ORIS LA EXPRESIÓN DEL COLOR

La versión con esfera gris; el fondo de la caja muestra en toda su extensión el Calibre 400.

LA EXPRESIÓN DEL COLOR

El ProPilot X Calibre 400 de Oris muestra un nuevo y llamativo rostro. Un escenario que se completa con la presencia del Calibre 400, el movimiento in-house que ha transformado la aportación mecánica de la firma.

EL PROPILOT X DE ORIS evoluciona en su imagen y ha sido diseñado para, como dicen en la marca, inspirar alegría. Y lo hace con un color y texturas diferentes. El lado de la esfera se define primero por su caja de titanio de 39 mm, con alternancia de zonas satinadas y arenadas, lo que da al reloj su aspecto técnico, y se complementa con el bisel ProPilot y un brazalete también de titanio, como ocurre con la corona, que además cuenta con protectores. Pero quizás lo más llamativo se encuentra en el color que adopta la esfera, que ahora está disponible en tres diferentes opciones: gris, azul y salmón. Una paleta de colores que permite ofrecer la sensación de un mayor tamaño, al tiempo que presenta tonalidades más vitalistas y llamativas. El otro argumento del nuevo ProPilot X se visualiza en el fondo de la caja: el Calibre 400 de Oris, el movimiento de carga automática con segundero central y fecha, y nada menos que cinco días de autonomía de marcha. Como todos los movimientos de la serie Calibre 400, cuenta con una precisión de -3/+5 segundos al día, cifras que se hallan dentro de los estándares de certificación de cronómetro, incluso después de haber estado expuesto a campos magnéticos, porque el antimagnetismo es otra de sus grandes cualidades. Todos los relojes de la serie Calibre 400 tienen una garantía de diez años. R.B