El español y yo

Náthali Adriana Juárez Gamiño 3er semestre.

Lo que recuerdo de como he aprendido el español durante mis estudios en la escuela. Creo que en un principio en mi etapa de educación primaria fue con un enfoque de gramática tradicional, ya que me enseñaban con la forma de aprender ciertas normas, reglas y definiciones, que en algunos casos para el nivel que tenía en ese entonces no podía comprender del todo, quedando algunos huecos en la comprensión de los mismos, se me insistía en que debía hablar y escribir con las palabras correctas, aprender las partes de una oración, etc. En las etapas posteriores en la secundaria y preparatoria continúe con el enfoque tradicional, ya que en mi proceso de enseñanza por lo regula, partía de enseñar el español desde un punto de vista de reglas y normas, pero también se enfocaba en la manera en como yo me expresaba hablando y como lo escribía, y si había algún error se me explicaba porque no lo debía hacer de esa manera, algunos de mis maestros recurrían a su creatividad para tratar de explicarnos los temas de una manera más sencilla y poniéndonos ejemplos que fueran más entendibles.

Mis problemas para hablar, escuchar, escribir y leer considero que se derivan del enfoque con el que he aprendido el español, ya que en las diferentes etapas de mi vida académica y los diferentes maestros que tuve fueron dándoles distintos niveles de prioridad a la escritura; en escuchar, pues, por las formas en que algunos trataban de mantenernos atentos al tema aplicando métodos creativos para llamar nuestra atención y enfocarnos para comprender los temas expuestos. En la lectura en algunas etapas se trató de fomentarla y a su vez de comprenderla, finalmente en el habla se mezclaba el uso de la lengua en un sentido más formal.

En resumen, el enfoque con el que creo he aprendido el español, es en un sentido más tradicional, este tuvo sus ventajas y desventajas, dado que, el método en que se me enseñó tuvo un desequilibrio en la forma en que se fueron fomentando la escritura, la lectura, el habla y la escucha, dándome hoy en día dificultades para poner en práctica las mismas.