Monografías de Botánica Ibérica, nº 16
ACTUALIZACIÓN DEL CATÁLOGO
DE LA FLORA VASCULAR SILVESTRE DE LA RIOJA
Estado de conocimiento en el invierno-primavera 2015-2016
AUTORES
Juan Antonio Alejandre Sáenz José Antonio Arizaleta Urarte Javier Benito Ayuso Gonzalo Mateo Sanz
LOGROÑO, 2016
INTRODUCCIÓN
El largo título de este documento sería difícil de entender sin unas explicaciones previas. Sobre todo porque la mayoría de los lectores desconocen la existencia de un catálogo de la flora vascular silvestre de La Rioja previo a este momento. Sería posible, aunque laborioso, hacerse una idea de la situación del conocimiento de esa flora si se repasara con atención la bibliografía que al final se añade. La primera conclusión que se sacaría de su lectura es que, como viene sucediendo en la mayor parte de los territorios que se acotan para una flora regional, la mayor o menor, pero siempre ingente, cantidad de datos pretéritos se encuentra dispersa en numerosos trabajos de índole y procedencia diversa. La primera tarea que se acomete en esta introducción es por lo tanto hacer un repaso, sencillo pero suficiente, de las fuentes de conocimiento que se han utilizado para poder registrar en forma de catálogo actualizado toda esa información disponible.
En el año 1991 se publica por ARIZALETA en la revista Zubía una Actualización del catálogo florístico de La Rioja con base en la recopilación de especies citadas en la bibliografía disponible en ese momento. Casi 20 años más tarde, como parte de un trabajo encargado por la Consejería de Turismo y Medio Ambiente, se realizan una serie de documentos, dos de los cuales se entregan en forma de listado de especies y base de datos adjunta (cf. ARIZALETA & al. 1996 y 2000a). En 1997 aparece, también, una Aproximación al catálogo florístico de La Rioja (MEDRANO & al., 1997) que trata de hacer públicos una parte de los contenidos en los documentos entregados a la Administración en 1996. Resumiendo sucintamente, estos son los antecedentes en forma de catálogo al que ahora se presenta.
Como ya se ha convenido más arriba, la información necesaria hoy día para llegar a un preciso estado de conocimiento de una flora regional proviene de una infinidad de fuentes: documentos inéditos de todo tipo, bibliografía publicada, bases de datos, colecciones de herbarios, datos de campo propios o ajenos, sistemas y herramientas cartográficas digitales de información, decretos e informes de las Administraciones, etc. El objetivo propuesto no puede llevarse a cabo sin una nueva revisión crítica de las fuentes, comenzado por las históricas de los autores clásicos que trabajaron en la zona. Mencionamos los tres más importantes: Xabier de Arizaga, Ildefonso Zubía y Fernando Cámara Niño, cuyas aportaciones, originales y de primera mano como consecuencia de sus exploraciones sobre el terreno, tienen un valor histórico y personal añadido muy de agradecer. Más o menos de su entorno temporal, hemos recogido en la bibliografía un número no excesivo de aportaciones, algunas novedosas y las más recopilatorias, que en su conjunto establecen un primer nivel de base de conocimiento sobre la flora regional. Autores de importancia que transcienden lo regional como Laguna, Colmeiro, Boissier, Gandoger y el propio Willkomm acotan el conocimiento de esa primera etapa histórica. Mención aparte merecen los esfuerzos continuados a lo largo de las primeras décadas del siglo XX de los exploradores y taxónomos que conforman el núcleo basal de numerosos estudios florísticos hispanos: C. Pau, F. Sennen y col., P. Font Quer y M.T. Losa, cuyos hallazgos regionales se pueden consultar en varias de las revistas de la época. Posteriormente el acopio de datos y de información se amplía en diversos aspectos del conocimiento, con trabajos académicos de MENDIOLA (1983), MEDRANO (1983 y años siguientes), TARAZONA (1984), NAVARRO (1986) y GARCÍA-BAQUERO (2005). A la vez, fruto de
una exploración ampliada a los territorios peninsulares, generalmente originada en instancias académicas, se acumula un gran número de aportaciones florísticas. En las dos últimas décadas del pasado siglo se produce un gran interés en diversos niveles de las instituciones de la Administraciones regionales por el conocimiento de la flora que favorece la redacción de trabajos de catalogación en Aragón, Burgos, La Rioja, País Vasco, Soria, etc. que afectan, unos de lleno y otros más alejadamente, a la profundización del conocimiento de la flora de nuestro territorio. Merece una mención especial el enorme esfuerzo de síntesis del saber que viene aportando el proyecto de Flora iberica; no solo por su materialización en los diversos volúmenes que se publican, sino muy especialmente por lo que ha supuesto de dinamización de los métodos de adquisición de información –ANTHOS y la Biblioteca Digital, etc.– y de utilización de un acercamiento crítico a los problemas taxonómicos y nomenclaturales que dificultan el conocimiento de flora de las diversas regiones peninsulares.
En estos últimos años la avalancha de trabajos taxonómicos con base en análisis moleculares y matemáticos –cladísticos, etc.– relativos a flora vascular publicados en todos los ámbitos geográficos –no pocos de ellos de dificultoso acceso–viene generando una especie de profundo terremoto que afecta de lleno a la redacción y concreción de floras y catálogos. El florista se ve a veces incapacitado para elegir con tino entre la fe ciega en los argumentos de autoridad y la resistencia que oponen las veteranas costumbres y su propia percepción, formación y experiencia. Esos movimientos sísmicos alteran desigualmente los trabajos de síntesis –que se consideran como básicos en el momento–. Donde mejor se vislumbra el cambio que supone la irrupción de esas técnicas modernas de análisis es en los trabajos taxonómicos o muy concretos o de amplitud a nivel de familia etc., que paradójicamente son precisamente los que con mayor dificultad se pueden adaptar a los problemas de la flora de cada región. Para nosotros tan malo es admitir mecánicamente siempre y como norma las modificaciones que se proponen como hacer oídos sordos a todas ellas. La solución que se pretende aplicar aquí es la de atender en lo posible al eco que esas propuestas provocan en el entorno y consecuentemente proponer, al menos en los casos admitidos, un aviso de correspondencia nomenclatural que facilite la comprensión del lector.
Los objetivos buscados al editar esta publicación son fundamentalmente cinco. En primer lugar, establecer un punto de partida, una plataforma de despegue que favorezca aportaciones múltiples y lo más ágiles posible para el avance del conocimiento de la flora de La Rioja. En ese sentido la llamada a la colaboración en positivo o crítica es tan amplia y universal como seamos capaces de articular en el futuro. En segundo lugar, la concreción de los listados trata de proporcionar a quien esté interesado en la flora riojana un campo de conocimiento balizado, estableciendo diferencias entre lo que se sabe y lo que se ignora; y en este último caso dar a entender el valor añadido que tendría decidirse a notificarlo, reduciendo de esa forma el campo de desconocimiento. Por otra parte, se pretende ofrecer un instrumento de unificación de criterios taxonómicos y nomenclaturales, que impida en lo posible, que se refuerce a diario el ruido espurio que dificulta la comprensión, evitando que cada uno denomine como le parezca las especies y los táxones. En cuarto lugar, la iniciativa de articular un catálogo siempre se justifica por el interés particular que para las Administraciones y sus técnicos tiene el conocimiento preciso y actualizado de la
flora en aras de iniciar, instrumentalizar y perfeccionar los procesos que se precisan para la protección razonada, y sobre todo, útil de la flora rara o amenazada. Finalmente, el objetivo más buscado y entusiasta es el de hacer posible en un futuro próximo la redacción de un Atlas de la flora de La Rioja. Consolidar un catálogo de táxones es empezar la casa por los cimientos. Como estrambote añadido a este párrafo, conste el compromiso de los autores de ir editando, pasado un tiempo razonable, nuevas entregas de este mismo documento, actualizando cada vez su contenido.
En el propio título se expresa la intención de acotar el contenido del catálogo a las plantas silvestres. Cualquiera que conozca un poco de flora regional sabe que este objetivo es cuanto menos resbaladizo y poco menos que imposible de concretar. Asombra un tanto en la lectura del documento sobre flora alóctona e invasora de Vizcaya/Bizkaia –se cita solamente como ejemplo cercano– (cf. HERRERA & CAMPOS 2010), el número de plantas que allí se definen como tales. La nómina de táxones afines a esas caracterizaciones crece constantemente en cualquier territorio de nuestro entorno; en paralelo, curiosamente, a la que recoge las plantas que van desapareciendo del territorio debido a las modificaciones de uso del mismo y a la antropización del suelo. No dudamos de la conveniencia de acometer un estudio sistemático de la flora alóctona, adventicia o naturalizada. Habrá de hacerse alguna vez, pero no es nuestro objetivo de hoy. Como consecuencia de esa imposible concreción y separación entre un tipo de flora silvestre y la otra, es posible que se encuentren en esta obra algunas contradicciones sin ninguna lógica. Nada de importancia mientras que en cada uno de los casos no se llegue a tomar partido en la definición de su estatus.
Esta Actualización se distribuye en tres apartados principales: el catálogo, varios anexos y la bibliografía.
En el catálogo el orden de exposición es alfabético, de familias, géneros y especies, partiendo de una primera separación clásica de Pteridófitas, Gimnospermas y Angiospermas –a su vez divididas en Dicotiledóneas y Monocotiledóneas–. El encaje taxonómico y consecuentemente la nomenclatura, tal como se ha expresado más arriba, trata de llegar a un punto de equilibrio entre lo expuesto en obras generalistas de síntesis de flora cercanas y las aportaciones o decisiones más recientes admitidas por la mayoría de los autores o en proceso de hacerse. Por supuesto que en este asunto se darán en el futuro numerosas modificaciones que habrá que asumir en posteriores ediciones. Se aporta el nombre de los táxones hasta el nivel de subespecie, añadiendo la parte del protólogo que parece necesaria, en este momento, al no disponer de una obra única a la que referirnos.
Al inicio de cada uno de los anexos se explica la intención de su inclusión y conveniencia de uso. Son indudablemente la parte menos elaborada y endeble del trabajo, pues además de estar per se en permanente construcción, en buena parte la dificultad de su redacción transciende en mucho a nuestras capacidades de hoy día. En cualquier caso, han de ser útiles, cuando menos por ser claramente perfeccionables. Los corchetes que se añaden a los táxones llaman a la consulta del documento que aparece en la bibliografía con el mismo número.
Una bibliografía que reuniera todos los trabajos relacionados con la flora local de La Rioja alcanzaría un tamaño imposible de implementar en este documento, incluso aunque se redujera a las obras en las que se citan expresamente las plantas. Nuestra decisión ha sido la de acotar las referencias a: las principales cuyo valor histórico es innegable y en las que se anotan referencias originales, las obras de síntesis o monográficas que representan el estado actual de conocimiento, las que aportan estudios que influyen directamente en las decisiones que hemos tomado en cuanto a problemas taxonómicos o nomenclaturales, las que tratan de la flora del entorno inmediato y que por esa razón pueden facilitar la búsqueda nuevos táxones que añadir al catálogo, y en todo caso alguna otra que por su especiales valores analíticos nos ha tenido cuenta atender. Aunque no se relaciona en la bibliografía hacemos constar que para la redacción del catálogo hemos dispuesto de la información que figura en los listados informatizados que algunos herbarios públicos nos han facilitado con el volcado de los datos referidos a La Rioja de las colecciones depositadas en sus centros, a saber: JACA, unos 230 registros; MA, 7510 registros; VAL, 1800 registros; VIT, 2401 registros y Herbario de I. Zubia depositado en el Instituto de Enseñanza Media de M.P. de Sagasta –algunas consultas parciales–. Además hemos dispuesto de la base de datos de la Consejería de Medio Ambiente de La Rioja con unos 24.703 registros. Hemos utilizado también, como fuentes de información, diversas herramientas digitales que se ofrecen en la Red (ANTHOS, GBIF, Herbario de Segura Zubizarreta –en la web del Real Jardín Botánico de Madrid–, Herbario Digital Xabier de Arizaga, etc.). Además de los herbarios particulares de los autores y los de algunos compañeros que fueron consultados puntualmente.
Logroño, abril de 2016.
Actualización del catálogo de la flora vascular silvestre de La Rioja. Catálogo florístico
CATÁLOGO DE PLANTAS VASCULARES SILVESTRES PRESENTES EN EL TERRITORIO DE LA COMUNIDAD AUTÓNOMA DE LA RIOJA
(invierno-primavera 2015-2016)
PTERIDOPHYTA
ASPLENIACEAE
Asplenium adiantum-nigrum L., Sp. Pl.: 1081 (1753) subsp. adiantum-nigrum
Asplenium ceterach L., Sp. Pl.: 1081 (1753) subsp. ceterach
Asplenium csikii Kümmerle & András., Magiar Bot. Lapok 21: 3 (1922)
Asplenium fontanum (L.) Bernh. in J. Bot. (Schrader) 1799(1): 314 (1799) subsp. fontanum
Asplenium obovatum Viv. subsp. lanceolatum (Fiori) Pinto da Silva, Agron. Lusit. 20: 217 (1959)
Asplenium onopteris L., Sp. Pl.: 1081 (1753)
Asplenium petrarchae (Guerin) DC. in Lam. & DC., Fl. Franç. ed. 35: 238 (1815) subsp. petrarchae
Asplenium ruta-muraria L., Sp. Pl.: 1081 (1753) subsp. ruta-muraria
Asplenium scolopendrium L., Sp. Pl.: 1079 (1753) subsp. scolopendrium
Asplenium seelosii Leybold subsp. glabrum (Litard. & Maire) Rothm. in Cadevall, Fl. Catalunya 6: 339 (1937)
Asplenium septentrionale (L.) Hoffm., Deustchl. Fl. 2: 12 (1976) subsp. septentrionale
Asplenium trichomanes L., subsp. hastatum (Christ) Jessen in Ber. Bayer. Bot. Ges. 65: 111 (1995)
Asplenium trichomanes L. subsp. quadrivalens D.E. Meyer in Ver. Deutsch. Bot. Ges. 74: 456 (1962)
Asplenium trichomanes L., Sp. Pl.: 1080 (1753) subsp. trichomanes (no se tienen pruebas definitivas de su presencial en La Rioja)
Asplenium viride Huds., Fl. Angl.: 385 (1762)
ATHYRIACEAE
Athyrium distentifolium Tausch ex Opiz in Kratos 2: 14 (1820)
Athyrium filix-femina (L.) Roth, Ten. Fl. Germ. 3: 65 (1799)
BLECHNACEAE
Blechnum spicant (L.) Roth in Ann. Bot. (Usteri) 10: 56 (1794) subsp. spicant
CYSTOPTERIDACEAE
Cystopteris dickieana R. Sim in Gard. Farmer´s J. 2(20): 308 (1848)
Cystopteris fragilis (L.) Bernh in Neues J. Bot. 1(2): 27 (1805) subsp. fragilis
Cystopteris fragilis (L.) Bernh. subsp. huteri (Hausm. ex Milde) Prada & Salvo in Anales Jard. Bot Madrid 41: 466 (1985)
Gymnocarpium dryopteris (L.) Newm. in Phytologist 4: 371 (1851)
DENNSTAEDTIACEAE
Pteridium aquilinum (L.) Kuhn in Kersten, Reisen Ost-Afr. 3(3): 11 (1789) subsp. aquilinum
DRYOPTERIDACEAE
Dryopteris affinis (R. Lowe) Fras.-Jenkins in Fern Gaz. 12: 56 (1979) subsp. affinis
Dryopteris borreri (Newm.) Newm. ex Oberh. & Tavel in Verh. Schweiz. Naturf. Ges. 118: 153 (1937)
Dryopteris cambrensis (Fras.-Jenkins) Beitel & W. Buck in Bull. Amer. Fern Soc. 15(2): 15-16 (1988)
Dryopteris carthusiana (Vill.) H.P. Fuchs in Bull. Soc. Bot. France 105: 339 (1959)
Dryopteris dilatata (Hoffm.) A. Gray, Manual 631 (1848)
Dryopteris expansa (K. Presl) Fras.-Jenkins & Jermy in Fern Gaz. 11: 338 (1977)
Dryopteris filix-mas (L.) Schott, Gen. Fil., tab. 9 (1834)
Dryopteris mindshelkensis Pavlov in Vestn. Akad. Nauk Kazakhsk. SSR 8: 129 (1954)
Dryopteris oreades Fomin in Vĕstn. Tiflissk. Bot. Sada 18: 20 (1911)
Polystichum aculeatum (L.) Roth, Tent. Fl. Germ. 3: 79 (1799)
Polystichum lonchitis (L.) Roth, Tent. Fl. Germ. 3: 71 (1799)
Polystichum setiferum (Forssk.) Woyn. in Mitt. Naturwiss. Vereines Steiermark 49: 181 (1913)
Actualización del catálogo de la flora vascular silvestre de La Rioja. Catálogo florístico
Valerianella dentata (L.) Pollich, Hist. Pl. Palat. 1: 30 (1776) (incl. Valerianella rimosa Bastard)
Valerianella discoidea (L.) Loisel., Not. Fl. France: 148 (1810)
Valerianella eriocarpa Desv. in J. Bot. (Desvaux) 2: 314, pl. 11 fig. 2 (1809) [incl. Valerianella muricata (Steven ex M. Bieb.) W.H. Baxter]
Valerianella fusiformis Pau in Bol. Soc. Esp. Hist. Nat. 21: 144 (1921)
Valerianella locusta (L.) Laterr., Fl. Bordel. ed. 2: 93 (1921) subsp. locusta (incl. Valerianella carinata Loisel.)
Valerianella locusta (L.) Laterr. subsp. lusitanica (Pau ex Font Quer) M. Laínz in Bol. Inst. Estud. Asturianos, Supl. Ci. 5: 29 (1962)
VERBENACEAE
Verbena officinalis L., Sp. Pl.: 21 (1753)
VIOLACEAE
Viola alba Besser, Prim. Fl. Galiciae Austriac. 1: 171 (1809)
Viola arvensis Murray, Prodr. Stirp. Gott.: 73 (1770)
Viola canina L., Sp. Pl.: 935 (1753)
Viola hirta L, Sp. Pl.: 934 (1753).
Viola kitaibeliana Schult. in Roem. & Schult., Syst. Veg. 5: 383 (1819)
Viola montcaunica Pau in Actas Soc. Esp. Hist. Nat. 1894: 129 (1895)
Viola odorata L., Sp. Pl.: 934 (1753)
Viola palustris L., Sp. Pl.: 934 (1753) subsp. palustris
Viola reichenbachiana Jord. ex Boreau, Fl. Centre France ed. 3, 2: 78 (1857)
Viola riviniana Rchb., Iconogr. Bot. Pl. Crit. 1: 81, tab. 95 figs. 202-203 (1823)
Viola rupestris F. W. Schmidt in Neuere Abh. Königl. Böhm. Gess. Wiss. ser. 2, 1: 6 (1791) subsp. rupestris
Viola saxatilis F.W. Schmidt, Fl. Boëm. Cent. 3: 60 (1794)
Viola suavis M. Bieb., Fl. Taur.-Caucas. 3: 164 (1819)
VISCACEAE (LORANTHACEAE)
Arceuthobium oxycedri (DC.) M. Bieb., Fl. Taur.-Caucas. 3: 629 (1819)
Viscum album L., Sp. Pl.: 1023 (1753) subsp. album
Viscum album L. subsp. austriacum (Wiesb.) Vollm., Fl. Bayern: 212 (1914)
VITACEAE
Vitis vinifera L. subsp. sylvestris s.l.
ZYGOPHYLLACEAE
Tribulus terrestris L., Sp. Pl. 1: 387 (1753)
ANGIOSPERMAE (MONOCOTYLEDONAE)
ALISMATACEAE
Alisma lanceolatum With.. Arr. Brit. Pl. ed. 3, 2: 362 (1796)
Alisma plantago-aquatica L., Sp. Pl.: 342 (1753)
Baldellia alpestris (Coss.) M. Laínz in Bol Inst. Estud. Asturianos, Supl. Ci. 5: 41 (1962)
Baldellia ranunculoides (L.) Parl., Nuov. Gen. Sp. Monocot.: 58 (1854)
AMARYLLIDACEAE
Narcissus assoanus Dufour ex Schult. & Schult. fil. in Roem. & Schult., Syst. Veg. 7: 962 (1830)
Narcissus bulbocodium L., Sp. Pl.: 289 (1753)
Narcissus dubius Gouan, Ill. Observ. Bot.: 22 (1773)
Narcissus minor L., Sp. Pl. ed. 2: 415 (1762) subsp. minor
Narcissus pseudonarcissus L. subsp. portensis (Pugsley) A. Fern. in Bol. Soc. Brot. ser. 2, 25: 183 (1951) (= Narcissus eugeniae Fern. Casas)
Narcissus rupicola Dufour ex Schult. & Schult. fil. in Roem. & Schult., Syst. Veg. 7: 958 (1830)
Narcissus triandrus L. subsp. pallidulus (Graells) Rivas Goday, Veg. Fl. Guadiana: 710 (1964)
Narcissus triandrus L., Sp. Pl. ed. 2: 416 (1762) subsp. triandrus
ANEXO I. Táxones nuevos del Catálogo provincial
Se incluyen en este anexo 37 táxones que se consideran novedades para la flora provincial, teniendo en cuenta que se admite como punto de partida el compendio de lo conocido con anterioridad a la finalización del año 2015 en publicaciones generalistas (ej.: Flora iberica) o a modo de catálogos, y que aparecen en la bibliografía publicada con indicaciones de una relativa certidumbre en cuanto a su origen y más o menos precisa concreción en lo referente a su localización geográfica dentro de la C.A. de La Rioja. Se especifica el nombre de cada taxon hasta el nivel de subespecie, al que le sigue la referencia a la obra en la que se publicó válidamente el protólogo. Tras ello se ha añadido entre corchetes y en “negrita” el número que en el listado bibliográfico indica la obra de referencia que justifica su inclusión en este anexo. Las citas que corresponden a publicaciones aparecidas posteriormente al año 2000, que consultadas y analizadas alcanzan, a nuestro juicio, la solvencia suficiente para ser tomadas en consideración, se aceptan como novedades provinciales que se suman a las que provienen de nuestras propias recolecciones o pesquisas en el campo todavía sin publicar.
Acinos arvensis (Lam.) Dandy in J. Ecol. 33: 326 (1946) [34]
Airopsis tenella (Cav.) Asch. & Graebn., Syn. Mitteleur. Fl. 2(1): 298 (1899) [20]
Alyssum minutum DC,, Syst. Nat. 2: 316 (1821) [MA 49123]
Antirrhinum meonanthum Hoffmanns. & Link, Fl. Portug. 1: 261, pl. 51 (1813) [34]
Armeria cantabrica Boiss. & Reut. ex Willk. in Willk. & Lange, Prodr. Fl. Hisp. 2: 366 (1868) [35]
Carex acuta L., Sp. Pl.: 978 (1753) [20]
Carex liparocarpos Gaudin, Étrennes Fl.: 153 (1804) subsp. liparocarpos [34]
Carex pseudocyperus L., Sp. Pl.: 978 (1753) [20]
Chaenorhinum semiglabrum (Loidi & Galán Cela) Alejandre, Arizaleta & Benito Ayuso in Fl. Montib. 12: 45 [18, 21, 74]
Convolvulus lanuginosus Desr. in Lam., Encycl. Méth. Bot. 3: 551 (1792) [34]
Corydalis cava (L.) Schweigger & Koerte, Spec. Fl. Erlang. 2: 44 (1811) subsp. cava [20]
Daucus durieua Lange in Willk. & Lange, Prodr. Fl. Hispan. 3: 23 (1874) [34]
Dethawia splendens (Lapeyr.) Kerguélen subsp. cantabrica (A. Bolòs) Kerguélen, Index Synon. Fl. France: XIII (1993) [20]
Gagea dubia A. Terracc. in Boll. Soc. Ortic. Palermo 2(3): 34 (1904) [com pers. C. Molina]
Gagea lacaitae A. Terracc. in Boll. Soc. Ortic. Palermo 2(4): 60 (1904) (= Gagea granatellii auct.) [com. pers. C. Molina]
Erodium daucoides Boiss., Elench. Pl. Nov.: 28 (1838) [20, 277]
Euphorbia helioscopia L., Sp. Pl.: 459 (1753) subsp. helioscopioides (Loscos & J. Pardo) Nyman, Consp. Fl. Eur.: 651 (1881) [35]
ANEXO II. Táxones eliminados del Catálogo provincial
Se incluyen en este anexo 30 táxones que se considera deben ser eliminados del Catálogo de la flora provincial. Los más fueron reconocidos circunstancialmente como presentes o muy probablemente presentes en La Rioja; y su inclusión en este listado ha de entenderse como una propuesta en firme que se justifica no pocas veces en base al conocimiento admitido como bueno sobre la situación regional de tal taxon. En otros casos, muy pocos, se estima que deben ser eliminados, a pesar de que su presencia en La Rioja se ha dada como cierta en algunos documentos publicados en los últimos años. Ante lo que puede entenderse como una divergencia de criterios discutible, en estos casos, se llama la atención sobre la conveniencia de consultar los trabajos bibliográficos en donde se expresa bien nuestro propio criterio o el de autores que lo defienden. Para todos los táxones se especifica el nombre hasta el nivel de subespecie, al que le sigue la referencia a la obra en la que se publicó válidamente el protólogo. Tras cada uno de ellos se ha añadido entre “corchetes” y en “negrita” el número que en el listado bibliográfico indica la obra bibliográfica de referencia en la que se propuso de eliminación. Que alguno de los taxones que se incluyen en este Anexo II aparezca, así mismo, en el Anexo IV, Táxones de presencia dudosa o probable en el Catálogo provincial apunta a que el nivel de probabilidad que se le confiere a su presencia en la provincia es muy bajo; y que a nuestro juicio, en todo caso cualquier modificación de criterio sobre su presencia en la provincia debe asentarse en testimonios y pruebas rigurosas y no en reiteraciones de los ya desestimados.
Agrostis alpina Scop., Fl. Carniol. ed. 2, 1: 60 (1771) [260, 278, 314]
Arabis serpillifolia Vill., Prosp. Hist. Pl. Dauphiné: 39 (1779) [20, 54, 254, 260, 261]
Bufonia macropetala Willk. in Flora (Regensburg) 34: 604 (1851) [54, 107]
Campanula lusitanica L. in Loefl., Iter Hispan.: 111 (126 (1758) [94]
Cardamine resedifolia L., Sp. Pl.: 656 (1753) [confusiones en Urbión y Cebollera (Bu, Lo y So) con Murbeckiella boryi (Boiss.) Rothm.] [107, 145]
Carlina acaulis L., Sp. Pl.: 828 (1753) [citas erróneas, confusión con C. acanthifolia All. subsp. cynara (Pourr. Ex DC.) Arcang.] [35, 54, 129]
Carum carvi L., Sp. Pl.: 263 (1753) [35]
Centaurea montana L, Sp. Pl.: 911 (1753) [a lo más, se puede confundir con C. triumfetti subsp. semidecurrens (Jord.) Dostál –rarísima en La Rioja] [29, 129, 253, 275]
Chaenorhinum origanifolim subsp. segoviense (Reut. ex Rouy) R. Fern. in Naturaliste 4: 190 (1882) [18, 21, 74]
Colutea arborescens L. Sp. Pl.: 723 (1753) [todas las citas anteriores de la C.A. de La Rioja son confusiones con C. brevialata Lange] [18, 342]
Crataegus laevigata (Poir.) DC., Prodr. 2: 630 (1825) [34, 245, 276]
Doronicum pardalianches L., Sp. Pl.: 885 (1753) [Todas la citas del Sistema Ibérico (Bu, Lo, So) se debe de llevar a Doronicum carpetanum s.l.][37, 49, 161, 244, 278]
Hyacinthoides non-scripta (L.) Chouard, Bull. Soc. Bot. France 81: 625 (1934) [citas regionales confusión con H. hispanica (Mill.) Rothm.] [312]
Hypecoum procumbens L., Sp. Pl.: 124 (1753) [No es especie riojana. Las referencias de Arizaga y Zubía son erróneas] [104]
ANEXO III. Modificaciones nomenclaturales o taxonómicas: correspondencias
Esta lista incluye una selección de táxones, de entre los que forman la nómina del Catálogo provincial, para los que se ha propuesto y utilizado recientemente una nueva nomenclatura. El signo “=” no pretende expresar en este caso una equivalencia taxonómica exacta, sino que únicamente señala correspondencias entre los nombres utilizados anteriormente y los que se supone reconocidos en la actualidad. Estos últimos aparecen en primer lugar –hasta el nivel de subespecie en algún caso–, seguidos, si se considera necesario, de la referencia a la obra en que se publicó válidamente el protólogo o la nueva nomenclatura. Entre paréntesis van, tras el signo “=” los nombres utilizados en floras de uso común que recogen datos sobre la flora regional. Al final de cada ítem, en “negrita” y entre “corchetes” se indica, en los casos que consideramos conveniente, el número que la obra de referencia ocupa en el listado bibliográfico.
Aegonychon purpurocaeruleum (L.) J. Holub, Folia Geobot. Phytotax. 8: 165 (1973) [= Lithosperum purpurocaeruleum L., Sp. Pl.: 132 (1753)] [345]
Allium paniculatum L., Syst. Nat. ed. 10: 978 (1759) [¿incl.? Allium pallens L., Sp. Pl. ed. 2: 427 /1759); ¿incl.? Allium stearnii Pastor & Valdés, Rev. Allium: 86, fig. 18 (1983)] [385, 290, 312]
Allium lusitanicum Lam, Encycl. Meth. Bot. 1: 70 (1783] [= Allium senescens L subsp. montanum F.W. Schmidt. ex Holub in Folia Geobot. Phytotax. 5: 435 (1970)] [150, 290]
Allosurus acrosticus (Balb.) Christenh. in Willdenowia 42: 284. (2012) [= Cheilanthes acrostica (Balbis) Tod. in Giorn. Sci. Nat. Econ. Palermo 1: 215 (1866)] [385]
Allosurus pteridioides (Richard) Christenh. in Willdenowia 42: 284 (2012) [= Cheilanthes maderensis Lowe in Trans. Cambridge Philos. Soc. 6: 528 (1838)] [385]
Alyssum fastigiatum Heywood in Bull. Brit. Mus. (Nat. Hist.), Bot. 1: 92 (1954) [= A. montanum L. sensu Flora ib.] [391]
Anchusa azurea Mill.,Gard. Dict., ed.8, no 9 (1768) [= Anchusa italica Retz., Observ. Bot. 1: 12 (1779)] [345]
Anthoxanthus ovatum Lag. subsp. aristatum (Boiss.) R. Litard. in Candollea 7: 231 (1937) [= Anthoxanthum aristatum Boiss., Voy. Bot. Espagne 2: 638 (1842)] [397]
Avenella flexuosa (L.) Drejer, Fl. Excurs. Hafn 32 (1838) [= Deschampsia flexuosa (L.) Trin. in Bull. Sci. Acad. Saint-Pétersbourg 1: 66 (1836)] [incl. Avenella flexuosa subsp. iberica (Rivas Mart.) Valdés & H. Schotz in Willdenolwia 36: 662 (2006)] [385]
Betula pubescens Ehrh., Beitr. Naturk. 6: 98 (1791)] [incl. Betula celtiberica Rothm. & Vasc. in Bol. Soc. Brot. ser. 2, 14: 147 (1940)] [= Betula alba L., Sp. Pl.: 982 (1753)]
Bolboschoenus maritimus (L.) Palla in W.D.J. Koch, Syn. Deut. Schweiz. Fl. ed. 3: 2532 (1905) [= Scirpus maritimus L., Sp. Pl.: 51 (1753)] [111]
Bupleurum gerardii All. in Mélanges Philos, Math. Soc. Roy Turin 5: 81 (1774) [cf. incl. Bupleurum virgatum Cav., Descr. Pl.: 121. (1801] [337, 385]
Campanula dieckii Lange, Overs. Kongel. Danske Vidensk. Forh. Medlemmers Arbeider 1893: 195 (1893) (= Campanula decumbens A. DC, p.p sensu Flora Iberica) [94]
Carduncelllus monspelliensium All., Fl. Pedem. 1: 154 (1785) [= Carthamus carduncellus L., Sp. Pl 831 (1753)] [385]
Carduncellus mitissimus (L.) DC. in Lam. & DC., Fl. Franç. ed. 3, 4: 73 (1805) [= Carthamus mitissimus L., Sp. Pl.: 831 (1753)] [385]
Actualización del catálogo de la flora vascular silvestre de La Rioja. Anexo IV
ANEXO IV. Táxones de presencia dudosa o probable en el Catálogo provincial
Esta lista incluye una selección de táxones que, como su título anuncia, pueden ser distribuidos en dos categorías diferentes o incluso antagónicas. Por un lado, los táxones que habiendo sido citados de forma expresa o algo imprecisa en cuanto a su localización en alguna zona de la provincia, el conocimiento limitado del lugar o la falta de datos impiden por el momento adelantar un juicio certero sobre su presencia real en el territorio. Por otra parte está un relativamente amplio grupo de táxones cuya presencia en territorios próximos a los límites provinciales, documentada por quienes estudiaron esas zonas, los eleva a la categoría de candidatos a integrarse en el catálogo provincial. Otra fuente en la que se puede espigar ese tipo de aspirantes a incorporarse al catálogo se obtiene del estudio de las áreas conocidas de algunas especies, cuando tales áreas se interrelacionan con la superficie provincial en zonas que no han sido todavía suficientemente exploradas.
Acer pseudoplatanus L., Sp. Pl. 2: 1054 (1753) [Dudas sobre su presencia autóctona] [277]
Aconitum napellus L .s.l., Sp. Pl.: 532 (1753) [Zubía la cita «hacia Ezcaray». De La Demanda burgalesa se le conoce, aunque sea como muy escaso y localizado] [23, 392]
Agrostis alpina Scop., Fl. Carniol. ed. 2, 1: 60 (1771) [poco probable en zonas elevadas de Urbión] [278, 314]
Agrostis canina L., Sp. Pl.: 62 (1753) s.l. [dudas taxonomicas, probable presencia dispersa][314]
Agrostis hesperica Romero García, Blanca & Morales Torres in Anales Jard. Bot. Madrid 43(1): 52 (1986) [probable en la zona occidental riojana de la base del Sistema Ibérico] [30, 314]
Alchemilla catalaunica Rothm. in Bol Soc. Esp. Hist. Nat. 34: 150 (1934) [en los carbonatos de zonas altas de Urbión y La Demanda –det. S.E. Frönher–]
Alyssum minutum DC,, Syst. Nat. 2: 316 (1821) [El pliego MA 49123 contiene 5 especímenes. Lleva tres etiquetas principales y dos de revisión. La original de Zubía dice: Alyssum psilocarpum/Boiss./ El Rasillo/de Cameros/Junio 20/Zubía. Un de las de revisión –para Flora iberica- firmada por Ph. Kupfer el 12-1991, segrega los ej. 1-2 como A. minutum DC. y otros dos (3-4), como A. alyssoides (L.) L.. Ambos testimonios no dejan duda sobre la procedencia y contenido de la recolección original. Hasta hoy se trata de la única localidad conocida de La Rioja.]
Anemone pavoniana Boiss., Diagn. Pl. Orient., ser. 2, 1: 6 (1854) [pudiera llegar a algún roquedo en zonas frescas y umbrosa del cordal de Obarenes y sierra de Toloño en la parte que corresponde a La Rioja, ya que está presente en las sierras de Toloño/Cantabria (Vi)] [65]
Antinoria agrostidea (DC.) Parl., Fl. Palerm. 1: 95 (1845) [cita cercana en el piedemonte silíceo del Sistema Ibérico de Burgos] [25]
Apera interrupta (L.) P. Beauv., Agrost.: 31, 151 (1812) [citas antiguas de Arizaga en Elciego. De presencia comprobada en territorios próximos del País Vasco, Burgos y Soria] [10, 23, 332]
Armeria maritima (Mill.) Willd. subsp. alpina (Willd.) P. Silva [Mendiola cita en dos de sus trabajos este taxon en: «Cumbre del Puerto de Piqueras, 30TWM3458 (MAC 6607). Escasa en la zona. Desvío del Puerto de Piqueras a Yanguas». No sabemos a que se refiere en realidad. También sorprende su comentario sobre Armeria bigerrensis: «En los pastizales de la sierra de Cebollera. Segura», pues de esa zona nada parecido se comenta en el Catálogo de Soria] [259, 261, 332]
ANEXO V. Táxones de interés para la Flora de La Rioja citados en la obra de Xabier de Arizaga (siglos XVIII-XIX)
Xabier de Arizaga (Soto de Cameros, 1748-1830) se ha de considerar, sin ninguna duda, el protobotánico regional y el explorador más influyente del amplio territorio que se circunscribe principalmente a la comarca natural de la Rioja, pero que se extiende también desde las estribaciones del Sistema Ibérico y montes cameranos hasta la misma costa cantábrica y algunas de las montañas de la divisoria. No pocas de las especies mencionadas en sus manuscritos, todos ellos redactados durante su estancia como boticario en el pueblo alavés de Elciego (Excursión botánica o Itinerario de herborización redactado el año 1785 [1], Breve explicación de algunas plantas medicinales… redactado el año 1792 [2], Species plantarum finalizado en el año 1802 [3] y por último el Itinerario Botánico de 1812 o tal vez de 1813 [4]), todavía hoy, más de 200 años después de que fueran citadas en parajes reconocibles a través de la toponimia que el utilizó y que aún perdura, han podido ser reencontradas en los mismos lugares. Nada de particular, si no fuera porque no pocas de esas plantas pueden ser catalogadas como notables, raras y hasta extremadamente localizadas en una amplia franja de territorio circunregional. Aunque muchas veces hemos constatado sobre el terreno la alta fiabilidad del testimonio de este insigne botánico, conviene sin embargo hacer notar que se dan en el caso dos circunstancias que complican de alguna forma la “utilidad” de las referencias debidas a Arizaga; sobre todo si lo que se pretende es, como en nuestro caso, añadir con base en evidencias falsables ciertos taxones o numerosos e interesantes datos corológicos al catálogo actual de la flora de la Rioja. En primer lugar, porque a pesar de que Arizaga herborizó y preparó un herbario de algunos cientos de pliegos –de las plantas más notables según su criterio–, y de que envió esos materiales al Real Jardín Botánico de Madrid, puede que apenas nada se conserve hoy día allí, o que al menos sea realmente difícil de asegurar que aquello que se tiene delante es lo que envió Arizaga del lugar que él dispuso en su correspondiente anotación. No cabe por lo tanto, o ha de resultar en este caso trabajoso, apoyarse en el mejor de los testimonios: el material depositado en los herbarios. Por otra parte, la nomenclatura utilizada por Arizaga, que aunque lineana en su mayor parte resulta a veces ajena al botánico actual, dificulta la comprensión e introduce dudas razonables sobre el sentido que quiso dar el autor a sus determinaciones.
A pesar de todo, nos ha parecido oportuno elaborar y añadir este anexo en el que se listan algunas de las numerosas referencias que se pueden espigar de la obra de Arizaga. Al nombre del taxon, trasladado a la expresión actualizada que creemos correcta, se añaden los datos reflejados en el texto de sus cuatro manuscritos. El objetivo es tratar de que este repaso inicial a su obra le permita valorar, a quienes les pueda interesar esta labor, la utilidad del esfuerzo dedicado a confirmar hoy día la existencia de algunos táxones en el territorio de La Rioja. En el listado bibliográfico que figura al final de este documento se indican las obras (cf. GREDILLA 1913 y 1914, consultables en la Biblioteca digital del Real Jardín Botánico de Madrid por el autor, Arizaga) y (cf. URIBE ECHEBARRÍA 2005, texto inédito) en las que se puede obtener información adicional sobre la figura y la obra de Xabier de Arizaga. Para facilitar la consulta de cada ítem se indica entre corchetes en negrita el número o números de páginas en el que aparece citado en taxon en cada un de los cuatro manuscritos (siguiendo para ello la paginación utilizada por GREDILLA en los dos volúmenes en los que dividió la edición de la obra). En caso de que Arizaga hubiera enviado una muestra a Madrid se cita el numero del cuaderno (1 a 4) y el que corresponde al pliego según lo dejó anotado su autor.
Actualización del catálogo de la flora vascular silvestre de La Rioja. Bibliografía
BIBLIOGRAFÍA
[1] AA.VV. (1998). Decreto 59/1998, de 9 de octubre, por el que se crea y regula el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora y Fauna Silvestre de La Rioja. BO. La Rioja 13 octubre 1998, núm. 123/1998.
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[6] AIZPURU, I., C. ASEGINOLAZA, P. CATALÁN, P.M. URIBE-ECHEBARRÍA & P. URRUTIA (1990). Algunas plantas navarras de interés corológico. Est. Mus. Cienc. Nat. de Álava 5: 83-90.
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