Trabajar y ser mamá

Las mujeres que son madres y trabajan suelen realizar dobles turnos entre su empleo y la crianza de los hijos y las actividades del hogar. Según datos oficiales cerca del solo cerca del 40% de las mujeres que tienen hijos pequeños participación en las actividades económicas y a medida que crece el número de hijos disminuye el porcentaje.

Trabajar y ser mamá.

Lic. Monica Cuevas / YO IDEAL

¿Trabajar y ser madre o dedicarte al 100% a tus hijos? No es una decisión fácil, algunas podrán tener la oportunidad de elegir y otras tendrán que tomar la única alternativa que tienen en el momento.

En tiempos modernos de alta competencia no es fácil ser madre y profesionista al mismo tiempo, pero esto no es nada nuevo, la participación económica de las mujeres va en aumento y a nivel mundial la tasa de natalidad ha disminuido principalmente en los países más desarrollados. Las generaciones que se encuentran entre los 20 y 35 años ya no están tan interesados en tener un bebé y se encuentran mucho más enfocadas en el aspecto económico-profesional. Creo que esta transformación de pensamiento está ligada a factores económicos, sociales, personales e incluso ambientales propios de nuestros tiempos.

De manera general las condiciones sociales en México son poco favorables para las madres trabajadoras, entre tiempos de reposo muy cortos, derechos laborales poco aplicados y falta de acceso a guarderías entre otras muchas condicionantes, hace que las mujeres hagamos el doble o triple de esfuerzo para poder llevar una vida…

Las mujeres que son madres y trabajan suelen realizar dobles turnos entre su empleo y la crianza de los hijos y las actividades del hogar. Según datos oficiales cerca del solo cerca del 40% de las mujeres que tienen hijos pequeños participación en las actividades económicas y a medida que crece el número de hijos disminuye el porcentaje.

No obstante, todavía existimos algunas o muchas aventadas que hemos decidido recibir a un bebé y tendremos que aprender a balancear la vida profesional con la personal. Será más fácil si lo explico por partes:

El emocional-psicológico. Cuando pasamos mucho tiempo fuera de casa y pocas horas con nuestro bebé es común que lleguemos a desarrollar ciertos sentimientos de culpa “por no estar ahí” con nuestros hijos y esto nos llega a desmotivar. Nunca olvides que el trabajo que actualmente realizas también tiene un objetivo; ofrecer una mejor calidad de vida requiere este tiempo y a medida que los logros se vayan dando lo difícil se convertirá en satisfactorio. No permitas que las personas de alrededor te metan presión extra e innecesaria, cada familia vive bajo valores y principios diferentes, así que las opiniones externas sobre lo que deberías hacer, no deben estresarte ni ponerte en una situación de “malo si lo haces y malo si no lo haces”.

A medida de lo posible y necesario, date permiso de vez en cuando para estar sola, descansar y recargar las pilas, sepárate medio día de todas las obligaciones para cuidar de ti misma, trabajar duro y ser madre puede llegar a ser desgastante si permitimos que se nos llene el vaso. Debemos aprender a separar el estrés laboral del hogar; aunque no lo creas, los pequeños pueden detectar y absorber fácilmente tu estado emocional, así que el tiempo que estés con ellos ofréceles tu atención y cariño en cuerpo y mente.

De igual manera, sácale jugo a cada minuto en tu trabajo, una mamá auto realizada tendrá una mejor disposición emocional en comparación a una mamá frustrada. Recuerda que los pequeños ven, escuchan y aprenden todo de ti, así que vive hoy de la manera en la que te gustaría ver a tus hijos en un futuro; ¿te gustaría que les vaya bien?, pues bueno… ¡dales el ejemplo!

Haz equipo. Apóyate de tu pareja y padres para ofrecerle a tu bebé tiempo con quienes realmente lo amán. Cuando tus hijos pasan tiempo con otras personas aprenden nuevas habilidades, crece su círculo afectivo-familiar y ayuda a formar una personalidad más independiente y segura.

No todo es dinero. Evita compensar con cuestiones económicas u objetos, claro que tus hijos estarán felices un día con un nuevo juguete o regalo, pero estarán agradecidos de por vida por los abrazos, besos y experiencias que hayan vivido juntos.

Haz lo que creas correcto. Solo tú y tu pareja saben la situación que están viviendo actualmente y lo que desean para el futuro, así que vive en función a lo que creas correcto. Les recomiendo platicar y crear un plan de acción en el que ambos estén conformes, valoren los pros y contras de cada alternativa y pónganlo en marcha.

En lo personal creo que es igual de admirable aquellas mujeres que han decido estar tiempo completo con sus hijos y aquellas que salen a trabajar todos los días, el secreto es tener un objetivo bien claro y hacer lo necesario para cumplirlo.