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Gráfico 9.2

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presupuestaria que los Estados aportan en materia de protección de la niñez evidencia la poca importancia que tiene esta área en la planificación estatal. En este sentido, tal como se puede apreciar en el gráfico 2, son las instancias rectoras de República Dominicana y El Salvador (CONANI e ISNA, respectivamente) las que, con una asignación de US$ 20 millones cada una, cuentan con el presupuesto más alto de la región. Seguidamente, se encuentra el ente rector en Guatemala (Secretaría de Bienestar Social),17 al cual se le asigna una cantidad de US$ 10 millones para llevar a cabo sus funciones de protección. Por último, la organización rectora en el sistema hondureño tiene asignada una cantidad de US$ 3.5 millones en su presupuesto, recursos que, en este caso, se destinan en su mayoría a pago de sueldos y salarios del personal técnico y administrativo que labora en la institución (DINAF), quedando un margen muy reducido para la operatividad.

Gráfico 9.2. Presupuesto Asignado a Instancias Rectoras de Sistema de Protección de la Niñez en la Región (en millones de US$)

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25.00

20.00

15.00

10.00

5.00

0.00 20.40

CONANI 2019 10.5

3.5

Secretaría Bienestar Social 2019

Presupuesto DINAF 2015 20.2

ISNA 2018

Fuente: Elaboración propia con datos de Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia de la República, 2018; CONANI, s.f.; ISNA, s.f.

17. Específicamente, a la Subsecretaría de Protección y Acogimiento a la Niñez y Adolescencia.

interactuando con el sistema de protección de los niños, niñas y adolescentes

Mientras que el marco legislativo, la infraestructura y el presupuesto de los sistemas de protección aluden a las condiciones y recursos que los Estados disponen para su operatividad—es decir, el potencial de respuesta institucional— para encarar las necesidades de protección de la niñez y la adolescencia, la etnografía institucional realizada en el marco de este estudio, permitió conocer las vivencias de los actores, sean estos trabajadores, niños, niñas, adolescentes o familiares cuando hacen uso de los servicios que brindan las diferentes instituciones públicas y privadas que son parte de los sistemas de protección de la niñez.

El universo de respuestas institucionales que ofrecen los Sistemas de Protección es muy amplio. Algunas están relacionadas con procesos judiciales, otras con procesos de adopción, así como litigios parentales o de retorno migrante, por mencionar algunos. La información que se presenta en este estudio focalizó sus esfuerzos en comprender la respuesta institucional que se brinda a NNA de 13 a 18 años cuando quedan bajo la tutela del Estado u organizaciones no gubernamentales (ONGs) como medida de protección frente a una denuncia de maltrato, es decir, cuando estos son institucionalizados y sus necesidades básicas deben ser cubiertas por dichas instituciones. A partir de esta información se busca ampliar la comprensión del funcionamiento del Sistema en su vida cotidiana.

inserción de los niños, niñas y adolescentes

Una de las medidas de protección implementadas por los sistemas para proteger a NNA que han sido vulnerados, y que se encuentran en una situación de riesgo en la que no pueden regresar con su familia nuclear o de cualquier otro lazo sanguíneo cercano, es la institucionalización. Ésta consiste en poner en custodia al niño o niña en centros que el Sistema ha determinado para ello, pudiendo ser casas de residencia, hogares temporales, centros de paso, entre otros. Así, la institucionalización de un NNA puede realizarse:

• En una casa de residencia temporal cuando existe un proceso de litigio o investigación que requiere un corto plazo para resolverse.

• En una casa de residencia permanente, cuando existen circunstancias familiares de riesgo permanente para el

NNA; cuando los litigios o procesos de investigación se extienden por períodos más largos; o, cuando el Estado toma control asumiendo la tutela del NNA porque no existen familiares adultos que puedan responsabilizarse de ellos.

En el caso de Honduras, las casas de residencia temporal son conocidas también como Centros de Paso, instituciones que fueron creadas por el Estado, pero que son administradas por ONGs que reciben un fondo estatal para financiar el salario del personal que labora en la institución y las necesidades básicas de los NNA. Cabe mencionar que este tipo de centros no se encuentra en todo el territorio nacional, por lo que sus servicios se limitan a las principales ciudades o zonas más urbanizadas. Se identificó también que la estancia de algunos NNA en estas instituciones constituye generalmente una etapa previa a su asignación a un hogar de residencia permanente.

Las casas de residencia permanente donde los NNA son trasladados, tienen servicios de atención especializados en relación con el perfil de sus necesidades; así, se pueden encontrar centros de residencia permanente para atender niñez y adolescencia en situación de abandono, con problemas de consumo de sustancias adictivas, problemas psiquiátricos, en conflicto con la ley, entre otros.

Nuestra responsabilidad es trabajar el carácter de las personas. Trabajamos con adolescentes, niños, niñas, madres y adultos. Yo trabajo solo con adolescentes niñas. Hay 7 hogares que se dividen en lo que le dije, adolescentes, niñas, niños, madres. Se trabaja la adicción, la prevención y el carácter. (Trabajador, ONG, Honduras)

En la República Dominicana, estas instituciones son en su mayoría casas que se han ido adecuando para los fines de protección, sin embargo, por esta misma razón estas instalaciones generalmente no tienen las condiciones que se requieren para cumplir con su propósito. Por ejemplo, tienen distintas distribuciones en cuanto a los espacios, es decir, no existe una homogeneización de las características físicas de dichas residencias, ya que estas varían dependiendo de su ubicación y la cantidad de NNA que albergan. Los espacios de los centros están distribuidos en dormitorios, área de

recreo y deporte, aulas de clases, bibliotecas y cocina. Los centros estudiados en esta investigación pueden albergar en promedio hasta treinta residentes. Y el espacio en el que generalmente permanecen los NNA por más tiempo es el comedor.

Respuesta ante necesidades básicas

La respuesta que brindan las instituciones temporales o permanentes para cubrir necesidades básicas de NNA es limitada. A su ingreso, son recibidos por el personal de la institución, siendo generalmente trabajadores voluntarios de las ONGs quienes les proveen de vestimenta y alimentación básica, así como artículos de higiene personal: “Se le da un kit, camisa, ropa interior, higiene. Se le toma una fotografía18 porque DINAF lo requiere” (Trabajador ONG, Honduras).

Yo lo recibo, lo presento a los niños, le pregunto si tiene hambre, la tía19 en la cocina le da de comer y después yo me llevo al niño a que se bañe porque hay que revisar los golpes que trae. Se le explica al niño que por primera vez se le va a revisar por si trae golpes. Antes de eso ya le he entregado todo su kit, sus calcetines, su bóxer, todo esto después de la comida. Ya le asigné su espacio, su cama, su gavetero20 donde va a poner su ropa. Luego le toca bañarse a él, pero tengo que percatarme si trae golpes. (Trabajador, Centro de Paso, Honduras)

En algunos casos, se asigna al NNA un tutor personal que puede ser otro niño o adolescente residiendo en la institución, y que se ha destacado por su buen comportamiento a la luz de los estándares de dichas organizaciones: “se le asigna una compañera que tiene más de dos meses en el hogar y tiene buena conducta para que le diga qué cosas tiene qué hacer en el hogar y no.” (Personal de ONG, 2018. Honduras).

18. La fotografía se toma con el propósito de documentar dejando evidencia de las condiciones físicas en que ingresan los NNA a la institución. 19. En las instituciones de residencia el personal que atiende a los NNA, se hace llamar “tía/tío” para hacer más familiar la relación. 20. Mueble con gavetas

Respuesta ante los derechos de salud física y mental

Generalmente las residencias carecen de personal de salud disponible para atender emergencias, o bien hacer los controles de salud básicos de

los NNA. En algunos casos, las residencias mantienen una relación con un médico para atender casos de emergencia, mientras que los problemas que requieren atención especializada son remitidos a los centros de salud pública: “…se llama a la doctora y pues si es un niño que está muy mal, se llama al hospital, donde se interna y lo traen ya cuando generalmente ha pasado el peligro”. (Trabajador, Centro de Paso, Honduras)

En el Sistema de Protección dominicano, las instituciones de residencia realizan al ingreso de los NNA un registro del historial médico. Para recibir atención en salud, la niñez y adolescencia debe estar asegurada, sin embargo, los NNA que ingresan a estas instituciones carecen de un seguro médico hospitalario, por lo que sus necesidades de servicios de salud generalmente son atendidas en centros o clínicas del sector público: “Al hospital público es que tenemos que llevarlos porque no tienen seguro” (Trabajadora ONG. República Dominicana).

Por las características socioeconómicas de la niñez y adolescencia inserta en estas instituciones, la mayoría de éstas ofrece atención en salud mental, para lo cual generalmente cuentan con al menos un profesional de la psicología. Los NNA generalmente tienen un primer encuentro con los psicólogos de la institución cuando son ingresados, o en los primeros días de su estancia, siendo los psicólogos quienes realizan el diagnóstico del estado psicoafectivo de los NNA. Estos profesionales tienen la responsabilidad de dar seguimiento al estado de su salud mental durante la estancia. En una de las organizaciones visitadas, se encontró que las niñas y adolescentes reciben terapia psicológica como parte de sus rutinas semanales: “Con la parte psicológica, le hacemos la entrevista psicológica dos días después [de su ingreso], porque cansa que le estén preguntando, entonces le damos ese lapso de tiempo para que conozca”. (Trabajador, ONG, Honduras).

Respuesta a necesidades de educación

Cuando los niños son institucionalizados, generalmente son extraídos del sistema educativo formal en el que estaban estudiando. Para suplir esta carencia, en Honduras, con el propósito de evitar el rezago educativo de la niñez institucionalizada, las organizaciones cuentan con un programa educativo ad hoc, insertándose los NNA en el grado escolar que cursaban en el sistema educativo formal. Este

programa se realiza en alianza con varias instituciones educativas y patrocinio de algunas empresas privadas. El énfasis de la formación se encuentra en las asignaturas de español y matemáticas, y de forma complementaria, en algunos casos reciben clases de inglés, informática y deporte. En la República Dominicana, sin embargo, las ONGs encargadas de la guarda de los NNA, en algunos casos les envían a centros educativos cercanos a la residencia, o bien la formación académica es impartida dentro de la institución.

[De] 8 a 10 tienen la primera clase de reforzamiento que es español y matemáticas; es donde más se refuerza porque es donde más problemas hay. La profe les va revisando, tienen ejercicios de ortografía. Para los más pequeños construir, desarrollar la habilidad fina y la gruesa, aprenderse los colores. A las 10 o las 10 y 15 se hace la merienda, los sacamos al parquecito un ratito si no está haciendo mucho sol, para que se relajen. Vuelven a clases con la maestra y con los educadores hasta las 12. (Trabajador, Centro de Paso, Honduras) Existen marcadas diferencias entre la República Dominicana y Honduras en relación con las actividades extracurriculares que reciben los NNA institucionalizados. Mientras en el sistema de protección hondureño la oferta extracurricular es reducida, en República Dominicana se identificó que los NNA realizan diferentes actividades, como visitar museos, realizar excursiones o aprender y practicar algún arte o deporte: “Después de las 2 de la tarde, por ejemplo, hoy, viene manualidades. Ayer tuvieron charla. Que las manualidades algunas son como hacer joyeros, a veces es hacer pulseras”. (Trabajador, Centro de Paso, Honduras); “las niñas ahora mismo están tomando clases de danza”. (Trabajadora, ONG, República Dominicana).

Respuesta a necesidades de recreación

E intento de garantizar el derecho de recreación que tiene la niñez y adolescencia institucionalizada forma parte de la programación cotidiana de las actividades. En este sentido, las instituciones destinan un tiempo dentro de sus rutinas diarias para que las y los residentes dispongan de un espacio de esparcimiento, consistente en ver la televisión, practicar algún

deporte o utilizar de dicho tiempo como los NNA prefieran: “Ven televisión una hora, luego hacen un devocional espiritual” (Trabajador, ONG, Honduras); “dentro de las actividades recreativas, ellos pueden salir, los llevamos a la piscina, en verano hacemos paseos en familia, cada familia sale con todos sus miembros, no importa, los llevamos a una playa” (Psicóloga, ONG, República Dominicana)

Limitaciones de la respuesta institucional

Si bien es cierto que, como se señaló anteriormente, los sistemas de protección de la niñez en la Región cuentan con una infraestructura que cumple con los requisitos formales de funcionamiento, como tener una instancia rectora, asignación de presupuesto y estar suscritos a la Convención; en la práctica se identificó que las instituciones locales en su interacción cotidiana con los usuarios del sistema encuentran serias limitaciones que obstaculizan su misión. Entre dichas limitaciones se identificaron: la escasez de recursos, la utilización del sistema como estrategia de castigo de NNA, la revictimización e incluso, en el caso de Honduras, actitudes discriminatorias contra NNA pertenecientes a la comunidad LGBTI.

escasez de recursos

Entre las principales manifestaciones de la limitación de recursos que enfrentan los sistemas de protección de la niñez se encuentra el poco alcance que tienen sus servicios a nivel nacional. Por ejemplo, en el caso de Guatemala en el 2017, la Secretaría de Bienestar Social solo dio cobertura del 0.82% (38,446) de toda la niñez en el país (4,705,937) (Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia, 2018). Mientras que en Honduras, solamente existen seis oficionas regionales de la DINAF para dar cobertura a los 18 departamentos (ver Ilustración1).

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