Revista
digital de Arquitectura y AÑO DOS / NO.8 / 2016
Arte
LÍMITES Y FRONTERAS
Michelle Belle + Efraín Torres, Grabador + Imaginario. Frida Inés Sánchez Pineda + Proyecto Tarima + DOSSIER: LÍMITES Y FRONTERAS + De la extinción del objeto arquitectónico + Del objeto al cuerpo arquitectónico + Ciudades contemporáneas y sus fronteras difusas + Agua, territorio y ciudad
Portada: Espacio Vivido 2016
Xalapa, Veracruz, México 2016 © Todos los Derechos Reservados
Perfil - http://goo.gl/26zgPn Página -http://goo.gl/bYwGZj @EspacioVivido Canal - http://goo.gl/mVCDwu
ESPACIO VIVIDO, REVISTA DIGITAL DE ARQUITECTURA Y ARTE, año 2, No. 8, Marzo - Abril - Mayo 2016, es una Publicación trimestral editada por Espacio Vivido, calle Adalberto Tejeda, 67, col. Modelo, C.P. 91040, Xalapa, Veracruz, espaciovivido.com. Editor responsable: Anahid Aurora Godínez Gutiérrez. Reserva de Derechos al Uso Exclusivo 04-2016-021906403400-30, ISSN en trámite, ambos otorgados por el Instituto Nacional de Derechos de Autor. Responsable de la última actualización de este Número, Arq. Dulce Monserrath Sánchez Guzmán, calle Arteaga, 140, col. Centro, Coatepec Veracruz, C.P. 91500, fecha de última modificación 7 de Marzo del 2016. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor de la publicación. Queda prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación sin previa autorización del Instituto Nacional de Derecho de Autor.
Revista Digital de Arquitectura y Arte
2016
Gente con Talento
Año 2
No. 8
2
Límites y Fronteras
Michelle Belle
10
Efraín Torres, Grabador.
A través de la mirada
12
Imaginario. Frida Inés Sánchez Pineda
Proyectos
20
Proyecto Tarima
Dossier
25
Límites y fronteras
29
De la extinción del objeto arquitectónico Del objeto al cuerpo arquitectónico
34
Ciudades contemporáneas y sus
fronteras difusas 36
Agua, territorio y ciudad
GRUPO ESPACIO VIVIDO Dirección General DAVID RUIZ COLORADO Coordinación de Relaciones Públicas y Corrección de Estilo ANAHID GODÍNEZ GUTIÉRREZ Coordinación Editorial D. MONSERRATH SÁNCHEZ GUZMÁN Coordinación de Maquetación y Difusión RAÚL ALVARADO SÁNCHEZ Coordinación de Medios Audiovisuales
Colaboradores
DG. MICHELLE ARRES BELLACETIN FOT. FRIDA INÉS SÁNCHEZ PINEDA UNO TALLER ARQ. JOSÉ ANTONIO SOLANO PÉREZ ARQ. URB. ARTURO VELÁZQUEZ RUIZ M. ARQ. RAMÓN GUILLERMO SEGURA CONTRERAS ARQ. FLORENCIA FORNERO GOI ARQ. LESLIE PEREYRA OVIEDO
www.espaciovivido.com espacio.vivido@gmail.com
EDITORIAL ¿Límite o frontera? ¿Son estos dos conceptos la misma cosa? Para muchos esta es una pregunta que aplicada a un contexto determinado podría tener diversas respuestas. Dentro del espacio natural, urbano, habitacional etc., los límites pueden ser algo tangible por el contrario de una frontera que pudiera ser algo que nosotros creamos y no existe físicamente. ¿Hasta dónde estos dos conceptos podrían ser buenos o malos para nuestra vida cotidiana? ¿Son ellos los responsables de todas las malas prácticas de nuestras ciudades, modos de vivir, etc.? En esta edición Número 8 de Espacio Vivido hablaremos en nuestro Dossier sobre los distintos enfoques que pueden tener estos conceptos. Distintos países, ciudades, nacionalidades nos cuentan sus experiencias. Esta publicación número 8 está llena de grandes talentos: el trabajo gráfico de Michelle y la fotografía de Frida nos harán ver la gran belleza de la mujer, así como el proyecto Tarima nos demostrará que no hay límites para expresar nuestra creatividad arquitectónica. Una entrevista con el grabador Efraín nos enseña que el grabado sigue siendo una de las técnicas más efectivas para expresar el arte. Amigo lector, te invitamos a hojear nuestras páginas y detenerte en cada uno de nuestros artículos. Acuérdate de la frase de Miguel de Cervantes “El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho”. EV
Michelle Belle Soy Michelle Arres Bellacetin - Michelle Belle. Hago diseĂąo e ilustraciĂłn, radico en la ciudad de Xalapa. Estas 7 ilustraciones fueron pintadas con acrĂlico sobre papel de 18 x 12 cm, posteriormente fueron hechas digitalmente procurando asemejar las pinceladas y tonalidades originales como parte de un ejercicio personal para el estudio del color digital.
micasagrafica.tumblr.com facebook.com/micasagrafica
2
espaciovivido.com
Gente con talento AĂąo 2 . No. 8 . LĂmites y Fronteras
3
4
espaciovivido.com
Gente con talento AĂąo 2 . No. 8 . LĂmites y Fronteras
5
6
espaciovivido.com
Gente con talento AĂąo 2 . No. 8 . LĂmites y Fronteras
7
8
espaciovivido.com
Gente con talento AĂąo 2 . No. 8 . LĂmites y Fronteras
9
EFRAÍN TORRES Grabador
Efraín Torres_artista gráfico - https://goo.gl/qokHse
10
espaciovivido.com
Gente con talento AĂąo 2 . No. 8 . LĂmites y Fronteras
11
La imaginación es aquella facultad de la mente que permite representar en ella las imágenes de las cosas reales como de las ideales. La imaginación consiste en un ejercico de abstración de la realidad actual provocando deseos e ilusiones. Hasta ahora es una utopía tratar de alcanzar las imágenes que nuestra mente realiza, es por eso que traté de crear imágenes con múltiples exposiciones, tratando de que los receptores se identificaran con ellos y al observarlos vieran un tipo de ensueño e irrealidad cercano a su imaginación.
Frida
12
espaciovivido.com
http://fridaines.tumblr.com
A través de la mirada Imaginario
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
13
Un anhelo
14
espaciovivido.com
A través de la mirada Un deseo
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
15
Un pensamiento
16
espaciovivido.com
A través de la mirada Un sueño
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
17
Un recuerdo
18
espaciovivido.com
A través de la mirada Una memoria
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
19
PROYECTO TARIMA
Proyecto: Vivienda en el cerro Propietario: Familia Fernández. Ubicación: Xalapa Veracruz México. Superficie: 90m2 Costo: $280,000*
PROYECTO: UNO_Taller Arq Antonio Solano CONSTRUCCIÓN: UNO_Taller Módulo 1 (servicios). Mtro. de obra: Omar Pérez. Módulo 2 : Arq. Raúl Ugarte / Arq. Antonio Solano Instalaciones hidrosanitarias: Víctor Conde Instalación eléctrica: Gustavo Hernández DISEÑO DE ILUMINACION: ARCANO PROJECT.
20
espaciovivido.com
Proyectos
E
l proyecto consistió en diseñar una vivienda para una pareja joven sobre otra vivienda, cuyas losas de concreto presentan una fatiga considerable y se encuentran a diferentes alturas; contando además con un presupuesto inicial limitado. Las condicionantes de partida nos llevaron a las primeras decisiones de diseño: 1.-Un sistema constructivo que no trasmita demasiada carga a la vivienda inferior. 2.-Pensar en la auto-construcción como una solución para combatir el incremento de costos. 3.- Colocar los elementos mínimos, necesarios para delimitar algunas funciones y espacios.
Se decidió agrupar cocinacomedor y baño en un módulo construido con un sistema “tradicional”: muros de carga de tabique y losa de concreto; el resto de la casa, 2 recámaras, vestidor y estancia, se soluciona con un sistema mixto que usa las palets como elemento principal en muros y cubierta. Durante el proceso de construcción, se sumó una situación más, por decisiones familiares, se desarrollaron unos locales comerciales justo enfrente de la vivienda, dejando un pequeño pasillo de 80 cms como separación entre una construcción y otra,
como resultado, teníamos una obra arquitectónica carente de fachada. Esto nos llevó a tomar todas las decisiones priorizando el interior más que el exterior, en la búsqueda por la correcta iluminación natural del espacio. Para darle mayor amplitud a la vivienda, se optó por una cubierta inclinada corrida y muros a alturas limitadas para dar continuidad visual. Una de nuestras metas fue presentar un espacio sincero, en el cual, siempre estuviera presente el costo, pero sin que éste se volviera motivo de desvalorización; así que confiamos en el material y su expresividad natural: Lo que es de tabique luce como tabique, lo que
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
21
es de concreto luce como concreto, lo que es de madera luce como madera. Cada elemento, encontró su lugar a través de la necesidad de su existencia, una moldura o un domo, incluso canaletas eléctricas, no solo fueron colocados como remates estéticos, cumplen funciones: refuerzan, delimitan, enmarcan, etc. En cuanto a la forma en que fue construida la vivienda, el módulo de servicios fue ejecutado por una cuadrilla: 1 Mtro de Obra + 1 oficial + 1 ayudante; mientras que el segundo módulo fue desarrolladopor nosotros usando la auto-construcción, lo que nos permitió no disparar el costo. A lo largo de los 2 años que duró la obra, las dinámicas entre usuarios - arquitectos obreros se fueron estrechando logrando un buen equipo de trabajo.
22
espaciovivido.com
Es indudable que cada obra construida, por mínima que sea, requiere de una inversión considerable para su realización. Muchas veces, los arquitectos, ingenieros o constructores, usamos el factor “costo” más como una excusa cómoda, que como una oportunidad para explorar y afrontar situaciones de diseño. No es criticable el hecho de que alguien gaste millones en realizar un proyecto arquitectónico, lo que sí es condenable es querer vender la idea de que se necesitan millones para poder hacerlo. Indudablemente este proyecto no hubiera podido llegar a término sin la confianza que la joven pareja depositó en cada uno de nosotros, incluso en los momentos de dudas, confiaron en que sería posible tener un espacio para vivir y no para padecer, poder ser dueños de su espacio, sin tener que pagarlo por el resto de sus vidas.
Proyectos Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
23
24
espaciovivido.com
LÍMITES y FRONTERAS
DOSSIER
Por David Ruiz Colorado
D
e latín limes, limitis ‘sendero entre dos campos’, ‘límite, frontera’. Tales conceptos suelen utilizarse en distintos campos con variadas acepciones y matices. En cualquier caso, se trata de líneas o puntos que marcan una separación o un estado que no es posible superar dentro de una escala determinada. En el campo de la geografía, el urbanismo y la arquitectura, estos límites y fronteras se entienden como elementos reales o imaginarios, naturales o artificiales que insertos en la estructura urbana o rodeándola y aún en un nivel inferior (léase objeto arquitectónico), dan forma a la ciudad y por ende al comportamiento de sus habitantes.
Aprendiendo de una ciudad del norte de Chile Algunas ciudades poseen marcadas características; otras prefieren revelarlas a quienes profundicen en su conocimiento. Durante una estancia estudiantil en la ciudad de Iquique, en el norte de Chile, tuve la oportunidad de conocer y asimilar algunos rasgos naturales y urbano-arquitectónicos definitorios de esta urbe. En una escala macro, Chile se entiende como una región desarrollada sobre un eje longitudinal Norte-Sur. Este hecho se debe a la existencia de dos grandes barreras naturales. Por un lado el océano Pacífico y por el otro la Cordillera de los Andes. Geográficamente, estas inmensas fronteras dan forma al país y por ende a varias de sus ciudades. De hecho, los Andes constituyen una frontera natural entre Chile y Argentina.
26
espaciovivido.com
A menos que se trate de los Emiratos Árabes, las ciudades no crecen hacia el mar. Por el otro lado, desarrollarse hacia la cordillera montañosa tampoco sería una opción. Por supuesto que existen ciudades ubicadas en el denominado “interior del país”, aunque la mayoría se encuentra en la costa. En un nivel subsecuente, la ciudad de Iquique también se desarrolla sobre un eje Norte-Sur. Hacia el Oeste, el mar ejerce una presión –acrecentada por la presencia de tsunamis- y hacia el Este, una enorme pared rocosa se eleva aproximadamente 400 metros sobre el borde costero y se extiende prácticamente a lo largo de toda la mancha urbana, generando una enorme planicie detrás de ella donde actualmente se ubica la comuna de Alto Hospicio, una “ciudad dormitorio” dependiente de Iquique, aunque con sus rasgos y elementos propios. Podría decirse que Iquique se extendió hacia el Este con la creación de Alto Hospicio y desde cierta perspectiva es correcto. No obstante, para nuestro análisis consideraremos
esto como irrelevante. De hecho, las únicas maneras de expandirse han sido en cierta medida hacia el Sur, y por supuesto de manera vertical porque hacia el Norte dicha pared se une con el mar y se transforma en un largo acantilado que no cede hasta encontrarse con otra de las ciudades importantes del norte de Chile: Arica, en la frontera con Perú, interrumpiéndose sólo por algunas desembocaduras fluviales. El crecimiento vertical ha sido una de las opciones que esta ciudad ha elegido en los últimos años, opción que en todo caso no tendría límites a no ser por el factor sísmico tan relevante en esta región. En efecto, los sismos y sus repercusiones en el mar han sido históricamente causa de daños y destrucción de muchas ciudades del borde costero chileno; cualquiera pensaría dos veces en vivir allí. No obstante el arraigo es más fuerte de lo que nos imaginamos, pero ese es otro tema del que no hablaremos aquí. Con todo, mientras existan recursos y medios podemos pensar que el crecimiento urbano será constante.
Borde costero e interior. Entre estos la ciudad. Fotografía: David Ruiz, 2010.
Hasta aquí se comprende el límite geográfico y urbano que define las ciudades y permea en el imaginario colectivo de sus habitantes. No obstante, dentro de la traza urbana y a medida que la ciudad se expande de manera planificada o no, aparecen franjas, líneas o zonas que son comprendidas por los propios habitantes como fronteras o límites entre un sector y otro. Tal es el caso del fenómeno que se genera en la zona de confluencia entre la parte industrial y la parte no reconocida como tal de Iquique. Por su condición de puerto y su ubicación, esta ciudad es clave para el intercambio comercial. Debido a eso, existe una zona libre de impuestos y un desarrollo industrial y comercial bastante notorio, caracterizado por la presencia de manzanas y bloques enteros formados por bodegas, talleres, etc. En ellos laboran individuos de diversas procedencias y modos de vida. Cuando este aglomerado urbano y social confluye con la parte habitacional o que no es propiamente industrial de la ciudad,
el resultado es una zona con fuertes problemáticas sociales, caracterizada por el desorden, la violencia, etc. Una frontera entre dos sectores distintos de la población, que divide la ciudad tanto en su morfología como en su componente social. En cualquier caso, estas problemáticas son oportunidades para repensar las ciudades e intervenir desde la arquitectura y las demás disciplinas.
Dossier
Elementos naturales que actúan como límites, primero geográficos y luego urbanos. El borde costero pasa a entenderse como un elemento determinante en la planeación urbana y el discurso arquitectónico; territorio y borde, con sus características morfológicas y tectónicas se unen en un concepto con tal fuerza que ha permeado en el discurso y los proyectos de la escuela de arquitectura de esa ciudad. La pared rocosa, por su parte, ciertamente es uno de esos bordes enunciados por Kevin Lynch, siempre presente en el recorrido hacia Alto Hospicio y más allá, hacia el Altiplano chileno y boliviano. Un borde que acompañó en un principio a la línea del ferrocarril y posteriormente a la carretera que se desarrolla a su lado; sendas y bordes y límites actuando juntos en la conformación de un territorio.
Desarrollo norte de Iquique, Chile con sus dos límites naturales. Fotografía: David Ruiz, 2010.
Al norte la carretera se ve bloqueada por el acantilado. Fotografía: David Ruiz, 2010.
Profundizando más, dentro de la mancha urbana aparece otro elemento natural que sin lugar a dudas también actúa como límite de la ciudad e incluso como referente de la misma. Se trata del cerro conocido como “Del Dragón”, una enorme duna sobre la cual no es posible construir por diversas razones. Esta cuerpo de arena se ubica entre la carretera hacia Alto Hospicio y la mancha urbana y ha frenado parte del crecimiento hacia el Sureste de la ciudad.
Frontera urbana y social generada por el choque entre dos sectores. Iquique, Chile. Fotografía: David Ruiz, 2010.
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
27
Límites en las implicaciones domésticas de la “Arquitectura de límites difusos” de Toyo Ito “ 2. Arquitectura de límites difusos: arquitectura que transforma el programa en espacio. Dado que no está localizado, el espacio creado por la comunicación electrónica es un espacio efímero. Por consiguiente, la arquitectura de límites difusos debe tener un carácter flotante que permita cambios de programa. El programa sirve para implementar las acciones de la gente en el espacio. En la arquitectura del movimiento moderno todas las acciones se mostraban gráficamente como funciones y se simplificaban. El espacio se construía según una interpretación muy estricta del programa. Ésta es la razón por la que ya no puede responder a la flexibilidad del espacio de la sociedad actual, caracterizada por grandes agitaciones. En la sociedad flotante actual es absolutamente esencial suprimir los límites basados en la simplificación de funciones y establecer una relación de superposición de espacios. Se requiere un espacio que pueda añadir lugares de cambio, como el remolino en un río que fluye uniformemente”. Arquitectura de límites difusos. Toyo Ito. Pág. 28
Las palabras expresadas por el arquitecto Toyo Ito se enmarcan dentro de un ejercicio crítico del movimiento moderno y un acercamiento a su pensamiento teórico. No obstante, cuando las leemos pensamos en nuestros contextos y campo de acción. ¿se pueden aplicar al contexto latinoamericano? ¿se pueden aplicar al ámbito de la arquitectura doméstica? El diseño arquitectónico doméstico en nuestro contexto latinoamericano sin duda está caracterizado por ser precursor de un funcionalismo heredado de las propuestas modernistas e higienistas de la primera mitad del siglo XX. Como usuarios y como arquitectos, nos resulta difícil comprender una vivienda sin hablar de sala, comedor, cocina, recámara, baño y cuarto de servicio, con sus respectivos muros divisorios. En muchas ocasiones concebimos la vivienda como una transición
de espacios cuya ubicación y tamaño está determinada por la relación funcional existente entre ellos. La arquitectura de límites difusos plantea un carácter flotante de los espacios, de tal forma que permita cambios en el programa y por supuesto cambios en las actividades dentro de un mismo espacio. Ello debería responder a las exigencias del nuevo cuerpo ampliado por el movimiento electrónico moderno. ¿Está hablando el arquitecto de la planta libre? En la vivienda mínima conocida como de “interés social”, el diseño arquitectónico –al menos a nivel institucional- se ha estancado en un ejercicio interminable de variaciones sobre la misma planta, a veces incluyendo una cochera, otras veces reduciendo la cocina, y en otras ocasiones contemplando el crecimiento progresivo de la unidad. Lo demás es simple fachadismo. Los problemas derivados de lo anterior son por muchos conocidos.
¿Cuáles son los límites de esta práctica? ¿existe una oportunidad en la propuesta de la arquitectura de límites difusos aplicada a la vivienda, en especial a la vivienda mínima? Pienso que sí. Creo que nuestros cuerpos ya están ampliados por el movimiento electrónico moderno; la tecnología de los países desarrollados (al menos en un nivel doméstico) no es ajena para nosotros. Padecemos similares patologías derivadas de las redes de comunicación. Restaría desprenderse un poco de preconcepciones y supuestos para explorar las implicaciones y los límites de una arquitectura basada en la superposición de espacios. No es simple: podemos hablar de elementos divisorios, relaciones, supresión de actividades, mobiliario y equipamiento. La arquitectura de límites difusos probablemente ayudaría a entender la vivienda mínima actual.
BIBLIOGRAFÍA ITO, Toyo. Arquitectura de límites difusos. 1ª ed. Barcelona: Gustavo Gili, 2007. ISBN: 978-84-252-2056-2. MARTÍN H., Manuel, La casa en la arquitectura moderna. Respuestas a la cuestión de la vivienda. 1ª ed. Barcelona: Reverté. 2014. ISBN: 978-84-291-2124-7.
28
espaciovivido.com
Dossier
DE LA EXTINCIÓN DEL OBJETO ARQUITECTÓNICO Del objeto al cuerpo arquitectónico
José Antonio Solano Pérez
¿
Qué diferencia existe entre la faraónica obra de las pirámides de Giza y la faraónica Ciudad de la cultura de Peter Eisenmman en Santiago de Compostela? Al parecer muy poca, si dejamos de lado las obvias evidencias de la forma y el material. Pero ésta -en principioabsurda comparación, parece señalarnos que en el ejercicio de la arquitectura los cambios han sido de accesorios. Si bien es cierto que de acuerdo a las épocas, necesidades y los gustos, se han ido “poniendo o quitando” elementos, esta ha experimentado pocas mutaciones profundas. Hemos visto con diferentes ojos la misma cosa, con connotaciones y materiales distintos, pero al final se sigue tratando, por ejemplo, de la misma columna griega: en acero, madera, cristal, concreto, sin o con capitel o fuste estriado… A pesar de sus disimiles caminos, el mayor valor de la arquitectura se encuentra en el espacio vivido. De hecho, la vivencia es una condición arquitectónica, que los mismos arquitectos se han encargado de monopolizar a través del espacio construido como la única forma de acceder a ella. ¿Qué circunstancias podrían orillarnos a pensar en una condición distinta? y tal vez, más importante aún, ¿por qué plantear en estos momentos una situación carente de espacio construido?
¿Puede existir arquitectura sin obra material? No, es la respuesta más fácil y a la vez la más incompleta. Habría que agregar: No, si seguimos pensando la arquitectura de la misma forma en que se ha hecho durante siglos. Sí, siempre y cuando aceptemos que todo aquello que hace a la arquitectura, ya está ahí, y puede interpretarse de muchas formas. Partamos de considerar que el evento que nosotros denominamos “arquitectura”, más que un fin es una consecuencia, que se da por la suma de diversos escenarios y momentos, que van desde la calidad humana del arquitecto hasta la calidad natural de un material, por tal motivo, no puede ser reducido a un único elemento concreto, cuya presencia sea una garantía; desgraciadamente confiamos demasiado en la forma; la mayoría de nuestra obra se ha vuelto exclusivamente visual y mientras sigamos basándola en volúmenes estáticos-inertes, que impongan su presencia aún sin estar en uso, el impacto visual seguirá siendo el eje de nuestras formas. Esta acción -la de hacer arquitectura- nos ofrece una experiencia puramente espacial. Todavía hay quienes hablan de arquitectura sin hablar del espacio. La mayoría de las veces abordamos el tema como si fuera algo ajeno a nosotros mismos, nuestras descripciones y explicaciones nos hablan de
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
29
espacio/hombre como entes separados e independientes, así como hablamos de una-arquitectura/un-espacio. Considero que se trata de la materia prima de la arquitectura, y no sólo caminamos sobre ésta, nosotros somos espacio, la arquitectura es espacio, y el espacio es hombre. Ahora bien, la construcción, es la forma en que interpretamos todo lo que nos rodea para convertirlo en nuestra realidad, al menos una más aceptable. Construimos para encontrar formas de habitar y al hacerlo vamos trasformando lo construido a través de un proceso vivo que está en constante movimiento. ¿Qué significa la construcción para la arquitectura?, ¿culmina ésta cuando se pone el último clavo? ¿Es acaso la construcción el ataúd de la arquitectura? Imagine que camina un buen día por el mundo cuando es golpeado por algo, tan fuerte que lo hace detener su marcha, acaso se trata de un recuerdo o una emoción, de una acción simple como encontrarse o reconocer a alguien, de algo que encontraron sus ojos en el horizonte o algún aroma que llegó hasta ahí, no sé, cualquier cosa que sea tan significativa como para que detenga su camino, lo que sea, ¿no vale la pena hacer lo necesario para honrar ese sitio, ese momento; echar mano de cualquier materia disponible para trascender ese instante en algo más…? y hacer que surja en nosotros la necesidad de construir para trascender, en el tiempo, en la vida, a la vida misma, a la memoria. Así, la construcción es el punto de inflexión de la arquitectura, a través de construir es que
30
espaciovivido.com
trasciende el pensamiento. Sin embargo, cuando caemos en construir por construir, el efecto es inverso, la trascendencia se convierte en exterminio. El actual espacio donde construimos, es vendido, comercializado, negociado y politizado bajo los mismos términos de la economía de consumo. Tener más es sinónimo de una mayor prosperidad y de un bienestar que pareciera se alcanza al lograr el menor esfuerzo a través del máximo consumo. En la generalidad, aceptamos el concepto de que a mayor cantidad, mayor satisfacción. Partimos de esta idea al decir que un espacio es más valioso o tiene mayor plusvalía, entre más extensión de suelo abarque, volviéndose útil, en la medida que nos permite desarrollar una mayor cantidad de actividades dentro de él. Pero esta idea se reduce únicamente bajo parámetros de medidas y no en función de sucesos (arquitecturas). La síntesis funcional de la arquitectura moderna, redujo y depuró las acciones que se realizan sobre uno de los recursos que más se consume desde hace miles de años: El hombre ha devorado y depredado al espacio. Bajo el yugo de la arquitectura ha pasado de artística a políticamente correcta la extinción de éste. Las grandes urbes ni con sus sólidas economías pueden detener este hecho. Claro ejemplo son los reducidos espacios habitacionales en lo que se mete a la clase media de casi cualquier país, mientras en las esferas altas de la sociedad, los arquitectos de éstos mundos terminan por adjudicarle el fracaso de sus proyectos a la poca superficie,
Dossier o al poco recurso destinado a un proyecto cotizado en miles de millones. Vale la pena hacer una pequeña reflexión sobre esta última situación, la del capital requerido para delimitar un espacio: No es criticable el hecho de que alguien gaste millones en realizar un proyecto arquitectónico, lo que sí es condenable es querer vender la idea de que se necesitan millones para poder acceder a la calidad de vida. He aquí nuevamente la estrategia del consumismo antes descrita. Aproximadamente sólo un tercio de los suelos no están habitados, estos son: desiertos, el Océano glacial Ártico y el Continente Antártico. Sin tomar en cuenta el ritmo exponencial al que está creciendo la sociedad e inclusive considerando un mundo alternativo, en el que todos los habitantes tuvieran las mismas oportunidades y el mismo nivel de desarrollo, no es suficiente para evitar los extremos a los que estamos llegando, abanderados por el cambio climático. Le queda poco espacio firme a la arquitectura y más espacio extremo, desconocido, lleno de caos; o se decide a dar un salto significativo o se extingue por su misma inoperancia. Definidos bajo cualquier lineamiento, los hechos son irrefutables: La sociedad contemporánea ha sido moldeada por el consumo; la arquitectura se volvió adicta a la construcción y en su enfermedad consumió el espacio volviéndolo una especie en peligro de extinción; a pesar de su protagonismo mediático, el arquitecto se ha vuelto irrelevante para la formación de la ciudad.
Por dondequiera que sea enfocada, la edificación es una alteración. “La arquitectura es agresiva contra el territorio, contra el material al que violenta, manipula, fuerza, retuerce; es violenta contra las formas existentes, contra los tipos y modos existentes. Toda arquitectura fundacional se basa en la violencia...” (Solà-Morales, 2012). Los actuales movimientos en la arquitectura global intentan, la mayoría de las veces a la desesperada, hacer conciencia para lograr la mayor reducción posible del impacto que significa la existencia del objeto arquitectónico. Este impacto es imposible de evitar. “Si el hombre no necesitara de abrigo para sí y sus actividades, no habría necesidad de arquitectura. Esta es un prerrequisito para la existencia humana”1, pero ¿será necesario que sea permanente? Si la arquitectura toma sentido o se complementa con la presencia del hombre, ¿Por qué hemos de edificar espacios rígidos, que permanezcan como una marca lacerante en el entorno? Pensemos en una arquitectura que surja con la presencia humana y que el resto de su tiempo libre disfrute de su entorno, es decir, que la herida desaparezca. En palabras de Jean Nouvel “cuando uno dice: voy a construir en un espacio, nos da la impresión que se construye para siempre.” Por eso veo al edificio como un gran monstruo devorador de funciones, entregadas en ofrenda a él, un objeto que devora acciones, las encierra, las perpetua, las momifica... No encuentro razón alguna para seguir perpetuando funciones, así, encerradas, enmarcadas, que tengan que soportar la ausencia del hombre.
1.- Argumento expuesto en su tesis de grado de maestría en tecnología: “La arquitectura y su influencia en el medio ambiente” por la Dr. Arq. Jeanine Costa Bischoff . 2 - 4 Definición citada en el artículo “Arquitectura como fricción” de Pedro Hernández. Arquine, revista internacional de arquitectura y diseño. Número 63, pp153. 2013. 3.-Perec Georges. (1974). Espèces d` espaces. París. Edt. Galileè.
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
31
Pero existe otra forma de hacer arquitectura, alejada de la violencia del consumismo, que el mismo Solà-Morales menciona y que podemos tomar de base, la de “la arquitectura como un vehículo de pacificación, de mediación”, que pondrá en tela de juicio su objetual producto de una disciplina obsesionada con criterios estilísticos. “Una arquitectura no como objeto sino como otro cuerpo con el que interactuar”2 Un cuerpo sin entrada, sin salida, sin fachadas. Sin función definida, líquido, difuso. Un anti-objeto arquitectónico que busque ser más con la menor intervención, sin imponer su presencia, una verdadera segunda piel y no un envoltorio cada vez más sofisticado. Que nos revele el hecho arquitectónico a través de sucesos entre cuerpos, relaciones de fricciones y tensiones. Ya que como diría Perec: “Pasamos de un espacio a otro sin medirlo, sin tomar conciencia, el problema no es tanto de inventar el espacio, y todavía menos de reinventarlo, sino de interrogarlo”3; un cuerpo arquitectónico y no un objeto, que Pedro Hernández define magistralmente en su artículo Arquitectura como fricción: “...La arquitectura manifestaría tal idea y estaría definida por una vida fraccional donde la relación cuerpo-acción, definidos ya como elementos inseparables, permite la apropiación del espacio para darle un sentido (...) tensión entre cuerpo y arquitectura.”4 Aquí ubicaríamos arquitecturas que se muevan, que desaparezcan, que se desliguen de elementos fijos o al menos que los tomen únicamente como anclas, arquitecturas que quepan en una mochila, que se activen con nuestro cuerpo y sobretodo que brinden oportunidades de multiplicidades de eventos
en un mismo espacio, pero ya no como un contenedor. No se trata de llenar una misma caja con diferentes cosas, se trata de que la caja se trasforme en cosas distintas. Un cuerpo vivo, pero no autónomo, en el que las mismas actividades del hombre sean las que justifiquen su transformación, debido a que no vivimos en un espacio homogéneo y vacío, sino al contrario, en uno totalmente cargado de energías, donde “la calidad de vida depende de pequeñas y cotidianas acciones, gestos elementales como servir un vaso de agua, regar una planta, hacer el amor, comunicarse, respirar, ser.” 5 Cada vez que me topo con un proyecto de condiciones mastodónticas, me viene a la cabeza la misma idea: ¿de verdad necesitamos tanto espacio para habitar? Ni las pequeñas cajas de la clase media, ni las macmansiones6 de las clases altas, logran ser la mayoría de las veces el reflejo de nuestro espacio vital. Nuestra arquitectura se ha vuelto una gran colección de espacios superfluos. Imaginemos por ejemplo, a un grupo de personas que se reúnen en un lugar distinto cada día, para tener sus juntas, no podemos negar la existencia de su actividad, ni su eficiencia solo por carecer de un espacio específico. No podríamos aplicar un programa arquitectónico tradicional para una actividad que se puede llevar a cabo en diferentes espacios y de diferentes maneras. Una gran plaza pública que contenga unos puertos para intercambio de información podría ser el nuevo edificio de oficinas, carente de un acceso principal, un directorio, una recepción.
5.-Coppola Pignatelli Paola (1980) Análisis y diseño de los espacios que habitamos. México D.F. Edt Concepto. 6.- El término surge como una crítica a las grandes mansiones que se edificaban a mediados del siglo XIX en Estado Unidos. 7.- El espacio del que habla la vacuidad no debe confundirse con la ausencia o carencia de. La vacuidad no puede ser ni descrita ni definida.
32
espaciovivido.com
Dossier Una vivienda generada por el aprovechamiento de la energía mecánica de nuestro cuerpo, energía que no alcanzaría a mantener un espacio enorme, sino pequeño, necesario, vital y que para hacerlo crecer nos obligue a hacer comunidad. ¿Qué sucedería si llueve, corre el viento, o la plaza está saturada de personas o si llegan invitados a mi pequeño espacio? Ya no diseñaríamos objetos fijos, sino funciones en diferentes circunstancias con diferentes dimensiones. ¿Cuál sería la fachada principal, la que se ve repleta de personas o la que está en ausencia del hombre? no serían las mismas, pues el cuerpo reacciona a diferentes ritmos, ¿Cuál sería mi casa, la que se forma cuando estoy solo, o cuando llegan mis amigos o mi pareja?. Una vez cubiertas las necesidades básicas, la idea era ser más, no tener más. “Cuando abren los ojos, muchas personas se dan cuenta que comprar mucho para vivir entre deudas no es libertad”8 Los objetos arquitectónicos se reprodujeron por cientos, se apilaron unos sobre de otros. Convertimos nuestras ciudades en grandes fosas comunes de estilos y formas antiguas, nuevas, obsoletas, mecánicas, tecnológicas... La extinción del objeto, por un cuerpo arquitectónico, dará paso a una arquitectura desligada de sus ataduras, y lo más importante, desligada de la exigencia única del espacio construido permanente, como única solución.
espacio para llegar a la consecuencia arquitectónica?. Tal vez lo que me hace alterar el espacio es algo que guardo en mi mano y me acompaña a todos lados. El regreso a la arquitectura, es el regreso al origen, a partir del regreso a nosotros mismos, tal como lo establece la primera ley de “vacuidad” (sunyata en sanscrito): “la concepción sólo puede ocurrir si se produce un espacio de vacuidad (...) implica que todo en el universo existe potencialmente, que el origen de la vida sólo puede darse en el momento en que la conciencia crea un espacio negativo, es decir, carente de toda información o sustancia y en esa carencia, en ese espacio potencial, surge la vida (...) a pesar de que sunyata, no tenga forma, lo impregna todo”.7 En las actuales sociedades, la lucha por el espacio se avecina, nadie habla de ello, como si no quisiéramos verlo o creerlo. Cuando ya no exista más espacio que el consumismo pueda lotificar y traficar, ¿en dónde podremos hacer nuestra arquitectura si la hemos reducido a un mero objeto físico?. Cuando acabe por extinguirse el primer espacio, nada impedirá que sigamos teniendo un espacio donde habitar. No necesitamos nada material, lo único que necesitamos está en el vacío y somos nosotros. Un espacio que no se ve, sólo se puede percibir cuando se habita.
Cambiar la forma de buscar la arquitectura -no sólo verla de diferente forma- implica pensar ¿qué estamos proponiendo en el
BIBLIOGRAFIA Coppola Pignatelli Paola (1980) Análisis y diseño de los espacios que habitamos. México D.F. Edt Concepto. Hernández Pedro. (2013). Arquitectura como fricción. Arquine, revista internacional de arquitectura y diseño. Número 63, pp153. Ito Toyo. (2006). Arquitectura de límites difusos. Barcelona. Ed. Gustavo Gilli. Perec Georges. (1974). Espèces d` espaces. París. Ed. Galileè. Ponce de León Arturo (2013). El Poder de la Vida en la Geometría Sagrada y la Arquitectura Biológica. Recuperado de http://www.psicogeometria.com/geometriasagrada.htm
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
33
CIUDADES CONTEMPORÁNEAS Y SUS FRONTERAS DIFUSAS Arturo Velázquez Ruiz Ramón Guillermo Segura Contreras
A
ctualmente, la ciudad se presenta como una antología de fragmentos, los cuales podemos considerar como oportunidades para continuar haciendo ciudad. Debido a esto, el concepto de fragmentación urbana es uno de los temas más discutidos en los estudios urbanos, por lo que es importante señalar causas, interpretaciones, retos, coyunturas, entre otros desde la academia hasta lo gubernamental para tener una idea más sólida al intervenir en el espacio urbano. Uno de los puntos más relevantes al momento de formar nuevas generaciones de arquitectos en las universidades no es únicamente la capacidad de dar información a los estudiantes, sino hacerlos conscientes de los diversos problemas que se nos presentan como arquitectos y también, por qué no, los problemas que los arquitectos creamos. Una actividad que se ha planteado para acercara los estudiantes en su conocimiento de la ciudad y sus problemas la hemos denominado “el vecino más distante”. En esta dinámica, se les pide buscar mediante el uso de la imagen satelital de google maps dos fraccionamientos contiguos (“A” y “B”) en alguna ciudad mexicana. La condición es que carezcan de integración vial entre sí y que por lo tanto obliguen a la persona a desplazarse a una distancia significativa para ir de una vivienda en el fraccionamiento “A” a una del fraccionamiento “B”. (Ver imagen 1)
Imagen 1. Bugambilias, Veracruz.
34
espaciovivido.com
Viendo la imagen nos damos cuenta de que el crecimiento de muchas ciudades en nuestro país (y en el mundo) se ha dado de forma fragmentada, en la cual el continuo urbano se pierde. Lo anterior deja inmersos espacios que dificultan la dotación de infraestructuras ocasionando una fragmentación urbana. Por fragmentación podemos intepretar el romper o separar algo, en este caso el espacio urbano. Entonces, la fragmentación urbana puede definirse como una discontinuidad espacial de la estructura urbana. Se entiende como la incapacidad de comprender el tejido urbano como unidad, es así que el espacio fragmentado puede definirse a partir de la diferencia entre la accesibilidad o la impenetrabilidad del mismo (Amante Haddad, 2009). También hay una escasez de accesos y recorridos dentro del mismo lo que genera problemas funcionales de la ciudad en conjunto. ¿Por qué se da la fragmentación urbana? Montaner y Muxí (2011) mencionan que estas fronteras, visibles o invisibles, pretenden combatir el miedo a los peligros de la vida contemporánea y que se generan más recurrentemente en sociedades donde existen desigualdades importantes, donde los ricos tratan de separarse de los pobres (ver imagen 2). Sus manifestaciones pueden ser muy variadas: fraccionamientos cerrados, centros comerciales, campos de golf, urbanizaciones de miseria, por mencionar algunos.
Imagen 2. Villa 31 y barrio de Retiro en Buenos Aires, Argentina.
Dossier
Arturo Velázquez Ruiz, catedrático de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana Ramón Guillermo Segura Contreras catedrático de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana.
En muchos de los casos donde se presenta fragmentación, los usos del espacio urbano han sido separados por la construcción de avenidas o autopistas que atraviesan las ciudades. Esto deja claro que la fragmentación urbana es un fenómeno bastante presente dentro del diseño y ordenamiento urbano. El crecimiento urbano extensivo (ligado directamente a factores económicos, políticas neoliberales) ha convertido a las ciudades mexicanas en sitios monótonos sin posibilidad de lectura por parte de los usuarios. Los desarrolladores privados (en ocasiones con la complicidad del Estado) compran terrenos en las afueras de la ciudad, dejando grandes extensiones de terrenos intersticiales (una forma de incrementar el valor del suelo). Si a esto agregamos que las leyes no regulan de fondo el crecimiento periférico (Amante Haddad, 2003) el resultado es catastrófico. De esta manera, en los últimos años, es evidente que las ciudades están atravesando por dinámicas globales que reestructuran sus aspectos sociales, económicos, espaciales, políticos y hasta geográficos. Existen varios autores que estudian la fragmentación urbana. Richard Sennet, Edward Soja, Graham y Marvin, Hidding y Teunissen, entre otros. Sin embargo, se menciona que el concepto de fragmentación urbana aún no está del todo comprendido, por su gran complejidad. Para clarificar lo anterior, debemos preguntarnos, ¿cómo debería funcionar y verse la ciudad?, ¿se debe pensar en la ciudad como un espacio continuo?, ¿la heterogeneidad del espacio urbano influye en el comportamiento del ciudadano? La fragmentación urbana, no solo es cuestión de una deficiente movilidad en la ciudades. Al hablar de esta noción nos remite, como menciona, a una ruptura o disociación social de las partes de un conjunto urbano. Lo anterior ocasiona una separación de territorios que se van contrastando por aspectos de carácter identitario. La fragmentación urbana genera divisiones culturales, sociales y políticas. Es de suma importancia situar los impactos sociales, culturales y hasta ambientales que trae consigo la
Imagen 3. Fragmentación social
fragmentación social y urbana. Podemos mencionar algunos patrones que se repiten en la mayoría de las ciudades del mundo: la informalidad, intolerancia, mercantilización, inseguridad, contaminación. Ante los fenómenos urbanos que se están presentando en las ciudades contemporáneas, es necesario repensar el discurso de la concepción, diseño, desarrollo, gestión y materialiazación de los espacios urbanos. Por lo tanto, son diversas y diferentes las disciplinas que han empezado a abordar estudios más profundos ante el fenómeno de fragmentación urbana. Se debe tener presente que el diseño y materialización de la ciudad son hechos que parten de acciones sociales, políticas, económicas, históricas, entre otras. El espacio urbano es complejo, sin embargo está lleno de oportunidades para transformar las experiencias y formas de vida a bien. Las intervenciones urbanísticas deben evolucionar y adaptarse a la exigencias del contexto, solo así se garantizará de cierta forma el éxito de la ciudad. Referencias bibliográficas Amante Haddad, Sergio (2003). La Ciudad Fragmentada. La Discontinuidad Espacio-Temporal en el Ámbito Urbano de Xalapa, Veracruz / México 1960-1990. Ed. Universidad Politécnica de Madrid. Jenks, Mike; Kozak, Daniel; Takkanon, Pattaranan (2013). World civiles and urban form: fragments, polycentric, sustainable? Ed. Routledge López de Lucio, Ramón (1993). Ciudad y urbanismo a finales del siglo XX. Ed. Universitat de Valéncia Montaner, J. M., & Muxí, Z. (2011). Arquitectura y Política. Ed. Gustavo Gili. Pérgolis, Juan Carlos (2005). La ciudad fragmentada. Ed. Nobuko Vinuesa angulo, Julio –coordinador- (2012). Dinámicas urbanas. Ed. Universidad Nacional de Luján y Universidad Autónoma de Madrid
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
35
AGUA, TERRITORIO Y CIUDAD
Fornero Goi, Florencia / Pereyra Oviedo Leslie Ciudad de Córdoba, Argentina.
“El paisaje urbano no es una escena que se contempla, sino el escenario de nuestras propias acciones”i
A
bordamos la problemática de la fragmentación urbana que surge como producto del crecimiento de la ciudad sin premisas de planificación, falta de regulación y control, que en su proceso ignoró la existencia de los cursos de agua preexistentes a la trama urbana. La inquietud por este tema, está fundada en la base de la investigación de nuestra tesis de grado de la carrera de Arquitectura de la Universidad Nacional de Córdoba. La ciudad de Córdoba cuenta con un conjunto de obras hidráulicas que datan del año 1980, construidas por los Ingenieros Esteban Dumesnil y Carlos Casaffoust. Nos referimos al embalse de San Roque, al Dique nivelador de Mal Paso y a los Canales Maestros Norte y Sur, destinados a la conducción del agua para riego empleada para abastecer el territorio que conformaba el ex cinturón verde de la ciudad. Estas obras que para su tiempo
36
espaciovivido.com
Fotografía aérea de Lago San Roque, la mancha urbana de Córdoba, y sus cursos de agua. Imagen © 2016 Digital Globe. Google earth.
resultaban emblemáticas y marcaban el comienzo de un camino de progreso y desarrollo, hoy a raíz de su deterioro han dejado de cumplir con su rol original, quedando obsoletas. Además, la ausencia de proyectos de preservación ambiental y de normativas que regulen los usos del suelo en áreas vacantes de esta índole, hace que nos encontremos reiteradas veces a lo largo del canal con dos situaciones: una
vinculada con la ciudad formal que le da la espalda como si se tratara de la sucia parte de atrás, contaminada con basura y tratada sin respeto y la otra, el crecimiento de asentamientos ilegales originados por las crisis sociales y económicas que aquejan a nuestra población.
“El tejido urbano complejo permite la diversidad de usos y las convivencias de diferentes tipos de personas que es la esencia de la ciudad” ii. Aquí bajo un mismo
Dossier Contaminación ambiental y asentamientos informales en los márgenes del Canal Maestro Sur. Imagen: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie
Contaminación ambiental en los márgenes del Canal Maestro Sur. Imagen: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie
Fotografía aérea del canal Maestro Mayor Sur con la localización de los potenciales espacios públicos y los barrios aledaños. Imagen © 2016 Digital Globe. Google earth. Contaminación ambiental en los márgenes del Canal Maestro Sur. Imagen: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
37
contexto y frente a dos realidades completamente opuestas podemos detectar que el espacio público se encuentra notablemente afectado. La segregación social y funcional genera áreas fragmentadas conformando pequeñas ciudades dentro de la ciudad con sus particulares pautas culturales, sociales y de costumbres que se reproducen en su interior consolidando así guetos de ricos y guetos de pobres.
Materialización de las barreras sociales. Guetos de ricos y pobres. Imagen: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie
En una lectura perceptual de la ciudad vemos que el canal se ha consolidado en sí mismo como una barrera física y territorial impidiendo el desarrollo del sistema de redes y relaciones detectando en su extensión insuficientes puntos de conexión entre ambos lados. Sumado a esto las acciones de los actores privados enfatizan estas divisiones al extremo de materializarlos, ya sea con montículos de tierra pasando por cercos alambrados hasta llegar al punto tal de levantar paredes de hormigón para no dejar evidencia de lo que sucede más allá de los muros y nadie se hace cargo. Observamos que la centralidad de la ciudad concentra actividades primarias para el funcionamiento de la urbe y a su vez se gesta un centro único de flujos primordiales que potencia la situación de fragmentación.
Muro realizado por inversores privados de uno de los mayores complejos habitacionales realizados en la ciudad de Córdoba, para separar aquello que no se desea ver. Imagen: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie.
38
espaciovivido.com
Dossier Islas urbanas. En la imagen, barrio Las Palmas de Horizonte, detrás del muro se encuentra el Canal Maestro Maestro Sur y asentamientos informales. Imagen: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie
En estos tiempos, donde la estructura urbana sufre un crecimiento desmesurado, se necesita generar una mayor integración de los espacios que hacen a la estructura urbana, posibilitando al ciudadano vivir la ciudad de una manera más amigable donde la preservación de la calidad de vida sea primordial. Las barreras sociales, funcionales, las privatizaciones y las áreas fragmentadas, condenan tanto a la ciudad y a sus habitantes como al espacio público considerado lugar o sistema de lugares significativos, como expresión de la heterogeneidad que identifica a las sociedades y como lugar de encuentro; además de ser el escenario donde se ponen en evidencia los problemas sociales, económicos y políticos. La diversidad hace posible el intercambio y para que sea posible la convivencia, es necesario que existan pautas comunes de civismo y aceptación entre unos y otros. Es en el espacio público donde la sociedad desigual puede expresarse, manifestarse y reconocerse.
En nuestro caso nos encontramos con un territorio que cuenta con gran potencial de ser espacio público y lo definimos como tal porque no lo podemos llamar espacio público simplemente por tratarse de un espacio vacío o porque debido a razones jurídicas así se ha denominado; es necesario algo más para que se trate de espacio público. Los canales de agua son vividos hoy en día como elementos urbanos negativos, límites concretos para el desarrollo de la población que podrían posibilitar esa cohesión física y social necesaria entre las partes del territorio ayudando a disolver las islas urbanas promoviendo la convivencia y no las divisiones, consolidando una ciudadanía con fuerte identidad urbana y apertura al sentido de pertenencia. REFLEXIÓN: Nos incentiva pensar que nosotros como agentes activos podemos invitar a reflexionar a la ciudadanía, que sí es posible transformar estos lugares de conflicto signados por la exclusión, abandono, divisiones y enfrentamientos sociales;
que son resultantes de los procesos de fragmentación, privatización y disolución que sufre nuestra ciudad y pueden ser transformados en un sitio de distención, una zona de tregua para el encuentro y el disfrute colectivo generando condiciones óptimas para las dinámicas sociales que inviten a nuevas formas de convivencia y relaciones entre los ciudadanos sin dejar de lado que al espacio público lo construimos y preservamos entre todos. En nuestro análisis observamos el potencial de este eje de transformarse en lo opuesto a lo que es hoy, convirtiéndose en un elemento estructurante de un sistema de espacios verdes, rompiendo las barreras que anteriormente mencionábamos y consolidándose en un conector ambiental, que contenga nuevos espacios verdes de proximidad. Esta franja de territorio potenciada podría ayudar a preservar las condiciones de medio ambiente, conectando áreas, mejorando la calidad de vida y colaborando con las condiciones de desplazamiento para el habitante urbano.
Año 2 . No. 8 . Límites y Fronteras
39
Testimonios de los ciudadanos que viven frente al Canal Maestro Sur. Fuentes: http://ecoscordoba.com.ar/edisur-y-el-muro-de-la-verguenza/ www.cadenatres.com/post_ampliado.asp?post=85007&categoria=65 www.diaadia.com.ar/cordoba/la-tormenta-pasa-la-bronca-permanece
Ciudades dentro de la Ciudad. Autoras: Fornero Goi Florencia, Pereyra Oviedo Leslie.
Una alternativa para consolidar esto podría ser la localización de nuevos focos de encuentro y actividad cultural que trabajen como puntos de conexión entre el centro de la ciudad y las periferias, modificando la imagen de estas zonas relegadas. Estos focos serían un factor de atracción de nuevas actividades que transformarían el entorno, atraerían más inversiones y a su vez más gente.
- Juan Manuel Borthgaray, Habitar Buenos Aires las manzanas los lotes y las casas, Editores: Sociedad Central de Arquitectos y Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo, 2010. ii - Jordi Borja y Zaida Muxí, El Espacio Público: Ciudad y Ciudadanía, Editorial: Electa, Barcelona España, 2003. i
Bibliografía: - Subsecretaría de Proyectos de Urbanismo, Arquitectura Urbanismo e Infraestructura. Ministerio de Desarrollo Urbano del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires Ciudad Verde, Editorial: Akian S.A., 2014. - Espacios de Paz | Venezuela 2014, una producción de Comisión Presidencial de Movimiento por la Paz y la vida + PICO Estudio.
“ARTÍCULO CREADO POR LAS AUTORAS A PARTIR DE LA INVESTIGACIÓN DE TESIS DE GRADO DE LA CARRERA DE ARQUITECTURA DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA
40
espaciovivido.com
estudiocasamx.wordpress.com
RĂ ul Alvarado SĂĄnchez Tel. 22 88 26 36 12 22 81 18 56 55
Espera en nuestras redes sociales la convocatoria para nuevos colaboradores