17/2/2015
Rosaura Barahona / El excepcional Médico - vLex Global
Rosaura Barahona / El excepcional Médico ID vLex: 78573780 http://norte-monterrey.vlex.com.mx/vid/rosaura-barahona-excepcional-medico-78573780
Autor: Rosaura Barahona Un verso de Antonio Machado, el poeta español, dice al hablar de un hombre: "Es, en el buen sentido de la palabra, bueno". Lo recuerdo hoy que hablaré de otro gran Antonio, éste de profesión maestro, aferrado siempre a sus convicciones profundas y fiel a su vocación de hacer del mundo al alcance de su mano, de sus ideas, de sus recursos y, sobre todo, de su corazón, un mundo mejor. Este otro Antonio, conocido para muchos de sus compañeros, amigos, ex alumnos y colegas como "El médico", me recuerda un texto de Roberto Juarroz, uno de mis poetas predilectos: Levantar la cortina / y confirmar cada tanto / nuestra mirada hacia el mundo. / Volver a observar / a quienes duermen caminando, / a quienes llevan la cabeza / debajo de los pies, / a quienes tienen la mirada / solamente pintada, / a quienes arrancan de los árboles / los frutos ya envasados, / a quienes envuelven su voz / con pañales de cifras / o con vendas en jirones / de los poderes deshilachados, / a quienes creen que van hacia delante / mientras en cambio retroceden, / a quienes arrastran sus pasos / como orugas sonámbulas, / a quienes descuelgan / como fatigados trapecistas / sobre el colchón o la red de los amores bobos. González Aréchiga, si estuviera en el poema, sería el que mira, no el mirado y tras otras reflexiones, diría como Juarroz: Y después de observar nuevamente estas cosas, / conviene bajar de nuevo la cortina. Conocí al ingeniero González Aréchiga hace más de 40 años, en voz de algunos de mis hermanos, sus alumnos. Ellos y sus compañeros lo admiraban porque sabía mucho y sabía transmitirlo. Su clase nunca se limitó a lo técnico; siempre involucraba lo vital. Escuchaba y aconsejaba a sus alumnos, a pesar de que no les llevaba muchos años. Conviví con él cuando se tuvieron las primeras reuniones para formar la Asociación de Profesores del Tec. Recuerdo, con claridad, la actitud siempre conciliadora del Inge González Aréchiga. Cuando, tras discutir y escuchar, llegaba a una posición que aceptaba como la adecuada, la defendía a capa y espada, sin importar mucho qué otras posiciones se sugirieran ni de qué tan alto provinieran. http://app.vlex.com/#WW/search/*/%22Universidad+Mexicana+del+Noreste%22/p5/vid/78573780
1/2
17/2/2015
Rosaura Barahona / El excepcional Médico - vLex Global
Nadie le escatima al Médico su inteligencia, aunque algunos le reclaman, no sé si a sus espaldas o abiertamente, lo que llaman "su idealismo", el que consideran obsoleto, inútil o ambas cosas. Juan Antonio estuvo siempre detrás de muchos de los proyectos que mejoraron o, por lo menos, buscaron mejorar al Tec, primero, a la Universidad Mexicana del Noreste (UMNE), después, y a las personas, siempre. Ha sido un hombre autocrítico y crítico, pero con una altura que no todos tenemos: critica los algos, no a las personas. En los casi 40 años que tengo de conocerlo, nunca lo he oído hablar mal de alguien. No sé si lo haga o no; digo que yo nunca lo he escuchado. Y me consta que cuando siente la obligación de aclarar una posición o de señalar algo que no le parece correcto, adecuado o debido, lo hace de frente y ante quien sea necesario. Me acabo de enterar que ya no es Rector de la UMNE. Lo siento mucho porque ahí invirtió gran parte de su vida. Me han dado varias versiones sobre qué sucederá con la UMNE. Una es absurda; dice que la "convertirán en una universidad con carreras para mujeres". Espero que no sea cierto, porque si alguien se atrevió a declarar un anacronismo discriminatorio de esa magnitud, merece que lo saquen del campo de la educación y del Siglo 21 y le den un curso intensivo sobre género y evolución de la mujer. Al Médico González Aréchiga hay que agradecerle muchas cosas que no caben en este espacio. En primer lugar, que haya sido fiel a sí mismo, y que toda su vida haya luchado por ser congruente y coherente, de modo que sus palabras respondan a sus convicciones personales, por lo que nunca ha dicho una cosa y hecho otra. También agradecerle que sea una prueba viviente de que se puede tener una actitud abierta y plural sin contradecir sus profundas convicciones religiosas; que le haya dado un lugar esencial a su familia; que haya incluido a su Beatriz en todos sus proyectos; que haya sido el pilar de una universidad en la que muchos y muchas se transformaron; que haya respetado a las personas, sin distinción de género, religión, cultura o posición económica; que se haya seguido preparando siempre; que le haya echado la mano a más gente de la que su razón le ordenaba y, "last but not least", que haya documentado sus vivencias con su eterna cámara fotográfica. Hoy, cuando nos quieren convencer que todos vivimos en un estercolero al que, tarde o temprano, debemos resignarnos, Juan Antonio dice todo lo contrario con su ser y con su estar. Se puede ser bueno, generoso, inteligente y capaz, siempre y cuando se sea fiel a las convicciones profundas y se practiquen los valores, en vez de limitarse a predicarlos. Gracias, Inge. Siga lo que siga, será bueno. No puede ser de otro modo para alguien con su calidad humana.
http://app.vlex.com/#WW/search/*/%22Universidad+Mexicana+del+Noreste%22/p5/vid/78573780
2/2