SOLIDARIO Resulta curioso que se hayan firmado dos acuerdos muy importantes en la empresa, dos acuerdos que nos afectan a TODOS LOS TRABAJADORES, y que aún así, aquellos que los han firmado (EL CONSORCIO, o lo que es lo mismo CCOO-UGTUSO) no digan una sola palabra al respecto. En el caso del primer acuerdo, el procedimiento de vacaciones, nos encontramos con novedades tan desfavorables para los trabajadores como que se limita el número de veces que un trabajador puede cambiarlas (sólo una vez en todo el periodo estival y otra en no estival), así como la eliminación de todas las herramientas de que disponíamos los representantes de los trabajadores para verificar que, efectivamente, dicho acuerdo se cumple con cualquiera de vosotros, o por ejemplo que la empresa pueda denegar cualquiera de las cuatro opciones que rellenes y que, posteriormente, sólo tengas un plazo de quince días para volver a
pedirlas o si no te serán automáticamente asignadas en la fecha que más le convenga a la empresa. Anteriormente, si habías rellenado las cuatro solicitudes, aún si fueran denegadas, en ningún caso te las podrían asignar. ¿Por qué le ha firmado esta basura EL CONSORCIO (CCOO-UGTUSO) a la empresa? ¿Qué han conseguido a cambio para todos nosotros? Para los trabajadores, que sepamos, nada de nada. Y para ellos, no sabemos. Pero es que el segundo acuerdo es, si cabe, mucho peor. Se trata del tema de la compensación de festivos. A partir de ahora, si trabajáis un festivo que os asigna la empresa, luego deberéis rellenar una solicitud pidiendo cuatro opciones (es decir, se cargan de un plumazo cualquier opción de un mutuo acuerdo para elegir la fecha de disfrute), y lo que es peor: en ningún lugar del documento dice que tengan que daros obligatoriamente al menos una de esas cuatro opciones, por lo que prevemos que el problema con los festivos será aún
mayor y costará aún más conseguir una compensación en una fecha decente. Pero todos los integrantes del CONSORCIO tratan de jugar al despiste, pese a la tremenda losa que han dejado caer sobre nosotros con sus miserables acuerdos. Algún malpensado podría llegar a decir que sólo sindicatos corruptos pueden llegar a firmar este tipo de acuerdos. Nosotros, que siempre nos hemos preciado de hablar claro, afirmamos aquí que sólo pueden hacerlo los idiotas.