0607 Salud
SUPLEMENTO DE LA NUEVA ESPAÑA 22 DE ABRIL DE 2022
Claves para detectar un desarrollo tardío en el habla de los niños por culpa de las mascarillas “El cubrebocas es una barrera en la comunicación oral porque su aprendizaje no se basa solo en lo que oímos, sino en lo que vemos”, señala la psicóloga y logopeda ovetense Carmen Vigón Manuel Ibáñez Oviedo
El 2020 fue un año de confinamiento, miedos, dudas y cambios irreversibles. Sin embargo, también lo fue de vida, esperanza, sueños e ilusión. En el Principado nacieron un total de 4.771 bebés: 2.437 niños y 2.334 niñas. La llegada al mundo de estos pequeños, sobre todo, entre marzo y mayo, no resultó fácil porque los restrictivos protocolos anticovid vigentes en los hospitales asturianos no permitían estar a los dos padres juntos tras el parto o aislaban a la madre en el caso de que hubiera dado positivo antes del alumbramiento.
Por suerte, todo ello forma parte del pasado y ahora, con la pandemia en una fase más manejable, esos casi 5.000 pequeños asturianos cumplen dos años de vida en un mundo en el que probablemente lo más característico ha sido el crecer viendo a la mayoría de las personas con la cara tapada por una máscara. Algo extraño para niños de mayor edad o adultos, pero completamente normalizado para ellos, dado que no han conocido otra cosa en su corto periodo de vida. Sin embargo, el no poder ver la boca de los adultos a la hora de hablar o expresarse ha generado un cierto grado de preocupación entre padres y especialistas de ca-
ra al desarrollo del lenguaje y comunicación de estos niños. “La mascarilla es una barrera en la comunicación”, explica Carmen Vigón, coordinadora de la unidad de Psicología y Logopedia del Centro Cavín de Oviedo. “Observamos que algunos niños pueden tener mayores dificultades en el desarrollo del lenguaje dado que el habla no es solo lo que oímos, sino lo que vemos”, explica. Vigón trata de tranquilizar a los padres descartando que el uso del cubrebocas pueda ser una causa-efecto a la hora de que los pequeños muestren mayor dificultad para hablar. “Que genera un problema no lo veo tan claro, aunque de momento no conta-
“Si un niño no produce 50 palabras entre los 18 y los 24 meses, o no realiza combinaciones de dos, es un signo de riesgo para el lenguaje”
mos con muchos estudios que lo puedan confirmar. Hay que ver la evolución de los niños que han nacido en pandemia y cómo se desarrollan, pero no veo que haya una demanda más aumentada respecto a otros años antes del covid”. ¿Cómo se detecta un desarrollo tardío en el habla? “Si un niño no produce 50 palabras entre los 18 y 24 meses o no realiza combinaciones de dos es un signo de riesgo para el lenguaje”, explica Vigón. De hecho, aquellos pequeños que presentan un trastorno en el habla han tenido, en prácticamente todos los casos, un inicio tardío en ese desarrollo del lenguaje a los dos años. “El contacto entre ellos mismos ayuda a la estimulación. A veces de un mes para otro, de repente, empiezan a decir una gran variedad palabras”, relata la especialista. El trabajo a la hora de estimular la comunicación hablada de los niños es también una labor que deben realizar los padres con ejercicios en los que puedan aprender jugando. “Lo que hacemos es valorar en qué punto se encuentra el niño. Recogemos mucha información del entorno. Trabajamos con los niños, pero también damos asesoramiento a los padres sobre cómo aprovechar el día a día, aprovechar el juego y qué papel tienen ellos (los progenitores) para ayudar a ese desarrollo”, añade. “En el trabajo con el niño se hace una estrategia en situaciones lúdicas. Sabemos que el lenguaje se desarrolla en relación con los demás, por lo que el niño comparte el espacio con una persona y están los dos centrados en la misma actividad, que puede ser leer un cuento, jugar con una pelota...”, indica Carmen Vigón. ¿Y qué ocurre de cara a la escolarización con los pequeños en los que se haya detectado dificultad en el habla? Antes del inicio del curso se hace una valoración por parte de Educación y se decide si es aconsejable tener algún tipo de apoyo de cara al comienzo del periodo de Infantil.
Las nuevas tendencias frente al glaucoma se exponen en Oviedo LNE Oviedo
El Instituto Oftalmológico Fernández-Vega celebra en Oviedo su II Curso de Actualización en Glaucoma. El encuentro tendrá lugar los días 6 y 7 de mayo y está dirigido por los doctores Pedro Pablo Rodríguez Calvo e Ignacio Rodríguez Uña, y coordinado por los doctores José L. Urcelay Segura, Andrés Fernández-Vega Cueto-Felgueroso y Carmen Rodríguez-Bermejo Guijo. La reunión se encuadra en el Programa de Formación Conti-
nuada de la Universidad de Oviedo. Tras dos años sin edición presencial a consecuencia de la pandemia, está previsto que acudan más de 250 profesionales de todo el país. El programa incluye una sesión dedicada a la inteligencia artificial y al big data, “que podrían constituir una herramienta de apoyo al diagnóstico temprano y clasificación de ojos con glaucoma”, destacan los responsables. Entre los ponentes figuran dos expertos del Reino Unido (Andrew Scott y Anthony King) y otros dos de Suiza (André Mermoud y Tarek Shaarawy).
Los directores del curso: Ignacio Rodríguez Uña, a la izquierda, y Pedro Pablo Rodríguez Calvo. | LNE