Para Gabriela Cano, el diseño de bisutería y objetos de madera se ha transformado en una empresa prometedora.
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Foto: ©William Castellanos/13
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abriela Cano es una artista plástica y decidió poner una pequeña empresa en la que combina la belleza femenina a través de piezas de bisutería, con diseño contemporáneo y objetos de madera para decoración infantil. Escogió un nombre en quichua: “Qilu”, que significa ‘madera’, y “maki”, ‘mano’. “Este emprendimiento —manifiesta— surgió de la necesidad de expresar mis emociones a través del color y, por esa razón, fusiono el arte abstracto en diseños que hagan sentir única a la mujer, enfatizando la esencia y la originalidad de su ser”. Además, Qilu Maki (www.qilumaki.com) acompaña a sus clientas en la etapa de maternidad, con una línea de decoración infantil cálida, tierna y personalizada. Gabriela también ha apoyado proyectos escolares de sensibilización de arte para niños. Todas sus creaciones son hechas a mano y en la bisutería utiliza pintura con acrílico sobre madera. “Las mujeres emprendedoras —dice— somos fuertes, valientes y constantes”, aunque reconoce que “el camino del emprendimiento no es fácil, se requiere tenacidad y paciencia para lograr objetivos. Si tuviera que definirlo en una palabra, diría que para ser emprendedor se necesita pasión”.
Recortar y pegar: una actividad que pronto se convirtió en un negocio para Adriana Intriago y Mariela Quintero.
Foto: ©Amaury Martínez/13.
U
n hobby convertido en negocio. Adriana Intriago y Mariela Quintero estudiaron Diseño Gráfico, formaron sus familias y hace seis años acordaron crear un negocio novedoso. Mariela notó que el scrapbooking (crear álbumes con recortes), un arte muy popular en Estados Unidos, podía ser rentable en Ecuador. Lo primero que hicieron fue importar productos, elaborar y vender entre sus amigas. Actualmente tienen dos islas en centros comerciales, un taller con personal, y clientes en Guayaquil y otras ciudades del país. El scrapbooking se realiza con diversos materiales: papel, stickers, botones, cintas y apliques. Estampan el estilo “crap” (‘trozo’, ‘recorte’) en portarretratos, colgantes, cajas para pasteles, sorpresas, recuerdos, tarjetas de presentación e invitaciones. Este arte manual es “muy sacrificado” e invierten “muchísimo tiempo”, coinciden en señalar Adriana y Mariela. Reciben pedidos por Facebook (ScrapIt) o desde su página web (www.scrapit.com.ec) y participan eventualmente en ferias, además de los clientes que adquieren en los centros comerciales.