DÍA DE LAS MADRES
Nora Sandigo, "La Gran Madre" ora Sandigo es conocida popularmente como “La Gran Madre” ya que ha aceptado la tutela de más de 1.500 niños nacidos en Estados Unidos, pero hijos de inmigrantes indocumentados que han sido deportados o temen a la deportación. Ellos han contactado a Nora por temor a que, si son deportados, sus hijos desaparecerían automáticamente en el sistema de hogares de adopción y no los volverían a ver. Nora huyó de Nicaragua en los años 80 debido a la guerra civil que atravesaba su país. En su ciudad natal Sandigo estaba viendo cómo desaparecían sus compañeros de clase. Uno de ellos no se presentó a una reunión con el grupo rebelde Sandinistas y lo mataron, dice ella. En medio de la violencia, su padre decidió enviar a sus hermanos a trabajar en una granja lejos de allí y les dijo que salieran del país. Ella fue a Managua y buscó asilo en la embajada de Venezuela. Allí empezó su camino, que la llevaría a Francia y luego a Miami como refugiada política en 1988, donde a través de su experiencia como inmigrante encontró su propósito de vida, el trabajar por los derechos de los inmigrantes. Se vinculó entonces a una fundación apoyada por las Naciones Unidas que ayudaba a proteger los derechos de la comunidad de inmigrantes y desde donde lideró una demanda colectiva dirigida a lograr que los Estados Unidos otorgaran asilo a los nicaragüenses. En respuesta, el Congreso aprobó una ley que permitió la entrada de inmigrantes de varios países, incluida Nicaragua. “Nos dimos a conocer como una fundación de puertas abiertas para la comunidad, con un trabajo gratuito, desde el corazón, una fundación de amor para ayudar a las familias”, dice Nora. Más adelante llegaron familias con niños y ellos les empezaron a ayudar con sus labores después de la escuela. Y eventualmente sucedió, “una madre peruana llamó desde un centro de detención
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12 | Mayo 2019 | Go! Latinos
En el mes de las madres, presentamos la vida y obra de “La Gran Madre”, quien ha adoptado a más de 1.500 niños de todo el país.
y me pidió que tomara la autoridad legal de sus dos hijos. Dije que sí y así comenzó todo”, cuenta Nora con orgullo. Así nació la organización Nora Sandigo Children Foundation, “La organización vino a ser mi refugio desde que llegué al país. Dios me puso en el camino, y recibí todo el adiestramiento para poder trabajar durante 30 años por la comunidad inmigrante, hasta hoy en día”, comenta Nora. A través de la organización, los padres que temen ser deportados firman documentos dándole poder a ella sobre sus hijos, los cuales no confieren tutela legal completa o derechos paternales sobre ellos. Más bien, proporcionan un salvavidas a las familias, y le dan tiempo a Sandigo para garantizar la seguridad de los niños en caso de que uno o ambos padres sean detenidos por las autoridades de inmigración. Con este poder Nora puede tomar decisiones por los niños en caso de que alguno de sus padres biológicos falte, en temas relacionados con su educa-
ción, su salud, cuando vayan a viajar o salir del país o cuando necesiten representación en la escuela, entre muchas más situaciones. Sandigo ha estado tomando la tutela de niños desde el 2006. Ella no los cuida a todos a la vez. Muchos viven con un padre o amigo de la familia y la contactan cuando necesitan de su ayuda. Ella solo ha tenido un puñado de casos en los que ambos padres han sido deportados y los ha llevado a vivir con su familia, al lado de su esposo y sus dos hijas. “Cinco niños han vivido conmigo y mi familia por más de 12 años, hasta que se han graduado de la escuela o han cumplido la mayoría de edad. Mi esposo y yo los consideramos nuestros hijos, y mis dos hijas los consideran sus hermanos”. En la actualidad Sandigo y la fundación están recaudando fondos para comprar tierras para construir un centro. Ella dice que albergaría alrededor de 100 niños necesitados, aquellos que quedaron huérfanos y que a menudo sufren las consecuencias psicológicas de una familia separada.