituto San Gabriel Arcángel no puede participar ninguno de sus miembros por circunstancias de sus respectivas familias. Para preparar este encuentro, el Delegado General, P. Vito Fracchiolla, ha enviado una
encuesta a todos los miembros de los Institutos Paulinos y a los Delegados con sus respectivos Consejos, invitando a contestarla para un mejor conocimiento de la realidad de los Institutos y de las expectativas y deseos de cada uno de los miembros. Por los datos que tengo, la mayor parte de los miembros de cada Instituto ha contestado a la encuesta dentro del plazo
que se ha dado. Y, además, el día 8 de diciembre hemos tenido un Encuentro, en esta casa de Protasio Gómez / Madrid, en el que han participado conmigo Maite y María Antonia, del Instituto Santa Familia, y Mari, Teresa y Dolores, del Instituto Virgen de la Anunciación. En este Encuentro, que ha sido muy rico, tanto a nivel personal como de grupo, hemos abordado las distintas cuestiones que están planteadas en la Carta de convocación del Encuentro Internacional de Roma. Por otra
parte, como Delegado, yo deberé cumplimentar otras formalidades. Esperamos y deseamos que el Encuentro que tendremos en Roma responda positivamente a lo que el Gobierno General espera en orden a una renovación y relanzamiento de cada uno de los Institutos Agregados Paulinos. La circunstancia, recuerda el 60º aniversario de la aprobación de los mismos se lo merece. P. Antonio Maroño, SSP
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Vida Paulina SOCIEDAD DE SAN PABLO: ENCUENTROS INTERNACIONALES EN ROMA
Del 4 al 8 de noviembre, en Ariccia, se ha celebrado el 2º Seminario Internacional de la Formación Paulina para la Misión (participantes: Gobierno General, Superiores de Circunscripción, Coordinadores generales de la formación y Directores Generales del Apostolado). Del 9 al 10 de noviembre, en Roma, se han celebrado los Encuentros de los Organismos internacionales: CIDEP, GEC y CAP-ESW (participantes: Superiores de Circunscripción y Directores Generales del apostolado). Del 11 al 14 de noviembre, también en Roma, se ha celebrado el Encuentro del Gobierno general con los Superiores de Circunscripción (participan el Gobierno General con los Superiores de Circunscripción). Por parte de España, participaron en estos importantes Encuentros el Superior Provincial, P. Lázaro García; el Director General de Apostolado, P. Miguel Carmen; y el Coordinador Provincial de la Formación; Hno. Pepe Pedregosa. Visita del Superior General a España Entre los días 11 y 14 de diciembre, el Superior General de la Sociedad de San Pablo, P. Valdir José de Castro, ha hecho una breve pero intensa visita a las Comunidades Paulinas de Madrid. No sólo a las Comunidades de la Sociedad de San Pablo, sino también a las sedes centrales de las Hijas de San Pablo y de las Pías Discípulas del Divino Maestro. Y también tuvo tiempo, cosa que le hemos agradecido de verdad, para recibir, saludar y dirigir la palabra a los miembros de los Institutos Agregados residentes en Madrid, Anunciatinas y San Gabriel Arcángel. 24 Alégrate
Hijas de San Pablo: Nueva Superiora General
La congregación de las Hijas de San Pablo ha celebrado el 11º Capítulo General, con la participación de 60 Hermanas, procedentes de 52 naciones. Y en el marco del mencionado Capítulo General, la Hna. Anna María Caiazza, de nacionalidad italiana, ha sido elegida como nueva Superiora General. Nuestra más cordial felicitación.
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Pías Discípulas del Divino Maestro:
Sumario Nueva Superiora Delegada en España
Después de la Visita que la Consejera General de las Pías Discípulas del Divino Maestro Hna. Giovanna Uchino, japonesa, hizo a la Delegación en España, el Consejo General nombró nueva Superiora Delegada de esta Circunscripción a la Hna. Liria Fabián, nacida en Brasil. Al mismo tiempo que felicitamos y damos la bienvenida a España a esta hermana, damos las gracias a la anterior Superiora Delegada, la Hna. Pierina Becerra, por el gran servicio que ha prestado y sigue prestando a sus hermanas de Congregación en España.
Biblia Viva: Nueva Revista de los Paulinos en España El pasado 27 de noviembre, la Sociedad de San Pablo ha presentado en Madrid una nueva revista de temática netamente bíblica, titulada BIBLIA VIVA. Esta nueva revista, cuyo primer número ya está en la calle, nace con el propósito de acercar la Biblia a todos los hombres y mujeres de nuestro tiempo, a los niños y a los jóvenes, a los mayores y a los ancianos… A todos. Su Director y Coordinador de redacción es el Hno. Pepe Pedregosa, que es también el Director del Centro Bíblico San Pablo en España. 26 Alégrate
CALENDARIO
Enero
Febrero
Marzo
1. Solemnidad de Santa María Madre de Dios 1. J o r n a d a M u n d i a l d e Oración por la Paz. 6. Solemnidad de la Epifanía del Señor. 7. 1997, aniversario de la muer te de Sor. M. Oliva García, HSP. 7. 1917, aniversario de la muerte del Hno. Manuel Martínez, SSP 11. 1919, aniversario de la muerte de Dolores Báez, ISVA. 12. Fiesta del Bautismo del Señor. 16. 2002, aniversario de la muerte de Guadalupe Lozano, ISVA. 18. Comienza el Octavario de Oración por la Unidad de los Cristianos. 20. 2001, aniversario de la muerte del H. Cirilo Peñas, SSP. 20.1917, aniversario de la muerte del Hno. Pablo Uriarte, SSP 22. 1991, M. Tecla Merlo, HSP, es declarada venerable. 24. 1948, aniversario de la muerte del beato Timoteo Giaccardo, SSP. 25. Fiesta de la conversión del Apóstol San Pablo. 26. Jornada de la Infancia Misionera. 30. 1989, aniversario de la muerte del P. Desiderio Costa, SSP.
2. Fiesta de la Presentación del Señor. 2. Jornada Mundial de la Vida Consagrada (24ª). 5. 1964, aniversario de la muerte de M. Tecla Merlo, primera Superiora General de las HSP. 5. 1998, aniversario de la muerte del H. José María López, SSP 5. 2015, aniversario de la muerte del H. Lucinio López, SSP. 8. Jornada Internacional de Oración contra la Trata de Personas (6ª) 9. 2011, aniversario de la muerte del H. Fco. J. Martínez de Antoñana, SSP. 9. Colecta de la Campa contra el hambre en el mundo. 10. 1924, en Alba, “dies natalis” de las Pías Discípulas. 11. Jornada Mundial del Enfermo (26ª). 12. Colecta de la Campaña contra el Hambre en el Mundo 13. 2011, aniversario de la muerte del P. Miguel Rojo, SSP 15. 2015, aniversario de la muerte del H. Lucinio López, SSP 18.1919, aniversario de la muerte del Hno. Vicente Hernández, SSP. 26. Miércoles de Ceniza. Abstinencia y ayuno 2 8 . 2008, a n i v e r s a r i o d e la muerte de Sor Mª Fidelis Puebla, HSP.
1. Día y colecta de Hispanoamérica 3. 1990, el Hno. Andrés R. Borello es declarado Venerable. 3. 2014, aniversario de la muerte del Hno. Arturo Guinea, SSP 8. 1916, en Mango (Italia), nace el venerable Andrés R. Borello 10. 1917, aniversario de la muerte del P. Jesús Álvarez, SSP 11. 1988, aprobación de la “Asociación de los Cooperadores Paulinos”. 15. 1933, aprobación Pontificia de las Hijas de San Pablo. 15. 1919, aniversario de la muerte de la Hna. Mercedes Barriuso, HSP 19. Solemnidad de S. José, esposo de la Virgen María. – Día y Colecta del Seminario 19. 1935, llegan a España (Bilbao) las Pías Discípulas del Divino Maestro. 20. 2008, aniversario de la muerte del P. Antonio Díaz, SSP. 21. 2013, aniversario de la muerte del P. Antonio Pinedo, SSP. 23. 2008, aniversario de la muerte de Sor Honorina Mussi, HSP. 25. Solemnidad de la Anunciación del S eñor. Titular del Instituto “Virgen de la Anunciación”. 25. 1924, las Pías Discípulas del Divino Maestro comienzan la Adoración Eucarística diurna.
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Sumario
INSTITUTOS PAULINOS DE VIDA SECULAR CONSAGRADA
La pobreza como parte negativa es privación y como parte positiva es construcción y edificación con el fin de ayudar a las almas (Vivamos en Cristo Jesús, p. 26) Despegar el corazón de las cosas de este mundo y abstenernos de administrarlas constituye la parte negativa del voto de pobreza. ¿Basta esto? Es necesaria la pobreza positiva: trabajar, sudar, cansarse (HSP52, p. 326s). Es necesario que el Instituto viva como nació; y habiendo nacido sin poseer nada, debe vivir del propio trabajo (Haec meditare, s2, 117). Protasio Gómez, 15 28027 MADRID +34 917 425 113 institutos@sanpablo.es
Es rica la pobreza religiosa, ¡y dichoso quien la haya observado fielmente. Parece una contradicción, pero es una consoladora realidad (Para una renovación espiritual, 176).