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EL AFFAIR QUE ROMPIÓ A LOS URDANGARIN Lo habían soportado todo: un juicio que sepultó su reputación y mandó a Iñaki a la cárcel, el despojo de sus títulos, casas separadas… Al final, fue una infidelidad la que puso punto final a su matrimonio.
E
l sonado caso Nóos, el escándalo de corrupción que sacudió a España en 2010 y que involucró directamente a Iñaki Urdangarin (y de paso a Cristina de Borbón), tenía todas las características para derrumbar el matrimonio de la hija del rey Juan Carlos y su esposo, el ex jugador de basketball Iñaki Urdangarin. El resultado fue estremecedor: Iñaki acabó en la cárcel, condenado a casi seis años de prisión, y Cristina –a quien también le tocó pasar por el banquillo de los acusados por fraude fiscal– se autoexilió en Suiza con sus cuatro hijos: Juan Valentín, Pablo Nicolás, Miguel e Irene, con toda la intención de huir de la prensa española, . Contra todo pronóstico, los Urdangarin se mantuvieron juntos. Felipe VI retiró a su hermana y cuñado el ducado de Palma de Mallorca y a él se le desterró de la familia real. Igual, nada. Como un roble, la pareja aguantó viento y marea. Lo que tal vez no vieron venir es que, Iñaki, ya en semi libertad y con la necesidad de salir a trabajar, se topó con una situación que sí, para rematar el asunto, acabaría por echarlo todo por tierra. Cosas que pasan Aquí es donde entra a escena Ainhoa Armentia, la mujer que se pasea del brazo de Iñaki en la playa de Bidart, el viejo refugio familiar de los Urdangarin. El misterio de su identidad duró poco, pues los avispados medios españoles hicieron rápido la tarea de descubrirla. Se trata de una compañera de trabajo del cuñado del rey en Imaz & Asociados, el despacho de abogados donde debió emplearse en 2020 para comenzar a rehacer su vida después de la cárcel. Tiene 43 años, está separada y tiene dos hijos. Más allá de esto, solo se dice que la infanta Cristina ya sabía de la existencia del amorío, y que la publicación de las imágenes tampoco fue una sorpresa para ella, pues se enteró de esto apenas unos días antes.
Las fotografías de Iñaki y Ainhoa, en Bidart, fueron portada de la revista española Lecturas. TIEMPOS MEJORES Iñaki y Cristina tuvieron, en su momento, una vida de cuento de hadas.
Tras su boda en la Catedral de Barcelona, el 4 de octubre de 1997, el rey Juan Carlos les concedió el título de duques de Palma de Mallorca.
FOTOS ©GETTY IMAGES / 1605697, 102204025, 1195998644, 1195999695, 1345885690, AFP / JEAN-LOUP GAUTREAU, DOMINIQUE FAGET, INSTAGRAM / @REVISTALECTURAS
Por Ana Dávila Cook
14 / MARZO 2022
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