ACERCA DE LA NADA Y EL VACÍO III LA GEOMETRÍA DEL VACÍO
H.C.ELÍAS
LA GEOMETRÍA DEL VACÍO
H.C. ELÍAS
Extracto del libro Acerca de la Nada y el Vacío ©H. C. Elías REG. INDAUTOR 03-2016-080810504800-01
Revelación
Cerré mis ojos, tranquilice mi mente, entoné mi corazón, nuevamente el mantra HARI OM TAT SAT HARI OM TAT SAT HARI OM TAT SAT y de pronto visualice el NOMBRE DIVINO HVHI, el vacío atrajo mi conciencia, once rayos de luz, cada uno un color, una forma geométrica viviente, un sonido, once formas geométricas vivientes dentro de cada forma geométrica viviente. Once destellos encapsulados en sí mismos suspendidos en un eterno ahora, existiendo pero aun no siendo. Geometrías estáticas de sonidos no pronunciados, fieles guardianes de Nombres no revelados. En medio de todo aquello una tenue bruma va surgiendo como espiral simbólica de aspecto fantasmal envolviendo cada forma geométrica viviente. Formas idénticas dentro de formas idénticas. Así comprendí que el NOMBRE se revelaba así mismo como un fractal. Aquella bruma en espiral que iba abrazando tiernamente las formas dejaba entrever símbolos carentes de sonido pero no de nombre, HVI HIV, VHI VIH, IVH IHV. No tardé demasiado en percatarme de la existencia de una segunda manifestación en espiral de aquella bruma girando en contra sentido, se trataba de la otra H del NOMBRE reclamando su sitio en la sinfonía silenciosa del vacío. Pude entonces percibir nuevos símbolos, fieles representantes de Nombres sin sonido, IHV IVH, VIH VHI, HIV HVI, deslizándose sutilmente sobre el mantra HARI OM TAT SAT. Las espirales de símbolos se entretejían entre los once haces de luz, separando colores, formas y sonidos, había surgido el espacio. Doce nombres, doce dimensiones. En el origen mismo de la bruma alcance a distinguir cuatro símbolos silenciosos, estos eran diferentes a los anteriores y permanecían en la base de la espiral a pesar de que esta se desarrollaba continuamente, HHV VVH, HHI IIH. Comprendí que no solo el espacio se había revelado también lo había hecho el tiempo.
Comentarios Ya que la geometría propia del nombre HVHI es la geometría sagrada y abarca tanto la flor de la vida como la espiral aurea, será interesante comprender la noción de vacío desde esta perspectiva. Por una parte la serie aritmética que genera la geometría de la flor de la vida-HVHI es de tipo binomial (0,1,2,4,8,16,32,64…), la espiral aurea-Mashiaj está relacionada con la serie de Fibonacci (0,1,1,2,3,5,8,13,21,34, 55…). Como dije anteriormente en la nada está todo, aunque de forma inerte y no diferenciada, en cambio en el vacío que desde luego es parte de la nada, también está todo, pero diferenciado y de forma activa. Quizá si imaginamos el vacío como una lente de aumento o lupa a través de la cual se distinguen los detalles no diferenciados de la nada nos dé una más clara idea de porqué son lo mismo y sin embargo sus atributos son diferentes. En sánscrito el vacío al que me refiero se denomina sunyata y representa el sustrato dinámico de toda existencia y toda realidad, en sí el vacío cuántico. El vacío está relacionado con el número cero y por tanto con la dimensión cero. Desde la perspectiva de la geometría sagrada en el vacío todo existe potencialmente, y la vida solo puede darse en el momento en el que la conciencia se ubica en el vacío. Dado que la Nada existe y tiene vida, todo cuanto surge del vacío comparte tales atributos, es decir, existe y tiene vida. ¿Cómo es que el vacío funciona como el canal de materialización de la realidad desde lo inmaterial de la nada?
Cuando la nada toma conciencia del vacío que mora en ella, es decir, del potencial de diferenciación que hay en sí misma, este es interpretado como una especie de lente de aumento de dimensión cero cuyo “vehículo” de apertura se equipara a un conjunto de espirales áureas girando en el sentido del reloj. A este conjunto de espirales se les asocia con la energía femenina. Se dice que forman un toroide de implosión en el que lo indiferenciable de la nada se manifiesta en el vacío como diferenciable por lo mismo representa el aparente paso del caos al orden, volviendo lo oculto en manifiesto. Este conjunto de espirales femeninas almacenan energía e información provenientes de la nada en estructuras de orden. A este efecto se le conoce como implosión. También lo contrario se da en otro tipo de espirales áureas, las que giran en sentido opuesto a las manecillas del reloj y que se consideran representan el principio masculino. En este caso el orden se transmuta en caos, como si la lente de aumento (el vacío) se cerrara nuevamente, ocultando el orden y mostrando el caos. A este efecto se le conoce como explosión. Esto implica que a través del vacío la realidad se “diluye o destruye” y se “genera o regenera” continuamente. Si reflexionamos un poco en lo anterior, es decir, en el vacío, en el toroide que se genera o regenera la realidad y en el toroide en el que se diluye o destruye, inevitablemente nos viene a la memoria la Trimurti hindú, Brahama, Vishnú y Shiva. En los textos sagrados hindús de Brahama se dice que en él están todos los mundos, a Vishnú se le asigna la preservación, en tanto que a Shiva la destrucción. Recordemos que el primer ser auto revelado en la nada a la que el hinduismo asocia con Brahaman es justamente Brahama. En Brahma está de forma inerte pero diferenciable toda realidad posible, por esto los textos sagrados se refieren a él como creador de una creación concluida.
En el caso de Shiva a Él se le asigna la función de destrucción pero bajo un doble matiz, ya que nada se destruye sino que se transforma para aparecer bajo otra forma, así Shiva es el dios destructor y a la vez el fecundador. Desde luego el paralelismo también se refleja claramente en la trinidad cristiana. En este caso el vacío estaría representado por Elohim cuyo nombre revelado es HVHI, la preservación o toroide femenino por el Mashiaj cuyo nombre revelado es Yeshua y la destrucción o poder de recreación continua, toroide masculino por Ruaj ha Elohím o espíritu de Elohim. El cual hasta hoy no posee nombre revelado, o al menos, no que yo conozca. Es interesante notar que el nombre masculino Mashiaj actúa como principio femenino, en tanto el nombre femenino ruaj ha Elohim (la espíritu de Di-s o Sagrada Espíritu) actúa como principio masculino. Vale la pena recordar que el principio femenino es un principio de implosión y restaurador del orden el cual está representado por el nombre Mashiaj, lo cual concuerda totalmente con la propiedad inherente adscrita a dicho nombre de redimir o equivalentemente de cambiar el pasado desde el futuro. Ahora el vacío, considerando simultáneamente ambas espirales, adquiría una geometría similar a la mostrada en la siguiente figura,
Brahama, Vishnu, Shiva
HVHI-Elohim, Yeshua-Mashiaj, Ruaj Ha Elohim Fig. 16
Una
vez
completado
el
ciclo
toroidal,
es
decir,
la
serie
de
Fibonacci
(0,1,1,2,3,5,8,13,21,34…) se reproduce esta meta-unidad en el patrón de la secuencia numérica binomial (0,1,2,4,8,16,32,64…). A cada espiral aurea se le asocian dos tetraedros opuestos como se muestra en la figura 17,
Fig. 17 De la semilla de la vida surge el Árbol de la vida, el cubo de Metratón, la flor de la vida y el fruto de la vida.
Semilla de la vida
Árbol de la Vida Fig. 18
Fig. 19
Cubo de Metratón
Por una parte está la pentaflor y por la otra la flor de la vida, la primera es distribuidora y la segunda acumuladora.
Pentaflor – Distribuidora
Flor de la Vida - Acumuladora Fig. 20
El patrón de la Flor de la Vida es un patrón de reproducción del Toroide simbolizado por un círculo que forma una matriz hexagonal. Sirve para contener, acumular y solidificar la vida que surge a través de la implosión de la Pentaflor asociada a la secuencia numérica de Fibonacci. La Flor de la Vida simboliza la capacidad de la vida para reproducirse y sostenerse pues en su estructura comprende la secuencia numérica binomial. Esta secuencia no sirve para que la vida se manifieste a sí misma, la Flor de la Vida no manifiesta vida, ni la distribuye, mucho menos genera un flujo de abundancia o un movimiento cíclico, sino que contiene todo aquello que la conciencia revela para sí misma mediante la Pentaflor, pero sí es la expresión más refinada de la auto revelación de la conciencia HVHI ya que contiene todo lo que la nada es en un nivel holográfico. Por su parte la geometría Pentaflor sirve para la auto revelación del punto cero o vacío en la nada, y representa un movimiento continuo de implosión y explosión para la manifestación de lo oculto y la generación y regeneración de la materia en la realidad. Ahora considerando ambas geometrías, la Flor de la Vida y la Pentaflor, el punto de vacío se vería algo así.
HVHI Elohim / Brahma
YESHUA Mashiaj/ Rama-Khrishna/Vishnu
Ruaj HaElohim/ Shiva Principio masculino
Principio femenio
Fig. 21 Las once geometrías vivientes a las que se reviere la revelación son las sefirot del Árbol de la Vida, sin embargo, aún no es momento de entrar en detalle al respecto.
De acuerdo a la Kabbalah, dentro del Tetragramatón están inscritos tanto el espacio como el tiempo, veamos a que se refiere:
Espacio: Las seis permutaciones de las letras del nombre HVHI de tres en tres, para una Hei y otras seis para la segunda Hei: IHV; HIV; VIH; VHI; IVH; HVI / IVH; HVI; IHV; HIV; VIH; VHI Tiempo: HIH- HHI- IHH fue; HVH-HHV-VHH es; IHIH será (superposición de IHI-HIH). Las permutaciones de IHI son IIH-HII.
Conforme a la figura 6 el color de las permutaciones de las letras del nombre HVHI que se asocian al espacio es blanco como en HVHI, y en cuanto al tiempo, el “fue” es azul violáceo, el “es” azul verdoso y el “será” violeta como para el nombre Mashiaj. De acuerdo al párrafo anterior una componente del será es él fue.
Veamos cual es la geometría del espacio dentro del vacío. Para tal fin reproduzcamos la tabla 1 y marquemos las permutaciones del nombre que corresponden, así como su color.
Las celdas marcadas en negro corresponden a la geometría de la primera Hei, en tanto las marcadas en azul a geometría asociada a la segunda Hei.
H
V
H
I
H HHH
V HVH
H HHH
I HIH
H
HHV
HVV
HHV
HIV
V
HHH
HVH
HHH
HIH
H
HHI
HVI
HHI
HII
I
VHH
VVH
VHH
VIH
H
VHV
VVV
VHV
VIV
V
VHH
VVH
VHH
VIH
H
VHI
VVI
VHI
VII
I
HHH
HVH
HHH
HIH
H
HHV
HVV
HHV
HIV
V
HHH
HVH
HHH
HIH
H
HHI
HVI
HHI
HII
I
IHH
IVH
IHH
IIH
H
IHV
IVV
IHV
IIV
V
IHH IHI
IVH IVI
IHH IHI
IIH III
H I
Tabla 6
H
V
I
I
H
V
V
I
H I
H v
H I
V H
V I
H
Fig. 22 El hexágono o cubo interior marcado en negro representa el espacio asociado a la primera Hei. H
V
I
I
H
V
V
I H v
H I
H I
V H
V H
I
Fig. 23 El hexágono o cubo exterior marcado en azul representa el espacio asociado a la segunda Hei.
En ambos casos el espacio es blanco y conjuntamente se representa por dos hexágonos uno dentro de otro. Uniendo por líneas rectas las 12 aristas, obtenemos:
Fig. 24
Cambiemos el color del fondo de la figura anterior y agreguemos color a manera de etiquetas, es decir, sin relación con los colores que hemos definido para las letras y sus permutaciones con el único propósito de distinguir claramente la forma geométrica inherente.
Fig.24 Ahora es claro que la figura anterior representa el cubo de Metatrón.
Veamos ahora que ocurre con el tiempo, y al igual que lo hiciéramos con el espacio volvamos a la tabla 1 y asignemos los colores a las celdas correspondientes vinculadas a la primer Hei, es decir al hexágono-cubo interior,
H
V
H
I
H HHH HHV HHH HHI
V HVH HVV HVH HVI
H HHH HHV HHH HHI
I HIH HIV HIH HII
H V H I
VHH VHV VHH VHI
VVH VVV VVH VVI
VHH VHV VHH VHI
VIH VIV VIH VII
H V H I
HHH HHV HHH HHI
HVH HVV HVH HVI
HHH HHV HHH HHI
HIH HIV HIH HII
H V H I
IHH IHV IHH IHI
IVH IVV IVH IVI
IHH IHV IHH IHI
IIH IIV IIH III
H V H I
Tabla 7 La correspondiente geometría sería, H
V
I
I
H I
V H
V
H
H I
V
H I
H
V
v
I H
Fig. 25
Veamos ahora lo correspondiente a la segunda Hei, o en otras, al hexágono-cubo exterior, para lo cual retomemos la tabla 1.
H
V
H
I
H HHH HHV HHH HHI
V HVH HVV HVH HVI
H HHH HHV HHH HHI
I HIH HIV HIH HII
H V H I
VHH VHV VHH VHI
VVH VVV VVH VVI
VHH VHV VHH VHI
VIH VIV VIH VII
H V H I
HHH HHV HHH HHI
HVH HVV HVH HVI
HHH HHV HHH HHI
HIH HIV HIH HII
H V H I
IHH IHV IHH IHI
IVH IVV IVH IVI
IHH IHV IHH IHI
IIH IIV IIH III
H V H I
Tabla 8 Cuya geometría correspondiente es, H
V
I
I
H
V
V
I H v
H I
H I
V H
V H
I
Fig. 26 Nuevamente por cuestiones de claridad no hemos utilizado los colores derivados de los asignados a cada letra anteriormente.
Regresemos a la geometría del Cubo de Metatrón y veamos cómo se pueden asociar los 5 sólidos dentro del Cubo con las celdas marcadas en las tablas 6, 7 y 8 representando espacio y tiempo.
Primer sólido “El Cubo o Hexaedro” H
V H
I
I
V H
I V
V
I
H
H
V
I V
H
I
H
Fig. 27 Es fácil ver que las líneas que conectan las aristas del cubo representan las permutaciones de las letras HVI, tanto en el hexágono interno como en el externo. Esto implica que la geometría del espacio, tanto para el revelado (primera Hei) como para el oculto (segunda Hei), es cúbica.
Segundo sólido “El Octaedro” H
V H
I
I
V H
V
H V
I
H
H
V
I V
I
H
I
Fig. 28 En este caso las aristas del octaedro corresponden a las permutaciones VVV y VIV, observando las tablas 7 y 8 vemos que no corresponden a espacio ni a tiempo ¡¿?!
Vayamos con el tercer sólido, “El Dodecaedro” H
V H
I
I
V H
I V
V
I
H
H
V
I V
H
I
H
Fig. 28 En este caso la unión de aristas corresponde a las permutaciones HIH, la cual representa el tiempo pasado o “fue”.
Continuemos con el siguiente sólido “El Tetraedro” H
V H
I
I
V H
V
H V
I
H
H
V
I V
I
H
I
Fig. 29 En este caso las permutaciones involucradas a través de las líneas de unión son III, IHI, VVV, VHV. Nuevamente al observar las tablas 7 y 8 solo podemos identificar el grupo de permutaciones IHI con la componente indeterminada del tiempo futuro o “será”.
Ahora toca el turno al “Icosaedro” H
V H
I
I
V H
V
H V
I
H
H
V
I V
I
H
I
Fig. 30 En este caso las permutaciones asociadas son VII, III. Si marcamos en la tabla 1 las permutaciones asociadas a cada uno de los sólidos anteriores, observamos lo siguiente,
H
V
H
I
H HHH HHV HHH HHI-dodeca
V HVH HVV-tetra HVH HVI cubo
H HHH HHV HHH HHI-dodeca
I HIH-dodeca HIV-cubo HIH-dodeca HII-tetra
H V H I
VHH VHV-tetra VHH VHI-cubo
VVH-tetra VVV-octa-tetra VVH-tetra VVI-octa
VHH VHV-tetra VHH VHI-cubo
VIH-cubo VIV-octa VIH-cubo VII-icosa
H V H I
HHH HHV HHH HHI-dodeca
HVH HVV-tetra HVH HVI-cubo
HHH HHV HHH HHI-dodeca
HIH-dodeca HIV-cubo HIH-dodeca HII-tetra
H V H I
IHH-dodeca IHV-cubo IHH-dodeca IHI-tetra
IVH-cubo IVV-octa IVH-cubo IVI-icosa
IHH-dodeca IHV-cubo IHH-dodeca IHI-tetra
IIH-tetra IIV-icosa IIH-tetra III-icosa-tera
H V H I
Tabla 9
Las permutaciones asociadas a los 5 sólidos platónicos están representadas en la tabla, sin embargo a dos grupos de permutaciones que aparentemente no tiene correspondencia geométrica con los 5 sólidos, es decir HHV y HHH.
El grupo HHI es desde luego análogo al conjunto HHV, y si HHI representa un dodecaedro, ¿no será que HHV también tiene una forma geometría análoga? H
V H
I
I
V H
V
H V
I
H
H
V
I V
I
H
I
Fig.30 Tomando como modelo el dodecaedro pero uniendo los puntos HHV en vez de HHI pero bajo un criterio análogo, obtenemos una geometría de tipo dodecaedro pero con una imagen tipo reflejo del dodecaedro asociado al grupo HHI.
Fig. 31 Por último solo queda el grupo de las ocho celdas que contienen la repetición de tres letras HHH. Si unimos con líneas los ocho puntos obtenemos una estrella de David dentro de un hexágono, esto es, el Cubo de Metatrón pero girado 45°.
H
V H
I
I
V H
I V
V
I
H
H
V
I V
H
H
I
Fig. 32 Considerando ambos conjuntos la tabla 9 quedaría totalmente cubierta.
H
V
H
I
H HHH HHV-dodeca inv HHH HHI-dodeca
V HVH-dodeca inv HVV-tetra HVH-dodeca inv HVI cubo
H HHH HHV-dodeca inv HHH HHI-dodeca
I HIH-dodeca HIV-cubo HIH-dodeca HII-tetra
H V H I
VHH-dodeca inv VHV-tetra VHH-dodeca inv VHI-cubo
VVH-tetra VVV-octa-tetra VVH-tetra VVI-octa
VHH-dodeca inv VHV-tetra VHH-dodeca inv VHI-cubo
VIH-cubo VIV-octa VIH-cubo VII-icosa
H V H I
HHH HHV-dodeca inv HHH HHI-dodeca
HVH-dodeca inv HVV-tetra HVH-dodeca inv HVI-cubo
HHH HHV-dodeca inv HHH HHI-dodeca
HIH-dodeca HIV-cubo HIH-dodeca HII-tetra
H V H I
IHH-dodeca IHV-cubo IHH-dodeca IHI-tetra
IVH-cubo IVV-octa IVH-cubo IVI-icosa
IHH-dodeca IHV-cubo IHH-dodeca IHI-tetra
IIH-tetra IIV-icosa IIH-tetra III-icosa-tera
H V H I
Tabla 10 Con el propósito de analizar estos resultados haré un resumen de lo concerniente a la geometría del espacio y del tiempo que les acabo de mostrar.
CUBO HEXAEDRO
OCTAEDRO
HIV ESPACIO
VVV – VIV
FLOR DE LA VIDA
DODECAEDRO
DODECAEDRO INVERTIDO
HHI FUE
HHV ES
PENTAFLOR
PENTAFLOR
ICOSAEDRO III – VII
TETRAEDRO III – HII TIEMPO INDETERMINADO ASOCIADO AL “SERÁ” – VVV - VHV Fig. 33
Analizando la figura 33 las geometrías en el primer renglón de ellas se dice que son duales en tanto una puede transformarse en la otra. Con esta propiedad en mente y sabiendo que el cubo hexaedro representa una geometría del espacio, quizá su dual, el octaedro también esté ligado a un tipo de espacio. Además el cubo hexaedro representa a la flor de la vida por lo que no es raro que éste vinculado con el espacio y no con el tiempo.
Fig. 34
En cuanto al dodecaedro es interesante ver que uno se vincula al tiempo presente el “es”, en tanto su reflejo lo hace al tiempo pasado el “fue”. De esta forma el pasado se constituye como un reflejo del presente, además es interesante ver que su geometría está ligada a la pentaflor y por tanto a las espirales áureas.
En este caso el dual del dodecaedro es el icosaedro por lo que esta geometría podría estar asociada a un cierto tipo de tiempo pasado presente.
Fig. 35
El caso del tetraedro es muy interesante pues en sus letras se refleja una componente indeterminada de tiempo asociada al será (HII) de forma directa, y de forma indirecta con el tiempo pasado y presente a través de III, con el espacio por la presencia de VVV y
finalmente con algo de naturaleza indefinida que quizá vaya más allá de los conceptos de espacio y tiempo como los comprendemos representada por las letras VHV.
En virtud de que su dual es el mismo no es raro que esta geometría este relacionada con espacio, tiempo y algo más. Atreviéndome a especular, quizá ese algo más tenga que ver con un esquema fractal tanto de espacio como de tiempo, pero bueno, es solo una aventurada suposición basada en la intuición.
Fig. 36
Por último vale la pena considerar la geometría para las letras HHH, las cuales como dije, forman un Cubo de Metratón donde el tetraedro dentro del cubo hexaedro está girado 45°.
Si sobreponemos este tetraedro girado al tetraedro natural dentro del cubo hexaedro en el Cubo de Metatrón, obtenemos una estrella de doce picos.
Fig 34
Esta estrella representa el efecto acumulador de la flor de la vida, el principio femenino de implosión, así como el principio masculino de explosión, la pentaflor, la unión de la Nada con el ser consciente, el portal entre realidades y la geometría del espacio tiempo, tanto en su aspecto revelado o manifestado, como en su aspecto oculto o desconocido, en donde podrían estar presentes algo que es difícil de imaginar o comprender como un cierto tipo de espacio fractal, al igual que un tiempo fractal, e incluso nociones totalmente desconocidas e inimaginables de ambos conceptos.
En este punto llevaré a cabo algunas observaciones interesantes que vale la pena destacar, la primera es que el “será” se forma de dos tipos de permutaciones la asociada al fue HHI y sus permutaciones y otra no definida ligada a las permutaciones de HII. Al grupo del “fue” le corresponde el color azul violáceo de acuerdo a la figura 5, en tanto que al “es” el azul verdoso. De forma análoga el “será” es violeta, justamente el color que se forma con las letras de la palabra Mashiaj. Otro punto importante es que el “será” no puede definirse a menos que el “fue” sea parte de él. Nuevamente se ve como el nombre Mashiaj se relaciona con el futuro y el pasado dentro de la flor de la vida, en tanto en la Pentaflor representa el principio femenino de implosión o materialización de la realidad.
Esto es verdaderamente importante pues implica que la realidad se revela conformando el pasado al futuro, o dicho de otra forma, el futuro es el que determina el pasado.
La función en la flor de la vida del espacio y el tiempo es la de generar un marco para la percepción diferenciada de la realidad, que de otra forma no podría ser perceptible para nuestro cerebro, así como la de acceder a otras realidades y niveles de conciencia ya que cada nivel de conciencia junto con sus respectivas realidades poseen sus propias interpretaciones de espacio y tiempo.
Tanto el espacio como el tiempo, distan de ser una experiencia directa no existe un objeto denominado espacio o tiempo que pueda estudiarse por sí mismo.
Lo que puede percibirse es que la realidad cambia, guarda una distinción respecto a si mismo, una diferencia. La cuantificación abstracta de esa diferencia y ese cambio es aquello a lo que llamamos tiempo.
Sin embargo la palabra cambio está asociada a la palabra movimiento y en nuestro universo todo está en movimiento desde la partícula más pequeña hasta la galaxia más grande, por tanto todo cambia y por lo mismo en todo está implícita la idea de tiempo.
El concepto de espacio está asociado a la separación entre cuerpos, de acuerdo a nuestra percepción sensorial el espacio en el universo en el que vivimos tiene tres dimensiones, estas son: altura, profundidad y longitud, pero de acuerdo a la física cuántica en realidad son 11 si consideramos la dimensión cero como tal, de las cuales, como dije, solo tres son perceptibles sensorialmente.
En cuanto a las dimensiones el punto se considera dimensión cero, la línea dimensión uno, el plano dimensión 2, el volumen dimensión 3, el tiempo dimensión 4. Sin embargo el tiempo lo podemos imaginar como un híper sólido cuyas secciones transversales son volúmenes de 3 dimensiones.
El híper sólido de cuarta dimensión representa la historia de una posibilidad de principio a fin o en otras palabras la historia en el pasado, presente y futuro.
La quinta dimensión representa el total de historias posibles para una conciencia consciente. La sexta y séptima dimensiones son de transición, la octava dimensión representa el total de historias posibles de todas las conciencias conscientes que comparten un mismo universo, en tanto la novena y décima nuevamente son
dimensiones de transición, la onceava dimensión representa la totalidad de historias posibles de todas los conciencias conscientes en todos los universos posibles.
Así en el tema de las dimensiones podemos distinguir dos grupos, el primero es el que establece el tipo de marco espacio temporal para permitir la diferenciación de los elementos que han de conformar la realidad de acuerdo al nivel de conciencia y el segundo grupo el cual solo representa la percepción de la interacción de las realidades correspondientes a conciencias conscientes participantes de una región específica de espacio tiempo.
A partir de la quinta dimensión el resto de las dimensiones representan lo mismo independientemente de las dimensiones que conformen su espacio tiempo. Dicho de otra forma, la única variación en la conformación dimensional está en el primer grupo el cual parece constar en nuestro universo de 3 dimensiones de espacio expandido, la dimensión cero y una dimensión de tiempo secuencial.
Dependiendo del nivel de expansión de la conciencia su marco espacio temporal constará de menos o más dimensiones de espacio, de menos o más dimensiones de tiempo secuencial o fractal. E incluso la naturaleza del espacio y el tiempo pueden ser completamente diferentes a las nociones que poseemos nosotros y que corresponden a nuestro nivel de conciencia.
Resumiendo, el espacio en todas sus dimensiones se manifiesta a través del cubo hexaedro y se oculta en un tipo de espacio desconocido representado por el octaedro, en tanto las componentes pasado y presente del tiempo secuencial (mal llamado lineal) se manifiestan en el dodecaedro y se ocultan en el icosaedro. En el tetraedro la componente futuro del tiempo secuencial, así como otro tipo de tiempo “¿fractal?” se revelan en la realidad del observador y se ocultan en el tetraedro mismo al girar 45°.
Además la estrella de 12 picos es el principio generador de información ya que no solo permite la focalización de la observación en la realidad actual, sino que facilita el acceso a diversos niveles de conciencia con sus respectivas realidades generando la información del futuro hacia el pasado.
De forma similar la pentaflor representa el principio distribuidor de la información la cual utiliza como vehículo las componentes presente y pasado del tiempo secuencial.
Por último es la flor de la vida la que actúa como principio acumulador de la información utilizando para ello el espacio con todas sus dimensiones.
Flor de la Vida Acumulador de información Espacio
Pentaflor Distribuidor de información Tiempo pasado presente
Estrella 12 picos Generador de Información Tiempo futuro y tiempo fractal
Fig. 35 De acuerdo al nivel de conciencia la historia en la frontera dimensional del primer grupo de dimensiones, en nuestro caso la cuarta dimensión, que ha de percibir la conciencia consciente se genera en el futuro y construye de futuro a pasado una historia conformándola coherentemente, de igual forma determina las características del espacio en el que será percibida. Cuando el nivel de conciencia cambia, el espacio tiempo se modifica y se adapta al cambio para que la conciencia pueda percibir su nueva realidad conscientemente. Una vez que la historia se ha conformado desde el futuro en lo concerniente a eventos y marco de percepción (espacio tiempo), todo ocurre como se formó sin la participación del libre albedrío, es como si se tratara de ejecutar un
programa predeterminado. De esta forma el libre albedrío solo se ejerce en el futuro y de ahí queda determinada y programada la historia asociada a ese futuro.
Desde esta perspectiva el libre albedrío más que un asunto de decisión es un asunto de nivel de conciencia, el cual determina la esencia del ser y con ello su “nombre”. Cambia nuestra esencia, es decir, nuestro ser interno o yo soy, y con ello un nuevo nivel de conciencia y un nuevo nombre, luego ligado a esto desde el futuro se genera la información (estrella de doce picos), para que la historia correspondiente se distribuya coherentemente (pentaflor) en la cuarta dimensión (es el caso de nuestro nivel de realidad interpretado como universo actual), una vez conformada la historia de fin a principio, el libre albedrío ya no opera, sino que toda decisión incluso la más intrascendente o aparentemente irrelevante queda predeterminada y a la conciencia solo le queda ajustar al programa que se determinó en el futuro mediante su nombre actual. Luego la información de la historia que se percibirá en una secuencia temporal de pasado a futuro se acumula en el espacio (flor de la vida) para poder ser percibida bajo la sensación de ser parte de esa historia en vez de un simple observador externo.
Sin embargo no debemos perder de vista que las tres estructuras geométricas mencionadas están codificadas en la primera, es decir, en la flor de la vida, por lo que no resulta raro que varias civilizaciones antiguas la hubieran grabado en los muros, pisos, puertas o estatuas de sus templos, siendo la más antigua la encontrada en el templo de Abydos en Egipto dedicado a Osiris.
Fig. 36
Aunque hay polémica al respecto de la antigüedad de este grabado, los arqueólogos ortodoxos le asignan unos seis mil años, en tanto, los menos convencionales hablan de una probable antigüedad de veinte mil años, ya que suponen que cuando los Egipcios llegaron a esas tierras, el templo ya existía y solo lo reconstruyeron dedicándolo a Osiris.
Con todo esto la geometría del vacío se vería algo así,
Fig. 37