La leche de calidad comprometida con Castilla y León

Desde 1966, Leche Gaza se esfuerza por ofrecer un producto de calidad, de proximidad y sostenible, siempre velando por el ganadero y su entorno

CINCUENTA y siete años después de su nacimiento en Zamora, Leche GAZA sigue cumpliendo al pie de la letra con sus principios fundacionales: conseguir un producto con altos estándares de calidad y velar por la comercialización justa y estable de la leche para las familias de ganaderos de la provincia zamorana. Hoy, GAZA agrupa a 76 explotaciones ganaderas, recoge diariamente 150.000 litros de leche de vaca y 10.000 de oveja, presenta unas modernas instalaciones de 10.000 metros cuadrados y garantiza unos ingresos fijos mensuales a cientos de núcleos familiares, sin olvidar a sus 45 trabajadores y a los más de 200 puestos de trabajo asociados a ella.

GAZA ha extendido esos compromisos a uno más actual, al que mantiene con el medioambiente. «Nuestro reto se enfoca en contribuir a formar un sistema más sostenible, que nos permita seguir ofreciéndole a nuestro consumidor la leche de calidad que lleva disfrutando desde hace años, pero con un impacto positivo en el planeta. Nuestro foco en innovación vaya destinado a la reducción de la huella de carbono y al reforzamiento del producto local», explica Ignacio Quintanilla, director general de Gaza.

De ahí que todas las granjas de esta empresa están acogidas al Protocolo de Kioto y gran parte de la innovación de GAZA se enfoca hacia la reducción de la huella de carbono y también al impulso de la leche de kilómetro 0.

Innovación

Una de las principales señas de identidad de esta empresa zamorana desde sus comienzos ha sido la innovación, diferen- ciándose del resto de marcas al ser los primeros que realizaron una certificación para garantizar la calidad de la leche en la propia granja, el cuidado de las vacas y su bienestar. «Nos hemos preocupado de que nuestros animales sean ‘felices’ en nuestras granjas. Cuidados diarios, visitas de nutrólogos y veterinarios son una constante para garantizar que nuestras vacas reciben los cuidados pertinentes para dar la mejor leche, y eso se nota en el sabor», apunta Ignacio Quintanilla. La leche es producida en granjas propias que trabajan bao el ‘Plan Gaza’ de aseguramiento de la calidad de la leche. «Hemos creado un sistema integral de gestión de calidad del producto, que establece las condiciones a las que deben ajustarse las granjas y somete a éstas a un control exhaustivo para asegurarse de su cumplimiento. Se trata, además, de un sistema auditable, que permite una total transparencia en la producción, y que descansa sobre tres pilares: la seguridad alimentaria, el bienestar animal y el respeto por el medioambiente. Todo para que Castilla y León tenga el producto que merece: saludable, sostenible, justo y local», concluye.