Desde pequeña empecé a tener gustos por las libretas y colores, me encantaba asistir a la escuela.
Siempre, me han gustado los niños y los bebes y en mi iglesia tuve un acercamiento un poco mas profundo siendo sus maestra y me encantaba serlo y pasar mi tiempo con ellos y compartirles lo que a mi un día me enseñaron otras maestras.
Enseguida como e trabajado con niños de todas las edades me gustan mas los preescolares, y fue allí cuando empecé a decir que quería ser maestra de preescolar, fue una decisión que tome apenas en preparatoria cuando comenzaban a preguntarnos que era lo que estudiaríamos y no sabia, pero maestra de preescolar llamaba mas mi atención aunque hubo gente que me desanimo por lo de las reformas y me decían que no costeaba ser maestro en estos tiempos, pero eso no me importaba ya después me dijeron que en la normal me harían un examen y ellos me dirían a donde irme si a maestra de preescolar, primaria o las otras especialidades, pero como yo solo quería preescolar comencé a inclinarme por enfermería aunque no estaba del todo segura.
Ya estaba en el bachillerato de químico biológico, pero no me sentía identificada al 100% así que me informe mejor de la escuela normal y aun que me decían que era muy difícil que quedara confié en Dios y la tuve como única opción y doy gracias porque aunque cuando aplique el examen vi a muchas aspirantes escuchaba a las voces en mi mente que decían que si quedaría. Y gracias a Dios que si quede y ahora es algo difícil y son muchos cambios en la vida, pero se que con la ayuda de Dios lo lograre y cumpliré mi sueño de ser maestra de preescolar.
Y así fue mi trayecto hasta aquí en la BENMAC.