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Adoración Permanente un carisma que se renueva
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Apoyo La Merced
Jóvenes
Apoyo secundario Los chicos tienen cosas para contarnos...
Mayo, tiempo de retiro
Año 06 Julio 2017
Distribución gratuita
Cristo Redentor Hagamos que las cosas sucedan
mucho más...
Parroquia Nuestra Señora de La Merced Dirección: Julián Navarro 3546, (1643) Beccar, Partido de San Isidro. Web: www.parroquialamerced.org Seguinos en: @lamercedsi
Capilla Cristo Redentor Dirección: Murature y Gob. Udaondo, Beccar
Horarios de misas Parroquia Ntra. Sra. de La Merced Lunes, martes, miércoles y viernes: 19:00 Jueves: 19:00, celebración con comunión Sábados: 19:00 Domingos: 11:30 y 19:00
Capilla Cristo Redentor Domingos: 10:00
Secretaría Parroquial Graciela Álvarez Iberlucea Horario: Lunes a viernes de 10 a 13 y de 17 a 20. Dirección: Julián Navarro 3546 (1643) Beccar, Partido de San Isidro Tel./Fax: 4512 8294 C.e.: secretaria@parroquialamerced.org E-grupo: lamerced-subscribe@yahoogroups.com
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IENTO: ESTACIONAM osos ad id cu os am Se tos dejando loss au en que en los lugare e. Los correspondpe n vecinos es trraos eso de noso
Editorial Apoyo La Merced
Apoyo Secundario. Los chicos tienen cosas para contarnos...
Cristo Redentor I “Somos un pueblo con una madre, no somos huérfanos”
Actualidad y memoria De los alpes a la pampa
Adoración ¿Cómo estamos?
Familia No es culpa tuya ser millennians...
Pastoral de la Salud La sabiduría del silencio
Cristo Redentor II Hagamos que las cosas sucedan
Jóvenes Mayo, tiempo de retiro
Correo de lectores
Se reciben: Lunes y martes de 9 a 11 en el Salón de Cáritas (J. Rodó 1895). Sábados y domingos después de cada misa, en la parroquia. Consultas: 4719 7956
Te invitamos a que nos hagas llegar tus comentarios, sugerencias y opiniones sobre la revista. revista@parroquialamerced.org
Producción:
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Dirección: Gerardo Semenzato Fotos: Pato Müller www.patriciamuller.com.ar Corrección: TRADUAR, www.traduar.com Claudia Calvosa y Silvana García Calabria Ilustraciones: freepik
Escribí a alegrate@parroquialamerced.org
La Merced / 03
Editorial
Queridos amigos: Todos sabemos que en La Merced recibimos el don de la Adoración Permanente. Es una inspiración y una gracia que Dios regaló a nuestra comunidad. En la exposición perpetua del Santísimo Sacramente se hace más sensible la promesa de Jesús a sus discípulos: “Yo estaré siempre con ustedes hasta el fin del mundo” (Mt 28,20). Es verdad: él siempre está con nosotros. Esta promesa del Señor se cumple en todo tiempo y lugar. Su presencia es real, amorosa y fiel. También es invisible porque “¡ha resucitado!” (Mt 28,6-7), pero como sus testigos lo han visto y anunciado, sabemos que él vive entre nosotros para siempre (cf Hech 4,20; 1 Jn 1,3). Cuando estamos en casa o en nuestros lugares de actividad –trabajo, estudio, diversión– Jesús está y nos acompaña. Sólo basta creer y hacer consciente su presencia para poder entrar en íntima comunión, poder hablarle y sentirlo cercano y compañero. Además el mismo Señor nos dejó un ritual para revivir su entrega amorosa en la cruz. En la última cena Jesús consagró un poco de pan y una copa de vino, ordenando a sus discípulos repetir ese rito en “memoria suya” (cf. Mt 22,19; Mc 11,24-25; 1 Cor 11,24). Por eso su cuerpo y su sangre entregados en el Gólgota están entre nosotros para que los recibamos ya que el Señor resucitó. Es una presencia gloriosa y sacramental: el pan y el vino que ven nuestros ojos sólo son “especies”, “signos sacramentales” del Cristo viviente, realmente presente en la comunidad.
La fe nos permite traspasar el signo y “ver” al Señor (cf. Jn 20,25). Mientras vivamos en este mundo el único modo de unirnos a Jesús resucitado será mediante la fe. Gracias a ella tenemos la certeza de que él está y nos acompaña uniendo su vida a la nuestra. En la eucaristía Jesús nos recibe como un amigo a su amigo. Con el Señor eucarístico podemos compartir nuestros dolores y fracasos, nuestras alegrías y esperanzas, nuestra rutina y cotidianeidad. A veces lo buscamos por necesidad y otras para expresarle nuestro amor agradecido. Nuestra visita al Señor en la capilla de adoración nos permite vivir un verdadero “encuentro de amigos”. Se trata, sin embargo, de un encuentro especial: con Jesús eucaristía no podemos tomar un café o acordar una salida al cine. No obstante, la comunión con él es real y podemos vivirla con intensidad. ¿Cómo? Sólo si nuestra fe está enamorada, es decir, afectada por nuestro amor a él que está ante nosotros con el máximo amor, el que da la vida por los amigos (cf. Jn 15,13). Debemos reconocer que nuestro amor al Señor es “espiritual”, no siempre podemos sentirlo y gustarlo. A veces,
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es árido y emocionalmente neutro. Pero es un amor seguro y fiel porque lo vivimos como respuesta al suyo. Dice san Juan: “Nosotros hemos conocido el amor que Dios nos tiene y hemos creído en él. Dios es amor, y el que permanece en el amor permanece en Dios, y Dios permanece en él” (1 Jn 4,16). Pocas palabras pueden expresar mejor lo que estamos llamados a vivir en la adoración eucarística. Estamos llamados a permanecer en él ya que él permanece en nosotros. La adoración es una invitación a crecer espiritualmente como cristianos, a intensificar nuestra amistad con el Señor. Es una propuesta de amor y responderemos a ella cuando, al menos, nos hayamos asomado personalmente a esa experiencia de fe tan intensa que tuvo san Pablo al decir: “Vivo en la fe en el Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí.” (Gál 2,20). Quién haya contemplado en la eucaristía al Señor y pueda decir: “me amó y se entregó por mí”, ya no querrá dejar de visitarlo en la capilla de adoración. parroco@parroquialamerced.org
Los invito a creer que es el mismo Jesús (y no sólo yo, el párroco) el que los llama a la adoración, a estar con él, a contemplarlo, a escucharlo y a dejarse consolar por su presencia. Así podrán intensificar una amistad que siempre “dará para más” porque su amor allí presente no sólo no se agota sino que es posible recibirlo con una abundancia creciente, ya que se trata del amor más grande… el que da la vida. Piensen, entonces, si se animan a tomar un turno semanal de adoración en La Merced. Que no los mueva el temor a la obligación para responder que “no”, ni los impulse la fuerza de un deber para decir que “sí”. Que solo los mueva el deseo de crecer en la amistad con Jesús. Que este deseo sea lo que les inspire el discernimiento para dar una respuesta. Les dejo un fuerte abrazo y mi bendición.
P. Carlos. Párroco
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Apoyo La Merced por Pina y Tere
Ap o sec d io
L chic ti c Đ° p a cĐžt n ...
En el Apoyo La Merced trabajamos junto a cincuenta familias, colaborando con el desarrollo integral de sus hijos. Nuestra misiĂłn es brindar apoyo y contenciĂłn a alumnos de nivel primario y secundario, con el objetivo de intentar mejorar su educaciĂłn formal e informal. El Apoyo para chicos de secundaria funciona los martes y jueves de 14.30 a 16.30. A este espacio se suman los Talleres de PsicologĂa, a los que tambiĂŠn pueden acceder sus padres en forma grupal o individual, si lo solicitan. Estos talleres trabajan los dĂas martes y viernes despuĂŠs de las 17. Los miĂŠrcoles, los viernes despuĂŠs de las 18 y los sĂĄbados por la maĂąana se brindan clases particulares para exalumnos del Apoyo La Merced que hayan finalizado su escolarizaciĂłn secundaria y adeuden materias; tambiĂŠn para los que estĂŠn preparando su ingreso a la universidad. En la actualidad, tres chicos estĂĄn cursando el CBC en la UBA, uno el de Medicina y otro el de IngenierĂa. El tercero estĂĄ preparando el ingreso a la Tecnicatura en Sistemas en la UTN de Pacheco.
Contamos ademĂĄs con Talleres de OrientaciĂłn Vocacional para los que estĂĄn en los Ăşltimos aĂąos del secundario y hacemos visitas a las universidades con los chicos. Cada dĂa comenzamos las clases con una dinĂĄmica grupal. Tratamos de fortalecer vĂnculos, generar motivaciĂłn, aumentar la capacidad de escucha, ejercitar la empatĂa, desarrollar habilidades de expresiĂłn, y generar confianza y aceptaciĂłn. Todos los esfuerzos en el ĂĄrea del secundario estĂĄn dando sus frutos. Hace unos aĂąos nos proponĂamos acompaĂąarlos para intentar que finalizaran la escuela. Hoy vamos por mĂĄs. Por eso queremos compartir cosas que dicen los chicos. Hablamos del Apoyo, los compaĂąeros, los voluntarios, el estudio, el futuro. Nos cuentan con entusiasmo y alegrĂa sus experiencias en el Apoyo. Nos asombra su claridad para expresar deseos y sueĂąos. El grabador no los amedrenta, por el contrario, los estimula a participar y a querer opinar sobre todos los temas.
DemiĂĄn, con su actitud tan positiva siempre, nos dice: "Yo vengo al Apoyo porque acĂĄ me siento bien. Y sĂŠ que si estudio voy a poder elegir un buen trabajo y mantener a mi familia. Quiero ser constructor". Franco, de los mĂĄs participativos, afirma: " Me gusta venir, acĂĄ se preocupan por nosotros y nos quieren. Estudiar es seguir y seguir siempre para adelante, eso es lo que siento y por eso vengo". Juan MartĂn, siempre tan responsable, con voz seria nos cuenta: "AcĂĄ siento que me ayudan, que me acompaĂąan; soy feliz en el Apoyo. Con algunos voluntarios tenĂŠs mĂĄs confianza y podĂŠs contarles cosas. Pienso que si elegĂs una carrera que te gusta podĂŠs encontrar un trabajo que ademĂĄs podĂŠs disfrutar, algo que te guste mucho. Yo quiero estudiar diseĂąo 3D y programaciĂłn para dedicarme a crear videojuegos". Juan L., mĂĄs tĂmido pero con mucha seguridad, dice: " A mĂ siempre me gustaron mucho los animales. Quiero ser veterinario para poder ayudarlos cuando se lastiman, para que no sufran". Nacho, siempre dispuesto a conversar, afirma: "Las personas que nos ayudan acĂĄ saben muchas cosas y quieren compartirlas con nosotros". Emma, convincente como pocos: "Para mĂ, algunas voluntarias son como mamĂĄs, porque te ayudan a hacer la tarea y algunas veces te retan. A mĂ me gustan mucho los autos desde que soy chiquito y quiero estudiar IngenierĂa automotriz".
Katy, con su acento tan especial: " Me siento libre aquĂ, y esto es muy importante para mĂ. Siento que el estudio me va a dar un buen trabajo. No sĂŠ bien quĂŠ estudiar, pero puede ser ComputaciĂłn. SĂŠ que lo que me proponga estudiar lo voy a terminar y asĂ voy a conseguir lo que quiero". Micaela, que viene al apoyo desde primer grado, nos cuenta: "Estoy muy cĂłmoda, como en casa, y me llevo bien con todos. En estos 12 aĂąos conocĂ gente muy buena. Estoy orgullosa porque aprendĂ muchas cosas. Siento que si estudio me va a ir mejor en la vida. Me gustarĂa estudiar odontologĂa y formar una familia". AndrĂŠs, compenetrado en la charla, afirma: "AcĂĄ me siento muy bien, puedo compartir momentos con gente diferente, con chicos y grandes. AdemĂĄs de estudiar, el compaĂąerismo y la amistad son importantes. Los voluntarios son muy buenos, tienen paciencia y ganas de enseĂąar, tienen un gran corazĂłn y son muy buenos siempre. Hoy sĂŠ que el estudio es lo mĂĄs importante para mi futuro, lo hago por mĂ, porque es bueno para mĂ. Me gustarĂa algĂşn dĂa ser alguien importante, saber mucho y brillar con mi propia luz. Desde los diez aĂąos me vuelvo loco por los barcos y quiero ser arquitecto naval. Eso sueĂąo. El aĂąo que viene, si Dios lo permite, empiezo la universidad". PodrĂamos seguir escuchando y transcribiendo sus voces durante horas, nos llenan de esperanza, de amor, de energĂa para seguir acompaĂąando. ÂĄQuĂŠ orgullo ser parte de su camino! Pina y Tere
Charlamos ahora con cuatro chicos que estĂĄn transitando su Ăşltimo aĂąo de secundario. AquĂ sus testimonios. Laura: "Me siento integrada y me gusta venir. AcĂĄ aprendo muchas cosas para la vida. El aĂąo que viene quiero estudiar PsicologĂa".
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Cristo Redentor I
“Somos un pueblo con una madre, no somos huérfanos”
Una maternidad que no sólo se circunscribe a las madres biológicas, si no que va aún más lejos. Es la maternidad espiritual que, nutrida por la experiencia íntima del Amor y apoyada en el reconocimiento de la propia identidad y dignidad personal, se despliega y ofrece a todos su espacio vital y cobijo espiritual.
Micaela Cantero, Andrea Díaz, Pamela Pedroza, Lidia Salas, Claudia Pedroza, Eliana Sosa, se consagraron el pasado 25 de junio; Daniela Valdez, Rosa Fleitas, Erika Khrun, Daniela Roldán, Verónica Herrera, Mariana Serantes y Liza León se unirán muy pronto al corazón de María.
Alégrate Madre, celebró tanto la consagración a la Virgen como la firme determinación de un grupo de mujeres del barrio de seguir el ejemplo de María.
Todas ellas son testigos presentes-acaso sin saberlo- de la continua sabiduría del Magisterio de la Iglesia, que en la encíclica Caritas in Veritate, de Benedicto XVI, nos decía: “Si se pierde la sensibilidad personal y social para acoger una nueva vida, también se marchitan otras formas de acogida provechosas para la vida social”.
Ejemplo de ternura y paciente voluntad que se hizo presente en los emocionados testimonios de cada una de ellas.
Nuestro Papa, Francisco, en su primer misa del año preciso que “las madres son el antídoto” más fuerte que existe contra nuestras tendencias egoístas, y que una sociedad sin madre es fría, ha perdido el corazón y el calor de familia, en donde hay lugar solamente para el cálculo y las especulaciones. María nos ha dado el calor materno que nos envuelve hijos en medio de las dificultades, aseguró el Papa, porque donde hay una madre hay ternura. Además María con su maternidad nos muestra que la humildad y ternura “no son virtudes de los débiles sino de los fuertes” y “que no es necesario maltratar a los otros para sentirse fuerte”. En Cristo Redentor podemos ver como esta enseñanza sobre la maternidad, dignidad y fortaleza se verifica cada semana con las mujeres que asisten a las reuniones que organiza Alégrate Madre. “Sumergirnos en el increíble océano de la maternidad y celebrar el júbilo de dar y transmitir vida es la motivación principal de nuestros encuentros” reflexiona Guillermina Ricciardi, que encabeza el equipo.
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Actualidad y memoria por Gerardo Semenzato
De l p
a la pampa
A mediados del siglo XVII, en la ciudad de Bormio, en LombardĂa, Italia, al pĂe de los Alpes, los fieles acudĂan a Misa al escuchar el alegre repicar de las campanas. Con el transcurrir de los siglos muchas edificaciones centenarias debieron ser derrumbadas o trasladadas para acompaĂąar el progreso y ampliar los contornos de la ciudad, o por deterioros causados por los aĂąos y los frecuentes temblores.
A mediados de la dĂŠcada de los setenta, del siglo XX, la antigua iglesia en honor a San Francisco, en Bormio, fue demolida. Sus campanas, antiquĂsimas, terminaron en un depĂłsito de la alcaldĂa local.
Don Andreola, vecino y amigo de quien en ese momento era el alcalde de Bormio, tuvo una ocurrencia insĂłlita. A instancia de su hijo Silvano, que habĂa emigrado a AmĂŠrica, solicitĂł en donaciĂłn una de las tricentenarias campanas del viejo templo. En la lejana Argentina, Silvano y su esposa Ana, colaboraban con el padre Rand a levantar una capilla en las afueras de la ciudad de Buenos Aires. Silvano Andreola conmemora con emociĂłn el imprevisto recorrido de la campana que, por fin, luce ahora La Merced. A lo largo de los siglos, su taĂąir ya centenario, pero siempre convocante, sigue llamando a los fieles con su sonido original.
Ana y Silvano frente a la placa que conmemora la donaciĂłn de la campana.
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Adoración por Equipo de Adoración Permanente
¿Cómo tam ? Terminado el procesamiento del censo de adoradores y preparadas las nuevas listas, queremos contarles cuál es la situación de la Adoración Permanente respecto del número de adoradores y de voluntarios en la coordinación:
Tenemos el número más bajo de adoradores permanentes desde el inicio: contamos con la mitad de los adoradores que teníamos al comenzar, hace 12 años. En este momento no están cubiertas 43 horas cada semana, sobre 168 horas totales, lo que implica a grandes rasgos que una de cada cuatro horas no tiene adorador. Esta realidad nos compromete como comunidad a movilizarnos para mantener vivo el carisma de la Adoración que nos fue dado. Pero si miramos esta situación desde otro ángulo, nos compromete también la presencia callada y permanente de todos los adoradores que, a lo largo de estos años, y seguramente con no pocos inconvenientes, permanecen en sus horas y aún suman otras cada semana.
“Nuestra adoración no está aislada de nuestra vida de caridad, de disponibilidad, de participación en las preocupaciones y en el trabajo… la pobreza y el sufrimiento, los nuestros o los de los demás son, con la realidad de la Presencia Eucarística, los medios que nos sirven para hacer subir desde el fondo de nuestra alma una oración de fe. Entonces nuestra oración estará como metida en nuestra vida y no al lado de ella, y en ella encontrará su alimento, porque nosotros habremos aprendido a mirar todas las cosas en la fe, con los ojos mismos de Señor… dejémonos moldear por Él”. René Voillaume.
¿Qué necesitamos? ■ Adoradores dispuestos a cubrir las horas libres. Podemos proponer alternativas a los turnos tradicionales, por ejemplo, elegir un turno al que ir como matrimonio o como familia; ofrecernos con un grupo de amigos donde vayan sólo algunos cada vez, alivianando así el compromiso de cada semana; armar un pequeño grupo de oración que alterne la oración individual con la grupal. Todas estas alternativas son posibles si tomamos alguno de los turnos que no tienen adorador. ■ Adoradores para los turnos que cuentan con un solo adorador ■ Voluntarios para coordinadores de hora (seis horas cada semana no cuentan con coordinador) ■ Voluntarios para la coordinación de turno
¿Cuál es el camino? La organización de la Adoración Permanente está en nuestras manos. Pero no olvidemos que la adoración que brota de un corazón enteramente disponible para el prójimo es la verdadera adoración. Dejemos que Él ore en nosotros e invitemos a adorar. Seamos sinceramente disponibles en la oración y en la escucha de su llamado, y generosos y abiertos al invitar a adorar
Es necesario que abramos los ojos a un aspecto de la Adoración que tal vez no vemos.
Todos estamos invitados a adorar. Todos podemos adorar. Podés tomar un turno permanente o temporario enviando un mail a: adoracionpermanente@parroquialamerced.org o dejando tus datos en el buzón junto a la entrada de la capilla. 12 / La Merced
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Familia
No es culpa tuya ser millennians…
Siempre han aparecido diferencias y brechas entre las sucesivas generaciones. Pero probablemente ninguna generación aparece como más conflictuada y conflictiva que la de los nacidos alrededor de la década de 1980. Luego de la exploción de los Baby Boomers, nacidos entre 1946 y 1964, en plena euforia por la finalización de la II Guerra Mundial, con la aparición de EEUU como superpotencia mundial, época marcada por importantes cambios culturales, sociales y económicos, el mundo se ilusionaba con una prosperidad sin fin y sin conflictos. Sin embargo los denominados Millennials vieron y experimentaron, desde su nacimiento (en los´80) tantos y tan variados cambios tecnológicos, que modificaron las formas de trabajar, de consumir e incluso de pensar. Y aparecieron otros conflictos. Simon Sinek,(*) profesor de Comunicación estratégica en la Universidad de Columbia y asesor motivacional de empresas, define algunos conceptos claves que ayudan a comprender y a contextualizar la difícil relación con los Millenianns. ■ Modelo de crianza y autoestima La “estrategia fallida de crianza” causada por la ansiedad de los padres para no generar una posible frustración en los hijos, interviniendo ante los educadores para abolir toda potencial discriminación, alteró la tradicional compensación y premio como reconocimiento al esfuerzo y dedicación. Les hizo creer a los niños que eran especiales, que todo lo que querían lo podían alcanzar y que se merecían todo sin esforzarse. Llegando al absurdo de premiar al perdedor en determinadas compe14 / La Merced
tencias, desde las educativas hasta las deportivas. Sin embargo la realidad no puede ocultarse y como efecto no deseado irrumpe: El perdedor sabe en el fondo que ha perdido y el ganador también se resiente porque su esfuerzo no ha sido reconocido. Sus respectivas autoestimas se han deteriorado. ■ Dopamina tecno Los estudios científicos sobre el efecto de los teléfonos celulares y las computadoras en el cerebro de las personas, han revelado que bajo ciertos estímulos –participación en redes sociales por ejemplo- se libera en el cerebro una sustancia química, llamada dopamina, que produce un fugaz instante de gratificación. El individuo se siente bien al ser aceptado y/o al recibir una aprobación (like). Por lo tanto, y de manera casi inconsciente, busca otros estímulos gratificantes, o sea más dopamina, convirtiendo en una adicción el uso de su celular y/o su computadora. Hay que agregar que la dopamina también se libera con el consumo de tabaco, alcohol y drogas. En la adolescencia se crece con incertidumbre e inseguridad. En la generación de los ’80 - ya nativos digitales-, con el uso omnipresente, indiscriminado y creciente de los celulares, podría encontrarse otra iniciación adictiva más, que tiene su explicación científica y biológica. ■ Mundo virtual o mundo real En la galaxia internet y en todo lo vinculado a la tecnología que allí se utiliza, la inmediatez es quizás la característica diferencial y por ende más atractiva. Ahora todo se conoce al instante y está al alcance de la mano (Con la precisión de un click). El desarrollo exponencial de más y más posibilidades de interconexión y comunicación, que posibilita internet, ha erradicado el vector del tiempo y la espera. Incluso el trabajo perseverante para alcanzar todo tipo
de bienes y objetos se ha transformado dramáticamente. Pero en el mundo real, el factor tiempo y el esfuerzo necesario para alcanzar determinados logros, no ha podido ser sustituido. Esta paradojal contradicción entre la satisfacción inmediata de la realidad virtual versus el esfuerzo prolongado, que exige el mundo real, tiene un impacto, que todavía no ha podido calibrarse en su verdadera dimensión. ■ Expectativa o urdimbre Otro pensador que ha delineado con precisión las características principales de los Millennials, es el Jesuita Psiquiatra, Tony Anatrella, autor de números escritos y libros, desde hace más de veinte años, sobre la juventud francesa y europea. Estudios que por la similitud de actitudes globales puede extenderse a casi todos los jóvenes Millennials del mundo. Entre las múltiples notas con que Anatrella, describe a los jóvenes, se destacan dos que impactan directamente en el mundo laboral: la economía afectiva de los jóvenes y la contradicción entre expectativas y cotidianeidad. Los jóvenes Millennials han vivido- en su gran mayoría- en hogares con precaria estabilidad afectiva y económica. Sus relaciones y vínculos están más bajo el dominio de la sensibilidad y emotividad de cada momento, que en el cultivo de relaciones personales más arraigadas, que permiten el conocimiento profundo de la otra persona. Con las alegrías y los dolores que eso ocasiona. Muchos se han sentido, y de hecho lo han sido, reemplazados por otros intereses del momento. Reemplazados sin contemplaciones por modificaciones de la conveniencia personal o económica del otro. Han desarrollado entonces la actitud afectiva de lo proviso-
rio. Una relación e intercambio por conveniencias momentáneas. La “conexión temporal” desvinculada del compromiso a futuro. Han buscado entonces, postergar todo tipo de decisiones que impliquen lazos de largo plazo. Se posterga todo, dilatando la espera de un momento, en el futuro incierto, en que sea necesario tomar un compromiso. Mientras tanto, todo se cambia por la conveniencia del momento. Esta actitud adolescente evita el compromiso diario, la urdimbre cotidiana con la que se tejen las decisiones y opciones de cada día y cuyos resultados se ven con el paso del tiempo. ■ Una oportunidad para el cambio. Tanto Sinek como Anatrella coinciden en que las actuales vinculaciones afectivas de los Millennials no los predisponen para el largo plazo, ni en las relaciones personales ni en las laborales. En una sociedad en la que el individuo se percibe como víctima de los demás, con la febril mentalidad de consumo efímero, a un ritmo de instantaneidad creciente, con la realidad filtrada por la tecnología virtual, es urgente y necesario hacer descubrir en todos los ámbitos, la oportuna existencia de un mundo real dónde es posible reforzar vínculos, establecer relaciones entre las diversas generaciones, promover y premiar el esfuerzo cotidiano y lograr estabilidad participando de una vida con sentido. (*) Recomendamos: https://www.youtube.com/watch?v=5-TimrsCrHc
La Merced / 15
Pastoral de la Salud
La sabid ía
d si cio
“El perfume bueno viene en envase chico” Desde el mismo nombre, Juanita, parecería que todo en ella fuese menudo, acotado y reducido. Sin embargo la sorpresa deja lugar al reconocimiento y el agradecimiento cuando podemos charlar y conocer un poco más a la persona. La Pastoral de la Salud es un servicio que requiere de una infinita paciencia y una enorme capacidad de confrontarse, cara a cara, con el dolor del prójimo. Muchas veces ante situaciones que no tienen posibilidad humana de recuperación, simplemente lo único que es posible hacer es acompañar, escuchar, permanecer en silencio. Silencio digno, reparador y acogedor. Para esto es necesaria la magnanimidad de corazón. Un corazón amplio y más allá de toda medida. Grande por dentro. Juanita del Valle Ortega, infatigable con sus múltiples tareas, despliega la experiencia acumulada, los conocimientos aprendidos y una enorme y natural capacidad humana de aceptar el dolor (propio y ajeno) como parte de la misteriosa realidad. Misterios que no siempre podemos comprender totalmente. 16 / La Merced
Esposa, madre y abuela. Tuvo cuatro hijos: Diego (46), Andrés (41), María Cecilia (33) y Daniel, quien falleció a los 16 años. La dolorosa experiencia recorriendo la incurable enfermedad de “Dany” la enriqueció en la aceptación. Sus jornadas son intensas “y de aquí para allá”. El Hospital de San Isidro, el Hogar para ancianos San Jorge, El Centro de Rehabilitación La Horqueta, La escuelita Camino al Corazón en Virreyes. Múltiples y diversas actividades que se sumaron a la propia trayectoria de aprendizajes, trabajos y vocación: maestra de inglés, psicóloga social, acompañante espiritual y auxiliar en teología. A veces las denominaciones en diminutivo, como su propio nombre, son insuficientes para describir un enorme espacio interior de amor al prójimo.
Así lo explica Juanita en sus propias palabras: En Nuestra Señora de la Merced, la Pastoral de la Salud es un servicio que se lleva a cabo en el Silencio y la Escucha hacia la persona que sufre y a la cual hay que acercarse con respeto y prudencia, sin invadir ni imponer; teniendo conciencia de que más allá de las circunstancias de vida, es un hijo, una hija de Dios que está sufriendo. Nuestra misión es ayudarlo a transitar lo que está viviendo. Muchas veces, quizá, ni la persona que sufre ni nosotros le encontramos sentido a este sufrimiento. Pero para Dios sí tiene sentido porque Él le da sentido.
El Señor es quien conduce esta pastoral y la misma es pura Gratuidad. Casi siempre el enfermo que puede expresarse en palabras nos despide con un “gracias”, que en lo personal, siento y vivo con un profundo agradecimiento al Señor Jesús, que me eligió y me llamó, a pesar de mis debilidades, para este servicio. Pido al Señor que su Espíritu Santo me conduzca por este camino y que siempre sea en mí su Presencia y su Voluntad.
Mi testimonio, desde la fe y mi lugar de voluntaria de la pastoral de la salud: Creo que lo importante es establecer con la persona que está postrada en una cama ya sea en su hogar o en un hospital, una relación encarnada en la compasión y el amor, para la cual el Señor ha capacitado el corazón de cada uno de nosotros. Cuando acompaño a una persona sufriente, siento que no soy yo, es Jesús a través de mí que está escuchándola, acariciando su frente, tomándola de la mano. Algunos pacientes están con oxígeno; no pueden hablar, pero escuchan y miran… esa mirada silenciosa, ¡me dice tantas cosas! Me conmueve esa mirada… En esos momentos solo el silencio es necesario… Ante estas situaciones de gran fragilidad, muchas veces las lágrimas se deslizan por el rostro del que está sufriendo… y entonces, siento que las lágrimas también acuden a mí y… algo sucede… siento que Jesús está sanando el alma del paciente y también la mía. Es un misterio que no alcanzo a comprender, sólo lo siento. También con los pacientes que están un poco mejor, el humor y la risa ayudan a la aceptación de las dolencias y a celebrar la vida, así como está.
La Merced / 17
Cristo Redentor II Agrandar las obras, agrandar el corazón: No siempre la magnitud del edificio o la velocidad de la construcción reflejan el cariño y empeño que se puso en lograrlo. Para que la construcción no sea un edificio vacío, frio o impersonal es necesario dotarlo de un alma. Un corazón.
Hagamos
que las cosas sucedan
Cada nuevo inicio viene precedido de expectativas y promesas. En los momentos que comenzamos un nuevo período y/o actividad nos proponemos que el logro alcanzado marque una diferencia respecto de lo que venía sucediendo. La inauguración de una obra también conlleva siempre nuevos propósitos. Aunque el pronóstico se presentaba como un domingo otoñal de viento, lluvia y frio, la capilla, desde temprano, comenzó a llenarse. Una doble expectativa: por una parte la confirmación de siete jóvenes y por la otra la misa concelebrada por monseñor Martín Fassi y Checo inaugurando una etapa importante de las reformas en Cristo Redentor. Los chicos que se confirmaron: Brisa, Brenda, Ximena, Hernán, Alexis, Rodrigo y 18 / La Merced
Agrandar la construcción es una oportunidad para agrandar el corazón de la comunidad y en particular, de cada una de todas aquellas personas que, día a día se acercan a ese lugar. Reconocer nuestras propias carencias: El año del jubileo de la Misericordia que instituyó el papa Francisco, que finalizó hace pocos meses, fue una inspiradora propuesta para que
en humilde y sincero reconocimiento advirtamos que a todos siempre nos falta algo. Que fallamos y que tenemos muchas carencias. Tan sólo reconociendo esa verdad podemos reconocer las carencias de quienes nos rodean. Y desde una actitud de comprensión y paciencia podemos colaborar para hacer coincidir nuestros objetivos comunitarios. A medida que la misa transcurría, la mañana fría y lluviosa fue corrida con el aliento impetuoso de un fresco pampero que permitió al sol asomarse, con esperanza, entre las nubes. Se elevó la temperatura ambiente casi tanto como el calor de los corazones de quienes estábamos presentes.
José vivieron una experiencia que los acompañará en el recuerdo toda la vida. Entre emocionados y asombrados fueron el centro de atención de los asistentes que presenciaron una “lluvia de lenguas de fuego” que bajaba de lo alto y se dispersaba en toda la capilla. Por otra parte la conclusión de mucho esfuerzo, trabajo y dinero como inversión tangible y muchas expectativas, alegrías y buenos augurios como rédito intangible. Mons. Fassi, fundamentó su predicación sobre tres ejes que nos hicieron reflexionar sobre el logro alcanzado por toda la comunidad. Hagamos que las cosas sucedan: más que detenerse en una actitud de abatimiento por las dificultades que siempre están presentes, la comunidad de La Merced, y en particular los más cercanos a la capilla Cristo Redentor, dejaron de lado las incomodidades prolongadas a lo largo de muchos meses y aportaron esfuerzo, ideas y colaboraciones de todo tipo para concretar la reforma. Se hizo lo necesario y sucedió lo que tenía que suceder: etapa concluida. La Merced / 19
Mayo, tiempo de ret o
Jóvenes La inauguración de las obras de ampliación y del centro CONIN sirvió de excusa para recibir al Dr. Abel Albino, presidente y fundador de CONIN y al intendente de San Isidro Gustavo Posse. Pequeña muestra de un trabajo mancomunado y de armonía social posible entre personas representantes de organismos públicos y privados, y nuestra iglesia. El Dr. Albino en una emotiva alocución nos urgió a “quitar los obstáculos que impiden que los chicos, en esta importante etapa de sus vidas, se desenvuelvan y crezcan sanos y unidos por lazos afectivos sólidos y sanos”. “Hay una impostergable urgencia para hacerlo. No podemos demorarnos. Seamos creativos y libres para crear condiciones mejores. Por los chicos y por nuestra Patria”. La comunidad de Cristo Redentor y el centro CONIN ya esperan con renovadas expectativas el inicio de una 2da etapa de obras para colaborar unidos, una vez más, y cumplir con este reclamo: Ahora, ¡a agrandar la capilla!
por Simón Salas Seeber
Mayo fue un mes clave para los jóvenes de nuestra Parroquia porque se realizaron los retiros de confirmación y posconfirmación (Pepe), que son las actividades que más gente congregan.
Los chicos de Confirmación, que se están preparando para recibir al Espíritu Santo en Junio, estuvieron hablando mucho sobre Él ( ), escuchando con gran atención todas las charlas y compartiendo momentos, desiertos y comidas con sus grupos y amigos. En total fueron unos 200 chicos que trabajaron mucho sobre su llamado al gran camino de ser cristianos y fueron puestos a prueba… ¡todos respondieron que ellos quieren pisar fuerte! Juntos le dedicaron un rosario a María construido con globos de helio que ahora debe de estar en algún rincón de la ciudad -o del cielo- y lo rezaron con todo el corazón. Entre actos, charlas, mates y, como siempre, mucha alegría, se vivió un gran fin de semana en el Colegio Máximo de San Miguel. Ahora los chicos llegan ´prendidos fuego´, como dicen ellos, para recibir el sacramento de la Confirmación donde darán ese sí tan importante en su vida. Por su lado, los chicos de Pepe no se quedaron atrás y vivieron un intensísimo fin de semana en el que hablaron mucho sobre la vocación en todo sentido –cristiana, profesional, a la vida… También fue un tema importante la perseverancia como un camino de conversión y hubo tiempo para compartir cómo está cada uno en ese camino. La Virgen María estuvo presente durante todo el retiro pero de un modo muy especial en la charla de Guada, quien nos recordó cuánto nos quiere nuestra Madre y cuánto la necesitamos.
trabajar, y volvieron a San Isidro con muchas ganas de perseverar en el día a día. La frase elegida como cabecera del retiro fue: “Sé quién estás predestinado a ser y prenderás fuego el mundo”. Sabiéndose amados por Dios, todos ellos vuelven con una esperanza renovada y con el firme propósito de confiar en el plan que tiene Dios para todos. Detrás de toda esta organización están los coordinadores. Ellos estuvieron planeando y pensando el retiro a lo largo de muchos encuentros y juntadas, pero también necesitaron un espacio para reflexionar y rezar que encontraron en su propio retiro: ellos se fueron a Ramos Mejía para hablar especialmente sobre la perseverancia y la permanencia en el amor de Dios. Se vivió un gran clima que ayudó a cada uno a seguir creciendo personalmente y a conocer un poco más sobre este gran misterio. Todos ellos volvieron muy llenos y sostuvieron que fue un gran empujón para la recta final de este año de confirmación, PEPE, y CHECES, y también para sus vidas. Bajo el lema “Una mirada agradecida, una esperanza comprometida” los jóvenes buscan ser cada día más LOS CHICOS DE CONFIRMACIÓN, ADORANDO AL SANTÍSIMO EN SU RETIRO.
Durante el retiro también tratamos un tema fundamental que es el servicio. En este caso el orador nos contó su experiencia en la India, que inspiró a muchos de nosotros, por lo menos ¡a lavar los platos en casa! Mediante dinámicas, charlas y actividades, los chicos se llevaron muchas certezas y temas para
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El papa Francisco nos manda un mensaje:
LA GENTE DE PEPE, FELIZ POR LO VIVIDO Y CON ANSIAS DE PERSEVERAR
conscientes de la locura que están viviendo y darle gracias a Jesús por haberlos traído acá. Tanto coordinadores como coordinados, encuentran en la Merced una comunidad de apoyo, escucha y crecimiento que es impresionante. Agradeciendo esto, ponen su confianza y esperanza plenamente
en Dios y esperan lograr su objetivo: perseverar y permanecer en el amor de Dios por siempre. Saben que el camino no va a ser fácil, pero habiendo vivido esto, ellos más que nadie saben que vale la pena intentarlo.
“¡La esperanza no defrauda! No está fundada sobre aquello que nosotros podemos hacer o ser, y mucho menos en lo que nosotros podemos creer. Su fundamento, es decir, el fundamento de la esperanza cristiana, es el amor que Dios mismo nutre por cada uno de nosotros. Esto no es fácil de entender, ya que esto nos parece más difícil de comprender. En cambio, constituye el presupuesto más auténtico, más verdadero. De hecho, la paz que nos ofrece y nos garantiza el Señor no se debe de entender como la ausencia de preocupaciones, de desilusiones, de faltas, de motivos de sufrimiento. Sino que la paz que surge de la fe es un don: es la gracia de experimentar que Dios nos ama y que siempre está a nuestro lado, no nos deja solos ni siquiera un instante de nuestra vida.” Comprometidos con Dios, los jóvenes buscamos crecer en este camino de Fe, escuchando su llamado a ser santos en todos y cada uno de los ámbitos de nuestras vidas. La tarea no es fácil, pero
Dios no nos pregunta si somos capaces, Él quiere saber si estamos dispuestos. Este sí hay que
darlo todos los días, y así, de la mano de Jesús, podremos lograr grandes cosas. Y este sí a Jesús es ahora. Cuando decimos “Ya habrá tiempo después...” es en ese después donde no está Dios. Ese después posterga nuestro compromiso con Dios y lo aleja de nosotros. El sabio Salomón sabe que este es el momento ideal para conocer a Cristo y perseverar en la fe: “Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud”, por eso los jóvenes pedimos a Dios la virtud de la humildad, para escuchar con el corazón abierto el consejo de Salomón y el de tanta gente grande que ha vivido más que nosotros, y así poder perseverar siempre agradecidos por el don de la Fe que nos fue regalado.