Con el mismo ritmo y parecida música de los Villancicos, encontramos en Pegalajar infinidad de Aguilandos. En los Aguilandos se mezcla lo divino y lo humano, lo serio y lo jocoso, lo religioso y lo profano…
También la Navidad es el tema principal de los Aguilandos, pero la fantasía del pueblo ha rodeado este tema de un sinfín de circunstancias alegres y graciosas que unen el sentido religioso con el entendimiento popular. De ahí que los Aguilandos sean tan conocidos y tan cantados como los propios Villancicos.
Aunque muchos Aguilandos nos hacen reír, al recoger nombre propios de personas y de lugares del pueblo, los hay también profundamente religiosos y tiernos.