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Salud & Vida ¿Cómo mantener una buena salud
bucodental en verano?
MADRID,(EUROPA
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PRESS) - En la boca conviven millones de bacterias, aunque no todas son “malas” ya que existen unas bacterias que mantienen bajo control a las bacterias que producen enfermedades, fenómeno conocido como simbiosis, pero, con el aumento de la temperatura y la deshidratación, este equilibrio se altera, aumentando las bacterias patógenas responsables de la caries, la enfermedad periodontal y la halitosis por lo que es aún más importante llevar a cabo unos buenos hábitos bucodentales.
Desde el Consejo General de Dentistas recomiendan tener una buena higiene oral durante el verano no descuidando la rutina diaria del cepillado y uso del hilo dental o cepillos interdentales. Para ello hay que cepillar los dientes, al menos, dos veces al día (por la mañana y antes de acostarse) durante dos minutos cada vez, con pasta dentífrica fluorada. A esto hay que sumarle también la limpieza de la lengua.
Otro de los hábitos a seguir para evitar los problemas bucodentales en verano es llevar una dieta saludable ya que, durante el verano es más común picar entre horas y consumir alimentos y bebidas azucaradas con mayor frecuencia. Es recomen - dable limitar el consumo de dulces, refrescos y alimentos procesados ricos en azúcar, ya que estos incrementan el riesgo de caries y dañan el esmalte dental, es mejor elegir opciones saludables como frutas frescas, verduras, pescados y agua.
Asimismo, también es importante mantenerse hidratado ya que el agua ayuda a mantener la boca hidratada, lo que contribuye a la producción de saliva y a combatir las bacterias patógenas, protegiendo los dientes de la caries.
Las bebidas alcohólicas también deshidratan y dañan los dientes y las encías, y, además, algunas pueden tener un alto contenido de azúcar, por ello lo dentistas recomiendan reducir su consumo.
Desde el Consejo General de Dentistas recomiendan tener una buena higiene oral durante el verano no descuidando la rutina diaria del cepillado y uso del hilo dental o cepillos interdentales.
Dentro de los hábitos de higiene también aconsejan usar protector bucal durante las actividades al aire libre ya que los traumatismos dentales aumentan considerablemente durante la época estival debido a la mayor práctica de deportes y juegos. Los datos indican que se produce un pico de mayor prevalencia de fracturas dentales entre los siete y los 12 años y los protectores bucales ayudan a prevenir lesiones en los dientes, labios y encías en caso de golpes o caídas.
Si un golpe provoca una avulsión, es decir, se desplaza el diente de su alveolo, haciendo que se mueva aunque sin expulsarlo del todo, los odontólogos recuerdan que es importante no usar colutorio ni tocar el diente.
Y, en caso de que el traumatismo haya roto un trozo de diente, se recomienda recuperar y conservar el fragmento de diente roto en suero salino, agua o leche. Si el traumatismo ha sido tan fuerte que ha expulsado el diente por completo se debe recuperar sujetándolo por la corona (nunca por la raíz), no limpiarlo, ni enjuagarlo.
Tras seguir estos pasos, en ambos casos hay que acudir de inmediato al dentista aunque el diente no esté fracturado, porque pueden existir otros tipos de daños, por ejemplo, en la raíz del diente, que no se aprecian a simple vista.
Por último, es aconsejable protegerse del sol aplicando cremas solares y labiales con factor de protección solar y evitar la exposición excesiva al sol. Al volver de vacaciones se recomienda pedir cita con el dentista para una revisión rutinaria.