6 de febrero de 2015
“Las funciones de la escuela”. Juan Delval. Hablar sobre las funciones de la escuela nos lleva a varias investigaciones, es decir, desde el papel que toma el alumno, el maestro, la institución, las autoridades educativas, el contexto tanto familiar como social, así como las diferentes ideas que tiene la sociedad de la escuela. Para comenzar, se tomará el tema de “la enseñanza obligatoria”. Se entiende que la educación debe ser impartida gratuita y laicamente a todo ser que sea parte de una sociedad. Dícese que en varios países se obliga a los niños a asistir a la escuela, entre ellos destacan América Latina, África y parte Asia. Claro que se dieron casos en el que los niños no asisten al aula de clase como debería de ser, esto se debe a la economía de la familia, no les pueden dar la educación que necesitan y, por causas mayores los ponen a trabajar. Dentro de las instituciones, se dieron una cierta variedad de cambios, entre ellos destacan el aumento de contenidos y de las exigencias. Desde mi punto de vista, el enseñarle a los alumnos contenidos extravagantes y, en algunos casos, innecesarios, es absurdo porque si no es significativo el aprendizaje lo olvidarán con facilidad y, por lo tanto, no le dan importancia alguna. Cuando un estudiante no obtiene buenos resultados en las materias que se le imparten dentro del aula de clase, existen dos políticas para ellos: una es que pueden repetir el curso pero, por ciertas razones el alumno no se encuentra con personas de su edad, van perdiendo el interés y son etiquetados como “tontos”. Dentro de lo psicológico, si un niño es catalogado así, poco a poco se va afectando emocionalmente y, con el paso del tiempo, se denotan las consecuencias de lo ocurrido. Otra política es que se ofrecen programas especiales, de recuperación sólo que el interés por los alumnos va decayendo cada vez más.
María Goretti Jiménez López.
6 de febrero de 2015 Entrando en una situación académica, muchos padres de familia creen que los maestros están para cuidar a sus hijos, tal vez sí, pero no de la forma que ellos se imaginan. Desde épocas atrás se tiene la imagen de la escuela como una “guardería”, un lugar en donde se “guardan a los niños” mientras los padres trabajan o desempeñan otro tipo de labores. Es lamentable ser testigos de los hechos, darse cuenta de que no se está valorando lo que se hace por los alumnos, no sólo es cuidarlos sino enseñarles los principios básicos del aprendizaje, así como los valores que se deben de impartir en el hogar pero, qué más da, el docente también puede desempeñar esa función. Destacar la función de socialización es importante porque es ahí donde se dan las bases primordiales para que interactúen con otros niños, se les prepara para el trabajo difícil que los espera en un futuro. Dentro de la enseñanza debe ir incluida la socialización del alumno para enriquecer ese aprendizaje, no sólo el que él conoce, sino aprender de los demás. El ir adquiriendo conocimientos es, primeramente tener en cuenta que la escuela transmite el conocimiento científico así como llevar a cabo la comunicación. Un punto importante a resaltar es que el niño aprende más en su casa, en la escuela sólo aprende lo que quiere, lo que necesita, por ejemplo, es importante saber leer y escribir, es por eso que son considerados como los conocimientos básicos. También se dan los casos del analfabetismo, a estas personas les es difícil adaptarse o integrarse a un grupo social. Así pues, la escuela transforma el conocimiento empírico en conocimiento científico. Considero que si el alumno no está interesado en la materia, simplemente que no se le enseñe pero, eso no es posible de lograr debido a las normas internacionales. Dentro de los ritos de iniciación podemos observar que se dan para entrar a un nuevo nivel, un ejemplo de esto son los exámenes de admisión; enseguida se da la discriminación hacia los más pequeños o se les da “la bienvenida” a los “neófitos”. El aprendizaje en la vida cotidiana nos dice que lo que se aprende en la escuela no se aplica en la vida diaria, así como las personas que no pueden hacer las cosas en la escuela pero fuera de ella sí. Desde mi punto de vista esto se debe a que
María Goretti Jiménez López.
6 de febrero de 2015 en la escuela no se aprende por placer o por gusto sino que sus conocimientos son por el momento, sólo para el examen que se les aplicará próximamente. Por lo tanto, lo que aprende en la “calle” es lo que más guardan, lo que más aplican porque fue significativo, ya sea positivo o negativo. El conocimiento científico se aplica mucho en la escuela, es más de aprenderte lo que sucedió o se inventó en años anteriores que lo que está pasando en el momento. Es por ello que muchas personas no logran entenderlo, no lo aplican en su vida diaria, está muy alejado a las posibilidades o necesidades de cada uno, no lo asimilan y mucho menos, lo aprenden. Así pues, la diferencia entre el aprendizaje escolar y el cotidiano es que el escolar es metodológico y en el cotidiano se plantean problemas reales. El tema fue significativo porque aprendí bastante sobre lo que es el contexto escolar al igual que las funciones que se desempeñan diariamente, darme cuenta de la imagen que se tiene e ir pensando qué hacer para que eso se termine o, simplemente, hacer que se valore el trabajo que desempeñaré como futura docente de educación preescolar.
María Goretti Jiménez López.