Las lecturas ELI son una colección de libros con ilustraciones maravillosas, que comprenden clásicos actuales y cuentos originales escritos por los/as alumnos/as de español.
Gramática El pretérito imperfecto El pretérito indefinido La gradación del adjetivo Las formas de obligación
Horacio Quiroga
La abeja haragana Una abeja haragana aprenderá en una noche la importancia de trabajar y cooperar con sus compañeras de colmena.
Horacio Quiroga
La abeja haragana
Había una vez una abeja haragana que no quería trabajar. Un día, sus compañeras la echaron de la colmena. Esa noche la abeja cayó rodando en el hueco del tronco de un árbol donde vivía una culebra que quería comérsela y....su vida cambió.
Lecturas ELI Infantiles y Juveniles Nivel 1 Dominique Guillemant, ¡A la playa! Dominique Guillemant, Un circo de ensueño Jane Cadwallader, Abuelita Anita y la cuerda amarilla Jane Cadwallader, Abuelita Anita y el balón Jane Cadwallader, Abuelita Anita y el pirata
Temas Naturaleza
Nivel 1
100 palabras
Sub - A1
Nivel 2
200 palabras
A1
Nivel 3
300 palabras
A1.1
Nivel 4
400 palabras
A2
Clásico
Lectura completa en CD audio
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Fabio Facchinetti
La abeja haragana De Horacio Quiroga Versión española y actividades de Silvia Cortés Ramírez Ilustraciones de Fabio Facchinetti Lecturas ELI Ideación de la colección y coordinación editorial Paola Accattoli, Grazia Ancillani, Daniele Garbuglia (Director artístico) Proyecto gráfico Sergio Elisei Compaginación Diletta Brutti Director de producción Francesco Capitano Font utilizado 14 / 20 puntos Plantin Schoolbook
info@elionline.com - www.elionline.com Impreso en Italia por Tecnostampa Recanati ERY 419.01 ISBN 978-88-536-0774-4 Primera edición febrero 2012
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Las Lecturas ELI son una completa gama de publicaciones para lectores de todas las edades, que van desde apasionantes historias actuales hasta los emocionantes clásicos de siempre. Están divididas en tres colecciones: Lecturas ELI Infantiles y Juveniles, Lecturas ELI Adolescentes y Lecturas ELI Jóvenes y Adultos. Además de contar con un extraordinario esmero editorial, son un sencillo instrumento didáctico cuyo uso se entiende de forma inmediata. Sus llamativas y artísticas ilustraciones atraen la atención de los lectores y les acompañan mientras disfrutan leyendo
© 2012 ELI S.r.l B.P. 6 - 62019 Recanati -Italia TEL. +39 071 750701 FAX +39 071 977851
EL
IS
Nivel 4 Gustavo Adolfo Bécquer, El gnomo Horacio Quiroga, La abeja haragana Jane Cadwallader, Pepe y el campeonato Jane Cadwallader, Pepe y la corona Jane Cadwallader, Pepe y el apagón Paloma Bellini, El pasaje secreto
Tiempo atmosférico
Ilustraciones de
Lecturas ELI Infantiles y Juveniles
Nivel 3 Jane Cadwallader, Tío Manuel y las suricatas Jane Cadwallader, Tío Manuel y el árbol Bakonzi Jane Cadwallader, Tío Manuel en la Antártida
Animales
Nivel 4
- Juegos y actividades - CD Audio - Vocabulario ilustrado
Nivel 2 Jane Cadwallader, PB3 y el payaso Rataplán Jane Cadwallader, PB3 y las verduras Jane Cadwallader, PB3 y la chaqueta
Me llamo Fabio y soy un dibujante. De líneas y puntos soy un gran amante. Con rectas y curvas dibujo los arcos que apunto certeros, valientes y risueños, hacia el horizonte de mis infinitos sueños.
LA ABEJA HARAGANA
Horacio Quiroga (Uruguay 1878 – Argentina 1937) es uno de los escritores Latinoamericanos más importantes de todos los tiempos. Muchos de los cuentos que lo hicieron famoso tienen por escenario la selva de Misiones, lugar donde él mismo vivió durante muchos años. “Cuentos de la selva” (1918) está considerado un clásico de la literatura para niños en América Latina.
Nivel 4 HORACIO QUIROGA
Vocabulario La naturaleza Los animales El tiempo atmosférico
Infantiles y Juveniles
A2
Lecturas
Infantiles y Juveniles
El Certificado FSC garantiza que el papel usado en esta publicación proviene de bosques certificados, promoviendo así una gestión forestal responsable en todo el mundo.
Para esta serie de lecturas graduadas se han plantado 5000 árboles.
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Lecturas
SÍLABO
Lecturas
Infantiles
y Juveniles
Lecturas
Infantiles y Juveniles
Horacio Quiroga
La abeja haragana Ilustraciones de
Fabio Facchinetti
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E
n una colmena vivía una abeja que no quería trabajar. Por las mañanas, la abeja se peinaba con sus patas y se echaba a volar muy contenta. Entraba y salía de la colmena sin llevar una gota de miel. Las abejas de la colmena estaban muy enfadadas. –¡Tienes que trabajar un poco cada día! Es la primera advertencia que te hacemos. –¡Hace mucho calor!
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Pero la abejita no se corregía. Al día siguiente las abejas que estaban de guardia le dijeron: –Hay que trabajar, hermana. –¡Uno de estos días lo voy a hacer!
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Pasaban los días y la abejita haragana prefería volar y jugar entre las flores. –Es nuestra última advertencia. ¡Si mañana no traes una gota de miel no te dejaremos pasar! –¡De acuerdo! ¡Hasta mañana!
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Al día siguiente llovía y hacía viento. La abejita voló hacia su colmena para no mojarse. Pero las abejas guardianas no la dejaron entrar: –¡No se entra! ¡Fuera! –¡Yo quiero entrar! ¡Ésta es mi colmena! –¡No se entra!
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Al caer la noche la abejita tenía mucho frío y estaba tan cansada que no podía volar. –¡Perdón! ¡Tengo sueño! ¡Tengo frío! ¡Me voy a morir! –¡No morirás! ¡Vete! –le dijeron las abejas que estaban de guardia.
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La abejita cayó al suelo y entró rodando por el tronco de un árbol hasta el fondo de una caverna. Allí vivía una culebra verde. –¿Qué haces aquí a estas horas? ¡Te voy a comer! –exclamó la culebra. La abeja temblaba de miedo. –¡Por favor, no me coma, señora culebra! La culebra se echó a reír. –Usted hace eso porque es menos inteligente que yo.
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La culebra quería saber quién era la más inteligente de las dos. –Vamos a hacer dos pruebas. La mejor, gana. Si gano yo, te como. Y si ganas tú, puedes pasar la noche aquí. La culebra sabía hacer una cosa que las abejas no pueden hacer. Con la cola podía hacer rodar la semilla de un eucalipto como si fuera un trompo. –¡Si no lo veo, no lo creo! –exclamó la abejita.
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La prueba de la culebra era extraordinaria. –Yo no puedo hacer eso, pero hago una cosa que nadie hace –exclamó la abejita. –¿De qué se trata? –preguntò la culebra. –Yo puedo desaparecer.
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En la caverna crecía una planta sensitiva cuyas hojas se cierran cuando la tocan. –¿Cómo? –exclamó la culebra–. ¿Desaparecer sin salir de aquí? –Sin salir de aquí.
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La abeja se acercó a la planta, teniendo cuidado de no tocarla, y dijo: – Ahora me toca a mí, señora culebra. ¿Puede darse la vuelta y contar hasta tres, por favor? Cuando diga “tres”, búsqueme por todas partes, ¡ya no estaré más! –¡Vale! Uno, dos, tres...
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Y así pasó. culebra buscó por todas partes: por arriba, por abajo, aquí y allí. La abejita no estaba. –¡Bueno! –exclamó por fin–. Tu ganas. ¿Dónde estás?
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La abejita preguntó en voz baja: –¿Me va a comer? –No te voy a hacer nada –prometió la culebra–. ¿Dónde estás?
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La abeja abrió las grandes hojas de la planta y salió de su escondite. –¡Aquí estoy! –dijo la abeja. La culebra no dijo nada, pero quedó muy irritada con su derrota. La abeja pasó toda la noche recordando a la culebra la promesa que había hecho. Fue una noche larga...
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La culebra y la abejita pasaron la noche arrimadas contra la pared. Fuera llovía mucho y el agua entraba en la caverna como un río.
La abejita tenía miedo, no se fiaba mucho de la culebra. De cuando en cuando la culebra sentía impulsos de lanzarse sobre la abeja. Nunca, jamás, creyó la abejita que una noche podría ser tan fría, tan larga, tan horrible. La abejita recordaba su vida anterior, durmiendo noche tras noche en la colmena, bien calentita, y lloraba entonces en silencio. 21
Al día siguiente ya no llovía y hacía sol. La abejita voló y lloró en silencio ante la puerta de la colmena: –¿Puedo entrar, hermanas? ¡Estoy muy arrepentida! Las abejas de guardia la dejaron pasar. La abejita había aprendido la lección.
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Desde ese día ninguna abeja recogía tanto polen ni fabricaba tanta miel como ella. –¡Cuánto polen traes! –¡Sí! ¡Pesa mucho!
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La abejita trabajaba mucho y se llevaba muy bien con sus compañeras. –¡Buenos días, hermana! –¡Buenos días!
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Por las noches, junto al panal, la abeja contaba su historia a las abejas más jóvenes. Les hablaba de la culebra, de la lluvia y de la planta sensitiva. –¡Qué miedo! –decían las abejitas más pequeñas. – Trabajen, compañeras, pensando que la felicidad de todos es muy superior a la fatiga de cada uno.
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Pรกginas de actividades 1 Completa el esquema. 1
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1 M I E L
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2 ÂżVerdadero o falso? 1 Las abajas viven en colmenas. 2 Las abejas recogen polen. 3 La miel es amarga. 4 Las plantas sensitivas se cierran al tocarlas. 5 Las culebras comen abejas. 6 Las culebras tienen seis patas.
V F ✓
3 Encuentra 14 verbos de la historia en esta sopa de letras. R A J A B A R T Z A B U S C A R O P H Y A R Ă‘ J H L A Q L E R P F A B R I C A R R U L E R O R E A D A C W N T F L I R O X O N E B R C R E C E R M A A D P E K I E S T A R R V R T R A R O L L O
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4 Sabiendo que A=1, B=2, C=3, etc., sustituye en el esquema los números por las letras correspondientes. T 21
R
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19
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1
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5 Encuentra seis fenómenos atmosféricos, las letras restantes te dirán el nombre de una peligrosa serpiente. A ENT NIEVECOGRANIZ A A I M V R U L O ONVIENTODNIEBLAAT ANL
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6 Lee y colorea. 1
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1 Una serpiente verde y roja. 2 Una abeja negra y amarilla. 3 Unas flores violetas y amarillas. 4 Un árbol verde y marrón. 7 El tiempo atmosférico. Coloca estas frases debajo del dibujo correspondiente. 1 2 3 Nieva. ¡Qué frío! ________________ _________________ _________________ 4 5 6 _________________ _________________ _________________ Hace viento. Llueve mucho. Hace sol. ¡Qué calor!
Nieva. ¡Qué frío! El cielo está nublado. El arco iris. 31
8 ¡Adivina, adivinanza! 1 Zumba que te zumbarás, van y vienen sin descanso, de flor en flor trabajando y nuestra vida endulzando. Las abejas ___________________________ 2 Un convento bien cerrado, sin campanas y sin torres y muchas monjitas dentro, preparan dulces de flores. ___________________________ 3 Larga y lisa, larga y lisa, llevo puesta una camisa, toda bordada, bordada, sin costura ni puntada. ___________________________ 9 Responde a estas preguntas. 1 ¿Qué estación te gusta más? ¿Por qué? 2 ¿Qué tiempo hace en primavera? 3 ¿En qué estación estamos ahora? 4 ¿Qué día hace hoy? 32