Comentario de libros El coleccionista de cráneos célebres: Recorrido patobiográfico en busca de los cráneos perdidos de Bach, Haydn, Mozart, Beethoven, Goya y el cerebro de Einstein. Julio Montes Santiago, Salamanca, Graficas Cervantes (con la colaboración de Fundación Meixonovo), 2002. Damos a conocer hoy una pequeña joya que nos ha llegado recientemente y aunque lleva ya varios años en el mercado literario e histórico-médico, creemos que no ha sido debidamente difundida entre los especialistas, lo que, sin duda, merece la pena. Bien editada, sin lujos, de cómoda lectura, dado su tipo y tamaño de letra, lo que el lector agradece especialmente. El autor, médico internista se licenció en Salamanca en 1980, cuna de tantos saberes científicos y humanísticos, hecho que, sin duda, ha tenido gran influencia en su enciclopédica formación, y se especializó en medicina interna en la prestigiosa Clínica Puerta de Hierro, de Madrid. Científico y humanista inquieto, había publicado, en esa fecha editorial de 2002, más de 68 artículos de su especialidad en revistas nacionales y extranjeras, colaborado en 12 capítulos de libros y presentado más de 100 comunicaciones en congresos nacionales e internacionales. Es, actualmente, un destacado miembro del equipo de medicina interna del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo. Resulta muy gratificante comprobar que en España el retrato patobiográfico, que fue “fundado” a nivel mundial por el maestro Marañón, de quien publicamos una admirativa semblanza (Cfr.: Ponte Hernando, F; Fernández Teijeiro, JJ: El doctor Marañón: el hombre que buscaba Diógenes. Evocaciones de un gran médico. Bs As, Revista de Historia & Humanidades Médicas, vol 4, nº 1, julio 2008, www.fmv-uba.org.ar/histomedicina) continúa vivo y goza de buena salud.
y viceversa en un extraordinario ejercicio de análisis antropológico y clínico, dónde no faltan excursiones por los terrenos de la ciencia y la música más elevadas. Un aspecto interesante poco estudiado hasta ahora, son las relaciones de ellos mismos con sus médicos que, dada la importancia de los personajes, con frecuencia se cuentan entre lo más granado de la medicina de sus épocas respectivas. Por el libro desfilan His, Freud, Rokitansky, Friedrich, Nissen, Plesch y muchos otros que sería prolijo enumerar.
El libro es un recorrido delicioso por las vicisitudes ocurridas con los cráneos de los biografiados y el cerebro de Einstein, a partir de los cuales el autor, con una profundidad maestría médica extraordinaria, va enlazando diagnósticos y diagnósticos diferenciales, unos precisos, otros orientativos, siempre brillantes, con un lenguaje sólo relativamente asequible a los no médicos, analizando a la par las circunstancias humanas de los protagonistas, su momento histórico, sus relaciones de familia, amigos, políticas, artísticas, etc e incluso algunas relaciones entre ellos mismos, unas conocidas, otras no tanto, que nos traen y nos llevan en todo momento del hombre al genio
Como colofón, el libro finaliza con un exquisito análisis sobre las circunstancias de la muerte de cada uno de los biografiados, dónde se aprecia la influencia ideativa del maestro de la patología y la ensayística española Roberto Nóvoa Santos, concediendo especial importancia al hecho cósmico del paso a la otra vida, dónde hace hincapié en esos fenómenos sorprendentes que, fruto de la tensión del momento supremo, del hecho trascendental del fin de la existencia terrena, aparecen irremediablemente en las narraciones de los testigos, y “se non e vero e ben trovatto” , hasta crean puentes con la Fe, reconciliándola con la Ciencia con hechos tan llamativos como la Cruz de Einstein,
30 | Médicos & Medicinas