DULCE ESPERA

¿Embarazada? Disfrute esta etapa

El embarazo dura nueve meses para dar tiempo a los papás de prepararse en todos los aspectos para recibir a su hijo. Es una etapa que, aunque parece larga, dura poco y pronto se convierte en realidad, así que disfrute cada día a ese hijo que lleva dentro.

Ya que haya confirmado que está embarazada, es hora de seguir ciertas indicaciones y cuidados para que no tenga complicaciones. Lo más importante es que acuda con su médico para que lleve un control de su estado desde los primeros días y seguir sus indicaciones.

Continúe leyendo los siguientes tips para que esta etapa la disfrute y no se convierta en una pesadilla.

¿QUÉ PUEDO COMER DURANTE EL EMBARAZO?

Engordar durante el embarazo es completamente normal y sano. Así que no intente dietas exageradas para conservar la estética de su cuerpo porque terminará dañando la salud del bebé.

Es vital que adopte una dieta balanceada, eligiendo variedad de comidas de los grupos alimenticios como pan, cereales, frutas y vegetales, lácteos, carne y pescado o alternativas a estos.

Procure comer cinco veces al día de forma más ligera en vez de hacerlo tres y de forma abundante. Así facilita el proceso de digestión.

Aumente el consumo de proteínas pero evite comer carnes y pescados crudos o no tan bien cocidos. En cuanto a la preparación de los alimentos, prefiera las técnicas que no aumen-

ten la carga de calorías como cocción, horno, vapor, plancha, etcétera. Evite grasas y aceites.

Disminuya la ingesta de sal. Si la necesita, condimente con ella la comida en su preparación pero no agregue más al momento de tenerla en el plato. La cantidad máxima diaria es de dos gramos.

En los últimos tres meses de un embarazo normal la necesidad de calorías se incrementa. Para cumplirla sin entrar en peligros ni en excesos de peso, recurra a tentempiés sanos como fruta o sándwiches.

La demanda de calcio en su organismo también se incrementa.

Tome mucha leche baja en grasa y lácteos como queso y yogur, además de vegetales de coloración verde oscuro.

MOLESTIAS COMUNES

Estos son algunos malestares que se presentan ocasionalmente en el embarazo, no olvide hablar de ellos con el doctor durante sus visitas periódicas. • Vómitos, náuseas y mareos • Diarreas • Estreñimiento • Hemorroides

SUS VISITAS AL GINECÓLOGO

Se recomiendan, al menos, 12 visitas al médico durante esta etapa, repartidas de esta forma: una vez al mes hasta la semana 28 de embarazo; dos veces al mes hasta la semana 36; una vez a la semana hasta el parto.

Tras la concepción se hace la primera y más larga visita porque es necesario hacer un diagnóstico completo e integral.

El doctor le preguntará detalles sobre su ciclo menstrual, su historial médico, su embarazo actual y embarazos anteriores, en caso de que se hayan dado.

A partir de esa información el doctor podrá anticipar problemas potenciales en el embarazo y to-

mar medidas para evitarlos en lo • Anemia • Alergias • Dolor de espalda • Hemorragias vaginales • Insomnio • Várices y estrías • Manchas y picazón en la piel • Fatiga • Calambres

• Congestión nasal posible. También se lleva a cabo un análisis físico donde se evalúan los aspectos generales de su salud, condiciones al interior y exterior de sus órganos y exámenes de sangre y orina para cerciorarse de que todo marche bien.

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En las siguientes visitas se vigila la evolución del embarazo, evaluando el peso, la presión sanguínea y el tamaño del abdomen para obtener el tamaño y los latidos cardíacos del feto. Por medio de ecografías obtenidas con aparatos de ultrasonidos, se controla el desarrollo del feto y su placenta.

EJERCICIO

Estar embarazada no significa permanecer en cama todo el día, de hecho eso es algo nocivo. Debe hacer ejercicio pero de forma diferente y limitada.

Si antes de embarazarse tenía una rutina de ejercicios, pregúntele al médico si puede seguirla o debe reestructurarla. Procure ejercicios ligeros como caminar o nadar y evite aquellos que impliquen riesgo de caída, golpes o grandes esfuerzos como ciclismo, equitación, deportes de conjunto, etcétera.

Para disminuir el dolor y optimizar la experiencia del parto, acuda a sesiones de gimnasia especial a partir del segundo trimestre de embarazo. Se llevan a cabo ejercicios de respiración y relajación muscular que la prepararán bien para este importante acontecimiento. Ningún embarazo es igual por lo que mejor tome la precaución de buscar la aprobación de su médico antes de hacer cualquier ejercicio.

SUPLEMENTOS VITAMÍNICOS

Para evitar complicaciones como desnutrición y anemia durante el embarazo, conviene tomar los suplementos que le indica el doctor sin que se le olviden, pues su cuerpo requiere de mayores nutrientes que lo fortalezcan.

El ácido fólico es una vitamina fundamental para garantizar el desarrollo correcto del bebé y durante el embarazo se duplican las necesidades de él. De preferencia, tómelo desde cuatro meses antes de quedar embarazada, pero si no lo hizo, no hay problema hacerlo durante varios meses del embarazo.

Otros suplementos necesarios son los minerales. El calcio y el hierro tienen una mayor demanda, sobre todo, el último porque ayuda a producir los glóbulos rojos necesarios para usted y el bebé en gestación. Recuerde que deben ser recetados.

ADIÓS A LOS VICIOS

Evite por completo el consumo de drogas. Las anfetaminas, la marihuana, la heroína y otras drogas durante el embarazo, causan grandes riesgos como bajo peso en el bebé, partos prematuros o complicados, sangrado de placenta y defectos de nacimiento.

Absténgase del alcohol. Si toma durante los primeros tres meses de embarazo, puede provocar problemas físicos y mentales en el bebé. Después de ese tiempo es permisible que tome una copa ocasional, sin incurrir nunca en excesos.

En cuanto al cigarro, dejarlo por completo significa aumentar significativamente las posibilidades de un embarazo sano.

Limite la cafeína a menos de 250 miligramos al día, es decir, tome como máximo tres tazas de café o seis vasos de refresco de cola al día.

Aunque aún no se comprueba una correlación entre los problemas de embarazo y el exceso de cafeína, sí existen rasgos que la hacen suponer.

El consumo abusivo de esta sustancia se suele relacionar con bajas de peso en el bebé, partos prematuros y aumento en la velocidad de latidos y respiración en el bebé.