En los últimos años, ha aumentado la preocupación entre la población y los órganos de gobierno de las ciudades europeas por el aumento de la radicalización y el extremismo violento, lo que ha llevado a las autoridades locales a considerar estas cuestiones como prioridades fundamentales en sus estrategias de prevención del delito. En particular, les interesa comprender los procesos que subyacen a la radicalización a fin de prevenirlos mejor. Durante más de 30 años, el Efus ha defendido un enfoque equilibrado que combina la prevención, la sanción y la cohesión social para abordar las causas de la delincuencia y mejorar su prevención. Dado que los factores de riesgo de la delincuencia común y de la radicalización violenta son en muchos aspectos similares, es lógico que la prevención de esta última se incluya en una estrategia global de prevención de la delincuencia.