José Ramírez Garbi
Piel de concreto
Desertar Tan sencillo como desplegar las alas… y volar. Desertar no hacerse más el muerto ni el desentendido, mucho menos seguirles el juego y nadar con la corriente. Desertar pasar a otro plano, saltar la barrera y botar tu nombre y hasta tu apellido, detonar el televisor, cagarte de la risa con el circo burotrárgico de ancianos de etiqueta. Desertar escapar y dejar de ser “cuerdos” sepultar las bocinas incandescentes y los semáforos paranoicos que mantienen organizada nuestras muertes. Desertar borrar la mirada vacía del peatón resignado, del mendigo infeliz, del anciano en la cola, la plaga roja, la verde, el bullicio que ensordece, olvidarlo todo.
Nº 45
Madriguera página de poesía
itinerante
Desertar borrar recuerdos borrar lenguaje FORMATEAR Empezar de cero. Desertar sin regreso sin pasaporte Mucho menos con billetes, biblias o banderas. Desertar sin regreso Sin permisos Sin aviso ¿Desertar por qué? Porque estorbas.
José Antonio Ramírez Garbi
San Cristóbal, estado Táchira01-12-1985. Cursa estudios en la Universidad Francisco de Miranda y de escultura en la escuela de artes plásticas Tito Salas. Artesano e intento de payaso.
¿Desertar por qué? eso no importa no hay alternativa solo queda… Desertar
http://elojodelbuho.blogspot.com/
Año 6 - Nº 45 - Julio 2011 Depósito legal PP200603FA452
Editores: Jenifeer Gugliotta / Mariana Chirino / Ennio Tucci Ilustraciones: Angie Añez Espacio web: http://www.madriguera.ya.st Correo: edicionesmadriguera@yahoo.es
Coro, estado Falcón / República Bolivariana de Venezuela
La sombra púrpura de un elefante verde es interrumpida por el aullido de un mono que se masturba frenéticamente
Pavos reales albinos y Cuervos celestes Vuelan sobre pinos grisáceos y deprimidos
Onírico
Anestesiante privilegio para el ingenuo que sepulta sus preguntas bajo asfalto y concreto. Sal en la herida al resto. Minúscula es la partícula que intenta descifrar el mezquino juego, Microbio, Bacteria errante a la deriva de un inmenso excusado. En el eterno festín verborrágico, En la disputa prolongada, El más adorado de los presentes Creó fama… Y hace siglos se fue a dormir.
Nuestras almas fogatas internas Que trascienden la carne e iluminan senderos, Descongelan glaciales internos y transforman el orgasmo en una expresión infinita
Nuestro aliento Sonido cálido, Esencia, lenguaje del fuego
Condensación
El sudor emerge de los poros en un centellear de innumerables alfileres que asoman sus delgadas puntas, Diminutas estrellas que se desvanecen Elevándose a la atmósfera…
Partículas de polvo se adhieren a nuestros cuerpos, templos animados y venerados en la consumación de almas.
Elemental
Puedo escribir los versos más tristes esta noche...¡ pero no! no escribiré un coño. Esta noche saco la basura de mi azotea y prendo la llama que calcina los malos pensamientos.
Dioses desquiciados divagan sobre el futuro de un imaginario universo. Ni en juego prevén llegar a un acuerdo O al final del crucigrama. Descifrado el acertijo infinito será el Bostezo. Dionisos balbuceantes en la azotea corroída del tiempo. Todo está dicho, Y los poetas solo son loros, Estos versos hediondos, retumban con eco en los cerebros vacíos.
Enardeceré la llama casi extinta, trascenderé sin filosofar, me masturbarme sin pensar en la muerte, oiré el sonido del tren inexistente de mi ciudad mientras esta se desviste, sacaré del alma el desdén de la rutina, hasta redimirla, y extraeré la parte mas clara de mi ser, voy a expandirla, fundirla y sentirla buscaré la belleza... hasta en la basura.
Voy a montar sobre la ola de mugre del mundo y a esparcir mi felicidad hasta en los puestos de comida rápida, donde el amor no tiene cobetura, voy a sorprenderme con las sonrisas de los ancianos del parque, voy a cagarme de la risa en una infernal cola donde todos tienen caras parafinadas. voy a dejar de imaginar una “flameante” iglesia en el combustible de mi pecado. voy a sentir el orgasmo de estar vivo... y darme cuenta, voy a correr con los perros como un perro más entre los callejones de una ciudad que se entibia, voy a meterme en la mirada del asaltante cuando bendice a sus hijos antes del atraco, voy a usar el periódico del día para hacerle nidos a las ratas vagabundas, voy a ver la belleza del circo callejero mientras un carro se traga una luz roja, voy a cantar la música que suena en los buses del transporte público, voy a orinarme sin miedo en las esquinas y a reunirme con los ciegos del escándalo abstracto del apogeo urbano.
Puedo escribir los versos mas tristes esta noche... pero la mujer que me ama y me espera no va a soportar que me diluya en una astral melancolía.
Respiro un mar que se insinúa en el horizonte desgastado de una ciudad sin recuerdos.
Piel de concreto
Destino Universal