Liliana Riveros - Jimena Montero

“Más que consumidores leales, hay marcas fieles a sus estánderes de calidad”

Pensamos que el 2022 marca el inicio de una tendencia de recuperación del conjunto de las actividades económicas en el departamento. Obviamente, el impacto del período crítico de la pandemia fue muy serio, pero estamos seguros que el espíritu emprendedor y la resiliencia que caracteriza a los paceños va a ser el factor fundamental en el camino hacia la reactivación económica y la generación de nuevos ingresos a pesar de los conflictos mundiales a los cuales el país no es ajeno.

En cuanto a cambios en los hábitos de consumo, las cifras son por demás elocuentes. Durante los cierres de gestión correspondientes a los años 2020 y 2021 nuestras plataformas digitales (personales + empresariales) crecieron en un 105%. En el caso de las transacciones digitales, de marzo de 2020 hasta la fecha, el crecimiento fue de más del 450% y en el uso del código QR para hacer transacciones financieras hubo un crecimiento de 1.300%. Esta tendencia es generalizada en todo el país. El consumidor paceño es más ahorrador y se caracteriza por ser un comprador “más prudente”. El principal criterio que impulsa su elección es la eficiencia de los productos solicitando más garantías que le aseguren el valor de su compra. De todas formas, el acceso a información global a través de internet y las redes sociales está influyendo en el comportamiento del consumidor paceño y boliviano haciendo que este sea cada vez más homogéneo. En cuanto a los aspectos que influyen en la decisión de compra, como lo apuntábamos antes, el más importantes para los paceños, es sin lugar a dudas la eficiencia de los productos que adquiere, tomando siempre en cuenta la relación calidad-precio. Sin embargo, creo que no se puede hablar de un perfil único, porque hay diferencias entre en el comportamiento de los consumidores según la edad, el género, el segmento social, la profesión, sus aficiones y un sinnúmero de otras variables que influyen hoy sobre el comprador global. La fidelidad de los consumidores depende básicamente del apego de la marca a los atributos que la convirtieron en una opción preferida por encima de las otras. Dicho de otro modo, más que consumidores leales, hay marcas fieles a sus estándares de calidad y, como dije antes, a su compromiso con ciertas causas globales.

Es un momento más que delicado. El comportamiento del mercado paceño es muy cauto y tradicional en cuanto al consumo. No va a arriesgarse a invertir o a gastar en esta coyuntura.

Hoy el consumidor paceño tiene certezas y costumbres en las compras online y digitales. Eso movió el mercado en un 360, pues marcas que antes de la pandemia no tenían espacio, hoy son líderes. Esto representa un gran aprendizaje para las marcas que no eran digitales.

A diferencia de otras ciudades, el consumidor paceño es algo más cauto y tradicional en sus hábitos de consumo y compra. Las preferencias son en varias áreas de consumo. La decisión de compra se basa en la información sobre todo de cuatro fuentes: 1. Vivencias pasadas, 2. Boca a boca, 3. Medio tradicionales y 4. Redes sociales. En cuanto a estrategias de marketing debe implementar una marca que quiere ingresar al mercado paceño para conquistar a los consumidores, primero debe estudiar los hábitos paceños en cuanto al producto que se va a lanzar y luego realizar un mix de comunicación y marketing sobre: experiencia de producto, solución que brinda el producto al mercado paceño y transformación que el usuario va a ganar. En general es un mercado fiel. Sin embargo, con todo lo vivido en la pandemia, el canal online de oferta y venta mostró al mercado paceño nuevos productos y servicios. Respecto a la preferencia del consumidor paceño sobre marcas nacionales o extranjeras, depende en qué nichos de mercado. Hay productos en los que efectivamente el mercado paceño prefiere marcas extranjeras, pero otros segmentos muestran claramente que preferimos “lo boliviano” porque es de calidad. No generalizaría.

MERCADO ¿CÓMO EVOLUCIONÓ EL CONSUMIDOR PACEÑO?

√ El consumidor paceño está expuesto, como todos, a un intenso flujo de información sobre bienes y servicios, y en esa medida elevó sus niveles de exigencia. Ahora puede comparar productos, evaluar calidades y establecer una decisión donde la variable precio no es la única determinante. En suma, estamos ante un consumidor global, informado y exigente.

LILIANA RIVEROS

GERENTE DE BANCA MINORISTA DE LA REGIÓN OCCIDENTE BCP

JIMENA

MONTERO “El consumidor paceño es algo más cauto y tradicional”

MERCADO ¿CÓMO EVOLUCIONÓ EL CONSUMIDOR PACEÑO?

√ En los últimos años el consumidor paceño aprendió a moverse entre las marcas tradicionales y las marcas o experiencias nuevas/digitales. La postpandemia dejó al mercado con mucho conocimiento de compras online y procesos digitales; por lo tanto, el consumidor paceño ya es un consumidor diferente al de inicios del 2020.