TU ESPECTÁCULO UNA CARRERA CON MÁS DE 100 FILMES Vanessa Redgrave, ganadora del Oscar por la película “Julia” (1977), cumplió 75 años y está más vital que nunca.
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SAN MIGUEL DE TUCUMAN, LUNES 30 DE ENERO DE 2012 - 2DA. SECCIÓN
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TEMA LIBRE Lo que importa es la audiencia ROBERTO DELGADO SECRETARIO DE REDACCIÓN
@robertodelgado4 rdelgado@lagaceta.com.ar
l cuento del paraguayo hizo revolcar de la risa a los 20 periodistas de todo el país que asistían a un extenso seminario de editores en Buenos Aires. Lo relataba un periodista cordobés con su acento característico: “Era un paraaguaio petiisito, flaquito, con cara de nada, una porquería el tipo... Llega a la casa de un industrial aleemán, grandote, con cara de pocos amigos. Golpea la puerta y sale el aleemán: - ¡¿Y vos quién sos?! ¡¿Qué querés?!, le pregunta. - Bueenas, yo soy paraaguaio, y he venido a buscar a su hija para hacerla mía. - ¡¿Para qué?! - Paraaguaio”. La primera vez que lo contó fue en un coffeebreak; los periodistas se rieron tanto que le pidieron que lo cuente en las clases, ante los profesores e incluso ante el director del seminario, un ex embajador. Y aunque el cordobés le hacía algunas variantes -incluso con malas palabras- todos terminaban riéndose hasta las lágrimas. Sorprendía el desparpajo del cordobés, capaz de romper la seriedad del estudio y la solemnidad del protocolo, para desparramar buena onda con el paraaguaio. De regreso en Tucumán, intentamos contarlo, repitiendo incluso la tonada cordobesa, que nos parecía que le daba la pátina de buen humor: “Era un paraaguaio petiisito...”, empezábamos, pero no tenía ni por asomo la carga provocadora de carcajadas que le había dado el cordobés. El paraaguaio quedaba lavado y apenas suscitaba una sonrisa y hasta, casi, la necesidad de explicar el cuento. “No es el paraaguaio. Es el cordobés”, pensamos, derrotados. Pero hubo un defensor que nos consoló y aseguró que no era así. “Es la audiencia; son los compañeros, que nunca los oyeron a ustedes contar chistes. Hay que contarlo en una reunión de amigos y ver qué pasa”. Así hicimos y el paraaguaio siguió cosechando risas, aunque no lágrimas. Nos quedamos conformes con la idea de que todo chiste (bueno o malo) necesita una audiencia predispuesta a dejarse pasear por el humor; de otro modo, queda sepultado en la indiferencia. Por si acaso, lo contamos con acento cordoobés.
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ALMA ROCKERA
RITA LEE TERMINÓ PRESA EN SU ÚLTIMO SHOW
Aunque cada año se modifican las exigencias de las escuelas o de los colegios sobre los útiles necesarios para iniciar el ciclo lectivo, los padres pueden adelantarse a la fiebre de las compras de último momento para elegir lo básico que cada estudiante necesita. Para hacer una compra inteligente se deben evaluar precios, marcas y calidad. Hay opciones para todos los gustos y bolsillos. No te duermas, este es el momento para hacer las compras tranquilo y a conciencia, para aprovechar al máximo las ofertas.
ARACAJU, Brasil.- La cantante de rock brasileña Rita Lee, de 67 años, no se calla nada y ayer a la madrugada fue detenida al término del último espectáculo de su carrera, en la ciudad de Aracaju. Es que si la provocan, la señora reacciona: ante 20.000 personas, Lee dijo por micrófono que había visto a la policía agredir a miembros de su club de fans. Los uniformados seguían recorriendo la platea y ella volvió a la carga. “Ustedes son buena gente, váyanse por ahí a fumar un porro”, los invitó. Los policías se acercaron al palco y formaron una pared humana y la compositora sacó entonces todo su espíritu de rockero y contó que ya había vivido situaciones similares durante la dictadura militar brasileña (1964-1985); les dijo a los policías que no les tenía miedo y los llamó “caballos”, “perros” e “hijos de p...”. Según informan medios locales, Lee fue conducida a una comisaría luego del show, que no fue interrumpido por la autoridad, bajo los cargos de “desacato y apología del delito”, pero después fue liberada. La semana pasada, Lee anunció que se retiraba de los shows en vivo y este fue su broche de oro. (DPA)