Manteniendo tu Cabeza y tu Corazón en el Juego

Por: Dr. Joe Dispenza Lectura de 1 min.

Antes de irse a la cama esta noche, ¿por qué no tomarse un tiempo para pensar en lo que hizo bien hoy con respecto a su crecimiento y evolución personal? Si está realmente involucrado en el proceso de cambio y transformación personal, si está trabajando activamente todos los días para crear cambios en su vida, ¿por qué no hacer un inventario para ver cuándo emparejó conscientemente sus comportamientos con sus intenciones? Si lo desea, puede incluso tener un cuaderno al lado de su cama y comenzar a registrar estos reflejos. Puede comenzar haciéndose preguntas como: ¿Pude alinear mis acciones con mis pensamientos cuando mis ojos estaban abiertos? ¿Cuándo mantuve la calma mientras todos los demás parecían impacientes, críticos y distraídos? ¿Qué pensamientos de los que me mantuve consciente que normalmente se me escapan de la conciencia? ¿Cuánto tiempo permanecí en los sentimientos de mi corazón durante el día? ¿Cuándo no reaccioné ante la misma persona o circunstancias de la misma manera de siempre? ¿Qué amo de mí mismo que hice bien hoy?

En otras palabras, si en tu meditación matutina te estabas convirtiendo en tu nuevo yo, y durante el día estabas trabajando para superar algún aspecto de tu antiguo yo, ¿por qué no observar y revisar quién eras durante el día y celebrar tus esfuerzos? Si te esforzaste en mantenerte presente y tranquilo, relajado y despierto, en lugar de vivir inconscientemente en uno de tus programas, festejate. Cuando empiece a recordarse a sí mismo lo que hizo bien hoy, podrá hacerlo de nuevo mañana y pasado mañana hasta que se vuelva más natural y automático.