8 minute read

En Portada

Next Article
Agro Evolución

Agro Evolución

ESPECIAL PERSPECTIVAS DE PRODUCCIÓN

AGUA Y SEQUÍA, SUELO, LA SOLUCIÓN ES DE TODOS

ESPECIALISTAS advierten las lluvias llegaron tarde y no caen donde deben caer. El nuevo secretario de Agricultura adelantó se pondrá en marcha un plan hídrico nacional.

POR Jair Pineda

México y el mundo enfrentan tres desafíos que deben resolver esta misma década: falta de agua, erosión de la tierra (suelo) y sequías extremas (cambio climático). Son factores determinantes para asegurar la producción de alimentos. El reloj de arena ya está al límite.

Expertos consultados por Gigante Agroalimentario, advirtieron que 40% de la producción de alimentos en la zona Centro y Norte del país está en riesgo. Ello, porque si bien se registraron lluvias en junio, muchas cosechas se perdieron en la primera parte del año y el agua que cayó no es suficiente en la mayoría de las entidades.

En el sexto mes de año, por ejemplo, el cilantro disparó su precio más de 1,000% debido a la escasez. Los estados productores, Puebla, Zacatecas, Aguascalientes y Baja California tuvieron problemas en sus cultivos por la sequía. El chayote también fue afectado.

Julio Berdegué, quien será el nuevo secretario de Agricultura, en el sexenio que está por iniciar, dijo: “tenemos que hacer un esfuerzo por usar el agua de manera más eficiente; podemos producir más usando menos el líquido. Vamos a tener un plan hídrico nacional dentro del cual, el cambio de las formas de acceder y usar agua en la agricultura, será un eje central.

“El otro tema es el cuidado de nuestras cuencas… están con mucha deforestación; se están perdiendo más de 200 mil hectáreas de bosque, selva y manglares, y los suelos está están muy erosionados (casi la mitad); tenemos que transitar a una agricultura más amigable con el medio ambiente”, afirmó tras ser nombrado por la Presidenta electa Claudia Sheinbaum.

Adelantó que se van a reforzar las políticas para el bienestar en el campo (menos personas en condición de pobreza); se va presentar el plan hídrico nacional (que será de inmediato) y habrá nuevos programas de acceso a crédito y de comercialización.

Por su parte, la Alicia Bárcena, quien tomará la Secretaría del Medio Ambiente, anunció que el tema del cambio climático será un eje central de atención durante la nueva administración, al igual que la gestión agua (revisando la legislación y normativa), y el trabajo para evitar la contaminación y limpiar los ríos y cuencas, para darle viabilidad a la producción y a la población.

Los especialistas propusieron impulsar una agenda de trabajo entre todos los actores, para definir políticas que atiendan las necesidades de cada región. El cambio climático, la crisis hídrica y el deterioro del suelo, figuran entre los principales factores que afectan la actividad agrícola, afirmó la Dra. María Isabel Escobosa García y el Dr. Fidel Núñez Ramírez, investigadores de la Universidad Autónoma de Baja California, de ahí la importancia de cuidar el agua y los suelos en beneficio de la agricultura.

Plantearon la urgencia de encontrar soluciones a la creciente demanda de agua debido a la escasez, sequía, contaminación y desperdicio del recurso hídrico, que también es indispensable para las actividades industriales y pecuarias.

Se refirieron específicamente al Valle de Mexicali y de San Luis Río Colorado, que ocupa la parte noreste de la península de Baja California y el noroeste del estado de Sonora.

Este valle fue una zona desértica, pero a partir de principios del siglo pasado se convirtió en una próspera región agrícola bañada por el río Colorado, la presa Hoover de Estados Unidos y varias presas regionales.

VAMOS A TENER UN PLAN HÍDRICO NACIONAL DENTRO DEL CUAL, EL CAMBIO DE LAS FORMAS DE ACCEDER Y USAR AGUA EN LA AGRICULTURA, SERÁ UN EJE CENTRAL; TENEMOS QUE TRANSITAR A UNA AGRICULTURA MÁS AMIGABLE CON EL MEDIO AMBIENTE.

JULIO BERDEGUÉ Nombrado secretario de Agricultura.

Para la Dra. Escobosa García y el Dr. Núñez Ramírez, el problema es multifactorial, porque intervienen cuestiones de agua, suelos, clima y factores propios de cada tipo de planta.

Señalan que se han implementado diferentes acciones, incluso ha sido incorporada la tecnología, pero no es suficiente, por lo que recomendaron realizar análisis de tierras y aguas que permitan un manejo nutricional de los cultivos.

“La salinidad del suelo se ha duplicado en setenta años y la calidad del agua ha disminuido, en tanto que la dinámica del clima está en aumento”, dijo Núñez.

Recomendaron como alternativas de solución, el riego por goteo subterráneo, el uso de agua de "drenaje parcelario" e identificar qué sales intervienen en la contaminación del suelo.

“De las características físicas, químicas y biológicas del suelo dependen el almacenamiento y disponibilidad de nutrientes, humedad fácilmente disponible y la absorción para la nutrición del cultivo y su trabajo metabólico, que se reflejarán en la producción”, afirmó el Dr. Eduardo Rodríguez Díaz, miembro del Centro Regional de Servicios Integrales para la Agricultura Protegida (CRESIAP).

EL IMPACTO EN ALIMENTOS

El Grupo de Consultores de Mercados Agrícolas (GCMA), que dirige Juan Carlos Anaya, advirtió que la persistente sequía en cientos de municipios del país, impactan las perspectivas de la cosecha 2024 de maíz.

“Lamentablemente no hay buenas noticias, las lluvias en el norte (en junio) llegaron cuando ya está terminando la cosecha de sorgo y maíz en Tamaulipas.

“En 2024, en maíz, un producto básico, la producción viene a la baja derivado de que Sinaloa trajo una producción a la mitad, igual que Sonora y Tamaulipas, y ahora que viene la siembra de la temporada primera-verano, en el Bajío y todo el país, el panorama no pinta bien porque no han caído las lluvias a donde deben caer de manera suficiente, lo que está retrasando la siembra.

“Eso va a provocar que la producción de maíz, de un volumen de 27.2 millones de toneladas del año pasado (2023), la estamos estimando en 24.5 millones, lo que va a provocar que este año subamos las importaciones de 19.7 millones de toneladas a casi 23 millones, lo que nos va hacer el mayor importador de maíz del mundo.

“Y en el tema del frijol, que también es un alimento básico, si no llueve en la zona centro – norte, en Durango, Zacatecas y Chihuahua, por segundo año consecutivo vamos a tener la peor producción y la mayor importación, lo que está subiendo el precio al consumidor.

“Y en el caso del azúcar, estamos viendo precios elevados, porque por tercer año cayó la zafra de caña; es la cosecha más baja de los últimos 10 años y eso está elevando los precios”, advirtió Anaya, en una entrevista a W Radio, el pasado 19 de junio.

Y es que, entre enero y abril de 2024, México compró al extranjero 16,500 mil toneladas de oleaginosas y granos; esto representa 20% más respecto al mismo periodo de 2023, revelan datos de la Secretaría de Agricultura, que encabeza Víctor Villalobos.

En la actualidad, los productores están muy preocupados por los rendimientos a la baja de sus cultivos y no sólo es por la necesidad de agua, sino también por el deterioro de la fertilidad del suelo.

Así, por ejemplo, el Valle de Mexicali y de San Luis Río Colorado, produce principalmente trigo, algodón, alfalfa, dátiles y maíz dulce, entre otros cultivos, pero ya se registran reducciones en la producción de granos y hortalizas.

Los datos son reales

De acuerdo con cifras del monitor de sequía de la Conagua del 31 de mayo contra 15 de mayo de 2024, el número de municipios con sequía aumentó de 1,963 a 2,105; un incremento de 142 con respecto a la quincena previa. Un estado que registra 100% de sequía en sus municipios es Tlaxcala.

Hay que destacar que durante la primera quincena de mayo se presentaron precipitaciones puntuales en las entidades de Coahuila, Puebla, Oaxaca, Chiapas y la zona limítrofe entre Tabasco y Campeche. Sin embargo, las lluvias no fueron suficientes para registrar una disminución en áreas con sequía.

Por el contrario, la segunda onda de calor dejó un ambiente de caluroso a muy caluroso en todas las entidades de México. Además, la sequía severa se incrementó en Oaxaca, el sur de Veracruz, Chiapas y Tabasco; en este último estado también surgió la sequía extrema. Respecto al nivel del agua en presas, a escala nacional pasó de 38.1% a 35.8% durante la última quincena de mayo, mientras que las principales presas de uso agrícola pasaron de 28.8% a 27.5% de su capacidad. Si bien en junio subió, no es suficiente en muchas entidades.

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), habían pronosticado que las lluvias empezarían el 15 de mayo, pero la reciente ola de calor en ese mes, que arrojó temperaturas hasta de 50°C), las retrasó hasta mediados de junio.

Ambos organismos anticiparon que los volúmenes de lluvia serían poco significativos, en especial en las regiones del Noreste y Norte Centro, debido a que el promedio histórico de lluvias observada durante estos meses (mayojunio) es bajo, lo mismo se prevé para el mes de julio.

“Esta situación hace suponer que tendremos un gran déficit de agua en el país; en junio había alta probabilidad de que se presentara oficialmente el fenómeno de La Niña y aumentará la actividad ciclónica y lluvias en el país”, señaló un informe de la Conagua.

This article is from: