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El saber infinito
UNA LEYENDA HECHA A LA MEDIDA
BRIONI ES LA ÚNICA SASTRERÍA QUE DESDE 1945 VISTE A LOS MÁS ELEGANTES, DESDE ROMA A NUEVA YORK. ACABA DE PUBLICARSE EL LIBRO BRIONI: TAILORING LEGENDS (ASSOULINE) REPASA SUS ORÍGENES Y RINDE HOMENAJE A SU LEGADO DE EXCELENCIA.
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TEXTO JAVIER FERNÁNDEZ DE ANGULO FOTOS CORTESIA ASSOULINE
El libro Brioni: Tailoring Legends es editado por la casa Assouline. Autor: Olivier Saillard y prólogo de Bret Easton Ellis. Inlcuye 200 ilustraciones y 264 páginas. LA EMPRESA FUE CONSTRUIDA por amantes de la sastrería, de las mejores telas y la creatividad. Durante más de setenta y cinco años, Brioni se ha mantenido como el sastre de referencia para los hombres más icónicos del mundo. Fundada en 1945 por los visionarios sastres Nazareno Fonticoli y Gaetano Savini, los audaces diseños de la marca la han convertido en un destino de vestuario para estrellas de cine, músicos, artistas, jefes de estado y estrellas de Hollywood. “Para el guardarropa de un hombre, la elegancia consiste en la discreción”, es el lema de la casa de moda masculina.
En 1959, los creadores de esta máxima alcanzaron un éxito sin precedentes y su vocación de hacer del traje una obra de arte les invitó a nombrar sus patrones con nombres como: Sansovino, Caravaggio, Bernini o Tiziano. Estas obras no colgaban de paredes de museos, si no de ganchos de armarios con estilo. Estos trajes empezaron a verse en estrenos de teatro, grandes galas en Hollywood, en importantes despachos. Nacía entre costuras una elegancia sin precedentes, aparentemente descuidada, pero de factura perfecta. Introdujo el color en los detalles, mezcló pantalones rectos con sacos de terciopelo púrpura, dobladillos, proporciones, equilibrio, corte impecable, costuras. Un universo nuevo para una moda masculina que comenzaba una nueva era.
Pronto sus diseños con nombres como Giotto o Tintoretto y sus trajes de seda hicieron furor. Unieron el estilo de etiqueta con un look más relajado propio de la moda de Estados Unidos. Toda una revolución en el atuendo masculino en los años 60, también en los setenta mantuvo su poder y su influencia en el vestir masculino.
Brioni inventó un estilo internacional que era menos rígido y almidonado que su contraparte de la sastrería británica de Savile Row, con un colorido sorprendente. Muy fiel al estilo italiano.
Sus creadores Foticoli y Savini ya fueron considerados como el Dior de la moda hombre. Decían a los viajeros de Estados Unidos que iban a Roma que tenían que hacer dos cosas, primero visitar el Vaticano, y luego a Brioni.
LEMA DE BRIONI
La marca selló su reputación como líder de la industria en 1952 al presentar el primer desfile de moda masculina en el Palazzo Pitti de Florencia. Esta colección rompedora se convirtió en el referente de la sastrería romana y estableció la noción moderna de elegancia en la moda masculina.
El escritor Bret Easton Ellis escribió el prólogo de este libro, homenaje a Brioni como leyenda de la sastrería y relata: “Compré mi primer traje Brioni cuando volví a Los Ángeles después de vivir en Nueva York durante veinte años, para comenzar la realización de una serie de proyectos de Hollywood que había escrito y que iba a producir. La conexión entre Brioni y su brillante vínculo con un pasado cinematográfico no estaba exactamente en mi mente cuando un vendedor de Barney’s en Wilshire Boulevard en Beverly Hills sugirió a Brioni después de que describí qué tipo de traje estaba buscando ahora como habitante recién trasplantado de la costa oeste: una de mis primeras preocupaciones fue que el traje fuera ligero, lo suficiente para llevar cómodamente en esta altitud que era tan diferente de la que había experimentado durante dos décadas en la Costa Este. Estaba en un momento de mi vida en el que pensé que finalmente me había asentado: había una gran película nueva, había una nueva relación. Tenía poco más de cuarenta años y quería presumir mi edad”, señala y añade: “Era una prenda mezcla particular de clasicismo y comodidad, a la vez de moda y atemporal. Acentuaba mi complexión, me quedaba bien, pensé que el traje era el más hermoso y cómodo que jamás había visto. Un traje Brioni es un testimonio de la herencia de la fina sastrería italiana, con su insistencia en una silueta impecable”, concluye.
La sastrería que se adapta a cualquier cuerpo ha permitido que entre sus clientes se encuentren jugadores de la NBA, directivos de Silicon Valley, amantes de la moda confortable, premios Nobel como el físico Joachim Frank o la estrella de rap Drake. Desde Obama a Mandela dieron sus tallas al sastre de Brioni, la firma ha tomado la medida a cuarenta jefes de Estado. Recientemente han colaborado con el artista multimedia conceptual alemán, Carsten Höller. Solo por mencionar algunos. Todo el saber de la sastrería ha sido durante siglos un oficio familiar, de padres a hijos. Marcando un sello
Página anterior, Diseños para Primavera 2022, coleccion Roman Garden; Pasarela durante Palazzo Pitti, 1960. Esta página, Foto y boceto, coleccion Blue Simphony, 1970; Modelos usando trajes Brioni, 1960. “UN TRAJE BRIONI ES UN TESTIMONIO DE LA HERENCIA DE LA FINA SASTRERÍA ITALIANA, CON SU INSISTENCIA EN UNA SILUETA IMPECABLE”,
BRET EASTON ELLIS
y una identidad, pero poco a poco eso se ha ido perdiendo y para evitar que todo ese conocimiento, ese oficio se perdiera, Brioni creo una escuela en 1985 para permitir que los maestros sastres transmitieran sus habilidades a los jóvenes estudiantes, un círculo virtuoso, manteniendo la excelencia de la calidad y los estándares exigidos por Brioni. Después de cuatro años de estudio, los graduados de la Scuola Alta Sartoria terminan sus estudios profesionales como sastres totalmente calificados.
Italia no es el único país que ha experimentado ese problema de trasmitir un oficio de padres a hijos, la mítica Savile Row de Londres también ha visto con miedo la perdida de este patrimonio si los jóvenes no se incorporan al oficio. Savile Row es sin duda una de las mecas mundiales de la sastrería y ha establecido lazos con la firma italiana.
En 2007, Brioni se asoció con el Royal College of Art para permitir que los estudiantes se beneficien del conocimiento institucional de Brioni y su técnica. Esta unión de estilo inglés y sastrería italiana se hizo universal con la primera película de 007 de Daniel Craig en Casino Royal, vestido con un impecable traje Brioni.
Otros actores han disfrutado su sastrería en la alfombra roja desde Tom Cruise, Matthew McConaughey, Christian Bale a Samuel L. Jackson, Denzel Washington, Jeremy Irons o Anthony Hopkins. En 2019, el actor Brad Pitt firmó para representar a Brioni en su campaña, así como también usó trajes y prendas de casa italiana para la película de Quentin Tarantino, en Érase una vez... en Hollywood, por la que ganó el Premio de la Academia por mejor actor de reparto.
El nombre original Atelier Brioni forma parte de un pequeño grupo de islas frente a la costa croata en el mar Adriático. Un lugar frecuentado por la alta sociedad europea, un destino de la jet set de principios de siglo. La clientela que los sastres querían para sus trajes, aristócratas y empresarios cosmopolitas. Después las islas formaron parte de la antigua Yugoslavia, pero ya quedó su nombre como sinónimo de lujo.
Todo el espíritu de su elegancia discreta, de su costura impecable permanece en esta firma que celebra más de 75 años como una leyenda del estilo masculino.
