Jesús Lizano Barcelona, 1931
Las personas curvas [Mi madre decía: a mí me gustan las personas rectas]
A mí me gustan las personas curvas, las ideas curvas, los caminos curvos, porque el mundo es curvo y la tierra es curva y el movimiento es curvo; y me gustan las curvas y los pechos curvos y los culos curvos, los sentimientos curvos; la ebriedad: es curva; las palabras curvas: el amor es curvo; ¡el vientre el curvo!; lo diverso es curvo. A mí me gustan los mundos curvos; el mar es curvo, la risa es curva, la alegría es curva, el dolor es curvo; las uvas: curvas; las naranjas: curvas;
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los labios: curvos; y los sueños, curvos; los paraísos, curvos (no hay otros paraísos); a mí me gusta la anarquía curva; el día es curvo y la noche es curva; ¡la aventura es curva! Y no me gustan las personas rectas, el mundo recto, las ideas rectas; a mí me gustan las manos curvas, los poemas curvos, las horas curvas: ¡contemplar es curvo!; (en las que puedes contemplar las curvas y conocer la tierra); los instrumentos curvos, no los cuchillos, no las leyes: no me gustan las leyes porque son rectas, no me gustan las cosas rectas; los suspiros: curvos; los besos: curvos; las caricias: curvas. Y la paciencia es curva. El pan es curvo y la metralla recta. No me gustan las cosas rectas ni la línea recta: se pierden todas las líneas rectas; no me gusta la muerte porque es recta, es la cosa más recta, lo escondido detrás de las cosas rectas; ni los maestros rectos 14
ni las maestras rectas: ¡libérennos los dioses curvos de los dioses rectos! El baño es curvo, la verdad es curva, yo no resisto las verdades rectas; vivir es curvo, la poesía es curva, el corazón es curvo. A mí me gustan las personas curvas y huyo, es la peste, de las personas rectas. ┕┕ De La palabra del hombre (1990)
Los mundos ¡Innumerables mundos! ¡Cada ser es un mundo! ¡Cada hombre es un mundo! Sólo los dueños del mundo presentan un solo mundo ¡secuestran a los mundos! ¡A la fuerza lograr un mundo! ¡Nos amenazan con el fin del mundo! ¿Un mundo? ¡Innumerables mundos! ¡Incalculables mundos! Yo me baño en los mundos, llevo los bolsillos llenos de mundos y estoy continuamente encontrando mundos. ¡Soy un mundo lleno de mundos! Necesitan forzar un solo mundo 15
¡no pueden con los mundos! ¡Pero mirad, mirad, cómo vuelan los mundos, cómo se entrecruzan los mundos, cómo se multiplican los mundos! Han aprendido a forzar un mundo para servirse de todos los mundos, no han aprendido la diversidad del mundo, la belleza del mundo. No la ha aprendido ni el mismo Mundo, el Único, el Total, el Universo Mundo, el que somete, el que destruye a sus propios mundos. ¡Hay muchos mundos! Pero hay un Mundo... ┕┕ De La palabra del hombre (1990)
La hormiga hombre Aquella hormiga se creía un hombre. Decía: ¿no soy un ser, no existo? ¿No trabajo? ¿No soy, acaso, un fragmento del inmenso hormiguero? Lo humano ¿no es igualmente un hormiguero? ¿No vivimos en cárceles y en refugios? ¿No me reproduzco como ellos? Y las hormigas
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¿no tenemos un amo, unas hormigas poderosas que nos controlan? ¿No entregamos también nuestro tiempo para llevarnos a la boca el grano que nos alimenta? Y, en fin, ¿no compartimos la esclavitud todas las especies? O qué son las abejas, los monos, los osos y los leopardos... ¿No puede creerse un hombre un leopardo? ¿No estoy condenada a muerte desde que he nacido? ¿No tengo mi pensamiento aunque sea más grande su cerebro? ¡Me río de su pensamiento! ¿No se alimenta el hombre de los cuerpos a su alcance? ¿Son sus colmillos menos sangrientos? Claro que el hombre es ingeniero y arquitecto. ¿Y nosotras, qué hacemos, o qué son nuestros túneles? ¿No construimos nuestros espacios? ¡Ah, sí, la música! ¿Pero, acaso el pájaro hombre envidia al hombre sus cánticos? Cierto que el hombre cubre su cuerpo. ¿Pero no se desnuda en los momentos en que es un hombre verdadero? ¿Y no son ellos los que señalan como odiosas todas las comparaciones? Bueno; el hombre es una hormiga más evolucionada,
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caza con más ingenio a las otras especies, mas en qué se diferencia su destino del nuestro. Y qué es un ser sino su destino. Por no hablar del águila hombre: qué envidia ha de tener el águila del hombre en sus vuelos, tanto que alardea el hombre de sus vuelos... Soy una hormiga hombre porque igual me apareo, igual sufro y me sé condenada, y me arrastro en columna por los suelos como se arrastra él por los sueños... Sí que el hombre transforma la naturaleza. Pero ¿se transforma a sí mismo? No sé escribir, se me olvidaba... Como si todo no estuviera ya escrito en los procesos... ┕┕ De Tercera parte de Lizanote de la Mancha o la conquista de la inocencia (1999)
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FRANCISCO J. URIZ Zaragoza, 1932
Seis fases en torno a una prohibición la prohibición está allí siempre A veces sólo es una línea blanca tumbada inofensiva en el suelo quién la ha puesto para proteger a quién la presa retiene las aguas del embalse la turbina transforma la caída de las aguas contenidas en fuerza eléctrica la prohibición el marco del cuadro retiene la desbordante fuerza el pintor acepta los límites —en eso radica su fuerza— de los que no puede salir las aguas desbordan el marco impulsadas por la contención la dialéctica ┕┕ De Mi palacio de invierno (2005)
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Máscaras 1 Se arrancan la cara ante el pueblo para que no vean la máscara 2 Arrancada la cara la agitan cual bandera ante el pueblo que sólo ve la máscara 3 Se arrancan la cara ante el pueblo Y el alma sigue teniendo su espejo en la máscara 4 Un tal Jano se arranca las caras y muestra satisfecho sus dos máscaras 5 Agotada también la vida de la máscara vuelve el rostro a su ser y en el fluir del arroyo Narciso ya sólo distingue su careta 6 Le arrancaron la cara al pueblo para reírse de su máscara Y lo que vieron les heló la sonrisa ┕┕ De Mi palacio de invierno (2005)
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