La depresión en adolescentes Un problema oculto para la salud pública y la práctica médica

Padres de familia, si su hijo tiene cambios emocionales como: sentimientos de tristeza, frustración o sentimiento de ira, desesperanza, estado de ánimo irritable, pérdida de interés en las actividades cotidianas, en la familia o amigos, baja autoestima, sentimientos de culpa, fijación en fallas pasadas, sensibilidad extrema al rechazo, necesidad excesiva de aprobación, dificultad para concentrarse, sensación que la vida está mal, pensamientos recurrentes de suicidio; y de comportamiento como: pérdida de energía, insomnio, disminución o aumento del apetito y disminución o aumento de peso, consumo de alcohol o drogas excesivamente, agitación, aislamiento social, bajo rendimiento escolar, falta de higiene, arrebatos de rabia, autolesiones; CUIDADO: puede estar presentando signos de depresión.

La depresión en adolescentes se está convirtiendo en un problema serio de salud pública en México.

Si bien los trastornos depresivos son más prevalentes en las mujeres, en los hombres sus consecuencias pueden tener repercusiones de gravedad aún mayores que en las mujeres.

El estigma hacia la depresión en los hombres puede conducir a que se intenten enmascarar los síntomas mediante conductas de alto riesgo.

Las mujeres tienen mayores tasas de intento de suicidio, pero en los hombres los intentos son más letales.

La depresión en adolescentes no es una debilidad o algo que se pueda superar con fuerza de voluntad, puede tener consecuencias graves y requiere de tratamientos a largo plazo.

Dr. Everardo Francisco

Ríos

García Especialista en Medicina Familiar

Cédula Profesional: 2383171

Cédula de Especialidad: 8376194

Registro Estatal: 14695ESVIII

Para la mayoría de los adolescentes los síntomas de depresión se calman con tratamientos como medicamentos y terapia psicológica.

Es probable que los síntomas de depresión no mejoren por sí solos. Hay situaciones que aumentan el riesgo de depresión como lo pueden ser: conflictos familiares, divorcios, maltrato hasta problemas económicos.

Es importante señalar que, de sospechar un trastorno de depresión, es necesario buscar ayuda y atención médica. En el caso del primer nivel de atención la medicina familiar considera a sus pacientes desde una dimensión biopsicosocial, la mayor virtud es la de brindar una atención médica integral, es decir, no solo atiende al adolescente, sino que también a la familia y a su interacción con su medio ambiente. Cabe destacar que el tratamiento es multidisciplinario y que involucra también al psicólogo, terapeuta, psiquiatra y principalmente un ambiente familiar adecuado.