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Hipoxia y uso de lentes esclerales

COLUMNA INTERNACIONAL IACLE

CURSO DE ACTUALIZACIÓN EN CONTACTOLOGÍA PARTE 91

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Lic. Opt. Rubén Velázquez Guerrero, FIACLE

Coordinador de IACLE México

n el presente documento encontrarán una búsqueda bibliográfica de la relación entre el uso de lentes esclerales e hipoxia o edema corneal.

Hay todavía una confusión entre el material con el que son fabricados los lentes esclerales y la trasmisibilidad real de oxígeno a nivel del epitelio corneal.

El uso de materiales de alta transmisibilidad en lentes esclerales no garantiza el flujo adecuado de oxígeno para las necesidades fisiológicas de la córnea; la razón, la cantidad de fluido debajo del lente escleral, es decir, dependemos del espesor de fluido debajo del lente para proporcionar una adecuada cantidad de oxígeno.

Así, los presentes artículos nos ilustran sobre esta particularidad.

Espesor del depósito de líquido y edema corneal durante el uso de lentes esclerales en ojo cerrado

Objetivo

Examinar la relación entre el grosor del depósito central de fluido poslente y el edema corneal central durante el uso de lentes esclerales en ojo cerrado a corto plazo, y comparar estas mediciones empíricas del edema con los datos de uso de lentes de ojo abierto y los modelos teóricos actuales para el uso de lentes esclerales durante la noche.

Métodos

Diez participantes (media ± error estándar de 30 ± 1 años) con córneas normales llevaban lentes esclerales (Dk 141 × 10-11 cm3 O2 (cm)/(seg.) (cm2)(mmHg)) en condiciones de ojo cerrado en días separados, con un grosor inicial del depósito de líquido post-lente considerado bajo (160 ± 7 μm), medio (494 ± 17 μm) o alto (716 ± 16 μm). Se midió el edema epitelial, estromal y total de la córnea mediante tomografía de coherencia óptica de alta resolución inmediatamente después de la inserción del lente y tras 90 minutos de uso, antes de retirar el lente. Los datos se compararon con el edema corneal inducido por el lente escleral de ojo abierto y con un modelo teórico de uso de lente escleral de ojo cerrado durante la noche (Kim et al., 2018).

Resultados

El edema corneal central fue principalmente de naturaleza estromal y se acrecentó con el aumento del grosor del depósito de fluido; el edema corneal total medio fue de 3.86 ± 0.50%, 4.71 ± 0.28% y 5.04 ± 0.42% para las condiciones de grosor bajo, medio y alto, respectivamente. Sólo se observó una diferencia significativa en el edema estromal y total de la córnea entre las condiciones de bajo y alto grosor del depósito de fluido (ambas p ≤ 0,01). La modelización teórica sobrestimó la magnitud del edema corneal central y la influencia del grosor del depósito de fluido sobre el edema corneal durante las condiciones de ojo cerrado.

Conclusión

El edema corneal central inducido por la lente escleral durante el uso de la lente en ojo cerrado se acrecienta con el aumento del grosor del depósito de fluido, pero a un ritmo menor en comparación con la modelización teórica.

Espesor del depósito de líquido y edema corneal durante el uso de lentes esclerales a ojo abierto

Significado

Existe un debate sobre la oxigenación de la córnea durante el uso de lentes esclerales debido al posible efecto hipóxico aditivo de un lente más un depósito de líquido.

En este estudio se investigó la concordancia entre los modelos teóricos y las mediciones empíricas del edema corneal inducido por un lente escleral con respecto al grosor del depósito de líquido central.

Objetivo

El propósito de este estudio fue examinar el efecto de la alteración del grosor del depósito

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de líquido en el edema corneal central durante el uso de lentes esclerales de ojo abierto a corto plazo y comparar estas mediciones empíricas con los modelos teóricos de predicción.

Métodos

Diez participantes (edad, 30 ± 4 años) con córneas normales llevaban lentes esclerales altamente permeables al oxígeno (141 Dk ×10-11 cm3 O (cm)/[(s) (cm2) (mmHg)]) en días separados, con un grosor inicial del depósito de líquido bajo (media, 144; intervalo de confianza [IC] del 95%, 127 a 160 μm), medio (media, 487; IC del 95%, 443 a 532 μm) o alto (media, 726; IC del 95%, 687 a 766 μm).

El edema epitelial, estromal y total de la córnea se midió mediante tomografía de coherencia óptica de alta resolución después de 90 minutos de uso, antes de retirar el lente. Los datos se calcularon o se extrajeron de modelos teóricos publicados sobre el edema corneal inducido por lentes esclerales para su comparación.

Resultados

El edema corneal central inducido por el lente escleral era de naturaleza estromal y aumentaba con el incremento del grosor del depósito de líquido; la media del edema corneal total fue del 0.69% (IC del 95%, 0.34 a 1.04%), del 1.81% (IC del 95%, 1.22 a 2.40%) y del 2.11% (IC del 95%: 1.58 a 2.65%) para los grupos de espesor bajo, medio y alto, respectivamente. No se observó ninguna diferencia significativa en el edema corneal entre los grupos de grosor medio y alto del depósito de fluido (P = .37). La modelización de oxígeno “Resistencia en serie” sobrestimó el edema corneal observado para los valores de grosor del depósito de fluido superiores a 400 μm.

Conclusiones

El edema corneal central inducido por la lente escleral aumenta con el incremento del espesor del depósito, pero se estabiliza en un espesor de alrededor de 600 μm de acuerdo con recientes modelos teóricos que incorporan factores relacionados con el metabolismo corneal.

Edema corneal central con el uso de lentes esclerales

Objetivo

Para evaluar la seguridad de los diseños de lentes esclerales, modelamos y evaluamos clínicamente el edema corneal central inducido por el uso de lentes esclerales en sujetos sanos.

Materiales y métodos

El edema corneal central durante el uso de lentes esclerales se mide mediante tomografía de coherencia óptica (OCT). Se modelan las resistencias de transporte para la difusión de oxígeno a través del lente escleral y el reservorio lagrimal posterior al lente (PoLTF), y hacia la córnea. La deficiencia de oxígeno en la córnea activa las reacciones metabólicas anaeróbicas que inducen el edema corneal.

La permeabilidad al oxígeno, la permeabilidad al dióxido de carbono, el grosor de la PoLTF del lente asentado y el grosor del lente escleral se han variado en los cálculos para imitar diferentes lentes.

Resultados

La modelización del transporte predice que, para ojos abiertos, el aumento del grosor del PoLTF de 50 a 400 μm incrementa el edema de la córnea central en aproximadamente un 1 a 1.5% cuando la transmisibilidad del oxígeno (Dk/L) es mayor que 10 hBarrer/cm (es decir, hectoBarrer/cm). Aunque el edema es mayor para Dk/L de oxígeno < 10 hBarrer/cm, el grosor del PoLTF tiene un impacto mínimo en este rango.

En ojo abierto, la transmisibilidad de oxígeno del lente desempeña un papel importante en el edema corneal, pero es insignificante cuando el Dk/L de oxígeno es > 40 hBarrer/cm. Para el ojo cerrado, el edema corneal central es superior al 5% para un rango de Dk/L de oxígeno de 0-100 hBarrer/cm con los parámetros típicos de adaptación del lente. Para transmisiones de dióxido de carbono que aumentan de 50 a 250 hBarrer/cm y con un Dk/L de oxígeno fijo de 25 hBarrer/cm, el edema calculado disminuye en un 0.5% adicional. La comparación de los cálculos del modelo con los datos de edema clínico está dentro del rango de error de las mediciones clínicas.

Conclusiones

Los cálculos de transporte de oxígeno/metabolitos para el uso de lentes esclerales de ojo abierto muestran que los espesores típicos de PoLTF ajustados por los clínicos (es decir, espesores de PoLTF < 400 μm) con los lentes esclerales modernos (es decir, Dk/L de oxígeno > 25 hBarrer/cm), producen un edema corneal de menos del 2% de acuerdo con el experimento. Por lo tanto, los lentes esclerales prescritos hoy en día evocan un edema hipóxico inferior al fisiológico (es decir, menos del 4%) para córneas sanas durante el uso

con ojos abiertos. Sin embargo, el uso con ojos cerrados (dormir con los lentes) parece clínicamente inseguro.

Edema corneal en un injerto corneal unilateral inducido por un lente de contacto miniescleral de alto Dk.

Introducción

Los lentes de contacto esclerales son cada vez más aceptados como método de elección para la corrección visual de córneas irregulares. Como consecuencia, han surgido casos que demuestran las complicaciones derivadas de los lentes miniesclerales. Es necesario identificar estos problemas y ajustar las técnicas de adaptación en consecuencia para reducir los riesgos asociados al uso de los lentes miniesclerales.

Informe de un caso

Una mujer caucásica de 58 años fue remitida para la adaptación de lentes de contacto rígidos permeables a los gases para la corrección del astigmatismo irregular tras una queratoplastia penetrante.

Tras cuatro meses de uso satisfactorio de los lentes de contacto miniesclerales, la paciente experimentó un episodio de rechazo del injerto y fue tratada en consecuencia, por lo que se le volvió a adaptar un nuevo lente miniescleral. Cinco meses después de la readaptación, la paciente presentó quejas de visión borrosa y se diagnosticó un edema corneal inducido por el lente.

Discusión

Es necesario aumentar la concientización sobre las posibles complicaciones de los lentes miniesclerales para fomentar y aplicar técnicas de adaptación de lentes miniesclerales que cumplan los requisitos de una bóveda mínima pero una protección adecuada de la córnea comprometida.

Efecto de la permeabilidad al oxígeno de los lentes esclerales en la fisiología corneal

Significado

Este estudio clínico aleatorizado, enmascarado y cruzado identifica que los materiales ≥125 Dk deben utilizarse para el uso diario de lentes esclerales si se quiere minimizar la interrupción de oxígeno en la córnea.

Objetivo

El uso de los lentes esclerales modernos ha aumentado y ha demostrado ser exitoso donde otros tipos y materiales han fallado previamente. Aunque se ha modelado la permeabilidad al oxígeno necesaria, no se ha establecido clínicamente.

Métodos

Quince participantes enmascarados de 20.7 ± 2.3 años de edad (10 mujeres) fueron equipados bilateralmente con cinco lentes esclerales diferentes (65, 100, 125, 125, 163 y 180+ Dk) del mismo perfil de forma, y un lente de hidrogel de silicona blanda en comparación con la no utilización de lentes en ocasiones separadas en un orden aleatorio.

Un investigador enmascarado midió el grosor de la córnea y la profundidad de la bóveda de líquido, la curvatura de la córnea, el enrojecimiento bulbar y limbal, la biomecánica de la córnea y el consumo de oxígeno de la superficie ocular antes y después de 8 horas de uso. Además, se obtuvieron puntuaciones de confort mediante una escala visual analógica.

Resultados

Los lentes esclerales con permeabilidad al oxígeno de 65 Dk dieron lugar a un mayor grosor corneal (1.37 ± 1.25%) tras 8 horas de uso, frente a los materiales ≥100 Dk (0.58 ± 0.99%; F = 17.215, P < 0.001) debido al engrosamiento del estroma; el edema con los materiales ≥100 Dk se asoció con la profundidad de la bóveda de líquido (r = 0,231, P = 0,05). La profundidad de la bóveda de líquido disminuyó de forma similar con todas las lentes permeables al oxígeno, de 325.6 ± 99.1 μm a 174.2 ± 100.8 μm tras 8 horas de uso (F = 0.961, P = 0.44). El consumo de oxígeno se redujo con las lentes ≤125 Dk (χ2 = 604,196, P < 0.001). El uso de lentes blandas y esclerales no tuvo ningún efecto sobre la curvatura corneal, la biomecánica corneal o la hiperemia ocular (P > .05). Los lentes blandos fueron más cómodos que todos los lentes esclerales (P < 0.05), y los lentes de 180+ Dk fueron los más cómodos entre los lentes esclerales (P < 0.05).

Conclusiones

Se aconseja un Dk ≥125 para un uso diario seguro de los lentes esclerales. El uso de lentes esclerales provoca un aumento del grosor de la córnea, independientemente de la permeabilidad al oxígeno del material del lente, debido a la profundidad de la bóveda post-lente.

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Tensión de oxígeno bajo los lentes esclerales con diferentes profundidades sagitales

Objetivo

Evaluar la presión parcial relativa de oxígeno (pO) en la superficie corneal bajo los lentes esclerales(LE) Boston XO con profundidades de ságita específicas de 200 y 400 μm (SL200 y SL400).

Métodos

Durante este estudio prospectivo, los ojos derechos de ocho sujetos normales fueron adaptados con SL200 y SL400. La profundidad sagital se validó tras 5 minutos de uso con un tomógrafo de coherencia óptica; se utilizó el espesor de los lentes para calcular la transmisibilidad y estimar la pO. Se midieron las pO de la córnea con un electrodo de oxígeno tras 5 minutos de exposición de la córnea a gases de calibración con diversas pO o con el uso de SL. Los descensos de la pO se modelaron con una exponencial. La regresión lineal entre el exponente k de estos decaimientos y las pO’s del gas de calibración permitió calcular la pO corneal bajo los lentes esclerales. Las diferencias entre las pO’s debajo de SL200 y de SL400 se comprobaron con un ANOVA mixto.

Resultados

La transmisibilidad estimada basada en los espesores y las profundidades (239.7 ± 34.7; 434.5 ± 33.2 μm) predijo una pO corneal de 8.52 ± 0.51 y 6.37 ± 0.28% para SL200 y SL400. Estos valores se acercan a la pO medida: 9.07 ± 0.86 y 6.19 ± 0.87% (media ± SEM) (P < 0.05) para SL200 y SL400, respectivamente. Ambas mediciones de pO no alcanzan los valores teóricos necesarios para evitar la hipoxia durante el uso de las lentes (9.9% y más).

Conclusiones

Como se ha demostrado in vivo por primera vez, un lente escleral de 18 mm dotado de un espacio libre de 400 μm reduce la tensión de oxígeno disponible para la córnea en un 30% en comparación con un lente similar equipado con un espacio libre de 200 μm después de 5 minutos de uso.

Predicción de estimaciones de transmisibilidad de oxígeno para lentes esclerales

Objetivos

Aunque los lentes de contacto esclerales se prescriben cada vez con más frecuencia, se sabe poco sobre sus efectos a largo plazo en la fisiología ocular. El objetivo principal de este trabajo es predecir los valores de transmisibilidad de oxígeno de los sistemas de lentes esclerales aplicando el concepto de resistencias en serie a los parámetros característicos de los lentes esclerales actuales. Un segundo objetivo es encontrar las combinaciones máximas de espesor del lente y del reservorio lagrimal posterior al lente por encima de los cuales se encontraría el edema corneal inducido por la hipoxia.

Métodos

Se utilizaron cálculos teóricos para predecir la transmisibilidad de oxígeno de los sistemas de lentes esclerales, considerando varias permeabilidades del material (Dks 100-170), espesores variables de los lentes (250-500 μm), la permeabilidad lagrimal conocida (Dk de 80), y los espesores de la capa lagrimal post-lente previstos (100-400 μm). Se utilizaron como puntos de referencia los criterios Holden-Mertz Dk/t de 24 unidades Fatt para la córnea central y los criterios Harvitt-Bonanno de 35 unidades Fatt para la zona limbal.

Resultados

Nuestros cálculos de transmisibilidad de oxígeno, con espesores variables de la capa lagrimal y del lente, oscilaron entre 10 y 36.7 en los centros del lente escleral, y entre 17.4 y 62.6 en las periferias. Nuestros cálculos de los espesores máximos del lente central muestran un rango práctico de 250495 μm, junto con un espesor de la capa lagrimal posterior al lente de 100-250 μm.

Conclusión

Nuestros cálculos muestran que la mayoría de los lentes esclerales modernos, con las técnicas de adaptación recomendadas, deberían provocar cierto nivel de inflamación corneal inducida por la hipoxia. Se hacen recomendaciones para minimizar el edema corneal inducido por la hipoxia: lente de mayor Dk disponible (>150) con un grosor central máximo de 250 μm y adaptado con un lente lagrimal post-lente que no supere los 200 μm.

Edema corneal inducido por lentes esclerales tras queratoplastia penetrante

Significado

Los modernos lentes esclerales altamente permeables al oxígeno inducen un edema corneal

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de aproximadamente el 1% al 2% tras breves períodos de uso en individuos sanos. Este estudio investigó la magnitud y la variación regional del edema corneal central inducido por los lentes esclerales después de la queratoplastia penetrante.

Propósito

El propósito de este estudio fue examinar la magnitud y la variación regional del edema corneal tras un breve período de uso de lentes esclerales en ojos después de una queratoplastia penetrante y en un grupo de control de ojos con córneas sanas.

Métodos

Se colocaron lentes esclerales de alta permeabilidad al oxígeno (Dk 100 × 10-11 cm3 O (cm)/ [(s) (cm2) (mmHg)]) en nueve ojos que se habían sometido a una queratoplastia penetrante (nueve participantes; edad media, 32 años). El grosor de la córnea central se midió mediante imágenes de Scheimpflug antes de la inserción del lente e inmediatamente después de retirarlos (tiempo medio de uso 6.2 horas).

Se cuantificó el edema corneal en los 6 mm centrales y se comparó con los datos obtenidos de un grupo de control histórico de ojos sanos, utilizando un paradigma experimental similar.

Resultados

Los ojos sometidos a queratoplastia penetrante presentaban un edema corneal significativo tras el uso del lente (2.99% [intervalo de confianza del 95%, 1.13 a 4.85%]) de media a lo largo de los 6 mm centrales (P = 0,006) y variaciones regionales del edema (P < 0,001) (mayor hinchazón hacia la unión injerto-huésped en sentido inferior). En comparación con los ojos sanos, los ojos sometidos a queratoplastia penetrante mostraron una mayor magnitud de edema corneal (en ~3X) y una mayor variabilidad en la respuesta corneal (en ~2.5X).

Conclusiones

El edema corneal central inducido por los lentes esclerales es mayor en los ojos después de una queratoplastia penetrante y varía regionalmente en comparación con las córneas sanas después de su uso a corto plazo. El diseño del lente y los factores de adaptación que contribuyen al estrés corneal hipóxico y mecánico deben considerarse cuidadosamente en todas las adaptaciones de lentes esclerales después de la queratoplastia penetrante para minimizar el posible rechazo o fracaso del injerto a largo plazo. Respuestas correctas al cuestionario del artículo “HIPOXIA CORNEAL” publicado en la revista anterior: 1.- a 2.- a

Cuestionario

1.- ¿Cuál es la combinación ideal para controlar el edema corneal con el uso de lentes de contacto esclerales? a) Lente de mayor Dk disponible (>150) con un grosor central máximo de 250 μm y adaptado con un lente lagrimal postlente que no supere los 200 μm. b) Lente de mayor Dk disponible (>150) con un grosor central máximo de 150 μm y adaptado con un lente lagrimal postlente que 300 μm. 2.- ¿Cuál es la permeabilidad de la lágrima postlente en la adaptación de lentes esclerales? a) 120 Dk b) 100 Dk c) 80 Dk

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