DOMINGO, 11 MAYO 2003
VIVIR
LA VANGUARDIA
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LOS AUTORES DE LOS POEMAS GANADORES EN LA TERCERA EDICIÓN DEL CONCURSO DE E-POEMAS n Entre los 2.379 poemas que han concursado este año en la 3.ª edición del concurso de e-poemas, un jurado formado por Sam Abrams, poeta y crítico,
“E-POETAS” “La Vanguardia” regalará el día 1 un cuaderno cívico con los mejores poemas de los 3 concursos
Jaume Subirana, poeta y profesor de literatura, y Toni Merigó escogió los cuatro ganadores, que explican aquí la trastienda de sus creaciones.
DANIEL RESNICH, 34 años, Barcelona
“Si hay Dios, está mirando un canal de pago”
XAVIER GÒMEZ
“Me impactó un niño iraquí mutilado en la tele. Me asomé a la calle. Era de noche. Las ventanas de los otros pisos titilaban por las teles encendidas que transmitían datos, números, balances. Ese niño era toda la humanidad y lo habíamos abandonado. Ahí surgió el poema.” Daniel –argentino– es guionista y consultor infomático. Llegó antes de la gran crisis: “Estamos condenados a la esperanza. Nos han robado el presente”. Publicó
sus poemas en las dos ediciones anteriores. A la tercera va la vencida. “La televisión nos da mensajes bien envueltos, digeridos, premasticados. Esa noche mis vecinos cenaban guerra. Con mi poema he querido provocar una indigestión.” El último verso alude al Evangelio. “Dios nos ha abandonado. Si existe, está mirando un canal de pago.” Profetiza nuevos formatos televisivos: “Nominaremos los prisioneros, los muertos...”.
PRIMER PREMIO Reality war Bombardean en mi cena Le siegan la cabeza a mi hijo. Su tronco cae decapitado en la mesa y se desangra en el bistec. Mi esposa gimotea. Retiro el cuerpo. Limpio la mesa. Comemos postre. La cabeza de mi hijo dice en la pantalla: ¿Por qué me has abandonado?
ARMAND MARIGÓ I CURCOY, 66 años, Barcelona
“Hoy en día es difícil escuchar la quietud”
MERCÈ TABERNER
“Me gusta la pintura. Los colores me fascinan. El poema se me ocurrió en casa, mientras practicaba gimnasia. Aunque un poema no debería comentarse. Es como un cuadro. Unos lo pintan y otros lo interpretan. Pero bien, ‘Colors’ habla del paso del tiempo, de hacerse mayor, de la sensación de sentirse lleno de vida aunque al fondo amenace el futuro. La vejez no es agradable.” Armand había trabajado de administrativo en un hospital de Barcelona, pero ahora está jubilado. Dos veces a la semana practica marcha en
Pedralbes. “Tengo unos 80 poemas escritos y he ganado algún premio, pero sólo escribo cuando siento la necesidad.” Ahora Armand puede disfrutar una vida contemplativa: “Hoy en día es difícil escuchar la quietud. La plaza del Monestir de Pedralbes es mi lugar predilecto. De joven, me planteé ser monje, pero me hubieran expulsado por ateo. Además, me gustaban las señoras. Expulsado dos veces.” Armand recuerda sus andanzas en los 60 tras las extranjeras. “Pocos éxitos, pero ¡qué tertulias con los amigos!”
SEGUNDO PREMIO Colors En color lila penso en el verd que ja és groc, a la caiguda de la tarda en el blau que encara no és negre
JOSÉ LUIS ANDRÉS CEBRIÁN, 47 años, Zaragoza
“Un libro de jaikus me llevó a Japón”
MERCÈ GILI
“En los ochenta empecé a practicar zen y descubrí los jaikus. Vi que los aforismos que escribía en mi diario podían tomar esa forma. Leí, me documenté... entonces escaseaban las ediciones.” Más tarde, en 1994, José Luis, actualmente celador, pagó la edición de 200 ejemplares de su “Diario de momentos” y envió algunos a asociaciones españolas en Japón. En una de ellas, en Imabara, lo utilizaron para aprender castellano. En 1998 le publicaron el
libro en edición bilingüe y le invitaron a presentarlo. “Esto aquí no pasa. No tenían ninguna referencia de mí. Todavía no me creo que ese libro me llevara a Japón. Me trataron estupendamente. ¡No me dejaron pagar ni un sello!” Allí, en un templo de Kioto, nació el jaiku de las hortensias. “El jaiku es la poesía del instante, la más proxima que existe al silencio. Diecisiete sílabas que hablan de la naturaleza. Pobreza, sencillez, simplicidad.”
TERCER PREMIO Jaiku Tallos de hortensias doblados por el peso de tanta belleza
LÍDIA RIUS BATALLER, 12 años, Castellterçol
“Yo he andado entre el trigo”
XAVIER GÓMEZ
“Sin que me vean, con una amiga, he andado dentro de un campo de trigo.” El trigo ondulante a merced del viento es una imagen habitual en Castellterçol. “Eso me inspiró un poema más largo, que escribí para la escuela.” Una versión reducida es la que ha concursado. No es la primera vez que Lídia recibe un premio. Fue galardonada en los últimos cuatro juegos florales de su escuela. Le gusta leer, tocar la gralla con su pandilla
–en una colina, cerca del depósito de agua–, el fútbol y “Operación Triunfo”. Escribe cuentos. Estudia piano. Su agenda rebosa de actividades. Pero no sabe qué quiere ser de mayor. En su bola de futuro sólo se ve en su pueblo de 2.000 habitantes, cerca de Moià. En verano son más; llegan los de Barcelona. No se siente distinta de sus amigas de ciudad. Eso sí, esa manera de hablar catalán –solo con las “as”– es para troncharse.
MENCIÓN ESPECIAL Camp de blat El camp de blat en un dia de vent sembla una mar daurada brillant i ardent Les espigues tremolen, d'un lloc a l'altre són com les onades, d'un mar mai en calma