ENSAYO “Ley de integración en la educación intercultural y sus implicancias curriculares” ¿Real eficacia en la integración?
Profesor: Jorge Miranda Cátedra: Diseño y Adaptación curricular Estudiante: Daniela Villagrán S.
Temuco, 20 enero 2012
La Integración es el derecho de todas las personas a formar parte de la dignidad humana y participar en las diferentes áreas de la sociedad, recibiendo el apoyo necesario en cuanto a educación, salud, empleo, ocio, servicios sociales y cultura, reconociendo los mismos derechos del resto de la sociedad. En nuestro país existen algunos respaldos que incluyen a las etnias reconocidas de Chile en el sistema escolar, de esta manera, el objetivo principal del presente ensayo es examinar las políticas existentes que amparen la educación intercultural y la integración de estas al sistema educativo nacional, relatando además las implicancias curriculares que esto conlleva y la real eficacia de estas medidas. A partir de 1990, los sucesivos gobiernos de Chile han impulsado una política que busca reconocer plenamente a los distintos pueblos indígenas que integran la sociedad chilena, respetando y desarrollando su propia identidad. Una de las principales acciones fue remitir al Congreso Nacional un paquete de propuestas legislativas que culminó con la aprobación de la Ley Indígena (Ley N° 19.253, vigente desde noviembre de 1993), reconociendo en primera instancia por medio del Estado las principales etnias indígenas de Chile (Mapuche, Aimara, Rapa Nui, la de las comunidades Atacameñas, Quechuas, Collas y Diaguita del norte del país, las comunidades Kawashkar o Alacalufe y Yámana o Yagán de los canales australes). Por otro lado se encuentra el Programa Indígena Urbano (PIU) que tiene como eje central promover el desarrollo integral de la población indígena que habita en las ciudades, favoreciendo el acceso a oportunidades de emprendimiento, espacios de participación, educación, valoración de su identidad, etc. Estas acciones, demuestran que el Estado valora la existencia de estos por ser parte esencial de las raíces de la nación chilena, apreciando su integridad, desarrollo y costumbres, promoviendo también por medio del Estado y las políticas creadas el respeto y la protección de dichas culturas, familias y comunidades, e iniciando propuestas de integración, las que se vinculan a la flexibilización del curriculum y apuntan al respeto y resguardo de estas culturas, desarrollando acciones como: desarrollo de un sistema de educación intercultural bilingüe a fin de preparar a los educandos indígenas para desenvolverse en forma adecuada tanto en su sociedad de origen como en la sociedad global, y así usar y conservar sus idiomas (consideran las lenguas aymara, quechua, rapa nui y mapuzugun para ser enseñadas), o el permitir a los estudiantes acceder a un conocimiento adecuado de las culturas e idioma indígenas y que los capacite para valorarlas positivamente; trabajando en la recuperación o consolidación de identidad, “valorar y valorarse”, esto desde el punto de vista de promover una auto imagen positiva de lo que significa ser indígena, de ser partícipe de un pueblo histórico que posee su propio legado cultural, promocionando las expresiones artísticas y culturales y la protección del patrimonio arquitectónico, arqueológico, cultural e histórico indígena, considerando además recursos especiales destinados a satisfacer los programas de becas
indígenas, respaldado por el artículo 33 de la ley mencionada anteriormente, lo que da paso a crear nuevas oportunidades de acceso de estas culturas indígenas a una educación que no sea distante a sus realidades, si no que se realicen las integraciones pertinentes para dar una respuesta positiva al propósito general que plantea el Estado que es preservar dichos patrimonios históricos de nuestras culturas indígenas, entregando esa igualdad de oportunidades que se busca conseguir, desarrollando al máximo sus potencialidades y alcanzar mejores resultados, tomando el Estado la responsabilidad de responder con diversos medios pedagógicos, técnicos y de recursos materiales y didácticos que incluyan las pautas de estas culturas, y distribuyendo el curriculum de manera igualitaria a la población (independiente de su procedencia) para la integración eficaz dentro de todo el proceso de enseñanza. Pero ante diversas estrategias, surge la duda si existe una real eficacia en la integración de estas propuestas, y es aquí donde vemos cifras reveladoras de los datos que arroja el Censo de 2002, pues 692.192 personas declararon pertenecer a pueblos indígenas originarios, es decir, el 4,6% de la población nacional, dentro de los cuales el porcentaje de analfabetismo entre la población indígena es casi el doble de la tasa de analfabetismo entre los no indígenas. En efecto, sólo el 3,7% de la población no indígena declara que “no sabe leer ni escribir”, mientras que en la población indígena este porcentaje se eleva al 6,8%, además la proporción de población perteneciente a etnias que no alcanzaron a completar su Enseñanza Básica es 12.2 puntos superior al de la población no indígena. Por otro lado, según la encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2009, solo un 14% de quienes integran los pueblos indígenas de Chile hablan y entienden su lengua originaria, aspecto especialmente preocupante si consideramos que la lengua es la encargada de configurar la cultura de cada pueblo. Datos de esa magnitud reflejan que no hay un verdadero cumplimiento de todas las propuestas y modificaciones curriculares que buscan alcanzar, desde el hecho de ver el alto porcentaje que no conoce su lengua originaria a pesar de las medidas que se han establecido, esto se puede presentar como una fuerte crítica a la falta de estrategias de control y supervisión estatal, ya que la flexibilización curricular que antes se mencionaba no está dando los resultados esperados (aunque si hayan varios progresos). Por otro lado surge un desafío para toda la sociedad, que es mantener un fuerte respeto y protección de los idiomas indígenas posibilitan aproximarse y conocer más a fondo la cultura, como también el incluir a todos las personas pertenecientes a estas etnias indígenas de Chile, dándoles la oportunidad de lograr cursar una educación de calidad y que le permita desenvolverse oportuna y satisfactoriamente dentro de la sociedad. Ahí la importancia de conocer y dar respuesta a todo lo mencionado aquí.
Bibliografía Banco Mundial (s/f) Plan para Población Indígena: Proyecto de Asistencia Técnica Sistema de Protección Social. Extraído el 17 enero 2012 de http://www.chilesolidario.gob.cl/administrador/arc_doc/14544009514a817744cc91d.pd f
Ministerio de desarrollo social (2011) Programa Indígena Urbano, extraído el 17 enero 2012 de http://www.conadi.gob.cl/index.php/programa-indigena-urbano
Ministerio de planificación y cooperación (2008) Establece normas sobre protección, fomento y desarrollo de los indígenas, y crea la corporación nacional de desarrollo indígena. Extraído el 17 enero 2012 de http://www.leychile.cl/Navegar?idNorma=30620